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Maravillas de la creación de Dios El extraño ciclo de las astas del reno
DIOSde Maravillas de la creación
El extraño ciclo de las astas del reno Dios diseñó a los renos para que mudaran sus grandes y pesadas astas cada año. Las astas les vuelven a crecer a velocidades increíbles —¡casi tres centímetros por día durante tres meses! (Las astas de reno son uno de los tejidos vivos que crecen más rápido en el mundo.) Tanto los machos como las hembras mudan sus astas una vez al año. Los machos suplementan su crecimiento con calcio proveniente de sus propios esqueletos. Con un peso de 15 kg y 90 o más centímetros de largo, un par de astas maduras pueden aportar hasta el 10 por ciento del peso total de un reno macho. Los machos mudan sus astas cuando la temporada de apareamiento termina. Las hembras, poco después de dar a luz. De esta manera pueden defenderse a sí mismas y sus fuentes de alimento durante el embarazo. Los renos bebés prácticamente nacen corriendo. Durante su primera hora de vida, aprenden a pararse solos; y tan solo seis horas después, pueden correr más rápido que un competidor de los Juegos Olímpicos. Fotografía: Reno del bosque (Rangifer tarandus) Fotografía por James Capo Texto por Jeremy Lallier y James Capo