PERFILES ICC






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Durante los últimos suspiros del siglo XVIII, específicamente el 21 de agosto de 1899, fue fundado nuestro colegio, luego de las sugerencias del Obispo de Concepción, Plácido Labarca, quien deseaba fervientemente un externado para niñas en el centro de la ciudad, el que abrió sus puertas, en primera instancia, por calle Caupolicán
Cinco años más tarde, la Congregación adquirió la primera parte de lo que serían las recordadas dependencias de Aníbal Pinto 340, hasta concretar la construcción e inauguración de la capilla en 1948, conjunto de edificaciones que daría forma a su emblemática ubicación durante poco más de un siglo Pero aún con el traslado de sus instalaciones al Valle Escondido Paicaví en 2019, hay aspectos que no están en duda: la vigencia de su tradición y su dilatada trayectoria en la Región del Biobío
Un sinnúmero de religiosas, funcionarios y estudiantes adornan la historia del Colegio Inmaculada Concepción, muchos de ellos, aún en el recuerdo de miles de personas, tal como ocurre con Sor Luisa Pozo, querida y recordada exdirectora de nuestro colegio.
Todos juntos somos los protagonistas de este colegio, quienes ejercemos el importante rol continuador del legado de Madre Paulina Von Mallinckrodt, de llevar adelante la misión educativa bajo los principios de la paciencia y el amor, pilares fundamentales para nuestra fundadora en la tan valiosa tarea de educar a niños, niñas y jóvenes. Hoy, cada uno avanza en esa dirección, con lo mejor de sus capacidades profesionales y humanas para llenar de vida y excelencia al Colegio Inmaculada Concepción.
TRAS LA NOTICIA
PERIÓDICO ESCOLAR EDITADO POR LOS ESTUDIANTES DEL TALLER DE PERIODISMO DEL COLEGIO INMACULADA CONCEPCIÓN
Directora: Carla Riffo Rebello
Editor General: Jorge Rubilar Astudillo
Reporteros: Monserrat Troncoso Jara Antonia Becar Tapia Amanda Melo Beltrán Cristian Quilapan
Mellado Arturo Pérez Iglesias Josefa Sanzana Cárdenas Dominga Reyes Salazar Joaquín Lizana Merino
Francisca Hormazábal Pino, Bianca Vargas Del Mauro, Domingo D'Arcangeli Jarpa, Sayeñ Silva Carvajal
Diseño y diagramación: Jorge Rubilar Astudillo
Impresión: Salvador Sáez Ruiz
Domicilio: Colegio Inmaculada Concepción Aníbal Pinto 2522, Valle Escondido Paicaví, Concepción
Contacto: pasoapaso@colegioinmaculadaconcepcion.cl
Marcela Soto
Geraldine Monsalvez
"La única meta de mi vida sea su gloria, su voluntad. Inseparablemente unida a la de Dios está la gloria y el honor de la Santa Iglesia. El Señor me conceda la gracia de promover siempre el honor y la gloria de la Santa madre Iglesia" (Retiro 1845). Roxana Garrido
Marcela Córdova
En las afueras de su domicilio en el sector de Laguna Redonda, Luis Concha Anabalón (83) espera plácidamente para sostener esta conversación. Asombra de inmediato por su puntualidad, aguardando minutos antes de la hora pactada: “¡Son costumbres que aprendí de mi Madre Directora!”, dijo de forma ferviente aludiendo a Sor Luisa Pozo El reloj del living suena a las 16:00 horas en punto, y se muestra dispuesto a dialogar sobre el regreso de este informativo, del cual fue su fundador.
Un hombre sabio, bonachón y gentil, esas características pueden definir a la perfección a Don Luis Concha, reconocido profesor de Lenguaje de nuestro colegio durante más de 3 décadas, cuyo recuerdo aún vive en la retina de un centenar de exalumnas y colegas que compartieron con él. Y aquello también aplica para sus alumnas que fueron
parte de la primera etapa del Taller de Periodismo, que inició en 1987 y que concluyó en la primera mitad de la década del 2000, equipo periodístico encargado de darle vida a “Paso a Paso”, el periódico escolar de nuestro colegio
En el taller, Don Luis quiso impartir y poner en práctica todos los conocimientos adquiridos en el diario “El Sur”, donde trabajó previamente como linotipista, y traspasar esa experiencia a sus alumnas de la academia. 20 años después de su término, esta se reactiva, y junto con ello, volvió a circulación “Paso a Paso”, el que hoy cuenta con sus primeros reporteros varones y que se divulga en formato digital, sin dejar de lado su tradicional versión en papel.
En esta conversación, el profesor Concha desclasifi-
ca su trabajo con las alumnas reporteras de la época bajo el alero de “Paso a Paso”, y sus principales impresiones sobre el regreso del informativo y del Taller de Periodismo al Colegio Inmaculada Concepción después de 20 años, lo que le generó una inmensa alegría
¿Cómo recibe la noticia del regreso del informativo “Paso a Paso”?
“Es extraordinaria, porque pienso que es una nueva etapa de mayor edad. Hoy veo que ese sueño de jugar al periodismo como lo hacíamos nosotros con nuestras alumnas, se pone pantalones largos y ofrece otras técnicas para llegar al público con esta calidad de publicación que empezaron a desarrollar ustedes, continuando con la tradición Nosotros llegamos al número 68 o 69, publicamos durante casi 20 años artesanalmente el “Paso a Paso”, pero estos ejemplares nuevos son como ver un hijo desarrollado, que ha crecido, que está madurando, es una joya, y espero que se mantenga en el tiempo para que siga creciendo aún más”
¿Recuerda su trabajo con las estudiantes de la época? ¿Cómo llevaban adelante la edición del periódico?
"Yo seguía ciertas pautas de redacción que había a -
prendido en el diario donde trabajé alguna vez Nos sentábamos con las niñas, cuyo número fluctuaba entre 15 a 20, y empezábamos a conversar sobre lo que iba a tratar el número, nos poníamos de acuerdo, hacíamos una pauta y nos íbamos de esa misma reunión con una tarea, para que en la próxima clase cada una pudiera traer su material que se iba a revisar Una vez que ya teníamos los primeros esbozos, se pedían dibujos a quienes tenían la habilidad para hacerlos, que por lo general eran en tinta china o lápiz grafito, pero con eso se mantuvo la publicación. Seguíamos en cierto modo una pauta periodística”.
¿Qué repercusión tuvo esta publicación en aquella época? ¿Cómo la era la recepción por parte de los miembros de la comunidad escolar?
“Es curioso, yo diría que nos movíamos entre los indiferentes y los fanáticos. Había alumnas que querían tener todos los números seguidos, me decían: “¡Profesor, guárdeme un número, por favor!”, pero estábamos en una limitación, porque no podíamos hacerlo para todo el colegio Hacíamos un buen número para que toda la gente se sintiera partícipe de la información que allí compartíamos En un principio, era de nuestro esfuerzo, pero después empezaron a aparecer colaboraciones, proposiciones para publicar algunos temas, pero poco a poco la gente se fue identificando con “Paso a Paso”. Todavía hay gente que me para en la calle para preguntarme cuando sale otro número de “Paso a Paso”, yo diría que a la gente le gustaba sentir que tenía una forma de expresión, que era en un pequeño periódico”
¿Qué artículos y/o secciones eran las más esperadas por los lectores?
“Cuando uno es profesor está expuesto a la aparición y desaparición de las alumnas, sobre todo las de III° y IV° Medio, porque ya sentía la nostalgia de que se iban a ir Sin embargo, hubo algunas tan constantes que hacían escrituras que llamaban mucho la atención, y cuando no había mucho, hasta el director se ponía a escribir también (haciendo referencia a él mismo). Publicábamos pequeñas narraciones, cuentos completos a veces, porque seguíamos el principio de la revista “Selecciones del Reader’s Digest”, que no planteaba un tema, sino que varios, ya que eso hace más atractiva las publicaciones, es un secreto que aprendí de ahí”
¿Cómo se distribuía “Paso a Paso”?
“¡No había porqué distribuirlo, me los arrebataban!, sacábamos la copia original y se la pasábamos a nuestro “ángel de la guarda” Salvador Sáez (actual Encargado de Imprenta) y el sacaba todos los ejem -
plares con una voluntad maravillosa Siempre tratábamos de regalarla porque esa era la intención, que fuera gratis y que nunca tuviera un precio, entonces a las chicas que les gustaba leerlo me los quitaban. Dividíamos los ejemplares por curso, que por lo general eran entre 10 a 15 dependiendo del número que sacábamos, pero siempre al tanto de que todos se sintieran identificados con “Paso a Paso” También había profesores que les gustaba leerlo, “¡No te olvides de mí, a mí me gustan los números!”, me decía la Sra. Victoria González. A muchos les gustaba leer la expresión de las niñas y siempre agradeceré haber trabajado en un colegio femenino, porque en general, las mujeres tienen una inclinación natural hacia la literatura y las letras, más que los hombres, que son más matemáticos y científicos”
¿Recuerda alguna exalumna en particular que haya destacado en el Taller de Periodismo?
