Ainhoa Goenaga portfolio
Entiendo mi práctica artística como un itinerario de acercamiento a la naturaleza, aquella que nos habita y rodea. Oscilante entre lo efímero y lo continuo, lo ancestral y lo contextual, procuro desarrollar proyectos permeables al entorno y sensibles al propio proceso.
Encaminada hacia un hacer más sostenible y consciente, dedico espacio y tiempo a la creación manual con elementos del lugar, buscando de manera intuitiva resonancias entre lo interior y lo exterior. Todo ello es un proceso de observación, reflexión y aprendizaje constante que se enraíza en acciones, conceptos y elementos esenciales: la vegetación, el agua, el silencio, el movimiento, la tierra, etc. Muestra de ello es la selección de proyectos que presento a continuación.
www.ainhoagoenaga.com
ainhoa.goenaga.m@gmail.com
@ ainhoa.goenaga
CV AINHOA GOENAGA
trayectoria artística
2021&2023 Ganadora del Premio Egile. Gipuzkoa Kultura.
2023 Lurpean. Residencia de investigación y creación sobre suelos y micelios. Labva, Chile.
2022 Lekukoak. Camino de tierras, intervención al aire libre. Festival Microscopies, Manresa.
2022 Crossing waters. Residencia de creación e intervención al aire libre. Norpas, Finlandia.
2022 Noraezean. Acción de concienciación en torno a los pasos migratorios. Hernio-Gazume, Gipuzkoa.
2022 Loreak. Ofrenda a la diversidad de vidas que estamos perdiendo. Ur Mara, Alkiza.
2022 Entre. Performance junto al danzarín Angel Zotes. CACiS El Forn de la Calç, Calders.
2021 Ser·es. Exposición individual. CACiS El Forn de la Calç, Calders.
2020 Uraren azalean. Proyecto participativo de arte y medio ambiente. Beca Olatuak, Gipuzkoa.
2019 Isilune. Mo(nu)mento de silencio. EASD Pau Gargallo, Badalona.
2019 Kwandalowa. Proyecto situado vinculado a procesos curativos. EASD Pau Gargallo, Badalona.
2019 Nus. Instalación escultórica y sonora. Sala Dalt La Vila, Badalona.
2019 Llum. Tercer Premio en el Simposio Internacional de Escultura Monumental en Nieve. Andorra.
2018 Sense. Performance en solitario en las jornadas “Dins el Panòptic”. MAC, Presó de Mataró.
2018 Destiempo. Intervención al aire libre. EASD Pau Gargallo, Badalona.
2017 Huts, pasos al vacío. Exposición de pruebas escultóricas. UB, Barcelona.
estudios
2017-2019 Grado Superior en Técnicas Escultóricas*. EASD Pau Gargallo, Badalona.
2016-2017 Master Oficial de Creación Artística Contemporánea. UB, Barcelona.
2010-2014 Graduada en Ciencias Sociales y Comunicación*. UPV, Bilbao y UAI, Chile.
* Matrícula de Honor en ambos proyectos de fin de grado
prácticas complementarias
2021-hoy Técnicas ancestrales en cerámica. Les Journées de la Céramique, Francia; La Cacharra, Argentina.
2017-hoy Danza improvisación. Encuentro Nomada, Costa Cantábrica; EHKIE, Lekunberri; etc.
2015-hoy Botánica y horticultura. Aize, Aia; Males Herbes, Barcelona; Workaway, Nueva Zelanda.
2018-2019 Talla en piedra. EASD, Badalona.
2017-2019 Cerámica artística. EASD, Badalona; La Industrial, Barcelona.
2015 Fotografía y edición. Ceinpro, Donostia.
2015 Emprendizaje social en areas rurales. Programa Erasmus+, Croacia.
2012-2014 Dibujo y pintura. Artezaleak, Zarautz; Berreginen Museoa, Bilbao; EBAV, Chile; etc.
colaboraciones
2022 50 forns. Elaboración y quema de 50 hornos junto al colectivo FemFoc. Escola de Ceramica de La Bisbal.
