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Buscan protección a sistemas electorales

Redacción

Los esfuerzos para proteger los sistemas electorales de la nación han crecido exponencialmente desde las elecciones presidenciales de 2016, pero se necesita más para defender la integridad y la capacidad de recuperación del proceso electoral antes de la votación del próximo año, dijo el martes el jefe de la agencia de seguridad cibernética de la nación.

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Jen Easterly, directora de la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad de Estados Unidos (CISA, por sus siglas en inglés) anunció planes para aumentar los recursos dentro de la agencia, contratando a 10 especialistas adicionales en seguridad electoral que estarán en todo el país para interactuar directamente con los funcionarios estatales y locales.

“Nuestras capacidades y postura en esta área son simplemente la noche y el día cuando se compara con 2016. A pesar de este progreso, sabemos que tenemos que hacer más y que debemos permanecer atentos frente a los riesgos nuevos y en evolución”, dijo Easterly a los funcionarios reunidos para su discurso.

CISA está a cargo de proteger la infraes- tructura crítica, incluidas las represas, los bancos y las plantas de energía nuclear de la nación y los sistemas de votación se agregaron después de las elecciones de 2016 y debido a la documentada intromisión de Rusia para inclinar la balanza hacía el candidato que más le favorecía, en éste caso, Donald Trump. Desde entonces, los funcionarios electorales estatales y locales han estado trabajando para reforzar las defensas de ciberseguridad en los sistemas de votación de del país con la ayuda de millones de dólares asignados por el Congreso a lo largo de los años.

En sus esfuerzos por asegurar las elecciones, CISA trabaja en todo el gobierno, asociándose con agencias federales, estatales y locales en varias iniciativas y brindando apoyo directo a través de revisiones de seguridad cibernética, evaluaciones de protocolos de seguridad física, pruebas remotas para buscar vulnerabilidades y otros servicios.

Mientras tanto, las amenazas a las elecciones siguen aumentando, y la preocupación más reciente se centra en el surgimiento de herramientas de inteligencia artificial generativa que pueden usar aquellos que buscan entrometerse en las elecciones estadounidenses para crear contenido falso y engañoso y eso se suma a los grupos de ransomware criminales motivados financieramente y al potencial de ataques cibernéticos sofisticados emprendidos por países hostiles a la nación.

Easterly, en una entrevista después de su discurso, dijo que estaba particularmente preocupada por el potencial de los malos actores para utilizar la IA generativa, pero expresó su confianza en que el público, con la orientación de sus funcionarios electorales estatales y locales, podrá sortear los intentos de manipulación. Hizo hincapié en que el voto en sí estará protegido y seguro.

“Todas las razones por las que las personas deberían confiar en la integridad y seguridad de las elecciones siguen siendo las mismas: las garantías de seguridad física, las garantías de seguridad cibernética, todos los mecanismos de defensa en profundidad, la segmentación, la capacitación que continúa. Nada cambiará todas estas salvaguardias y medidas que se implementan para garantizar la integridad y la

Líder republicano Kevin McCarthy no descarta procedimiento de “impeachment”

Redacción

El presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, dice que los legisladores republicanos podrían considerar una investigación de juicio político contra el presidente Joe Biden por afirmaciones no comprobadas de mala conducta financiera, en respuesta a la enorme presión del Partido Republicano para demostrar su apoyo a Donald Trump antes de las elecciones presidenciales de 2024.

Eso es aparte de los supuestos intentos de la bancada trumpista autonombrada “Caucus de la Libertad” para borrar los dos juicios políticos en contra de Donald Trump, a pesar de que en su momento los mismos republicanos lo declararon no culpable.

McCarthy dijo que las preguntas que los republicanos de la Cámara están planteando sobre las finanzas de la familia Biden deben investigarse, aunque reconoció que hasta el momento, reconoció, las pesquisas de la Cámara no han probado ninguna irregularidad, pero una investigación de juicio político “permite que el Congreso obtenga la información para poder saber la verdad”.

Una investigación de juicio político por parte de la Cámara sería un primer paso para presentar artículos de juicio político y tal investigación podría ser tan larga o rápida como lo determine la Cámara, y podría extenderse hasta la temporada de campaña.