“Voy a nombrar tres. La primera era una chica de origen palestino, cuyo apellido no voy a dar, que hizo sus primeras armas en “Paso a Paso”, y ella hablaba de estudiar Periodismo para defender sus ideas palestinas, siempre la he recordado con mucho cariño por su entusiasmo. Otra de las chicas era la niña Isabel Barrera, que escribía como los ángeles, muy calladita, era muy quitada de bulla, pero escribía
narraciones, cuentos, todo lo que le pidieses Y por último, mi querida Carla Pérez, ella dibujaba y escribía (todavía lo hace), sigue soñando con que “Paso a Paso” es de su propiedad, tanto así que ella una vez que vino a mi casa a hablar sobre “Paso a Paso” y creí que era la mejor guardadora de la tradición, por lo que decidí regalarle la colección completa, tenía todos los originales y se los regalé Ellas son las tres que más destacaron Yo soñaba con que algunas de ellas iban a seguir estudiando Periodismo, aunque tuve algunas que no son para nada periodistas y que todavía andan por ahí haciendo historia, recuerdo a Marisa Navarrete por ejemplo, una excelente alumna, que hoy tengo entendido que está trabajando en la Contraloría General de la República Todas eran buenas alumnas, escribían bien y era notable esperar un lucimiento profesional a futuro”.
¿Y por qué se llamó “Paso a Paso”?
“Yo creo que Stephen King tuvo la culpa, está basado en un cuento de él, no recuerdo cual, pero se parece mucho a la película “El Cuerpo” En ella, un grupo de chicos encuentra un cadáver y quieren dar la primicia, que consiste en llegar primero a donde está el cuerpo y explicar por qué lo mataron, y la lucha era con otros chicos más grandes que ellos que también querían hacer lo mismo, entonces este gru-
po se proponía hacer las cosas “paso a paso”, porque van caminando por las vías del tren, cruzaron una ciénaga, siguen caminando y se ensucian hasta llegar al objetivo, entonces como yo dije “paso a paso”, vamos a crecer “paso a paso” Las chicas estuvieron de acuerdo con el nombre y quedó con nosotros”.
Desea compartir algún mensaje y/o consejo para los estudiantes que hoy integran el Taller de Periodismo.
“El mismo que le ofrecí yo a mis alumnas, que es seguir con ese entusiasmo que han demostrado Tal vez estamos jugando al periodismo, pero al mismo tiempo, estamos dando las armas para que los jóvenes adquieran toda base de herramientas, ya sea en la redacción, diseño gráfico o dibujo, como también, en el contacto con la historia, las narrativas y el lenguaje Creo que tienen muchas posibilidades, eso es lo que siento yo en mis manos con esta publicación que trabajan, el continuar una línea de creación que sirve para soñar con un futuro mejor para los jóvenes, porque andan buscando que les señalemos el camino, y este es un bello camino, de dar a conocer lo que estamos haciendo para que en el futuro lo vean muchísimas personas más. A los pequeños periodistas les nace escribir y les gusta entrevistar, conversar con la gente y ver nuevas posibilidades de escritura, que les guste el lenguaje y que puedan jugar con él es maravilloso. Tengo recuerdos de chicas que de una frase u oración sacaban un tema y se entusiasmaban, querían entrevistar sobre diferentes temas, incluso de algunos que eran complicados de abordar; la opinión de las personas la teníamos como el tesoro mejor guardado, porque era como dejar constancia de lo que opinaba la gente, eso hacía adquirir una pertenencia que deseábamos tanto, porque cuando las niñas se comprometen para hacerlo lo realizan. Hay tanta información y es lindo jugar con esa posibilidad, creo que falta tiempo para buscar todo lo que tenemos a nuestro alcance”.
Antes de responder la última pregunta, el profesor Luis Concha se dio una licencia para entregar las siguientes palabras:
“Le agradezco al Colegio Inmaculada Concepción porque siempre creyó en mí, este taller era solamente por un año y terminé haciéndolo casi 20. ¿Cuál era la garantía? Que el señor Concha estaba con sus chicas parando una actividad concreta, no perdíamos el tiempo, teníamos una especie de modalidad de trabajo que consistía en reunirse, aprovechar el tiempo y ver florecer una publicación cada semana, quincena o mes, dependía únicamente de nuestras posibilidades y de nuestro trabajo”.
Pese a que asumió la Dirección a mediados de 2022, cuenta con una extensa y reconocida trayectoria en el Colegio Inmaculada Concepción En efecto, ingresó en 2002 como profesora de Historia, por lo que su trabajo en el establecimiento ha marcado gran parte de su vida profesional y personal
Carla Riffo Rebello, Directora de nuestro colegio, dialogó en exclusiva con “PASO A PASO”, donde pudimos conocer su recorrido en el Colegio Inmaculada Concepción, desde sus primeros años desempeñándose como profesora jefe y docente de Historia, hasta su presente al mando de la Dirección
Esta última misión, la cataloga como desafiante y llena de aprendizajes, pero al mismo tiempo, con muchos deseos por delante para fortalecer aún más al establecimiento que ella define como “su segunda casa”
¿Recuerda su llegada a nuestro colegio? ¿Qué rememora de esos primeros años?
“Yo llegué por primera vez al colegio en 2002 a hacer un reemplazo, estuve harto tiempo, unos 8 meses más o menos Era muy joven, y la verdad, es que fue una muy linda experiencia, porque aprendí muchísimo, especialmente de las personas que me recibieron en ese momento. Era un trabajo en un colegio muy grande, muy consolidado, en el que había mucha cultura, y siento que los profesores y directivos de ese período, fueron muy acogedores y humanos conmigo, fue una experiencia muy bonita que me marcó harto Luego yo me fui, pasaron 2 años, y volví en 2004 a trabajar de manera completa Fue una experiencia también muy hermosa, porque yo estudié en el Colegio María Inmaculada, por lo que fue reencontrarme con mis orígenes y, también, con el sello y carisma de Madre Paulina. Acá siempre me siento como en casa”
Apenas inicio su trayectoria en el Colegio Inmaculada Concepción, ¿Qué aspectos le llamaron la atención del establecimiento?
“Que era, primero que todo, un establecimiento de mucha tradición, con una historia muy importante en Concepción, con un legado, muchas generaciones y la formación de niñas Sentí en ese momento que se llevaba muy a fondo el carisma institucional, con las celebraciones, también muchas actividades hermosas. Además, sentí que era un cuerpo de profesores muy cohesionado, muy acogedores y fraternos, fue muy bonito cuando llegué”.
Durante sus años como profesora, ¿Qué es lo que más valoró y destacó de su trabajo en el aula?
“Yo fui toda mi vida profesora, desde que llegué hasta 2020, que tuve mi último curso como profesora jefe, fue un IV° Medio en pandemia. Soy profesora de Historia y Geografía, y estuve harto tiempo como Jefa de Departamento de Historia. Yo tenía una cercanía muy grande con mis estudiantes. Hoy día hay colegas que fueron mis alumnas, por ejemplo, la profesora María José Delgado, la profesora Constanza Villaseñor y la psicóloga Sofía Rivas Siempre intenté entregar enseñanzas y aprendizajes, pero también conocer a mis estudiantes, fui 7 veces profesora asesora de CEAL, entonces conocí muy bien a los cursos y siempre tuve cercanía con ellos”.
¿Algún curso en particular la marcó?
“Yo creo que todos, pero el curso donde tuve como alumna a la profesora Geraldine Monsalvez fui su profesora jefe 4 años. Para mí todos los cursos fueron importantes, pero ese fue el único en el que tuve su jefatura desde I° a IV° Medio, entonces viví hartos momentos buenos con ellas y otros no tanto, porque hay un gran cambio entre I° y IV° Medio, pero fue una experiencia de mucho aprendizaje; ellas a veces me veían como su segunda mamá, tenía una cercanía muy grande con todas y me tocaba, a veces, apoyarlas en lo bueno y en lo no tan bueno”.
¿Imaginó en algún momento ser Directora? ¿Cómo ha sido este desafío para usted?
“La verdad no, porque prácticamente trabajé en este colegio toda mi vida profesional Toda la vida fui profesora, desde que llegué, después fui Coordinadora Académica de Enseñanza Media en dos etapas, primero entre 2011-2012 y después volví en 2019. Luego, rápidamente sin esperarlo, pasé a la Subdirección Curricular, en eso estaba hasta el año pasado, porque a mí me gustan mucho los aprendizajes y el desarrollo curricular en el aula, de promover estrategias que motiven a los estudiantes, ese es mi foco. Por una situación que yo no esperaba, que la exdirectora se cambió de ciudad y tomo una decisión que implicaba dejar su trabajo por asuntos
personales, yo asumí el desafío, no tenía tan claro el año pasado si era lo que yo quería, pero asumí por la responsabilidad, el compromiso, y el cariño que le tengo al colegio. Yo llegué aquí soltera, entremedio me casé, nació mi hijo, estudié de nuevo, me pasaron muchas cosas, lo veo como mi segunda casa Cuando me ofrecieron el desafío en 2022 yo no lo dudé, porque era la persona más antigua dentro del equipo y había que asumir, este año no tenía la claridad si era lo que yo debía afrontar, pero el período del año pasado me dio la fortaleza para tomar la decisión.