2022 Slow Art Day. Exposición colectiva de arte sostenible. Ur Mara, Alkiza.
2019&2020 Exposición anual de artistas de Urola Kosta. Nahia Elkartea, Zarautz.
2012 Exposición colectiva de pintura, escultura y grabado. EBAV, Chile.
2012 Cuerpos pintados. Acción colectiva. Carnaval Mil Tambores, Chile.
SENSE
¿Mancança o sentit?
¿Carencia o sentido?
Lack or sense?
Acción performática de escribir con agua sobre la pared, Celda nº5
Presó de Mataró, 2018
Escribiendo de manera continua “aiguasiusplauaiguasiusplauaiguasiusplau…” “agua por favor”, Presó de Mataró, 2018
Carente de aire puro y sin apenas luz, quienes habitaron esta celda tuvieron como única fuente de calor su propio cuerpo, el cual estrechamente junto al de las demás compañeras se consumía en una espera incierta. La vida, pendiente de débiles y escasos hilos, ni siquiera encuentra lo mínimo para poder continuar: agua, agua que fluya. No tener acceso a algo tan ínfimo y tan esencial, es negarle a una persona su derecho a vivir. Según el propio testimonio de una reclusa: “Nos daban una bañera de agua por semana. De esa agua teníamos que beber, lavarnos, lavar a los niños, lavar la ropa (…) Cuarenta y dos niños murieron esa semana” (Mujeres en las Cárceles Franquistas, T. Cuevas, Icaria Editorial, 2005).
Mediante esta intervención puntual en la Presó de Mataró, considerada como una gran mejora cuando se construyó allá por el año 1851, se hace un reclamo de aquel agua, de aquella vida que fue negada, y que lo sigue siendo en otros contextos. Durante la performance las paredes actúan una vez más de castigo y testigo. Sobre ellas el agua revela un sutil continuo de palabras, prácticamente un murmullo. La fugacidad del mensaje es compensada por la repetición de éste. El trazo se superpone, las paredes se saturan y todo se vuelve ilegible. Lágrimas afloran en los muros por el exceso cometido. En cierto modo, el agua hace visible su habilidad para transformar y regenerar el paisaje sea externa o internamente.
Al fin, solo queda la acción, cuya implicación e insistencia traspasan cualquier intención inicial adquiriendo así realmente sentido, un sentido que no está circunscrito.
Alfarería vinculada a procesos curativos
Todo comienza con el gesto más simple, el más humano: el caminar. De ahí parte este itinerario de acercamiento a la naturaleza y los seres y formas que en ella habitan. El andar establece un proceso meditativo y a la vez exploratorio en el cual me sitúo en el espacio y tiempo presente.
Divagando por las colinas de Barcelona me encuentro con cuerpos inhertes de cactus desecados que yacen por doquier. En su desnudez, éstos exhiben un entramado interior frágil y atractivo. Movida por la curiosidad, abro paso a la recolección y el estudio de este ser vegetal; la chumbera, también conocida como nopal, tuna o higuera de pala.
Chumberas desecadas en las colinas de Barcelona, 2019
Transfiriendo la trama de la fibra de la chumbera sobre la arcilla
Hendidura en el cuerpo de arcilla cubierto por fibras vegetales
Herida en la corteza de un árbol del entorno
Conjunto de vasijas integradas entre chumberas enfermas, EASD Pau Gargallo, 2019
Observando y conociendo a la chumbera me doy cuenta de su riqueza y su decadencia, ya que éstas están muy enfermas debido a la plaga de la cochinilla. Al mismo tiempo, descubro una tradición africana vinculada a procesos curativos. En diversos pueblos del valle del río Góngola, al noreste de Nigeria, realizan unas vasijas llamadas Kwandalowa, a las cuales se les otorga fines curativos.
En estos pueblos existe un vínculo ancestral entre la medicina y la alfarería. Tal es así que cuando una persona enferma acude a la curandera ésta le pide a la alfarera que elabore un recipiente en representación del caso en cuestión, es decir, una Kwandalowa.
