Enero 2012

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-¿Cómo ha ido la semana? -Pues mira, jodido. ¿Para qué te voy a mentir? Al fin y al cabo estás aquí para escuchar todas mis mierdas, analizarme y cobrar 60 pavos la hora. Yo que sé tío. Es que realmente no sé por dónde empezar... están muy locos, en serio. Los humanos están como putas cabras. ¿Por qué coño hacen cosas tan raras? Esta semana he estado hasta arriba de trabajo por su culpa. Igual que siempre, con todas sus putas excentricidades. Pero es que una cantidad desmesurada de atrocidades, ¿eh? Perdóname porque he pecado es la frase estrella. Pero es que realmente lo que me están diciendo, porque yo lo sé, es que acaban de, no sé, follarse a un gato, puro vicio ¿vale? ¿Cómo perdono eso? ¿Hago oídos sordos? Es que no, no puedo, ¡nadie puede, joder! ¿¡Además qué cojones haces follándote a un gato!? Que te casaste por la iglesia hijo de puta... ¡He creado miles de cosas más atractivas que un maldito gato! Perdón, ¿estaba gritando? Todo esto me altera mucho. -¿Esto que me cuenta... le hace sentir mal? -¡Pues claro! Es que te he contado una, pero como esa hay miles. Que si perdóname porque soy pirómano. Que si perdóname porque le extirpé los senos a esa prostituta y me los pongo en el pecho para salir de fiesta con las amigas de mi mujer. En serio, eso no es natural. ¿De dónde coño habéis salido? Os hice a mi imagen y seme-

janza y, por el amor de Mí, ¿eso en qué clase de jodido perturbado me convierte? Hay cosas que no entiendo de mí mismo, de la propia definición de lo que soy. Y eso me lleva a estos ataques de ansiedad que cada vez son más frecuentes. Aunque bueno, va por rachas. -¿Se refiere a...? -Mira, yo puedo llegar a entender las perversiones. Yo mismo me masturbo mirándome al espejo y metiéndome cosas por el culo. Cruces, sobretodo. Llámame romántico si quieres. Hay temporadas en las que no puedo dormir pensando en cómo la vais a liar mientras me echo un sueñecito. En la última siesta que tuve así más larga, no coge un chaval, Kevin creo que se llamaba, que se va a una isla él solo, puto enajenado, y empieza a cargarse a otros chavales. Vale que todos eran muy homosexuales, pero es que se los cargó a todos así. Plim. -Plaka, plaka. -Sí, sí... De güirinai. Y luego me reza, ¿sabes? Ahí, medio loco. Me dice Señor, tú eres todopoderoso, tú eres supremo, tú eres mi padre, mi guía, eres magnánimo... Claro yo ahí aún no sé qué va a decir, y me siento cojonudo. Me están comiendo la polla verbalmente. A veces, cuando se lían en esas partes, hasta me toco un poco porque me mola, ¿sabes? Es normal. Es mejor que una línea


Os hice a mi imagen y semejanza y, por el amor de MĂ­, Âżeso en quĂŠ clase de jodido perturbado me convierte?


erótica. De hecho en la línea erótica te dicen cómo se lo está pasando ella, pero aquí te dicen lo que molas tú. A veces sangro cuando me corro. De todas formas, lo que me hace sentirme mal es el momento en el que paran en seco de masturbarme psicológicamente y me dicen ...lo siento Señor, perdóname porque he ido a una isla, armado, con meses de planificación y he matado a ochenta homosexuales. Pero vamos a ver, no me pidas perdón joder... En algún puto momento de esos treinta meses de planificación se te pudo ocurrir que no me iba a gustar. Digo yo vamos. Pero él va y lo hace. Manda huevos. -¿Dónde los envio? -Teo deja de tocarme los cojones joder, que te pago por horas. -Solo pretendía calmarle un poco, le veo algo enervado. -Sodoma y Gomorra, ahí estaba enervado. La glaciación, ahí estaba enervado. Hitler, ahí estaba enervado pero solo con los judíos. Llámalo venganza de padre. Como esa película de Liam Neeson que la lía increíble. Y luego me pide perdón. Siempre acaban pidiendo perdón. Siempre acaban diciendo que, por favor, en las cortinas no. Jeje... Bueno, ¿qué te iba diciendo? -Que envió a Hitler por venganza. -Ah sí, sí. No veas tú que risa. Pues eso. Enervado. Sí... oye, ¿cuánto queda? -No se preocupe por eso. Hábleme de su hijo. -El greñas ese. El tonto’ los huevos. Pues no le doy superpoderes y le dijo que baje a la Tierra a predicar mi palabra... ¡es el puto hijo de Dios! Y se me hace un jipi de mierda de esos. Ole, ole y ole. Como pille a San Juan le voy a dar una somanta de hostias que va a flipar. Y bueno, no te lo comas de vista, que lo mejor es cuando en la cruz me dice Padre, allá voy. Ni una semana en casa, el hijo de la grandísima puta. Tres días, baja, se folla a no se cuántas y me vuelve con un herpes