Ahora estoy muy contenta, he aprendido muchísimo, yo creo que uno nunca deja de aprender en este trabajo, todos los días son diferentes y pasan situaciones que uno tiene que abordar Mi visión ha cambiado mucho, porque yo antes veía las cosas desde la mirada de profesora, desde la Coordinación Académica, y hoy me toca mirar todo, desde algo muy chico hasta situaciones muy grandes. Siento que me he ido fortaleciendo, tengo una mayor claridad y certeza para abordar situaciones, y eso me pone contenta”
Desde su punto vista ¿Qué distingue a este colegio del resto de los establecimientos del Gran Concepción?
“Muchas cosas. Nosotros somos un colegio que, si bien, hemos avanzado con el tiempo, mantenemos nuestra tradición e identidad, que nos dio nuestra fundadora, que es un legado muy valioso Ella un día tuvo un sueño de formar, de dar todo por la educación en Alemania, luego viajó a Chile, y quienes hemos formado parte de la educación, sabemos que es un sueño tan bonito. Preservar su legado es muy importante, y de alguna manera, es lo que me mueve. También, no solo buscamos ser formadores en lo académico, sino que de manera integral, creo que eso marca la diferencia Para todo eso, tenemos buenos profesionales y gente muy comprometida con su trabajo”.
¿Cuáles son sus deseos a futuro para nuestro colegio?
“Tengo muchos deseos para el colegio. Primero que sea realmente un lugar donde se promueva el aprendizaje en todos sus ámbitos, también una sana convivencia escolar, es súper importante dialogar frente a situaciones complejas, que se busquen soluciones y que el colegio pueda acoger a las familias. Y uno de los sueños que se vuelve un desafío es integrar a las familias a nuestro colegio, que participen más, que existan más actividades que involucren no solo a los niños, sino que también a sus familias, que podamos tener actividades pastorales, de formación, escuela para padres, pero que esta participación genere un lazo con la familia. También, espero tener estrategias más innovadoras, teniendo una mirada de las nuevas generaciones, que quizá no aprenden como yo les enseñaba a mis estudiantes hace 10 o 20 años, que hoy viven con la tecnología, nos gustaría de a poco ir caminando hacia allá Otro sueño también es trabajar la autonomía con los estudiantes, como estamos formando, que se integren a la sociedad el día de mañana, que tengan las herramientas para poder desarrollarse en sus próximos desafíos”.
2023 ha sido un año distinto para la profesora Elizabeth Muñoz Olguín, en abril asumió como profesora asesora del Centro de Alumnos junto al profesor Andrés Umaña, tarea que le fue encomendada por la directiva estudiantil debido a su constante cercanía y cariño con todos sus estudiantes. Esa es la esencia de la profesora de Lenguaje y Comunicación de nuestro colegio, que acaba de cumplir dos décadas trabajando en el Colegio Inmaculada Concepción.
En esta conversación con “PASO A PASO”, la docente nos comparte aspectos de su vida personal y académica, donde manifestó diferentes revelaciones de ambas esferas, desde su inclinación vocacional por el arte de las letras, hasta su trabajo en nuestro colegio, que hoy abarca a los 7° y 8° Básicos.
¿Dónde realizo sus estudios?
“Yo estudié en la Universidad de Concepción, en la Facultad de Educación”
¿Qué la motivó a ser profesora?
“Cuando yo comencé a estudiar en la universidad, nunca me imaginé que iba a ser profesora. Quise estudiar esto porque me gustaba la literatura, cuando era estudiante me iba muy bien en Lenguaje y en las asignaturas humanistas, me di cuenta que iba
a ser profesora en el cuarto año de mi carrera. Deseaba concluir pronto esa etapa, por lo que nunca me pregunté si me iba a gustar o si estaba preparada, solo continue”
Cuando tomó la decisión de ser profesora, ¿Tuvo apoyo de su familia o amigos?
“Tuve el apoyo de mi familia en todo momento, porque mis padres siempre quisieron que todos sus hijos fueran universitarios, nosotros fuimos los primeros de toda la familia Siempre eché de menos que mis padres pudieran haberme abierto más el abanico de posibilidades, que me hubieran propuesto otras opciones y no solo esa Por decir un ejemplo, mi papá fue carabinero, y en los últimos años antes de que el falleciera, le pregunté porque nunca me había dicho si podía ser carabinera o detective, o si de alguna manera podría haber estudiado otra cosa”.
¿Mientras estudiaba en algún momento se planteó desertar o estudiar otra carrera?
“Nunca, la verdad siempre traté de esforzarme al máximo, yo vivía para la universidad, estaba todo el día ahí, estudiaba mucho, me iba muy bien y nunca tuve ese pensamiento de abandonar la carrera”.
¿Qué fue lo que más se le dificultó al momento de estudiar?
“No sabía como estudiar, el primer año o los primeros certámenes fueron muy caóticos para mí, porque no sabía que esperaban de mí los profesores, no conocía el tipo de preguntas que me iban a hacer, eran muchas asignaturas y en cada una de ellas tenía que leer muchos libros, era como tener 10 controles de lectura al mismo tiempo Mi mamá me apoyó acompañándome en las sesiones de estudio, yo al principio traté de trasnochar estudiando y me di cuenta de que no estaba hecha para eso, con el paso del tiempo apliqué otras estrategias, estudié de día, en ratos libres, o en grupo en algunas ocasiones me favoreció, pero más que nada por el hecho de sentirme acompañada Si tenía una duda contaba con el apoyo de mis compañeros o amigos; la verdad, el universitario debe buscarse un espacio, un lugar y un sistema que le permita tener confianza e ir lo suficientemente preparado para cada certamen, porque son muy exigentes, por lo menos, los nuestros eran de desarrollo y con muchas hojas”.
¿Qué es lo que más le gusta de su profesión?
“Lo que más me gusta de ser profesora es que todos los días me hace cambiar mi ritmo personal privado, una se vuelve más extrovertida, alegre y acelerada También me hace estar más concentrada en mis estudiantes, mis niños, me gusta reírme, hacer juegos, locuras, y por supuesto, preocuparme de que
aprendan, lo que más me gusta es la clase en el aula”
¿En cuántos colegios ha trabajado?
“La verdad no sé, yo llevo más de 20 años en el Colegio Inmaculada Concepción, pero yo empecé en colegios bastante vulnerables con muchísimas necesidades, yo creo que trabajé en unos seis o siete colegios antes”
Si se hubiera dedicado laboralmente a otra cosa, ¿Qué habría sido?
“La verdad no sé, no me veo en otra cosa por el momento, uno de repente piensa en tener un café, trabajar en una biblioteca, o cambiar completamente de rubro y pasear mascotas, hasta eso he pensado, pero en realidad no, seriamente no lo he pensado”
¿Tiene algún hobbie?
“Por el momento, mi hobbie es ver series policiales, mientras más crímenes y detectives inadaptados tenga mejor”.
Podría comentarnos cual ha sido el momento más feliz que ha vivido.
“Uno generalmente asocia esos momentos felices con cumplir ciertas etapas o metas, que podrían ser cuando terminas la universidad, cuando nacen tus hijos, cuando tienes tu casa, un auto o cuando te ca-
sas Yo asocio el momento feliz con las etapas que he logrado cumplir y con las metas que he logrado alcanzar”.
¿Cuál fue el momento más difícil de su vida?
“En los últimos tiempos la pandemia para mí fue muy difícil, porque yo nunca fui de la idea de trabajar en casa, fue bastante complicado llevar lo laboral a mi espacio personal, y eso me trajo consecuencias muy importantes; estuve con licencia médica por depresión laboral, en ese momento yo pensé algo que solamente me he planteado dos veces en mi vida, que era no ser más profesora. La primera vez fue cuando nació mi tercera hija, que me hizo dudar el querer volver a trabajar, y la segunda fue en pandemia, cuando realmente yo no quería nada con hacer clases, porque era eso o estar en mi casa con mis hijos, de verdad yo ya no daba más y creo que no solo me pasó a mí, también le ocurrió a muchas trabajadoras de diversas áreas. Ese ha sido en los últimos tiempos mi momento más difícil, sin dejar de lado, obviamente, el fallecimiento de mi papá”
¿Algún consejo de vida que nos quisiera entregar?
