Educación y realidad virtual: el fin de la pizarra y la libreta Las herramientas de realidad virtual y aumentada definirán la educación del futuro. Se estima que, para 2023, la inversión en sistemas de VR y AR en el sector educativo rondará los 700 millones de dólares. Estas nuevas tecnologías ofrecen al sector educativo múltiples soluciones tanto para alumnos como profesores. Con estos sistemas, los alumnos podrán aprender a través de experiencias inmersivas e interactivas. Según un estudio realizado por ABI Research, una consultora de análisis de mercados especializada en nuevas tecnologías, la inversión en realidad virtual en educación superará los 640 millones de dólares en 2023. Por su parte, el sector de la educación y realidad aumentada tendrá un valor aproximado de 5.300 millones de dólares. Para el ABI Research, la inversión es el principal obstáculo para implementar la AR y VR en la educación. No obstante, ve una solución a este problema en los smartphones. “Las soluciones en móvil son eficientes, debido a su amplia presencia en el mercado, pero no permiten una experiencia completamente inmersiva. Las gafas de realidad virtual ofrecen las experiencias más inmersivas, pero pueden suponer un problema por su precio”. El mismo reporte de ABI Research prevé un descenso en el precio de este tipo de herramientas. “Se espera que el precio de las gafas de realidad virtual baje hasta los 200 dólares en 2023. Este descenso será incluso mayor en sistemas de realidad aumentada para teléfonos. Su facilidad de instalación y uso las convierten en las herramientas favoritas para fines educativos”.
Educación y realidad virtual y aumentada: mayor interacción y facilidad de aprendizaje Eleftheria Kouri, analista para ABI Research afirma que “la realidad virtual y aumentada transforman el proceso de aprendizaje de pasivo a activo, permitiendo a los estudiantes interactuar con el contenido y poner en práctica sus conocimientos en tiempo real”. Otro informe, de la Universidad Politécnica de Madrid, enumera las principales ventajas que la realidad virtual y aumentada ofrecen a los estudiantes. Gracias a estas tecnologías, los alumnos están más motivados, obtienen más información y desarrollan destrezas tecnológicas. Además, estimulan el trabajo colaborativo y la implicación del alumno en la construcción del conocimiento. Para Eleftheria Kouri, “el aprendizaje experimental permite un mayor entendimiento y memorización de conocimiento. Las experiencias inmersivas e interactivas estimulan la motivación del alumno y aumentan su implicación, factores clave para mejorar el rendimiento académico”.