que, mira, yo he visto cosas raras porque yo lo veo todo, pero ese herpes... lo tengo en el llavero, al lado de las llaves del paraíso, mira lo tengo aquí (...) ¡MIERDA¡ He vuelto a perder las llaves. Que se jodan, la Tierra Prometida se me estaba llenando de chinos... bueno, ya sabes, luego está lo de la paloma. Ay, la paloma.... -Aha, la paloma. Cuénteme. -Sí, la típica corrida tonta de domingo por la noche viendo los concursos estos que hacen ahora, que te dan pistas pero que llamas y no te lo coge nadie. Sólo hay un montón de gente así hablando en común. Todos muy jodidos que se creen que tienen la verdad. Pero la verdad no la sabe ni Yo. Que me lo cogieron una vez y yo superemocionado respondo ave rapaz. Con toda mi voz así potente y cautivadora, y me dicen que no, que gracias por llamar. Dime tú qué animal empieza por A y acaba por... ¡Me cago en la puta! ¡Avestruz! ¡Me cago en mi Maldita Imagen! ¡Mil euros! Mil euros que me podía haber llevado Teo. Me cago mil veces en la estampa de la Virgen. Si te cojo te rajo, te arranco los intestinos y te ahorco con ellos. -Tranquilícese. La paloma. Céntrese en la paloma, por favor. -Bueno sí, eso, que en los programas esos de la tele se da la típica situación de que te empiezas a tocar los huevos todo tranquilo ahí y te vas en-

cendiendo, te vas encendiendo, empiezas a ver a la señora esa que lo presenta que tiene las tetas todas fuera, gritándote que la llames, que es fácil, y claro... uno no es tan Todopoderoso como lo pintan. Efectivamente, acabé masturbándome. Una señora paja. Además es que llevaba semanas sin masturbarme, ya sabes, con lo de crear la Tierra, los putos animalitos, las putas plantitas, que si Adán y Eva tocándome los cojones con sus mierdas... y yo no tenia tiempo. La cosa es que claro, ahí dentro lo tenía que parecía olleta, todo acumulado. Una cosa cercana a lo bizarro. -Le entiendo perfectamente. -No, en serio Teo, entre tú y yo... si ves aquello se te caen los cojones al suelo y te explotan las entrañas. T odo el cielo lleno de semen y sangre. Una bar-bari-dad. Me dio un bajón de azúcar y todo. Yo no sabía ya si eso era el Más Allá o qué. Bueno, sabía que no era porque yo sé cómo es, pero entiéndeme. Una locura. Entonces ese caldo, aunque a mí me gusta llamarlo el yogur sagrado, empezó a moverse y a mezclarse con la sangre, haciendo sonidos raros, y de repente se formó una paloma. Porque esa es otra, cada vez que me corro se forma algo. Bueno, pues eso, que la paloma bajó embalada hacia la Tierra y se le metió en todo el coño a una tía de por ahí. La típica tirada que hay por la calle. La Mary creo que la llamaban. Y bueno, el resto es historia. Es una de las pajas más históricas que me he hecho, en el más amplio sentido de la palabra. Y ojo, que es la palabra de Dios.

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