“Que disfruten del día a día, que todos los días se levanten con una idea o un proyecto. Diría que los momentos más bonitos se viven en el colegio con los amigos, y que esos amigos te acompañen después en las distintas etapas de tu vida; es algo que yo no tuve, porque me mude mucho de casa y me cambie bastante de colegio, cuando yo veo que mis niños empezaron en Pre-Kínder y que van pasando de curso hasta llegar a IV° Medio, yo creo que es un regalo, por todo eso, yo creo que deben disfrutar esta etapa de colegio. Mi consejo sería ese, que disfruten sus etapas de vida acompañados de sus buenos amigos, que los van a tener por quien sabe cuántos años más, hasta que sean viejitos”
Tras el éxito de la última versión del Spelling Bee, Gladys Inostroza Ruiz manifestó su alegría por la gran recepción que tuvo la actividad, que logró concitar a un alto número de estudiantes interesados en aprender Inglés. Justamente esa es parte de su labor, apoyar e incentivar la enseñanza del idioma extranjero en nuestro colegio, responsabilidad que materializa con sus clases de Inglés en los ciclos Minden y Aquisgran, y junto con ello, a cargo de la jefatura de departamento de la asignatura desde 2022
Chorera de nacimiento, específicamente del sector
Las Canchas de Talcahuano, la más pequeña de 4 hermanos, alegre, carismática y cercana a sus estudiantes, así podemos definir a “Miss Gladys”, quien ya nos acompaña desde hace 7 años Aquí, conocimos más de su trayectoria y de su gusto por enseñar Inglés a los más pequeños, con un ingrediente secreto que conserva bajo el brazo: el amor.
¿Por qué quiso estudiar Pedagogía en Inglés?
“De chica me creía profesora, tenía las habilidades y cuando estaba en el colegio siempre ayudaba a mis compañeros, y ellos me entendían, siempre participaba en instancias extracurriculares, en deportes e inglés, ambas cosas eran lo mío y lo disfrutaba. Las canciones en inglés igual influyeron, creo que fue un punto importante de la motivación que tuve para optar por esta carrera Mi otra opción era ser detective, pero por esas cosas de la vida no postulé y preferí estudiar Pedagogía en Inglés”
Ha recibido comentarios positivos de su desempeño en el aula por parte de los estudiantes y apoderados, ¿Cómo los recibe?
“Yo creo que lo más importante para mí es el cariño que recibo a diario de mis estudiantes, la relación con ellos es vital, y por supuesto los apoderados perciben todo esto y escuchan a sus hijos En el aula utilizo mucho la pedagogía del amor, que sirve mucho y lo he comprobado con los años, y realmente
el amor que uno le entrega a los niños hace, en mi caso, que se enamoren de la lengua extranjera. Es real y se siente, porque cuando entro a la sala, los niños se me acercan, me abrazan, me dan pulseras y dibujos todos los días, es una cosa que veo a diario y se percibe, se acercan a mí para contarme sus cosas y que suelen ser súper importantes para la etapa de crecimiento en la que ellos están”
¿Cuál es la metodología más efectiva para acercar el idioma a los más pequeños?
“En los niños siempre he utilizado el Total Physical Response (TPR), que es una metodología de movimiento, se utiliza para enseñar vocabulario en específico, después oraciones más cortas y siempre he tenido éxito en eso, los niños adquieren realmente los conocimientos, y mientras más pequeños son, el aprendizaje aumenta. La exposición que ellos tienen, por ejemplo, en Pre-Kínder, es casi un 100 por ciento, los niños no se cuestionan ¿qué significa eso? ellos simplemente lo adquieren. Ven imágenes y otros recursos, y literalmente ellos son una esponja, porque absorben en su totalidad los contenidos”
En su calidad de Jefa de Departamento, ¿Qué avances significativos ha tenido la enseñanza del inglés en nuestro colegio que usted pueda evidenciar?
“Con el cambio curricular que tenemos, inicialmente desde Pre-Kínder hasta II° Medio, que tengan cinco horas semanales hace que los estudiantes estén más expuestos a la lengua, que aprendan más Por otro lado, estamos guiando la preparación de TOEFL (Test of English as a Foreign Language), que es la certificación internacional de la lengua para 2 niveles del colegio, que ha tenido buenos resultados. En cuanto al liderazgo que uno pueda tener, más todo lo administrativo que es revisar planificaciones, dar ciertos tips, y apoyarnos entre los colegas, todo es sumamente importante para la labor que cumplimos nosotros que es educar”
¿Cuánto tiempo lleva en nuestro colegio?
“Este ya es mi séptimo año. Recién había salido titulada de la carrera y estaba estudiando un postítulo para la enseñanza de los pequeños, y me hicieron una entrevista al igual que todos mis colegas del postítulo, y finalmente quedé yo Partí como toda docente sin saber nada, el primer año había un supervisor de Santiago para la que fui como su conejillo de indias, porque me supervisaba siempre, pero eso igual me aportó mucho a mi carrera porque él me enseñó mucho. Uno va creciendo durante la experiencia y lo que te pueda transmitir, por ejemplo, el jefe de departamento o los propios colegas”
¿Cómo ha influido el Colegio Inmaculada Concepción en su desarrollo profesional?
“Ha influido muchísimo, porque es el primer lugar de trabajo que he tenido en mi vida y he logrado formar una carrera acá He crecido, he aprendido y he fallado, pero también he aprendido de los errores y eso me ha impulsado a querer más, seguir estudiando y perfeccionándome para siempre dar algo mejor”.
Y así ocurrió con el magíster que acaba de realizar, ¿Qué tal fue esa experiencia?
“Fue muy demandante en un principio, porque era un Magíster en Gestión y Liderazgo y era la alumna más joven, el rango de edad era como de 40-50 años y yo tengo 29 Fue muy crítico, a tal punto que pensaba que no me la iba a poder, quienes estaban ahí eran personas con cargos directivos, entonces yo no tenía ni el habla y ni la experiencia que tenían ellos. Era también mi primer año de liderazgo como Jefa de Departamento, pero es un mundo gigante por conocer, pero satisfactoriamente me fue súper bien”
POR JOAQUÍN LIZANA MERINO8° BÁSICO A
Hernán Sanhueza Muñoz, profesor de Matemática y Computación, nos explica en esta conversación con “PASO A PASO” diversos aspectos de su vida, mayoritariamente laboral, donde nos cuenta el apoyo recibido por sus familiares, lo fácil que fue para el encontrar su primer trabajo y diversos ámbitos de su vida como estudiante Además, el también profesor jefe de 7° Básico B, nos demuestra que estudiar pedagogía no siempre es fácil, pero teniendo la motivación necesaria, siempre es posible lograrlo en el intento.
¿Cuál fue su materia favorita como estudiante?
“Tenía varias materias favoritas, la que más me gustaba cuando niño y durante toda la Enseñanza Media fue Física, y a la vez Música, pero Matemática era lo que más me gustaba enseñar”.
¿Ser profesor de Matemática fue su primera opción?
“Cuando tuve que elegir una carrera fue mi primera opción, incluso tenía la posibilidad de estudiar cualquier Pedagogía, fuera Física, Matemática, Música o Ciencias, pero definitivamente quería que fuera Pedagogía, porque me gustaba enseñar. Quise estudiar Pedagogía en Física, pero no estaba la carrera como tal en Concepción, solamente estaba en la Universidad de Valparaíso, y no podía trasladarme hacia allá por temas de hospedaje y lejanía Entonces, preferí estudiar Pedagogía en Matemática y Computación en la Universidad de Concepción”
¿Sus padres lo apoyaron cuando decidió ser profesor de Matemática?
“Mis padres decidieron estudiar pedagogía, y aunque
no me lo aconsejaban por el tema económico, siempre me motivaban a estudiar una ingeniería o en algo donde se ganara más dinero, donde yo creo que me hubiera ido bien, pero mi decisión ya estaba tomada Ellos me recomendaban estudiar Medicina o Ingeniería en Matemáticas, pero nunca una Pedagogía, entonces siempre estuvo ese consejo y me trataban de convencer para elegir otro camino. Aun así, el apoyo de ellos siempre lo tuve a pesar de mi determinación final”.
Cuándo estudió Pedagogía en Matemática, ¿Usted pensó en cambiar de carrera?
“No, nunca lo pensé, al contrario, cada vez me motivaba más en seguir con la carrera. Siendo sincero, al principio no era mi mayor interés sentir esa realización académica, pero como un acto de responsabilidad y tranquilidad hacia mis padres me
puse a estudiar. Yo felizmente me hubiera dedicado al arte, música o a la jardinería, pero era un acto de irresponsabilidad de mi parte, siempre intente hacerlo bien en la universidad y me colocaba a estudiar Si en algún momento me aburría o no tenía ganas de seguir con la carrera, me iría por una donde tuviera que utilizar mis manos, donde yo creo que me hubiera ido bien, pero siempre quise terminar mi carrera y tenía muchas ganas de enseñar”.
Al momento de titularse, ¿Se demoró mucho en encontrar trabajo?
“No, encontré trabajo antes de titularme y tuve que dejarlo para hacer la tesis de práctica. Cuando aún no la terminaba, me llamaron de un trabajo, así que me titulé y ya estaba trabajando”.