Una vez terminada la pieza, la curandera realiza un ritual para transferir simbólicamente la enfermedad del cuerpo humano al de terracota. Curiosamente, según las traducciones que he hallado, Kwandalowa podría venir a significar “estoy en”, lo cual me remite a la naturaleza originaria de cualquier recipiente; su vacío, un espacio disponible a infinidad de posibilidades, capaz de guarecer, contener y transferir tanto cosas como “no cosas”.
El valor de estas vasijas en concreto yace en su peculiar aspecto y significativo contenido. Las Kwandalowa presentan unas expresivas texturas en su superficie; incisiones, protuberancias y otras múltiples singularidades estrechamente relacionadas con el malestar del ser. Su contenido también varía en función de la enfermedad y su respectivo tratamiento, aunque por lo general suele ser puramente agua. Con lo cual, todo viene a ser una metáfora del ser viviente; siendo la arcilla, criatura de la tierra, quien encarna al cuerpo y el agua quien lo habita.
El reflejo del agua en el interior de una de las vasijas, EASD Pau Gargallo, 2019
Isilune significa momento de silencio, silencio que da pie a la escucha y ahonda en aquello que late en profundidad.
Este proyecto se da en un contexto concreto. Los talleres de pr á cticas artísticas de la escuela de arte de Badalona se encuentran ante un cierre progresivo. Simultáneamente, el jardin que rodea la escuela está sufriendo la dejadez de una humanidad mal acostumbrada a usar y tirar y la negligencia hacia los espacios comunes.
En medio de estas circunstancias, me nace la necesidad de hacer una pausa para meditar y tomar acción. Entonces empiezo a construir esta gran pieza de tierra: Isilune. Entorno a ella hago un llamamiento a la colaboración y la reflexión. Entre todas recogemos la maleza y las basuras del jardín y les prendemos fuego dentro de este monumental cuerpo de tierra.
Trabajando en el taller EASD Pau Gargallo, Badalona, 2019
Isilune mo(nu)mento de silencio EASD Pau Gargallo, Badalona, 2019
“Monumentos nacidos de la tierra, que nadie sepa que son y quien es su autor, pero que todo el mundo sienta su necesidad y su amistad como parte del alma de la naturaleza”
- C. Brancusi
Evolución de la acción colectiva Isilune Vídeo disponible en vimeo
EASD Pau Gargallo, Badalona, 2019
Proyecto participativo de sensibilización en torno al río que atraviesa el pueblo
URAREN AZALEAN
Movida por la voluntad de visibilización y sensibilización de los espacios naturales con los que convivimos aflora el proyecto Uraren Azalean "en la piel del agua”, una iniciativa que aúna conciencia ambiental, creación artística y convivencia. Situada en Zarautz, centro mi trabajo en el río que atraviesa el pueblo: Iguerain, comúnmente conocido como el “río peste”. En torno a éste voy proponiendo diversas actividades abiertas al público.
Para empezar y dar a conocer la situación del río realizamos el recorrido de sus aguas junto al grupo de naturaleza Arkamurka, con la intención de observar de cerca los seres que lo habitan y en qué condiciones. A continuación, organizo varios talleres creativos asociados al río en el centro cultural Artezaleak. Por un lado, trabajamos en cerámica dando cuerpo a una serie de vasijas inspiradas en la naturaleza y relacionadas con procesos curativos, conocidas como “Kwandalowa”. Por otro lado, elaboramos unos “Koinobori” o peces voladores. En la cultura japonesa estos peces son admirados por la fuerza que demuestran al nadar contra corriente, siendo considerados símbolo de buena salud y del crecimiento de niñas y niños.
Fundamentalmente, las piezas creadas en los talleres son una manera de homenajear y reivindicar el curso natural del río y la vida que hay en él.
