La encantadora de moscas

La encantadora Esmeralda

Jiménez Cortés

de moscas

iempo atrás, vivía una mujer llamada Tina Haya, y era conocida por todos como «la encantadora de moscas».

Con un sencillo movimiento de sus manos, podía llamar y hacer danzar con elegancia a las moscas de todo el pueblo.

A la gente le daba lo mismo porque ya estaban acostumbrados a verla, y Tina, por su parte, tampoco encontraba de gran utilidad su don, lo hacía porque le gustaba ver el baile de los bichos, y siempre creaba nuevas coreografías según iban dictando las modas del momento.

l rumor de que existía una encantadora de moscas viajó por el río hasta un lugar llamado Atis.

La gran consejera, que era una mujer sabia y curiosa, organizó una expedición con su gente más valiente, para que le trajeran noticias sobre Tina, porque en Atis nunca habían visto algo así.

Con el capitán cinocéfalo al mando, comenzaron a hacer los preparativos para partir lo antes posible.

Desgraciadamente, su curiosidad mató a un gato gigante que vivía cerca de ahí.

amás Durn de Atis había dejado su casa.

Su padre le dijo que era una gran oportunidad partir con la expedición y contar sus hermosas historias por el mundo entero.

Durn de Atis era el poeta de la ciudad, y cada lunes sin falta, solía declamar sus cuentos y poesías en la plaza pública, ante la admiración de todos.

l esqueleto del gato, que había muerto por curiosidad ajena, fue un excelente material con el que construyeron una nave fuerte para navegar los mares.

Partieron rumbo a la tierra de Tina, emocionados todos y con gran expectación, ya que habían escuchado que era una maravilla ver la forma en que las moscas hacían su danza.

Esperaban llegar a buen puerto.

uy pronto llegaron al pueblo de Tina, y la tripulación se ocupó en conocer el lugar, visitando sus callejuelas y jardines, probando su comida y saludando a sus habitantes.

Durn, el poeta, se acomodó a la sombra de una acacia para contar a la gente su historia de la gata y el ave; pronto la gente se reunió a su alrededor para escucharlo.

ISBN 978-84-19106-15-5

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¿Te imaginas poder hacer que unos bichitos bailen?

Todo es posible si actúas desde el amor

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