TODO SALDRÁ BIEN ALKARREN BARRI 268 EKAINA 2020
LAS SIERVAS DE JESÚS, ATENDIENDO A LAS PERSONAS ENFERMAS DE SIDA
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as religiosas de la Naja, una de las órdenes llamadas de enfermería u hospitalarias prosigue con la misión de su fundadora, la santa vitoriana María Josefa del Corazón de Jesús, atendiendo a las personas enfermas “al igual que lo hizo nuestra fundadora durante el cólera o el tifus”, apostilla la superiora en Bilbao, sor Ascensión. Durante este periodo de pandemia siguen ofre-
ciendo desayunos y comida a cinco familias de bajos recursos. “Todo igual que antes”, destaca, con la salvedad de que ahora deben tomar más precauciones “siguiendo las recomendaciones del Gobierno Vasco”. El número de usuarios ha descendido con motivo del confinamiento y también en tiempo de Ramadán y en cuanto al perfil de las personas que se acercan destaca que “la mayoría son españoles y latinoamericanos”. Residencia En el centro de Acogida a enfermos del VIH las religiosas atienden en la actualidad a 16 personas. En este tiempo se ha actuado con “todas las medidas y atenciones necesarias” con la colaboración de los profesionales y el voluntariado “que no han tenido miedo al contagio”. “Con nuestra labor sencilla, callada y silenciosa, como lo suelen hacer las personas de la Iglesia, estamos consolando a mucha gente que llora”, concluye la religiosa •
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UN CURA CONVIVIENDO CON SEIS JÓVENES INMIGRANTES EN LA CASA CURAL
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osé Alberto Vicente, presidente de la Fundación Harribide es el alma de la Fundación radicada en Etxebarri. Actualmente convive con seis jóvenes inmigrantes, en la casa cural. Durante estos días de pandemia dos de ellos y él suben diariamente al local del Banco de Alimentos del barrio de San Antonio.
Urte honeetan, 300 gazte baino gehiagori eskaini izan deutsie arretea
“Hay que seguir manteniéndolo, funcionando y repartiendo” a la gente más necesitada. En tiempo de confinamiento, han realizado las labores cotidianas de una casa: las comidas, el fregado, recoger las cosas... Harribide gestiona algunos pisos y comunidades de acogida en Etxebarri, Bilbao y Algorta. Algunos de estos jóvenes conviven en el piso habilitado en la misma parroquia de San Antonio de Etxebarri. “El boca a boca es importante y muchos de ellos, cuando se quedan sin ninguna ayuda económica, se acercan aquí a pedir amparo”, detalla el presbítero •