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EL VOCERO DE PUERTO RICO >VIERNES, 18 DE DICIEMBRE DE 2015
Opinión { EDITORIAL }
E pluribus unum
E
l lema nacional de los Estados Unidos E pluribus unum es una frase en latín que quiere decir “de los muchos, uno”. Celebra el hecho de que la Nación se forjó y se sigue nutriendo de una diversidad de pueblos, culturas, religiones e idiomas que contribuyen a hacer de los Estados Unidos un solo mosaico nacional. El lema se acuña y se imprime en cada moneda y billete. El miércoles el Gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, dijo en Club Nacional de Prensa en Washington que Puerto Rico no es parte de esa nación. El mismo día en que viajó a la capital nacional para conocer el resultado de sus insistentes reclamos de ayuda económica al gobierno federal de la nación de la que somos ciudadanos, García Padilla dijo y repitió “Puerto Rico es un país latinoamericano, esa es la verdad…estamos orgullosos de ello y es lo que queremos seguir siendo”. Más adelante, como para remachar su punto, dijo “we are not part of E pluribus unum”, que quiere decir “nosotros no somos parte [del lema nacional] de los muchos uno”. “Somos puertorriqueños que tenemos la ciudadanía americana, no ciudadanos americanos de Puerto Rico”, añadió. A pesar de las dificultades con el idioma—al respecto de lo cual el propio García Padilla bromeó—todo el mundo entendió el mensaje perfectamente: “nosotros no somos parte de ustedes; tenemos su ciudadanía
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porque es una conveniencia, pero no somos parte de ustedes ni queremos serlo”. Esa es una postura legítima y digna. La sostiene todo independentista en Puerto Rico. Lo que resulta difícil de entender es cómo el líder político de un país latinoamericano que se siente que su Pueblo no es parte de la Nación, y enfáticamente sostiene que no quiere serlo, se pueda sentir “decepcionado” porque el gobierno federal de esa nación no haya respondido a su pedido de ayuda económica. ¿Por qué habría el gobierno federal de hacerlo? No es difícil imaginarse a los cabilderos que se oponen a que el Congreso ayude a Puerto Rico frenéticamente enviando por e-mail el mensaje del Gobernador a cuanto congresista o senador, Republicano o Demócrata, tengan en sus listas de contactos: “García Padilla quiere que le manden los billetes, pero que le borren lo de E pluribus unum”. Independientemente de su preferencia de estatus, juzgue usted si ese tipo de mensaje, de boca del gobernador de Puerto Rico, nos ayuda a lograr que nos ayuden en Washington. Pero esa no fue la única bomba. En su mensaje, el Gobernador también anunció que su administración caerá nuevamente en el impago de sus obligaciones el 1º. de enero o, a más tardar en marzo. No es
la primera vez que García Padilla anuncia el inminente impago de su administración a la prensa nacional antes que a la prensa local. A finales de junio, García Padilla le anunció en exclusiva al New York Times que su administración habría de incumplir con sus obligaciones, lo que ocurrió el 1º. de agosto cuando dejó de pagar principal e intereses de bonos de la Corporación para el Financiamiento Público. Pero ese evento de impago no fue nada comparado con lo que nos viene encima en Año Nuevo. Según confirma la presidenta del Banco Gubernamental de Fomento, aparte de incumplir con el pago de bonos de la Autoridad para el Financiamiento de Infraestructura, el 1º. de enero la administración también incumplirá parcialmente con el pago de intereses de bonos de obligación general, que tienen garantía constitucional. El vendaval de litigios que resultará de ese impago tendrá un efecto devastador. Esperemos que el aún tentativo compromiso congresional de retomar en el primer trimestre del año que viene alguna iniciativa de ayuda a Puerto Rico no venga a concretarse demasiado tarde. Y esperemos que en el trajín del cierre de sesión legislativa, los congresistas y senadores no tengan la oportunidad de leer el mensaje de García Padilla ante el Club Nacional de Prensa.
¿Igualdad o independencia?
ecientemente el Comisionado Residente, La trayectoria ideológica del movimiento estaPedro Pierluisi hizo unas manifestaciones dista en este principio ha sido lineal, no pendular. en el hemiciclo del Congreso referentes al En su programa de gobierno para las elecciones estatus político de Puerto Rico que fueron objeto de 1932, el Partido Unión Republicana, con Rafade crítica por algunos de sus hermanos de san- el Martínez Nadal de presidente, planteó que hay gre partidista: “Si hay un aspecto positivo de esta que “tratar de obtener cuanto antes de los Estacrisis, es que ha llevado a una mayoría de dos Unidos la admisión de Puerto Rico mis electores a concluir que la relación como estado de los Estados Unidos de entre el gobierno federal y Puerto Rico América, y en caso de que esta demanda tiene que cambiar. Puerto Rico debe tenfuese negada, o que actos del Congreso er igualdad en esta unión o la independe los Estados Unidos la hicieren irrealizdencia fuera de ella,” dijo. Lo dicho por able, entonces, el Partido Unión RepubPedro Pierluisi no es nuevo dentro del licana trabajará para conseguir la plena movimiento estadista. Barbosa fue el pisoberanía interna y externa igualmente onero en este tipo de cosas: “Queremos Mario Ramos compatible con nuestros ideales de libla independencia de nuestro país, pero ertad y gobierno propio.” (Véase Reece B. Méndez una independencia verdadera, efectiBothwell, Puerto Rico: cien años de lucha Historiador va, sin enmienda Platt, sin intervención política). de aduanas, sin el control efectivo irreEn 1936, en respuesta al Proyecto sponsable que ejerce el gobierno americano en del senador Millard Tydings para otorgarle la Cuba, Santo Domingo, Venezuela.” (Véase José independencia a Puerto Rico de un plumazo, Celso Barbosa, Orientando al Pueblo). Y afirma- el líder estadista Rafael Martínez Nadal se diba, también, el padre del movimiento estadista: rigió al pueblo en repudio al proyecto, pero con “Nosotros somos regionalistas, separatistas, in- una declaración de principios: “Como puertordependentistas como el más independentista, el riqueño y como uniorrepublicano, cuyo partido más regionalista, el más separatista, entre los más tiene consignada en su plataforma la indepenradicales de pensamiento de nuestros paisanos dencia, como refugio de dignidad para cuando independentistas…” actos del Congreso o del pueblo de los Estados
Unidos nos indiquen la imposibilidad de constituirnos en Estado de la Unión, entre el hambre y la deshonra, yo señalo a mi pueblo el camino de la dignidad.” (Véase Teófilo Maldonado, Rafael Martínez Nadal: su vida). Como una repetición en el tiempo el programa de gobierno del Partido Estadista Republicano para las elecciones de 1956 emula, en cierta medida, aquél programa de 1932. A una cláusula sobre la independencia se le llamó el Programa Específico de Luis A. Ferré: “Yo quiero decir que tengo un profundo respeto; yo quiero decir que mi Partido tiene un profundo respeto por los compatriotas que postularon ayer y postulan hoy el ideal de independencia. La independencia es una fórmula digna de resolver el problema político de Puerto Rico; es una de las maneras únicas como puede y tendrá que resolverse el problema político de Puerto Rico.” (Véase Teófilo Maldonado, Luis A. Ferré: ciudadano). Durante el siglo XIX la independencia y la estadidad fueron corrientes hermanas dentro de esa corriente mayor denominada “separatismo”. (Véase Raúl Cepero Bonilla, Azúcar y Abolición). Ambas se identifican con el anticolonialismo. Por eso se parecen mucho y por eso son fáciles de entender.