2 minute read

Bogotá D.C - Cundinamarca

Las autodefensas en su empeño por desterrar a la guerrilla del Oriente Antioqueño han aplicado la estrategia de desplazar a la población, que es percibida como base de apoyo de los grupos guerrilleros. Desde finales de los años noventa se presentan de manera sistemática masacres en las zonas de incursión de las autodefensas.

Bogotá D.C - Cundinamarca

Advertisement

De acuerdo con el Sistema de Alertas Tempranas – SAT- de la Defensoría del Pueblo16, en el proceso de seguimiento al informe de riesgo 021 emitido por las Localidades de Bosa y Ciudad Bolívar del Distrito Capital y del sector de Altos de Cazucá en el municipio de Soacha (Cundinamarca) se continúan presentando múltiples violaciones a los derechos fundamentales a la vida, a la integridad personal, a la libre movilidad, a la libertad de expresión, persistiendo la intimidación, las amenazas de muerte, el miedo, la zozobra y la cooptación de organizaciones comunitarias. Las expresiones de violencia demuestran una mayor relación con el accionar de actores armados ilegales que aprovechan las condiciones sociales de vulnerabilidad del territorio.

Es necesario señalar que en estas zonas del Distrito Capital y de Soacha, se asentaron un buen número de desmovilizados de las autodefensas que están cumpliendo con los compromisos derivados del proceso de desmovilización de las AUC, buscando reinsertarse a la vida civil manteniendo un perfil discreto en las comunidades. Sin embargo y al igual que ha acontecido en otros lugares del país, un buen número de desmovilizados están involucrados con actividades delictivas al conformar nuevas estructuras armadas ilegales (Águilas Negras, AUC, Bloque Capital, entre otros) que establecen alianzas con otros actores armados o con grupos mafiosos.

En el municipio de Soacha, el 70% de la población que es amenazada corresponde a población en condición de desplazamiento por la violencia. Así, la población desplazada asentada en el municipio de Soacha sigue estando expuesta a nuevos sucesos de vulneración de sus derechos por los que sigue siendo victimizada.

Se estima que en Bogotá el 52% de la población son mujeres y el 48% hombres. Del total los hogares (se estima en 2.345.2452), el 36% tiene como cabeza de hogar una mujer, y de ese 36% el 81.4% tiene jefatura única. La vulnerabilidad económica de las mujeres es ma-

16. Defensoría Delegada para la evaluación de riesgo de la población civil como consecuencia del conflicto armado. Sistema de Alertas Tempranas – SAT. Nota de seguimiento No. 010-09. Primera al informe de Riesgo No. 021-08A.I. emitido el 1 de octubre de 2008. 19 de Junio de 2009.

100 APUNTES PARA UNA PRÁCTICA DE LA ESPERANZA