Tradicionalmente, el juicio político se ha visto como una opción de último recurso en el Congreso, para ser utilizado solo por delitos graves, pero el poder constitucionalmente autorizado de acusar a los funcionarios de “delitos y faltas graves” está en camino de convertirse en una rutina.

“Seguiremos esto hasta el final”, dijo McCarthy.

Es el comentario más fuerte hasta el momento de McCarthy sobre un posible juicio político a Biden después de que el líder republicano dejara de lado los esfuerzos anteriores de los conservadores de la Cámara para iniciar una investigación de este tipo.

Con una pequeña mayoría en la Cámara, McCarthy enfrenta demandas de los aliados de Trump para elevar sus prioridades y el propio Trump cuestionó en un foro de Fox News la semana pasada por qué Biden aún no ha sido acusado.

McCarthy aún no ha respaldado a Trump, quien es el favorito del Partido Republicano para presidente, ni a ningún otro candidato republicano y negó un informe de que está considerando votar en la Cámara para eliminar los dos juicios políticos de Trump como otra forma de mostrar su apoyo.

McCarthy no dio el martes un cronograma para iniciar una investigación de juicio político contra Biden y dijo que no había hablado con Trump al respecto, también se negó a decir si haría un respaldo presidencial.

Cuando se le preguntó si sentía presión por parte de Trump, se burló: “¿Parezco como si estuviera bajo presión?”

El portavoz de la Casa Blanca, Ian Sams, dijo que el “anhelo del Partido Republicano de la Cámara de perseguir al Presidente de los Estados Unidos, sin importar la verdad aparentemente no tiene fondo”.

“En lugar de centrarnos en los problemas reales que los estadounidenses quieren que abordemos, como continuar bajando la inflación o crear empleos, esto es lo que el Partido Republicano de la Cámara quiere priorizar”, dijo Sams en Twitter.

Los republicanos en el Congreso han intensificado las investigaciones de Biden y su hijo Hunter y han esado investigando las finanzas familiares, en particular los pagos que el joven Biden recibió de Burisma, una compañía de energía ucraniana que se enredó en la primera acusación contra Trump.

Desde entonces, Hunter Biden llegó a un acuerdo con los fiscales para declararse culpable de cargos menores por no haber pagado impuestos sobre la renta durante varios años y está previsto que comparezca ante el tribunal esta semana en ese caso.

Pero los republicanos continúan persiguiendo una teoría desacreditada derivada del primer juicio político a Trump sobre Burisma.

Un informante confidencial anónimo del FBI afirmó que los funcionarios de la empresa Burisma en 2015 y 2016 intentaron pagar a los Biden 5 millones de dólares a cada uno a cambio de su ayuda para expulsar a un fiscal ucraniano que supuestamente estaba investigando a la empresa.

El Departamento de Justicia lanzó una revisión de las afirmaciones del informante en 2020 bajo la dirección del fiscal general de Trump, William Barr, pero se cerró ocho meses después con pruebas insuficientes de irregularidades.

Aún así, la semana pasada, el senador Chuck Grassley, republicano por Iowa, publicó el llamado formulario FD-1023 del FBI,

En dato: con afirmaciones no verificadas del informante, que proporciona una visión pública completa de las acusaciones.

Los republicanos se han quejado de la lenta respuesta de la administración a algunas consultas del comité y McCarthy dijo que si la administración “nos niega la capacidad de obtener la información que estamos pidiendo, eso daría lugar a una investigación de juicio político”.

Jaime Harrison, presidente del Comité Nacional Demócrata, dijo el martes en un comunicado que McCarthy “se ha asegurado de que la mayoría de la Cámara sea poco más que un brazo” de la campaña de Trump de 2024.

“Está claro que Donald Trump es el verdadero presidente de la Cámara. Este es otro truco político destinado a ayudar a Trump”, dijo Harrison.

El primer juicio político de Trump por parte de la Cámara, que resultó en acusaciones de que presionó a Ucrania para desenterrar a los Biden, mientras amenazaba con retener la ayuda militar que el presidente Volodymyr Zelenskyy buscaba para disuadir a Rusia, duró varios meses en 2019 y el expresidente fue absuelto más tarde por el Senado.

El segundo juicio político de Trump después del ataque al Capitolio del 6 de enero de 2021 fue rápido: la Cámara lo acusó una semana después de incitar a una insurrección, pero fue nuevamente absuelto por el Senado.