¿Qué lo motivo para ser profesor de Matemática?
“Siempre me gustó enseñar y elegí Matemática porque mis compañeros de colegio me entendían y, además, yo me divertía enseñando, tuve buenos momentos de aquello. Además, la imagen de mi padre fue muy importante, él es profesor de Física y yo admiraba su trabajo, y en un momento fue también la elección de mi mamá, pero ella siempre fue humanista y pudo cumplir su sueño de estudiar pedagogía, pero no terminó de estudiar porque se dedicó a cuidar de mí y de mi hermana, así que vi la pedagogía como una tradición familiar que admiré mucho”.
¿Qué hobbies tiene usted?
“Me gusta mucho el jardín, las flores y la agricultura También la música, escribir, investigar historia y política, esos son mis pasatiempos”
Usted nos contó que le hubiera gustado ser profesor de Música ¿Por qué no eligió esa carrera?
“Porque siempre me puedo dedicar a eso, aunque fuera aficionado, me gusta intentarlo y aprender, aunque no sea especialista Me pasa lo mismo con la Física, siempre puedo instruirme en cosas e irme documentando”
En síntesis, ¿Qué repaso puede hacer de su vida laboral?
“En todos mis trabajos he tenido buenos recuerdos. Al titularme, mi primer trabajo fue en el colegio donde estudié, y esa sensación de trabajar donde mi crie con mis compañeros y profesores fue una comodidad En el Colegio Adventista también fue importante, porque tan solo con una experiencia laboral, tal vez de pocos años, fui el primer profesor de Matemática de Enseñanza Media de aquel colegio, los estudiantes confiaban en mi trabajo, y también los apoderados me respaldaban y apoyaban, hubiese preferido no irme Acá en el Colegio Inmaculada Concepción siento que respaldan mi trabajo, incluso cuando era profesor volante, ya era valorado mi trabajo, hoy respondo a esa confianza y respaldo con lo mejor de mis capacidades profesionales”.
Traslado de dependencias en Valle Escondido Paicaví
CONCEPCIÓN
1979 - 1986: Sor Luisa Pozo Valenzuela
1987 - 1991: Sor Mariela Kortmann Wetzel
1992 - 2002: Sor Luisa Pozo Valenzuela
2003 - 2010: Mirta Mouat Castillo
2011 - 2012: Sor María del Rosario Castillo Burdiles
2013 - 2020: Eduardo Vega Riquelme
2021 - 2022: Angélica Caro Rodríguez
2022 - presente: Carla Riffo Rebello
Angélica Martínez Marchant, también conocida como “Miss Angelica”, se encarga de la Coordinación Académica del Ciclo Paderborn (7° Básico a IV° Medio), donde trabaja y colabora con las diferentes áreas de nuestro colegio. Sus tareas no se limitan, entra en juego tanto en las planificaciones y la administración de las áreas curriculares, como en el trabajo de generar lazos y conexiones con los estudiantes, y poniendo ojo a quienes tengan cualquier tipo de inconvenientes
“Yo tengo que averiguar porque el estudiante falta y ver que está pasando, si presentó algún certificado, si debía evaluaciones y ver como lo puedo ayudar”, mencionó. Además, como Coordinadora del Ciclo Paderborn, afirma que su parte favorita es articular la orientación que se lleva a cabo con los estudiantes de III° y IV° Medio, guiándolos hacia qué carrera o universidad elegir
Camino académico y profesional
La Coordinadora estudió durante sus primeros años en Cañete, donde adquirió un gran interés por los idiomas desde pequeña, deseo que la impulsó a estudiar Pedagogía en Ingles en la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), pero para ello, decidió mudarse sola a Concepción a sus 18 años. Para ella, no fue muy fácil el comienzo, “yo tenía que mantener mis becas, porque sin las becas no podía pagar la carrera, tenía una presión super fuerte”, expresó
A pesar de los obstáculos durante su ciclo universitario, logró titularse con éxito. Acto seguido, en 2015 inició su etapa laboral en el Colegio Inmaculada Concepción, en un principio, solamente tenía planeado trabajar durante 2 años, para luego ser profesora en la educación superior No obstante, se dio cuenta del efecto que podría generar con los
estudiantes en su edad adolescente, en comparación con los jóvenes universitarios, reflexión que marcó un precedente que la impulsó a continuar en nuestro colegio.
En 2022, Miss Angélica fue profesora jefe del ya egresado IV° Medio A, con el que generó un vínculo estrecho, tanto con sus estudiantes como con sus apoderados, esa fue su última experiencia en el aula antes de dedicarse de lleno a la Coordinación. Dejar de ejercer como profesora fue muy complicado para ella, debido a que siempre se ha sentido vinculada con el trabajo en la sala, pero que también era necesario emprender otros rumbos en su carrera profesional, lo que se materializó con su llegada a la Coordinación del Ciclo Paderborn
“El contacto con los estudiantes en el aula es y será por siempre súper valioso. Yo soy una persona súper inquieta y curiosa, y seguir mucho tiempo una rutina me supera un poco”, manifestó.
Para Miss Angélica, trabajar con todas las áreas y asignaturas la hace sentir muy motivada, y al mismo tiempo, orgullosa del trabajo que realizan los profesores que comparten labores junto a ella. “Voy a ver profesores desde Matemática hasta Artes, incluyendo todos los electivos, ver a todos mis cole -
gas en acción ha sido súper enriquecedor para mí”, afirmó.
¿Cómo se definiría usted en una palabra? Servicio.
Con esa respuesta tan sencilla, pero decidora, desea que sigamos manteniendo un trato cordial y amable entre todos, para construir día a día una mejor comunidad. “Tenemos que abrazar la diversidad y los cambios, para que seamos una institución acogedora”, sentenció.
Lo que no sabías de Miss Angélica
Signo zodiacal: Virgo.
Dueña de dos gatas, llamadas
Suki y Momo
Serie animada favorita:
Avatar, la leyenda de Aang.
Grupos de K-pop favoritos:
Mamamoo y BTS
POR REDACCIÓN "PASO A PASO"
Hace 12 años, una joven estudiante de Pedagogía en Educación Parvularia cruzaba la puerta de Aníbal Pinto 340 para iniciar su práctica profesional, sin saber que 5 años después, desarrollaría de ahí en adelante su trayectoria profesional de la mano del Colegio Inmaculada Concepción. Proveniente de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Victoria Sepúlveda Medina admite que siempre le llamó la atención nuestro colegio, y que supo apreciarlo aún más tras cumplir con su deber académico en la UCSC
Por ende, fue gratificante para ella recibir en 2016 la noticia de su incorporación definitiva a nuestra comunidad, ya con su título bajo el brazo y luego de realizar una serie de reemplazos en otros recintos educacionales. Carismática, alegre, rigurosa y “bailarina” con sus niños y niñas, la “Tía Vicky” ha sabido ganarse el cariño de sus estudiantes y apoderados a base de trabajo y dedicación, virtudes que, a su modo de ver, fueron potenciadas por la confianza que nuestro colegio ha depositado en ella.
¿Cómo recuerda su primer acercamiento al Colegio Inmaculada Concepción en su práctica profesional?
“Recuerdo que siempre me llamó la atención el colegio, porque cuando yo veía a las niñas en Concepción encontraba que tenían un sello, se veían siempre ordenadas y yo jamás pude postular a un colegio así. Cuando se me dio la oportunidad de estudiar Pedagogía en Educación Parvularia y tenía que hacer la práctica, claramente la quería hacer en un colegio de Iglesia que tuviera sellos valóricos, que es lo que más me importa Dejé mis papeles en varios lados y quedé acá en el colegio, donde pude hacer mis prácticas y también apliqué mi proyecto de tesis con mi grupo”
¿Quién supervisó su práctica en el colegio?
“Mi práctica la supervisó Paulina Merello, me enseñó bastante y aprendo de ella hasta el día de hoy. Va a mi sala porque le hace clases de Religión a mi curso, y observa en mí sellos que fueron forjados por ella en la práctica profesional”
¿Cómo surgió la opción de volver a trabajar al colegio como profesional?
“Yo creo que todas las cosas se van dando, porque terminé la práctica profesional y no se dio la opción de seguir trabajando ese mismo año. Pasé 4 años haciendo reemplazos en el sistema público en Talca, Concepción y Talcahuano, esas experiencias formaron mi carácter, porque cuando yo salí de la práctica me faltaba mucha experiencia, solamente tenía teoría Luego de unos años, Paulina Merello me llamó y me dijo que se iban a abrir cursos nuevos, y yo vine porque ya estaba familiarizada con el colegio; en ese tiempo me entrevistaron Eduardo Vega y Rosa Costa, y finalmente quedé, estuve muy contenta porque para mí siempre ha sido grato trabajar acá”
¿De dónde proviene la inquietud por estudiar Educación Parvularia?
