Vivimos el Respeto
Acoso sexual
Son comportamientos de tono sexual no deseados y ofensivos, tal como contactos físicos, insinuaciones, observaciones de tipo sexual, exhibición de pornografía y exigencias sexuales, verbales o de hecho.
Para que sea considerado acoso sexual, no debe existir consentimiento de estos actos.
Acoso laboral
Son actos abusivos de hostigamiento, persecución y actitudes de violencia psicológica o física que buscan disminuir a otra persona, atentando (por acción u omisión) contra su dignidad. Estas situaciones pueden conducir a graves alteraciones de ansiedad y/o depresión e induce al colaborador a desistir de su trabajo, poniendo en peligro su posición y deteriorando el ambiente laboral.
Para que sea considerado acoso laboral, estos actos se deben dar de manera repetitiva.
Es importante que tengás en cuenta que no es acoso laboral:
Dar feedback sobre actitudes que no favorecen el buen ambiente laboral o sobre resultados de desempeño: seguimiento disciplinario (disciplina progresiva), ya que corresponde a la retroalimentación sobre oportunidades de mejora.
Solicitar alineación a cambios propios de la estrategia: comunicados relacionados con la operativa del trabajo y ajuste de metas de negocio.
Atender funciones no planificadas que se requieran para la continuidad del servicio o negocio.
Las asignaciones propias de la naturaleza del puesto o actividades colaborativas del área.
La asignación de actividades orientadas hacia el desarrollo profesional y personal del colaborador
Las expresiones y tonos propios de una persona.
Gestionar, supervisar y exigir el cumplimiento de las obligaciones laborales para el logro de las metas y resultados organizacionales, siempre y cuando sea bajo el marco del respeto. Salvo que el feedback que se dé por parte del líder sea de forma agresiva, utilizando palabras, gestos o acciones que humillen, desacrediten la honra del colaborador, atentando contra su dignidad o que su trato sea discriminatorio o desigual, siendo una situación que tenga permanencia y reiteración en el tiempo.
Terminar el contrato de trabajo por causa justa.
El estrés generado por un ambiente laboral competitivo, bajo presión, con exigencias propias de las tareas y con control y supervisión de funciones, puede causar diferencias y conflictos propios en las relaciones entre compañeros, jefaturas, un grupo de colaboradores, antipatía recíproca entre un jefe y un colaborador; por eso es importante gestionar bien los conflictos y en tiempo y no confundir este tipo de situaciones como mobbing o acoso.
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