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From the Editor

Al Creador damos las gracias por permitirnos volver a ver la luz como publicación luego de un período de ponderación, ensayo y error y resiliencia que, de manera compartida, la humanidad no había visto desde la primera mitad del siglo pasado. Aceptamos, pues, este privilegio como el reto de convertirnos en el principal anuario logístico del país en un futuro próximo, fortaleciendo nuestra plataforma y marca en el cambiante mundo digital.

Ciertamente damos las gracias por Panamá y por su industria logística, los marcos geográfico y económico en los cuales vivimos y actuamos, ya que bien sortearon, cual bautismo de fuego, las vicisitudes ocasionadas por la pandemia y su consecuente descalabro financiero para resurgir, mano a mano, como una de las economías de mayor crecimiento de la región.

Sabemos, no obstante, que no todo es color de rosas, especialmente en el sector microeconómico, en donde el empleo informal y el desempleo, la escasez de mano de obra calificada, la falta de mantenimiento de la red vial y la brecha digital que existe entre los sectores público y privado continúan siendo los principales escollos de la industria. También sabemos que donde hay crisis hay más de una oportunidad. ¡El país continuará creciendo y se hará más fuerte!

No podemos dejar de dar gracias en esta edición a todos nuestros anunciantes, que con paciencia supieron esperar nuestro retorno ¡Gracias por ser nuestro principal motor e inspiración! ¡Gracias! ¡Muchas gracias!

Gabriel E. Leonard DIRECTOR EJECUTIVO MANAGING DIRECTOR

We hereby thank The Creator for allowing us to see the light as a publication once more after one of the longest periods of ponderation, trial-and-error, and resilience humanity as a whole has ever seen since the first half of the 20th century. We, therefore, accept this privilege as the challenge to become the country’s main logistics yearbook in the not-so-distant future by strengthening our platform and name-brand in the everchanging digital world.

We give thanks for Panama and its logistics industry –the geographic and economic frameworks in which we live and interact, as they were able to weather (as experiencing a baptism of fire) the financial debacle caused by the pandemic to re-emerge, hand in hand, as one of the fastest-growing economies of the region.

We also know, nevertheless, that all is not sunshine and rainbows, especially in the microeconomic sector, where both unemployment and informal employment, the scarcity of qualified personnel, the lack of road maintenance, and the digital gap that exists between the public and private sectors continue being the main hurdles of the industry. We also know that there is more than one opportunity wherever there is a crisis. The country is only bound to continue growing and will become stronger!

Lastly (but not least,) we cannot forget to thank the advertisers of this issue for patiently awaiting our return. Thanks to all of you for being our principal motivation and inspiration! Thank you from the bottom of our hearts!