“Estaba un poco desorientada. Cuando estaba en IV° Medio, me gustaba mucho Pedagogía en Historia, y una vecina me dice que vea la opción de Educación
Parvularia, y fue lejos la mejor opción, porque el trabajo con los niños es entretenido y te rejuvenece constantemente. Uno siempre es un personaje, es la tía chistosa, que tiene mucha expresión facial, gesticula mucho, hace bromas, salta, corre, toma a los niños en brazo, se acerca a ellos cuando tienen pena, a veces hay que dejar de lado un poco lo académico y enfocarse en lo emocional, entonces yo creo que fue la mejor opción Pude haber estudiado Pedagogía en Historia, pero no me veo trabajando con cursos tan grandes”.
Refugio espiritual
Victoria nació en Talcahuano, pero su familia es originaria de Talca, ciudad en la que nacieron sus 2 hermanos mayores La crítica situación laboral en la capital de la Región del Maule, obligó a sus padres y hermanos a emprender el rumbo al Biobío, donde se asentaron y pudieron desarrollar su diario vivir.
Su madre, Alicia Medina, falleció el 5 de julio de 2018, acontecimiento que para ella significó un profundo dolor En medio de este triste suceso, reveló que pudo sobrellevar la pena gracias al apoyo espiritual que recibió en nuestro colegio, aspecto que hasta el día de hoy reconoce y valora.
“Cuando entré a trabajar al colegio en 2016, mi mamá
todavía estaba viva, y fue la más feliz de que estuviera trabajando acá, más estable y no en un reemplazo. Ella falleció en julio de 2018, y encontré fundamental que yo haya estado acá, porque el colegio me brindó en aquel entonces mucho apoyo espiritual, comprensión y empatía, tuve el lugar y las herramientas para saber refugiarme y sobrellevar ese dolor”, confesó.
El día a día de “Tía Vicky”
La educadora de párvulos, además, confidenció que sus primeros acercamientos a su profesión se dieron en su esfera familiar, ya que al ser la más pequeña de sus hermanos y primos, de más grande cuidaba a los hijos de estos últimos “Yo creo que de ahí saqué en parte el tema de Educación Parvularia”, manifestó.
¿De qué manera se puede describir la “Tía Vicky” con sus niños y niñas?
“Es la tía bailarina, le gusta mucho bailar, mueve mucho a los niños, todos los días los cambio de pues-
to y siempre están rotando. También es la de los personajes, que de repente se pone histriónica, pero ellos saben que hay un tiempo para jugar y de ‘chacoteo’, siempre con respeto, y otro momento para trabajar, porque o si no todo sería juego y saben que hay que respetar, aunque de repente la tía ‘eche la talla’, después en otro contexto hay que respetar”
¿Cómo ha influido el Colegio Inmaculada Concepción en su desarrollo profesional?
“El colegio siempre ha dado muchas instancias para que uno se vaya capacitando en varias cosas, innovando estrategias Todos los años vienen llegando niños diferentes, incluso en tiempos de pandemia y confinamiento, he progresado mucho en varios aspectos como tecnología, trabajo con niños.
También depositaron su confianza en mí, he tenido cursos muy buenos, los papás también, y estoy muy feliz por ser parte del Colegio Inmaculada Concepción, porque en el aspecto profesional he crecido mucho”
Los comentarios internacionales en televisión influyeron mucho en Karla Delgado Carreño, tanto así, que marcó un precedente en la elección final de su profesión A su modo de ver, la profesora de Historia cree que el hecho de ver las noticias desde muy pequeña junto a sus abuelos, incidió en su gusto por su área de interés.
Hija única, nacida en Talcahuano y exalumna del Colegio Mixto Inmaculada Concepción de Talcahuano desde Pre-Kínder a IV° Medio, por lo que sus conocimientos sobre la Congregación datan de muy corta edad Fuera de su trabajo en el aula, gusta de la cocina, las series y películas, y por supuesto, del fútbol, como reconocida hincha de Colo Colo.
La profesora Karla Delgado conversó con "PASO A PASO" y reveló datos de su trayectoria en el colegio,
junto con abordar aspectos desconocidos de su inclinación vocacional.
¿Qué la motivó a estudiar pedagogía?
“En primer lugar porque era una carrera que englobaba todo lo que a mí me gustaba, desde el punto de la enseñanza, la historia, la geografía y la pedagogía. En segundo lugar, porque es un trabajo que me mantiene activa y que cada día será algo nuevo”.
¿Siempre quiso ser profesora?
“Sí y no, porque cuando era más pequeña y tenía entre 10 y 12 años si quería ser profesora, pero después cambié de opinión y quise estudiar Psicología, Trabajo Social y Derecho. Con el paso del tiempo, descubrí que la pedagogía era más completa a lo que a mí me gustaba”.
¿Y por qué Historia?
“Netamente porque me gustaba la asignatura desde chica, siempre me gustó Historia Desde mis primeros años en el colegio era mi asignatura favorita y siempre lo fue, entonces si era una pedagogía, sí o sí era Historia, no había otra opción. Coincide también con que en mi casa veían hartas noticias, principalmente mis abuelos y yo las veía con ellos, entonces me llamaba la atención todo lo relacionado con la política internacional, y en ese tiempo cae el Muro de Berlín, después vino la Guerra del Golfo Pérsico, la desintegración de la URSS, entonces todas esas cosas siendo chica me llamaban la atención, y después en el colegio me di cuenta de que todo estaba relacionado con la historia reciente hacia atrás. Después me puse a ver otras cosas, como por ejemplo, los romanos, que me gustó mucho cuando los vi, aluciné con Roma un tiempo Finalmente, estudié pedagogía porque era lo que englobaba todo lo que me gustaba, y solamente en Historia, aunque Biología igual me llamó la atención un tiempo, pero solamente quise Historia”.
“Mi primer acercamiento fue en la práctica profesional en 2006, yo había hecho todas mis preprácticas en el Inmaculada de Talcahuano, y cuando llegó el momento de elegir el lugar de práctica no podía seguir haciéndola allá, porque no estaba como centro de práctica oficial; entonces como el colegio estaba en el centro y tenía conocimientos por la Congregación, quise hacerla acá y me aceptaron, Carla Riffo fue mi supervisora en aquella época Luego pasaron dos años y ella me escribe para saber si estaba trabajando, le dije que sí, pero que no estaba del todo cómoda, entonces me cuenta que el colegio necesitaba profesores de Historia y que iban a salir los avisos en el diario; me lo dijo como para que postulara porque ya me ubicaban, incluso le preguntó a la Sra Loretta Iturra si se acordaba de mí todavía, que en ese tiempo era la Orientadora de Enseñanza Media y la coordinadora de las prácticas, y le dijo que sí y que me avisara, así que vine y dejé mi currículum. Luego, la Sra. Victoria González me preguntó como sabía de antes y le dije que me habían
dado el dato, entonces recibió mi currículum, pero me advirtió que después iban a llegar más y que tenía que estar atenta. Recuerdo que hicieron un concurso en tres etapas, y como a los diez días que di la primera entrevista, me llamaron para decirme que había quedado”
¿Cómo ha sido su experiencia en el Colegio Inmaculada Concepción?
“Es un buen lugar para trabajar y es un ambiente laboral bueno. Aunque no tenga muchos puntos de comparación, el colegio me ha permitido desarrollarme profesionalmente, entré con 28 horas, después con 33, hasta llegar a 43, entonces todo mi centro giraba en torno al colegio”
¿Qué tan importante es para los jóvenes que conozcan la historia?
“Siempre va a ser importante que estén cerca de la historia, por un tema de cultura e identidad, de no volver a repetir ciertos patrones, es importantísimo. Es una asignatura primordial que te permite desarrollar cualquier tipo de habilidades como, por ejemplo, la comprensión lectora, el análisis y desarrollar un pensamiento crítico Es fundamental no solamente en los jóvenes, sino que también desde muy pequeños deben tener la identidad y la conciencia de lo que se ha vivido en el pasado, y que muchas veces nos sirve para no repetir los mismos errores en el presente”
TRAS LA NOTICIA
POR REDACCIÓN "PASO A PASO"
Un montón de dibujos adorna la oficina de Constanza Vallejos Sanhueza, profesora diferencial de nuestro colegio, que representa la muestra más fehaciente del cariño que le expresan a diario sus pequeños estudiantes del Ciclo Minden La joven profesional forma parte del Colegio Inmaculada Concepción desde hace un año y medio, del cual agradece la oportunidad de realizar sus primeras armas en el campo de la educación.
Pese a su juventud, hoy ejerce como jefa del Área Diferencial, con un demarcado sello entusiasta que la impulsa a ampliar sus conocimientos y poner lo mejor de sí a disposición de sus estudiantes Con un gran equipo de trabajo que se ha conformado en el último tiempo, ve posible atender en conjunto los requerimientos propios del área que encabeza.
