Eduardo Homero Tovilla Lara

Eduardo Homero Tovilla Lara, nacido en la Ciudad de México el 14 de julio de 1969, es un modelo de determinación y humildad. Como único hijo entre cuatro hermanos, desarrolló un sentido de disciplina y esfuerzo que luego definió su personalidad. Su primer amor, el fútbol, lo llevó a las categorías inferiores del Club América con tan solo 15 años, augurando un brillante futuro en el deporte. Sin embargo, este camino se vio abruptamente frenado por graves infecciones hepáticas, que no sólo amenazaron su carrera deportiva sino también su vida. Superando estas pruebas, encontró consuelo y fuerza en el pádel, que pasó de ser una actividad de rehabilitación a una parte crucial de su identidad. Académicamente, fue igualmente ambicioso, completó su licenciatura en Economía en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y amplió su educación con una Maestría en Administración de Empresas, con especialidad en Proyectos de Inversión, en la Universidad de las Américas Puebla. La vida personal de Eduardo ha pasado por altibajos. Su matrimonio con Flor Rivera en 1994 terminó en 2002, pero siguieron comprometidos con sus dos hijos. En 2006 conoció a Lina Pera, quien se convirtió en una compañera y socia vital. Profesionalmente, se inició en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de México en 1995, ascendiendo a roles destacados en el gobierno del estado de Puebla. Sin embargo, su carrera enfrentó desafíos inesperados tras la muerte del gobernador de Puebla en 2018, lo que lo llevó a su exilio temporal en Vancouver, Canadá, en 2019 debido a conflictos políticos. Regresó a México en 2023, listo para afrontar sus batallas legales.