SALUD Y FELICIDAD
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Metas y objetivos claros. Algunas personas temen contar sus sueños a la otra persona por miedo, pero si el ser amado es uno de tus mejores amigos, ¿Por qué no contarle tus objetivos y metas, y así encontrar ese apoyo incondicional? Date un momento para reflexionar y enfócarte en tus verdaderos sueños, cuéntaselos y no te quedes solo con las intenciones.
Hablar sin miedos. No nos referimos al hecho de pelear, sino que algunas parejas no tienen una comunicación sincera por miedo o porque la otra persona reacciona de manera negativa. Para un verdadero trabajo en equipo lo ideal es hablar y expresarse exponiendo los puntos de vista reales, una pareja saludable se sentirá libre de hacerlo.
Repartir las tareas. Si bien es cierto, no se pueden dividir estas tareas en un 50% debido al trabajo o la falta de tiempo, al menos ambos deben verse implicados en las actividades cotidianas mientras les sea posible. Las tareas domésticas deben ser prioridad de ambos.
Tu pareja, tu equipo Apoyo constante. Aunque es común que ambos tengan metas individuales, es esencial compartir un poco de ellas con la pareja, lo importante es encontrar apoyo y no distanciamiento al dejar que cada uno se concentre en sus propios objetivos. Con perseverancia y trabajo en equipo nada es difícil de sacar adelante.
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Planes en pareja. Hay que mantener viva la llama del amor, por eso es esencial que algunos de los planes giren en torno a la nueva vida en pareja, desde adquirir una vivienda, hasta el hecho de querer tener hijos, estas metas los impulsarán a apoyarse y mantenerse unidos.
El trabajo en equipo trae innumerables beneficios a las parejas, así los más importantes son fortalecer el compañerismo, el reconocimiento de la intención positiva en cada acción, se disuelven los temores a ser juzgados, resultan un buen ejemplo para los hijos y se fomenta la validez hacia el otro.