“Cuando pensaba en que estudiar, mi foco siempre fue trabajar con niños y niñas, y poder marcar de manera positiva su vida Mi principal intención era poder ayudar a quienes se sintieran desplazados, impulsando y promoviendo la inclusión y la aceptación de la diversidad. Entre todo eso, llegué a Pedagogía en Educación Diferencial en la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), y ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida”, introduce la docente respecto a sus principales deseos e inquietudes antes y durante su llegada a la universidad
¿Qué significado tiene para usted iniciar su carrera profesional en nuestro colegio?
“El mayor significado para mí es que representa un tremendo desafío. En todas mis prácticas progresivas y profesionales, que son lo más cercano que tenemos a esta realidad que uno va a enfrentar en la vida labo-
ral, fue en colegios con PIE, entonces la estructura y el funcionamiento es muy distinto Antes en el colegio solamente había una profesora diferencial, por lo tanto, estábamos formando un equipo desde nuestra área y eso involucra muchas cosas; por un lado, tener que ir estableciendo ciertos lineamientos y protocolos, estructurando como serán los talleres psicopedagógicos, fue un trabajo continuo y en equipo, en el que incluso íbamos aprendiendo a través del error, entonces es una construcción continua, porque hasta este año todavía se han incorporado nuevas acciones y apoyos desde nuestra área. Siempre estamos intentando alcanzar nuestro principal objetivo, que es llegar a una inclusión total de nuestros estudiantes, la aceptación de la diversidad y lograr el trabajo colaborativo. Ser parte
de todo esto que se está creando y estructurando, es una gran tarea, pero al mismo tiempo, es una hermosa experiencia que te llena de aprendizajes, que te enseña a enfrentar diversas situaciones a los cuales tenemos que dar respuesta”.
¿Cómo recibe el cariño de sus pequeños estudiantes?
“Mis estudiantes son mi todo y mi principal motivación, son quienes me motivan día a día a amar mi profesión y a decirme si tomé la decisión correcta. Siempre he tenido la convicción de que la educación se tiene que lograr siempre a través del afecto, el vínculo, el amor y la empatía hacia tu estudiante, cuando logras conectar de esa manera, todo lo que tiene que ver con el desarrollo de habilidades en sus procesos de aprendizaje, se va dando Siempre me entregan su cariño en los pasillos, en los recreos, y es muy hermoso encontrarse con un estudiante que me diga: “Tía cuando nos toca taller con usted” o “Tía la quiero mucho”. Siempre me hacen dibujos, y lo atesoro mucho, para mí es algo que tu estudiante dedicó tiempo, pensó en ti y que no conforme con eso te lo da, es algo maravilloso y les hago saber que lo que hicieron para mí es importante, tengo un espacio de la sala en donde yo pego cada uno y me siento muy afortunada que me hagan saber qué estoy haciendo mi trabajo bien. Además, ellos son muy inteligentes y
saben por qué están trabajando conmigo, entonces también me agradecen en el ámbito profesional, ya sea por ayudarlos a leer y escribir, saben cual es el rol que yo cumplo con ellos y cuáles son nuestros objetivos”.
¿Cuáles son los principales ejes que se buscan desarrollar en el Área Diferencial?
“Algo que nos tiene muy felices como equipo es el ingreso de las profesoras diferenciales en el aula por primera vez en el año, es algo que nos permite ir avanzando en temas de inclusión, ya que lo que puede aportar una profesora diferencial en el aula común es muy valioso, permite entregar a los docentes distintas estrategias y formas de cómo diversificarla enseñanza Nosotras enseñamos desde la idea de que hay una diversidad, que cada uno de los niños es un mundo distinto, en el que aprende de forma diferente, y la idea es ir dando respuesta a todo esto, a todas las características y ritmos de aprendizaje de cada alumno, el foco siempre está en disminuir las barreras hacia el acceso del aprendizaje. Además, trabajamos en nuestro taller que se enfoca en el desarrollo de habilidades, en mi caso específico, está enfocado en todas estas habilidades que son precursoras, con Pre-Kínder y Kínder trabajamos todas aquellas que son propias del proceso lectoescritor, y con 1 y 2° Básico está derechamente enfocado en la adquisición del proce-
¿Cómo ha sido el trabajo en conjunto con sus colegas del área?
“En este trabajo, mi colega Geraldine Monsalvez ha sido muy importante Juntas hemos ido aprendiendo y creciendo como profesionales, nos hemos apoyado en todo sentido y hacemos un gran equipo, siempre nos escuchamos, empatizamos y orientamos, ha sido muy lindo poder vivir esta experiencia junto a ella, incluso, más allá de ser buenas colegas y profesionales, logramos generar un lindo vínculo de amistad, y algo muy positivo que tenemos es haber adquirido la capacidad de separar las cosas, de no juntar nuestra amistad con lo profesional, entonces hay un respeto con las opiniones de cada una También intentamos dar más de lo que se nos pueda solicitar, si queremos hacer algún juego o actividad en nuestro taller, siempre vamos a intentar de dar lo mejor y eso es una ventaja, porque en las actividades que tenemos en común nos apoyamos y motivamos en hacer todo lo que nos proponemos Actualmente está Lilian, que finalmente ha pasado harto tiempo acá en el colegio haciendo un reemplazo, también ha sido una experiencia muy linda trabajar con ella, y tener por primera vez una tercera profesora diferen-
cial, por lo cual estamos muy felices Se ha integrado bastante bien a nuestro equipo, es una persona también muy colaboradora y accesible, siempre muy atenta y aportando constantemente, y se ha alineando de buena manera al trabajo en nuestro colegio Nos apoyamos mucho entre las tres, así que ha sido un muy buen equipo el que hemos estado formando y fortaleciendo estos lazos entre colegas”
¿Cuáles son sus deseos y proyecciones futuras?
“Me encantaría seguir siendo parte de esta comunidad educativa, de este hermoso equipo que hemos ido formando desde nuestra área, seguir avanzando en todo lo relacionado con inclusión y potenciar el trabajo individualizado que tenemos con los estudiantes Poder ser parte de todo esto y continuar aquí sería maravilloso También dentro de mis proyecciones está el deseo de especializarme, ya llevo dos años y el que viene pretendo volver a estudiar, todo con el objetivo de ser una profesional más completa y que me permita contar con todos los conocimientos, estrategias y habilidades en pro de ayudar a mis estudiantes, todo lo que quiero seguir aprendiendo es por ellos De esa manera, quiero entregar una educación de calidad y que respete esta gran diversidad que hay dentro del aula”.
so de lectura y escritura, con la intención de potenciar la fluidez y la comprensión lectora".
Músico y docente a todo terreno. El profesor de Música y profesor jefe de 8° Básico A, Mauricio Martínez Mardones, desclasificó su faceta como docente en nuestro colegio, y también la de artista, que en la actualidad se manifiesta al formar parte de la banda “Los Pelagatos”, agrupación musical especializada en cuecas y cumbias. En esta conversación con "PASO A PASO", evoca su época de adolescencia, donde formó su conexión fructífera y permanente con la música, y que ha sabido vincularla de manera exitosa al ámbito de la educación
¿Le gusta su trabajo en nuestro colegio?
“Me encanta mi trabajo como profesor de Música y me gusta este colegio también, yo postulé apenas supe que se hizo un cupo acá y me encantó cuando llegué. Yo trabajaba part-time antes, y desde este año ya estoy por tiempo completo”
¿Por qué eligió la carrera de Pedagogía en Música?
“Me gusta mucho la música y me encanta hacer música, me pasó que me produjo mucho agrado y placer poder enseñar esto a otras personas. Yo cuando estaba en I° Medio, entré a un Taller de Folclore que tenía en el Liceo Enrique Molina con las chicas del Liceo Experimental, como allá era de puros varones y el Experimental eran puras niñas, para que el taller fuera mixto bailábamos cueca, y hacíamos un grupo de voz mixto, se juntaban ambos grupos y se hacía un taller que era dirigido a los dos liceos. En el Liceo Experimental lo dirigió una profesora de Historia, no tan especialista en temas musicales, pero había conseguido que a los alumnos más grandes los enviaran a capacitaciones de folclore, que se hacían en vacaciones con la Escuela Nacional de Folklore Cuando pasé a II° Medio y ya me había aprendido todo el repertorio que tocaba en
el grupo, me tocó enseñarle a tocar guitarra a mis compañeros que habían entrado recién al conjunto; al año siguiente, recién me gustó enseñar a la gente a como tocar un instrumento, explicarle cómo lo hacía y ver cuando la persona se alegraba de que le empezaba a salir bien, después empecé a dirigir el ensayo para toda la gente que cantaba Así que dije: 'acabo de encontrar con lo que me quiero dedicar en el futuro'”
Usted tiene una banda de cueca, ¿Cómo surgió la banda “Los Pelagatos”?
