JOSÉ MANUEL RESTREPO, EXMINISTRO MINISTRO DE HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO

EL COMPROMISO SE VE REFLEJADO EN UNA GESTIÓN QUE NO CESA

Tras sufrir una fuerte contracción con el surgimiento y expansión de un nuevo miembro de la familia de los coronavirus, Colombia siguió marchando hacia delante y con la frente en alto, llegando a experimentar un crecimiento económico mayor al del promedio mundial.

En entrevista exclusiva, el exministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, detalla las acciones que ccontribuir a alcanzar tal logro e informa sobre aquellas que fueron llevadas a cabo en su administración para posibilitar que, en 2022, el país se situé en el top regional en materia de reactivación.

Colombia registró en 2021 el mayor crecimiento económico en su historia como república (10,6%), según lo manifestado por el mismo Iván Duque con base en las cifras del DANE. ¿Cuáles fueron las principales acciones que desde el Ministerio de Hacienda fueron emprendidas para alcanzar tal logro?

Colombia se posicionó como una de las economías con mejor crecimiento en 2021, respaldado por un proceso de reactivación que demostró su efectividad tras ese resultado del 10,6% que ustedes resaltan. Superamos a economías similares a la nuestra, pero también varias mucho más grandes, por ejemplo, a países como Australia, Brasil, Argentina, Estados Unidos, Canadá, Noruega y Dinamarca, incluso superamos el promedio mundial.

El impulso a la Ley de Inversión Social fue, sin duda, clave para jalonar parte de ese importante resultado de crecimiento económico en 2021, entre las medidas que empezaron a regir desde el año pasado están los tres días sin IVA, que fueron un éxito en ventas, significando un alza importante en el consumo, el cual fue uno de los principales jalonadores de ese crecimiento. Asimismo, el comercio y la industria que fueron algunos de los sectores más favorecidos por estas jornadas y que también figuran en los principales renglones del crecimiento del 2021.

De igual manera, debo destacar la importancia de las medidas en materia territorial, que permitieron que los departamentos y municipios pudieran acceder a más recursos para que pudieran financiarse de mejor manera en este periodo de reactivación.

También incluyó el subsidio a la nómina para micro y pequeñas empresas con el fin de apoyarlas a mantener las nóminas mientras seguían luchando por superar las afectaciones de la pandemia, este subsidio fue ideado, también, para las empresas que se vieron afectadas por el paro nacional. Adicionalmente, incluimos un incentivo para que se creen nuevos puestos de trabajo, especialmente para jóvenes y mujeres, a la fecha ya se han creado más de 270 mil empleos con este programa.

De igual forma, aportamos para que las finanzas públicas se estabilicen luego del golpe tan duro que significó la pandemia, algo que en 100 años no había sentido la economía. Logramos reducir el déficit fiscal a 7,1%, algo mucho menor a lo que habíamos previsto. En ese mismo sentido, la reducción de la deuda empezó antes de lo que pensábamos, llegando a niveles que solo esperábamos se dieran desde el 2024. Tener unas finanzas estables y controladas son una buena señal para que más inversionistas lleguen al país.

En 2021, el crecimiento económico de Colombia superó al de países como Australia, Brasil, Argentina, Estados Unidos, Canadá, Noruega y Dinamarca.

A pesar de la gesta conseguida el año anterior, el 2022 abrió con un reto mayúsculo: la inflación. ¿Cuáles son los factores que han incidido mayoritariamente en el encarecimiento de los precios?

Desde el Ministerio hicimos diferentes análisis de la mano del equipo técnico, principalmente vimos que la situación internacional originada por la pandemia llevó a una reactivación de la demanda a un ritmo al que la oferta no estaba preparada para responder, como consecuencia de este fenómeno hay mayor demanda que oferta con capacidad de responder, generando una subida en los precios.

También está explicado en parte por ese rompimiento de las cadenas logísticas de los contenedores alrededor del mundo y que ha ocasionado que se presente escasez de insumos y productos.

Tampoco podemos desconocer el efecto que tuvieron los bloqueos en abril, mayo y parte de junio del año pasado, mayoritariamente en el suroccidente del país, en los que esos cierres de vías ocasionaron desaprovisionamiento y escasez, generando rompimientos en cadenas productivas locales, especialmente en el sector agropecuario.

