Venga Su Reino, por Obispo Brewer

Venga Su Reino

POR OBISPO GREGORY O. BREWER

La temporada de Adviento que se aproxima llena nuestros corazones con imágenes de la luz penetrando la oscuridad, esa es una perfecta imagen del reino de Dios.

¿Pero qué es el reino? Cada vez que Jesús usó ese término lo describió como una extensión de sí mismo. Su propia vida es la manifestación del reino, ya fuera a través de la proclamación de sanidades milagrosas, la ayuda a los pobres o su muerte y resurrección. Si tiene que ver con el reino de Dios, podemos claramente seguirle la pista en la palabra y obra de Jesús: Emanuel, Dios con nosotros (Mateo 1:23).

Añorar el reino

En el Adviento recordamos la obra de Dios en y a través de Jesucristo: su nacimiento, vida e inminente regreso, de lo cual somos beneficiarios agradecidos. Aun así, las escrituras nos dicen que lo que experimentamos ahora está incompleto. Hasta los héroes del “salón de la fe” en Hebreos 11 que experimentaron la verdadera presencia de Dios en sus vidas, supieron que vendría mucho más. El Espíritu Santo produce dentro de nosotros una profunda añoranza por lo que aún no se ha concretado (ver Romanos 8:26).

Muchos de nosotros hemos experimentado ese deseo por “venga su reino” más profundamente durante el Adviento. Conocemos la presencia de Dios ahora, pero cuando la comparamos con todo lo que la Biblia promete nos damos cuenta de que el lapso entre los dos debe llenarse un día. Se acercan un nuevo cielo y una nueva tierra.

La pandemia nos ha permitido reconocer lo que quizás no nos dimos cuenta en el pasado: el anhelo que tenemos por Dios. Nuestro anhelo por la realización del reino nos puede motivar a encontrar maneras creativas para servir, bendecir y nutrir a otros. Eso es lo que veo sucediendo en nuestras iglesias y es lo que leerás en esta edición. Sí, el COVID-19 sigue entre nosotros, pero más importante que eso es que Emanuel está con nosotros. La presencia y el poder de Dios en nuestras vidas todo lo transforma.

Testigos del reino

Esta verdad y este anhelo nos dan permiso para hablar con otros de manera auténtica. El Adviento dice: “Hay más en la historia que ‘Alegría para el mundo, el Señor ha venido’. Es también, ‘Sentimos melancolía porque aún él no está aquí del todo’”.

Eso nos habla en medio de esta temporada tan inusual. No importa lo que el futuro nos traiga, entendemos que Dios no ha terminado con el mundo. El año por venir probablemente venga con las mismas clases de dificultades que hemos enfrentado o quizás más.

Así es que “venga su reino” incluye un llamado a la paciencia. Debemos realzar nuestra propia fe de manera tal que nos ayudará a soportar esta temporada de actividades restringidas. Debemos acercarnos a aquél que nos sujeta aun en un tiempo de aislamiento.

De manera que el reino de Dios requiere pensamiento y oración creativa: “Señor, en medio de todo esto ¿qué quieres que yo haga?”. Cuando nos preguntamos eso, cuando escuchamos y obedecemos lo que Dios dice, experimentamos la realidad de venga su reino, no solo durante el Adviento sino también durante los días por venir.

Su gracia sobre ti,

Obispo Gregory O. Brewer