Jornada de limpieza en la desembocadura del río Grupo Naturalista Arkamurka, Zarautz, 2019
Salida de reconocimiento y concienciación en torno al río Iguerain, Zarautz, 2020
Llenando una de las vasijas Kwandalowa con el agua del río en el único punto donde se puede acceder a él, justo antes de que llegue al pueblo y sea soterrado y contaminado. Gesto de homenaje y reivindicación del curso natural del río y la vida que hay en él.
NUS
Cuerpos etéreos sumergidos en el baño sonoro del mar
Enredando con las fibras internas de la chumbera voy tejiendo redes. Suspendidas en el aire, éstas forman volúmenes etéreos, cuerpos permeables y sensibles que se balancean en corrientes invisibles. En una sinergia de procesos creativos, sumergimos estas creaciones en el ba ño sonoro del mar en colaboración con mi compañero de taller Joaquín López. El vaivén enérgico y melódico de las aguas envuelve su difusa corporeidad. Su trama abierta desvela un interior diáfano que no distingue entre dentro y fuera, mientras que su frágil materialidad alude a la fugacidad del cuerpo y de la vida.
Instalación escultórica y sonora Nus Sala Dalt la Vila, Badalona, 2019
Danzar al viento entre la caricia y la ruptura acunando los huesos y las sombras escucha su fragilidad
Dando cuerpo a la instalación SER·ES CACiS El Forn de la Calç, 2022
Esta instalación se sitúa en los arcos gemelos de los hornos de cal de CACiS. La instalación se compone en dos partes; a un lado, una especie de cortina formada por frágiles formas vegetales transformadas en cerámica que oscilan y tintinean con el viento; al otro lado, un conjunto de piezas cerámicas de formas cóncavas y convexas que permiten el flujo de las gotas de agua, generando un ambiente sonoro ténue y cavernario.
HEZUR
Fibras vegetales transformadas en cerámica recordando a huesos en su forma y fragilidad
Al fondo, la otra parte de la instalación, TAN TAK, comunicadas entre si por una apertura en el muro
gotas que caen
Activando el cuerpo antes de la performance “Entre” Angel Zotes y yo, CACiS El Forn de la Calç, 2022
En colaboración con el bailarín Angel Zotes y la cámara Alma Esteban realizamos una acción performática dentro de la instalación SER·ES. Integrando los recorridos que nos ofrece el propio espacio, la formas y los movimientos de la instalación, los estímulos externos - viento, luz, suelo, sonido - y las interacciones entre nosotros. En el transcurso de la performance surge una ciega y espontánea sincronía entre Ángel Zotes, yo y el entorno.
NORAEZEAN
Intervención efímera en la línea de caza del paso migratorio Hernio-Gazume
A las faldas del monte Hernio, montañeros y puestos de caza
En época de migración de aves, pienso en cómo las obligamos a vagar sin descanso. En una sociedad que tiende constantemente al control y la explotación de su entorno, con nuestra industria, construcción, monocultivo y sobrepoblación obstaculizamos los vaivenes de los animales que migran. Y la caza hace que este viaje sea aún más difícil.
Con el fin de visibilizar y reivindicar los pasos migratorios, tomo la iniciativa de realizar una pequeña intervención efímera en el paso natural de Hernio-Gazume en Gipuzkoa. Haciendo uso de fibras vegetales y otros elementos naturales presentes en el lugar, elaboro unos nidos y los voy colocando en los puestos de caza que se encuentran allí mismo durante el otoño de 2021 y la primavera de 2022. Estos nidos hechos a mano ocupan por un tiempo las mirillas de estos puestos de caza, tomando simbólicamente estos puntos de amenaza para su paso, un total de 17 puestos.
BESTEAREN AZALEAN En la piel del otrx*
*Extendiendo la idea del “otrx" más allá de los seres humanos
Observar la naturaleza que nos rodea, intentar ponernos en su piel; despertar esa sensibilidad me resulta necesario. Durante mi residencia artística en Norpas en el archipiélago finlandés, quedo maravillada por las diversas pieles de este nuevo y cuidado entorno; líquenes, musgos, rocas, cortezas de árboles y surcos de insectos xilófagos, entre otros. El pino autóctono, el pino rojo, tiende a desnudarse constamente. Su hermosa y fina piel rojiza se va amontonando en el suelo, y yo, curiosa, comienzo a recolectar y experimentar con ella.
