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Ciencia y Tecnología

Por Blanca Juárez.

Un equipo de científicos ha desarrollado una piel electrónica hecha de una fina capa de silicona incrustada con cables y detectores sensibles, que podría allanar el camino para dispositivos robóticos suaves y flexibles para ayudar con los procedimientos quirúrgicos o ayudar a la movilidad de las personas.

La creación de E-skin elástica por investigadores de Edimburgo da a los robots blandos por primera vez un nivel de autoconciencia física similar al de las personas y los animales. La tecnología podría ayudar a los avances en robótica blanda al permitir que los dispositivos detecten con precisión su movimiento en el entorno más sensible, dicen los expertos.

Los robots blandos, que están hechos de materiales flexibles en lugar de metal o plástico duro, con piel electrónica, podrían tener una variedad de aplicaciones, incluidas herramientas quirúrgicas, prótesis y dispositivos para explorar entornos peligrosos. A diferencia de los robots rígidos tradicionales, que tienen un rango establecido de movimientos, los robots blandos son altamente flexibles.

Esto plantea un gran desafío para desarrollar los sistemas de detección, que son esenciales para que los robots lleven a cabo tareas precisas e interactúen de manera segura con las personas y el medio ambiente, dicen los investigadores.

El telescopio espacial más nuevo de la NASA ha logrado otro hito con observaciones de su primer mundo rocoso. Poco más de un año después de su lanzamiento, el histórico Telescopio Espacial James Webb ha detectado su primer exoplaneta rocoso, y la distinción es LHS 475b, un planeta del tamaño de la Tierra, pero tan caliente como Venus, ubicado a solo 41 años luz de distancia de la Tierra en la constelación Octans.

El hecho de que JWST haya podido detectar este planeta indica que podrá identificar más planetas similares a la Tierra en el futuro. Y aún más que eso, debería ser capaz de detectar sus atmósferas, algo que otros telescopios no pueden hacer con planetas de este tamaño.

El objetivo final de gran parte de la investigación actual de exoplanetas es comprender las atmósferas alrededor de los exoplanetas. Para comprender mejor si ciertos planetas son habitables, los astrónomos necesitan estudiar sus atmósferas, ya que esto puede tener un profundo impacto en factores como la temperatura de la superficie.

A pesar de que JWST debería ser capaz de detectar atmósferas de exoplanetas, la tarea sigue siendo un desafío, puesto que los científicos señalan que los exoplanetas son mucho más pequeños que las estrellas y emiten mucha menos luz, por lo que rara vez se detectan directamente.

Sus hojas suelen ser delgadas, pero fuertes y flexibles, lo que les permite soportar el movimiento constante de las olas y las corrientes, y es la única planta que puede vivir bajo el agua. Los pastos marinos son plantas con flores que se encuentran en aguas marinas poco profundas, como bahías y lagunas, y a lo largo de la plataforma continental del Golfo de México y del Mar Caribe. Estos son una parte vital del ecosistema marino debido a su nivel de productividad, puesto que proporcionan alimento, hábitat y áreas de crianza, y también son un entorno ideal para que los peces e invertebrados juveniles se escondan de los depredadores, y las hojas son ideales para la fijación de larvas y huevos, incluidos los de ascidias y moluscos.

La distribución de los pastos varía desde fondos intermareales altos hasta fondos blandos y duros submareales, incluidas bahías arenosas, marismas, lagunas, estuarios, y plataformas de arrecifes protegidas y expuestas. Los pastos marinos utilizan las mareas y las corrientes para dispersar sus semillas flotantes y su polen, al igual que las plantas terrestres utilizan las abejas o el viento para la polinización. Con suficiente claridad del agua crecen hasta una profundidad de 70 m.

Características de los pastos marinos:

•Taxonómicamente, pertenecen a la clase monocotiledóneas.

•Son perennes, es decir, viven más de dos años.

•La mayoría de ellas tienen aspecto de “pasto”.

•Se desarrollan en fondos arenosos, fangosos o areno-fangosos.

•Habitan en zonas de poca profundidad, ya que deben recibir luz para el proceso de la fotosíntesis

•Su reproducción puede darse tanto de forma vegetativa como sexual mediante la producción de flores y frutos.

•Albergan especies en peligro de extinción, tales como los caballitos de mar y las tortugas marinas.

Las praderas de pastos marinos ocupan un área extremadamente pequeña de nuestros océanos, pero capturan hasta el doble de dióxido de carbono que los bosques terrestres, lo que las hace extremadamente importantes para nuestro clima y el equilibrio de los océanos. Además de que son áreas de alimentación críticas para los herbívoros más grandes de nuestro arrecife, como la tortuga y el dugongo, y para una gran variedad de peces que dependen de las praderas para sobrevivir. Una tortuga verde adulta come alrededor de dos kilogramos de pastos marinos al día, mientras que un dugongo adulto come casi 30 kilogramos al día.

También actúan como filtros de nutrientes y sedimentos para el arrecife, cumpliendo con la función de filtrar la escorrentía costera dañina y la contaminación para ‘limpiar’ el agua antes de que llegue a las comunidades de coral. Y juegan un papel importante en la eliminación de dióxido de carbono de nuestra atmósfera, actuando como enormes esponjas, absorbiendo carbono y almacenándolo internamente. De hecho, pueden almacenar carbono de 30 a 50 veces más eficazmente que los ecosistemas tropicales.

Pese a su gran papel en la vida marina, los pastos marinos están experimentando una disminución en todo el mundo debido a una combinación de los impactos del cambio climático, que incluye el aumento de la temperatura del agua, la erosión costera y las tormentas e inundaciones severas. Asimismo, las actividades de navegación ilegales y no reguladas han generado pérdidas de praderas en algunas áreas.

Por otra parte, la agricultura y ganadería generan una cantidad excesiva de nutrientes que provoca un crecimiento anormal y muy acelerado de las algas, resultando en el ahogamiento de los pastos y cambiando la constitución de las praderas. El dragado y relleno de material, la pesca de arrastre y los altos niveles de contaminación destruyen grandes extensiones de praderas.

Perder los hábitats de pastos marinos significa perder los animales marinos que dependen de ellos para su protección, alimento y refugio. Sin estos pastos, sabemos que los dugongos y las tortugas marinas que llaman hogar a nuestro arrecife no sobrevivirían. Además, cuando los sumideros de carbono, como los pastos marinos, se dañan o destruyen, parte del carbono se libera nuevamente a nuestra atmósfera, lo que aumenta significativamente el dióxido de carbono atmosférico y contribuye al calentamiento global.

Este 01 de marzo se conmemora el Día Mundial de los Pastos Marinos, por lo que es un buen momento para continuar compartiendo el valor que estos tienen en la mejora de las condiciones del cambio climático en el planeta. Se necesita una investigación más enfocada en el tema y un arduo estudio en cómo podemos restaurar aéreas dañadas por las actividades humanas, sobre todo en aquellas que siguen siendo afectadas por residuos industriales o la pesca ilegal.