“Estamos aportando para que las finanzas públicas se estabilicen luego del golpe tan duro que significó la pandemia, algo que en 100 años no había sentido la economía. Logramos reducir el déficit fiscal a 7,1%.”

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue del 1,63 % en febrero y la inflación anualizada llegó al 8,01 %. En el contexto de una “economía sana”, ¿cuáles deberían ser los índices ideales y los que se ha propuesto el Gobierno nacional?

Hay que decir que el ente rector en materia inflacionaria es el Banco de la República y en sus objetivos tiene mantener la inflación en un rango meta entre el 2% y el 4%, que es lo que se considera ideal y el Gobierno sigue ese mismo objetivo desde lo que su naturaleza ejecutiva le permite hacer. Sin embargo, es clave anotar que hacemos previsiones bajo distintos índices, entre estos la inflación, que para las cuentas de este 2022 proyectamos esté en los niveles del 4,3%, es decir, por encima de ese rango que le menciono y al que debemos apuntarle, pero que tampoco desconoce el fenómeno actual, sabiendo la afectación que puede generar en las cuentas que se hacen desde el Gobierno nacional.

En este sentido, ¿qué estrategias se implementó el Minhacienda para controlar la inflación?

Controlar la inflación es uno de los grandes retos que tenemos desde el ministerio. Parte de nuestros esfuerzos estuvieron enfocados en reducir el déficit fiscal en 2021 a menos de lo que proyectábamos en nuestras previsiones y en lo que resta del Gobierno confiamos en que siga descendiendo. Esto tiene un efecto importante en la reducción de la presión sobre las finanzas públicas y evitar, así, aumentos en la tasa de cambio que se traduzcan, a su vez, en aumentos de precios.

También trabajamos de la mano con el Comité de Aprovisionamiento, junto a Minagricultura, Mintransporte, Mincomercio y el DNP, en tomar medidas para reducir los costos de la producción en productos agropecuarios, reglamentando la Ley de Insumos Agropecuarios, buscando una reducción de los aranceles en la importación de insumos, de los productos agropecuarios, mejorando algunos cuellos de botella en la cadena logística portuaria y, con ello, reduciendo los costos de producción.

Así mismo, destinamos $1,3 billones para la nueva línea de crédito de subsidio agropecuario que se complementará con el subsidio para el seguro agropecuario, estos dos productos permitirán motivar mayor producción en la economía y aumentar la oferta y de esta manera, reducir precios.

De igual forma, con Minagricultura se realizaron gestiones ante los productores de papa, lácteos, arroz y gremios nacionales para aumentar la producción.

También es importante mencionar que la Junta Directiva del Banco de la República, de la que formé parte como ministro de Hacienda, empezó hace varios meses un proceso de normalización de la política monetaria, con el fin de hacerle frente a ese aumento de precios.

Finalmente, teniendo en cuenta el dinamismo presentado por la economía nacional y la continua generación de empleo, ¿cuenta desde ya el ministerio con una estimación sobre cuánto podría crecer el PIB en el presente año?

Por supuesto, a principios de febrero le presentamos al país el Plan Financiero para 2022 en el que detallamos lo que se vivió en 2021 en materia económica y lo que creemos que será el panorama para este año, entre esas proyecciones que presentamos, consideramos que el crecimiento económico será del orden del 5%, explicado principalmente por el impacto sostenido de las medidas de nuestro plan de reactivación económica, que con- solidará a Colombia como uno de los países líderes en el mundo en materia de crecimiento.

Estas medidas, junto a la fortaleza que ha demostrado nuestra economía, permitirán una consolidación de la recuperación de la economía en 2022, llevando a que el PIB se ubique 7,4% por encima del 2019, superior al 6,5% del promedio mundial, y ubicándose en el top 10 en materia de reactivación económica dentro de una muestra de 52 países (países OCDE, emergentes y latinoamericanos).

Esperamos que los sectores que jalonen este importante resultado sigan siendo la gran rama del comercio y la industria, además de una esperada recuperación de la inversión, especialmente en obras civiles.

“Destinamos $1,3 billones para la nueva línea de crédito de subsidio agropecuario que se complementará con el subsidio para el seguro agropecuario, estos dos productos permitirán motivar mayor producción en la economía.”