Grassley, en colaboración con el presidente de Supervisión de la Cámara de Representantes, James Comer, republicano por Kentucky, quiere una mayor investigación y había citado al FBI para obtener el documento.

Los demócratas en el panel de Supervisión respondieron el lunes con un memorando de cuatro páginas refutando las acusaciones.

En el memorando, los demócratas señalan otros documentos, incluido el de Lev Parnas, un exasociado del abogado de Trump, Rudy Giuliani, quien afirmó tener conocimiento de primera mano de algunas de las conversaciones y cuestionó las acusaciones.

Parnas dijo que uno de los funcionarios de Burisma le dijo que las afirmaciones no son ciertas.

Los demócratas también señalan que no solo Biden quería que se destituyera al fiscal ucraniano Viktor Shokin, sino que otros aliados occidentales también expresaron su preocupación de que no estaba investigando la corrupción en Ucrania.

Los fiscales dijeron que Timothy Shea se embolsó 180,000 dólares en una recaudación de fondos que prometía a los donantes que el 100% del dinero recaudado se destinaría a la construcción del muro.

Hizo fraude con muro fronterizo

Timothy Shea se embolsó

180 mil de donantes trumpistas; le dan 5 años de cárcel

Redacción

Un empresario de Colorado condenado por desviar de manera fraudulenta cientos de miles de dólares de una recaudación de fondos en línea que recaudó $25 millones para construir un muro a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos, fue sentenciado el martes a cinco años y tres meses de prisión.

Timothy Shea fue sentenciado en la corte federal de Manhattan por la jueza Analisa Torres, quien presidió un juicio en octubre que terminó con su condena por cargos que incluyen conspiración para cometer fraude electrónico, conspiración para cometer lavado de dinero y obstrucción de la justicia. Un juicio a principios de 2022 había terminado cuando un jurado llegó a un punto muerto en los cargos.

Shea, de 52 años, de Castle Rock, Colorado, también recibió la orden de confiscar $1.8 millones y pagar una restitución de igual cantidad.

Shea fue acusada hace tres años junto con otras tres personas, incluido Steve Bannon, el exasesor principal del entonces presidente Donald Trump.

Trump perdonó a Bannon a principios de 2021, mientras que otros dos se declararon culpables y fueron sentenciados a prisión, mientras Bannon, quien ahora está siendo procesado en la corte del estado de Nueva York, se declaró inocente.

Torres dijo que Shea y los demás no solo engañaron a los donantes, sino que también “nos lastimaron a todos” al dañar la fe en el sistema político del país al sacar provecho de quienes creían que construir un muro ayudaría a asegurar las fronteras del país.

Señaló que entre los donantes que testificaron en el juicio se encontraban un veterano del ejército y una maestra cuyo difunto esposo había trabajado como agente fronterizo.

Antes de que se anunciara la sentencia, Shea le dijo al juez que lamentaba “todas las cosas de ‘We Build The Wall’” y pidió clemencia, diciendo que su esposa y sus hijos adolescentes lo necesitaban en casa.

Los fiscales dijeron que Shea se embolsó 180,000 dólares en una recaudación de fondos que prometía a los donantes que el 100% del dinero recaudado se destinaría a la construcción del muro.

Shea es propietaria de una compañía de bebidas energéticas, Winning Energy, cuyas latas tienen una imagen de superhéroe de dibujos animados de Trump y afirman contener “12 oz. de lágrimas liberales.”

En un comunicado, el fiscal federal Damian Williams dijo que Shea abusó de la confianza de los donantes cuando “robó cientos de miles de dólares en donaciones para llenar sus propios bolsillos e intentó obstruir la investigación federal de su conducta criminal”.

El esquema comenzó después de fines de 2018, cuando cientos de miles de donantes comenzaron a invertir millones en la campaña para construir un muro.

A principios de este año, Brian Kolfage y Andrew Badolato fueron sentenciados luego de declararse culpables de los cargos del caso. Kolfage, de 41 años, de Miramar Beach, Florida, recibió cuatro años y tres meses de prisión, mientras que Andrew Badolato, de 58 años, de Cocoa, Florida, fue sentenciado a tres años de prisión.

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