“Siempre he estado tocando en grupos. Cuando estuve en el liceo, formé uno de música andina, estilo Yamo, que se llamaba “Chaltomay”, que tocábamos con un compañero del mismo conjunto que nos habíamos conocido La profesora de Música de esa época, María Eugenia Huaiquimilla, nos alentaba a que ensayáramos juntos, a que tocáramos, nos ayudaba con los arreglos de los temas y la voz, nos decía cómo tenía que tocarse y cómo cantar, todo esto era un contexto extracurricular, ni siquiera era un taller, a veces la pillábamos en algún recreo y le pedíamos que nos explicara algunas cosas o nos quedábamos en la tarde y ahí nos podía ayudar con otros asuntos, ahí empezamos a tocar y tuvimos algunas presentaciones como grupo. Después, la profesora desarrolló un proyecto para armar una or-
questa y estaba haciendo música latinoamericana, y nos invitaron a tocar con la ella, porque nosotros tocábamos los instrumentos que no eran clásicos como el violín ni el cello, era el charango, el bombo, entre muchos otros, y fue muy entretenido. Después entré a la universidad y el grupo se cortó, justo por el terremoto, porque nuestra presentación de despedida iba a ser justo el 27 de febrero de 2010, porque después, algunos integrantes se habían ido a Santiago y se disolvió, así que nunca se despidió el grupo. Después de eso pasó un año aproximadamente, y algunos quedamos con las ganas de seguir tocando, y ahí me invitaron a tocar en un grupo de cuecas urbanas, estilo romántico, y yo estaba aprendiendo a tocar piano, empezamos así y fue bastante entretenido, yo no sabía mucho de piano en ese momento, así que tampoco me salía tan bien. En ese intertanto, conocimos el concepto de la cueca brava, que era un poco más urbana, de los suburbios y los barrios, y las letras tenían esa connotación, ahí quisimos armar un grupo nuevo, pero con los mismos que estábamos en este primer proyecto, que finalmente se llamó “Los Pelagatos”, y eso fue en 2011 Ese mismo año, en abril, tuvimos el primer ensayo, y le pusimos el nombre definitivo al grupo y desde ahí no ha parado hasta el día de hoy, ya hemos realizado conciertos en Santiago, Temuco, Talca e incluso en Argentina”.
¿Alguna vez usted pensó tener otra carrera que no fuera a ser músico?
“Cuando era más niño quería ser astronauta y después quise ser astrónomo Luego me peleé un poco con la Matemática y cuando descubrí que la Astronomía era casi una Matemática y que no era estar todo el rato en el telescopio, me desencanté un poco, pero creo que, en otro universo, quizás ese habría sido mi destino si no hubiese sido la música, por ahora no se me ha pasado nunca por la cabeza. Otra opción que me gusta mucho como pasatiempo es la carpintería, mi papá hace muebles y me he planteado aprender esas técnicas en algún momento de mi vida y combinarlas, pero me gusta mucho hacer clases, incluso más que la música, espero algún día hacer clases en la universidad, me encantaría poder formar profesores, también me gusta esa otra línea del desarrollo profesional”.
¿Algún pasatiempo favorito? ¿Algo en especial que le gusta hacer en sus tiempos libres?
“Aparte del trabajo, la banda y la paternidad, que absorben mucho, me queda poco tiempo para esparcirme. En realidad no lo extraño tanto, porque mis trabajos son entretenidos y la banda también la disfruto, en mis responsabilidades hay algo de deber y un poco de distracción, es combinado En el caso de las clases hacemos música muy buena, igual es a-
gradable estar escuchando los trabajos de los estudiantes, por lo general elijo siempre canciones que me gustan Fuera de todo eso, estoy haciendo un refugio en el campo, así que también pienso harto en eso y le dedico tiempo a ir a trabajar la tierra, ahora estoy por terminar la cabaña Además, me gusta mucho Nintendo, tengo un Nintendo Switch y me divierto mucho con eso, en la pandemia esa fue mi salvación, jugar Mario Bros o Zelda, los videojuegos de Nintendo”.
¿Cómo ha sido la experiencia de ser profesor jefe?
“Trabajo como profesor desde 2012, son 11 años de trayectoria y estuve de jefatura dos años en San Pedro, donde tuve un 7° Básico y que luego fue 8°, al año y medio después un 5°, y ahora, el curso que tengo a la actualidad. Estuve como cinco o seis años sin jefatura, y aunque tenía sus pro y contra, lo fui extrañando, porque cuando uno solamente es profesor visitante conoce poco a sus estudiantes y también lo conocen poco a uno Es agradable poder tener ese contacto más humano con los niños, y de conocerlos más allá de la asignatura en sus historias de vida, y poder orientarlos en algunos aspectos que son ajenos a la especialidad de Música, como el desarrollo personal, de sus relaciones interpersonales, de su crecimiento y su autoestima, eso es lo más bonito de esa área”
Paulina von Mallinckrodt nació el 3 de junio de 1817 en Minden, Westfalia Es la mayor de las hijas de Detmar von Mallinckrodt, de religión protestante y alto funcionario de gobierno del estado de Prusia y de su esposa, la baronesa Bernardine von Hartmann, de religión católica, originaria de Paderborn Desde pequeña absorbe con avidez la formación cristiana que le imparte su madre con amor De ella hereda una fe profunda, un gran amor a Dios y a los pobres y una férrea adhesión a la Iglesia católica y a sus pastores Herencia paterna son la firmeza de carácter, los sólidos principios, el respeto hacia los demás y el cumplimiento de la palabra empeñada Ejercen también una benéfica influencia sobre ella la gran educadora Luisa Hensel y su profesor particular de religión el sacerdote Antonio Claessen, más tarde Obispo Auxiliar de Colonia
Paulina pasa parte de su niñez y juventud en Aquisgrán, a donde fue trasladado su padre Por la temprana muerte de su madre, Paulina, cuando sólo cuenta 17 años de edad, toma en sus manos la dirección de su casa y la educación de sus hermanos menores Jorge y Hermann y de la pequeña Berta Cumpliendo su tarea a plena satisfacción de su padre, encuentra tiempo y medios para ponerse al servicio de tantos pobres que por los cambios técnicos, económicos y sociales de su siglo, sufren de miserias materiales y espirituales
Cuando su padre se retira del servicio estatal y se instala con su familia en Paderborn, prosigue Paulina su actividad caritativa Al mismo tiempo crece su decisión de consagrarse a Dios en la vida religiosa. En 1842 poco después de la muerte del señor von Mallinckrodt, le confían a Paulina el cuidado de unos niños ciegos muy pobres. Ella los atiende con la exquisita afabilidad que la caracteriza. Y como Dios sabe guiar todo según sus planes, son los niños ciegos los que darán origen a la Congregación fundada por ella, porque a Paulina la admiten en distintas congregaciones religiosas pero no así a los ciegos. Monseñor Antonio Claessen le hace ver que ella está llamada por Dios a fundar una Congregación. El 21 de agosto de 1849, funda la Congregación de las Hermanas de la Caridad Cristiana, Hijas de la Bienaventurada Virgen María de la Inmaculada Concepción con tres compañeras más.
Bendecida por la Iglesia, la Congregación florece y se extiende rápidamente en Alemania; pero como toda obra grata a Dios debe ser probada por el sufrimiento; la prueba no tarda en llegar El Canciller Otto von Bismark emprende en 1871 una dura lucha contra la Iglesia católica Una tras otra ve la Madre Paulina cómo se van cerrando y expropiando las casas de la Congregación en Alemania Con su profundo espíritu de fe ve la mano de Dios en esta persecución religiosa “El Señor nos da y nos quita, bendito sea el nombre del Señor”, les dice a las Religiosas Las casas de la joven Congregación fueron confiscadas, las Hermanas expulsadas, la fundación parecía llegar a su fin
En la misma época de las persecuciones en Alemania, llegan muchos pedidos de Hermanas desde Estados Unidos y Sudamérica para enseñar a los niños inmigrantes alemanes. Paulina respondió enviando pequeños grupos de Hermanas en 1873. En los siguientes meses se enviaron más grupos de Religiosas a los Estados Unidos. En noviembre de 1874 arriban las primeras Religiosas a la diócesis de Ancud, en Chile. De allí partirían unos años más tarde hacia el Río de la Plata, en 1883 a Montevideo, Uruguay, y en 1905 a Buenos Aires, Argentina.
A fines de década de 1870 la persecución religiosa terminó en Alemania y las Hermanas pudieron volver desde Bélgica a su patria, donde prosiguieron con su obra.
Después de un último viaje a América en 1880, la Madre Paulina vuelve a Paderborn y a los pocos meses, ante el dolor de las Hermanas, enferma gravemente de neumonía y muere el 30 de abril de 1881.
El 14 de abril de 1985, el papa Juan Pablo II beatificó a la Madre Paulina, reconociendo en su vida un modelo y mensaje válido para el hombre de hoy. “La Madre Paulina es un ejemplo de vida. A la angustiosa inquietud del hombre moderno, ella señala un camino de Paz interior: busca animosa y confiada a Dios en los hermanos que sufren. Por eso su mensaje es actual, en la medida que es siempre actual la búsqueda de Dios”, afirmó el Santo Padre en aquel momento.
"LA PACIENCIA Y EL AMOR SON LOS MEJORES MAESTROS"
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