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COVID - 19: Regresando al lugar de trabajo

Una colaboración de PwC México

Con el regreso a las operaciones de actividades no esenciales, las empresas comienzan a establecer los protocolos para la reapertura de sus organizaciones, fabricas, etc. Sin embargo, traer de vuelta a la gente a las oficinas y lugares de trabajo no será una tarea menor. Cada compañía es única y tendrá que tener consideraciones especiales.

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Algunos tienen trabajadores con tareas que les permiten seguir laborando de forma remota, mientras otros tienen fábricas que necesitan activarse o puntos de venta, tiendas y otros espacios que requieren echar a andar nuevamente. En cualquier caso cada empresario enfrenta preocupaciones muy similares: dónde comenzar, cómo mantener protegidas a las personas, cuándo y cómo comunicarlo, y cuál es la forma correcta de avanzar.

¿ Qué necesito considerar para traer de vuelta a la gente al lugar de trabajo?

El desafío es complejo, pero existe un marco en el cual basarse. Todo comienza planteándo - se las preguntas correctas.

Liderar con propósito para manejar las preocupaciones de los empleados

¿El liderazgo de la empresa está preparado para esta transición y entrenado para liderar con empatía y dirección las inquietudes a medida que surgen, dejando ver en todo momento la importancia de poner a la gente primero?

¿Podemos reutilizar nuestro equipo de gestión de crisis para convertirse en nuestro equipo de transición y regreso al trabajo?

¿Estamos construyendo un plan coordinado que promueva el cumplimiento, eficien- cia y empatía?

¿Tenemos la información necesaria para facilitar la toma de decisiones rápida basada en datos?

¿Hemos construido un enfoque de gestión del cambio para generar conciencia, comprensión, compromiso y adopción entre nuestra gente?

¿Hemos desarrollado un plan de comunicación que considere tanto a los trabajadores que regresarán a la oficina como a los que permanecerán remotos?

¿Tenemos un plan de capacitación en nuevos procesos, políticas y procedimientos operativos durante la transición y más allá?

¿Hemos considerado nuestras fortalezas culturales lo suficiente como para to- marlas como base y punto de partida?

¿Tenemos un plan de co- municaciones y relaciones públicas y externas que comparta los mensajes correctos a través de los canales correctos en el momento adecuado para clientes, pro- veedores, inversores y la co- munidad en general?

¿Cómo definiremos y mediremos el nivel de éxito en la transición considerando la seguridad de los empleados, el bienestar, el compromiso y la productividad?

¿Tenemos planes para los informes de responsabilidad corporativa y cualquier otro requisito de divulgación relacionado?

Depende de ti propiciar un entorno saludable y seguro

¿Hemos planeado protocolos de desinfección y limpieza regular más estricta?

¿Tenemos pautas para el distanciamiento físico y uso de equipo de protección personal?

¿Tenemos o podemos asegurar equipos de seguridad (como mascarillas) para uso de los empleados?

¿Hemos identificado quien realmente necesita estar en sitio y cuándo?

¿Qué métodos de verificación de salud usaremos teniendo en cuenta la privacidad y la política de la empresa?

¿Podemos usar el rastreo de contactos para ayudar a reducir el riesgo para nuestra gente?

¿Tenemos un plan para administrar y monitorear la seguridad alimentaria (p. ej., cafetería en el lugar, entrega de comida)?

¿Necesitaremos personal o asesores médicos?

¿Podemos contratarlos y movilizarlos cuando sea necesario?

¿Tenemos algún plan de notificación para las personas en riesgo de contagio?

¿Tenemos una política sobre pruebas de inmunidad o en - fermedad?

¿Podemos implementar un sistema para rastrear el co- rrecto cumplimiento de las regulaciones sanitarias y directivas durante una cuarentena?

¿Hemos desarrollado una política en torno a viajes de negocios y personales?

¿Tenemos planes de contingencia en el caso de que haya un aumento significativo en casos de COVID-19 durante el período de regreso a la oficina?

Necesitas un plan para impulsar las operaciones y satisfacer las demandas cambiantes

¿Hemos desarrollado un programa para cada día y cada semana según las previsiones de volumen, regulaciones locales y nuevos horarios de producción?

¿Hemos establecido horarios de operación por sitio (p.ej. para plantas de fabricación, tiendas, centros de contacto)?

¿Podemos identificar qué empleados son esenciales por rol, ubicación y demanda, así como personas o puestos que puede permanecer en suspensión o continuar trabajando de forma remota?

¿Hemos invertido adecuadamente en las herramientas e infraestructura que permitirá una colaboración virtual segura para aquellos que todavía estén trabajando de forma remota (software, redes, acceso, gestión o detección de amenazas y respuesta)?

¿Cómo vamos a separar a los equipos en turnos de trabajo para minimizar el riesgo de infección?

¿Podemos desarrollar y mantener horarios a nivel empleado para el regreso al trabajo?

¿Tenemos un equipo de gestión de incidentes, herramientas suficientes y pro- cesos establecidos y listos para operar?

¿Podemos satisfacer los cambios en la demanda de nuestros clientes basados en las operaciones y plan de programación que hemos desarrollado?

¿Estamos preparados para satisfacer las necesidades de los clientes y comunicarse con ellos abiertamente sobre qué pueden esperar?

¿Hemos considerado qué controles serán monito- reados para la efectividad operativa?

Necesitas entender las nuevas situaciones que la gente enfrenta

¿Cómo responderemos a las limitaciones y nivel de confort de los empleados, incluidos los problemas de salud y el cuidado infantil, entre otros?

¿Hemos formado una política para empleados que no se siente cómodos regresando al lugar de trabajo físico?

¿Necesitaremos ofrecer transporte alternativo y seguro hacia nuestros sitios de trabajo para aquellos que dependen del transporte público?

¿Necesitamos cambiar las políticas y expectativas de pro- ductividad para permitir una limpieza más frecuente de los sitios de trabajo, equipo y descansos para lavarse las manos u otros protocolos de higiene?

¿Tenemos un plan para acelerar las implementaciones de trabajo virtual para aquellos empleados que pudieran seguir trabajando a distancia?

¿Hemos establecido planes y políticas para adaptarnos a nuevas condiciones, así como nuevos beneficios en torno a la salud y el bienestar?

¿Tenemos un plan y políticas empáticas para abordar la salud mental y emocional y los niveles de estrés de los empleados cuando empiecen a regresar al lugar de trabajo?

¿Hemos identificado y planeado los cambios requeridos en la gestión y entrega de beneficios para trabajadores que permanecen remotos por un período más largo?

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