Con la idea de intentar ponernos en la piel del otrx voy formando un manto de cortezas de pino rojo ahí en el bosque mismo, tomando una tela de lino como soporte. Al acabar, les invito a visitantes y amigos a ponerse este manto mientras hablamos del significado y el sentido de ponerse en la piel del otrx.
Extender el concepto del otrx más allá de los seres humanos es imprescindible para transitar hacia una convivencia más sana con la vida que nos rodea y de la que formamos parte.
CROSSING WATERS
Cruzando las aguas
Esta instalación se basa en la acción de cruzar las aguas como conexión entre territorios y sus habitantes. Cuando llegué por primera vez a la isla de Kimitoön-Kemiönsaari en el archipiélago finlandés para mi residencia artística en Norpas, me cautivó todo el agua que la rodea. Dondequiera que mirara veía el mar o alguno de los múltiples lagos que caracterizan estas tierras.
En el archipiélago, todas las conexiones se dan a través del agua, donde se trazan caminos invisibles. Hice un conjunto de vasijas para recrear estos movimientos entre tierras, conectando visualmente la orilla con una pequeña isla en el lago cercano al pueblo. Las vasijas forman así un camino en pausa a través de las aguas.
Observando la vida del lugar, reparando en los líquenes sobre las rocas
Elaborando las vasijas de grandes bocas que compondrían el camino de cruce de aguas, poniendo especial atención a los acabados inspirándome en las texturas y las tonalidades del entorno
Colocando las vasijas a ambos lados del agua, entre la orilla y la isla Norpas Artpark, Taalintehdas, 2022
El a ñ o pasado particip é en el Festival Microscopies de Manresa. Partiendo de la costa cantábrica hacia el Mediterráneo, recorrí el Prepirineo recogiendo diversidad de tierras. En total hice 27 paradas, es decir, recolecté 27 tierras distintas.
Tomando las tierras como narradoras del lugar, reconstru í el camino entre mares en una intervención efímera a cielo abierto, tal y como aparece en las imágenes a continuación.
Este recorrido fue para mí una especie de peregrinación donde observar los cambios en el suelo, sus cromatismos, composiciones, usos y transformaciones.
En el trayecto también atravesé varios incendios y quise darles especial importancia dentro de la intervención, dada la gravedad de la situación actual. Los restos de los incendios tomaban todo el ancho del sendero, obligando as í a los visitantes a pasar a través de ellos.
Intervención “Lekukoak”
Camí de terres, testimonis del lloc Festival Microscopies, Manresa 2022
LURPEAN
Bajo tierra convivencia entre sustratos y micelios
Trabajando con tierras recolectadas en los alrededores para el crecicimiento de los micelios
En Lurpean nos adentramos en los procesos vitales subterráneos, en un intento por conocer y visibilizar esa vida generalmente invisible.
Se trata de un proceso artístico-científico de análisis de la evolución, crecimiento, expansión y relación de varios hongos, desarrollado en el laboratorio LABVA de Chile, grandes conocedores de hongos y biocultivos.
Entre los diferentes experimentos de tierra y hongos realizados en LABVA durante mi residencia, elaboro varias vasijas de barro, abiertas por la mitad, lo cual me permite observar el proceso de colonización de los hongos y su convivencia, ya que juntamos distintos tipos de hongos y distintos tipos de sustratos en el interior de cada una.
Inicialmente este proceso se da dentro de una incubadora, donde se dan las condiciones óptimas para el cultivo de los hongos. Más adelante, desplazo algunas de estas vasijas a un entorno natural y la entierro con el fin de realizar su seguimiento y observación en condiciones cambiantes a la intemperie. He de mencionar que todos los hongos con los que trabajamos eran de origen local y beneficiosos para la regeneración del suelo.
