Cuadernos naiara

Page 1

]

ESTUDIO DE LA MEMORIA BIOCULTURAL DEL MONTE DE NALDA Autora: Naiara Ferrer A. ABSTRACT Palabras Clave: Nalda, La Rioja, agroecología, memoria e identidad campesina A mediados del siglo XX la producción de alimentos sufrió un cambio impresionante que se conoció con el nombre de “Revolución Verde”. Uno de los elementos centrales de esta gran transformación y nuevo “orden mundial”, fueron los canales de transmisión biocultural, que sufren un grave deterioro por no decir desaparición, donde las personas sabedoras, el campesinado en general, que coevolucionaron con la naturaleza de su ecosistema y su cultura, enlazando creer-saber-conocer, tiende a quedarse sin memoria, al volverse amnésico, al deslegitimar el saber “tradicional”, burlándolo de arcaico y atrasado; acentuándose el riesgo de la pérdida cultural relativa al uso y formas de convivencia con su entorno natural. En contraposición, la Agroecológia, cuyo enfoque presta atención a cuestiones que normalmente quedan invisibilizadas por la mirada científica convencional; y se nutre del “diálogo de saberes campesinos”. Así, el conocimiento tradicional interesa desde la Agroecología como base cultural; por su utilidad en el manejo adecuado del medio y; por la dimensión identitaria que posee. Es necesario, sin embargo, dejar claro que no se trata de una postura romántica y melancólica de añorar lo pasado, de los tiempos que “se han ido”.


Se trata, en todo caso, de dejar de considerar a estas poblaciones como arcaicas, de partir de lo propio y respetar lo que existe para generar verdaderas estrategias de desarrollo desde las entrañas de los propios interesados/as. Esto implica quitarse las anteojeras y tener siempre claro que aunque esos saberes y conocimientos locales se han desarrollado en su propio contexto ecológico, social y cultural, también pueden tener limitaciones. B. METODOLOGIA DEL ESTUDIO En marzo del 2014, comienza la elaboración del estudio que se presenta en las siguientes páginas, una investigación que establece como objetivos de investigación: Objetivo 1: el análisis de la diversidad de ecosistemas ecológicos presentes en el territorio, identificándose recursos locales de interés en estos lugares. Objetivo 2: el análisis de los diferentes usos históricos que el suelo ha tenido, identificándose las memorias bioculturales asociadas estos usos. Validada la propuesta de investigación con la Asociación Panal; primeramente, se realizaron diversas entrevistas abiertas a personas identificadas como “informantes clave”, con las que se pudo detectar el interés de participación y lo idóneo de los objetivos expuestos para el análisis de la Memoria Biocultural del pueblo de Nalda. Para la elaboración de la “muestra de informantes” se identificaron aquellos actores sociales que representasen más fielmente la realidad del conjunto poblacional que se pretendía conocer. En este proceso se tuvo muy en cuenta la “significatividad” de cada informante seleccionado, para poder recoger la diversidad de situaciones micro-sociales a estudiar. La muestra de informantes seleccionada contó con la participación unas 35 personas claves directamente vinculadas con el campo. El perfil de la muestra representó por tanto, una importante población local, con edades comprendidas entre 20 y 83 años, con un promedio de unos 50 años. Por otra parte, la revisión bibliográfica y documental constituyó uno de los principales pilares de esta investigación agroecológica. La elaboración del marco teórico a partir de la revisión documental fue imprescindible, ya que delimitó el objeto de estudio y sirvió para complementar y reforzar los contenidos aquí expuestos. En concreto, fue muy enriquecedor contar con recursos locales promovidos por el propio tejido rural local Estas entrevistas junto con la observación participante permanente y la revisión bibliográfica y de fotografías antiguas han posibilitado medir, matizar, contrastar y verificar los testimonios obtenidos en las entrevistas fundamentales para la caracterización de la situación actual y que, sin duda, marcarán la impronta en el futuro. C. RESULTADOS DEL ESTUDIO

A. Caracterización de la evolución del paisaje: Contándose el millar de habitantes, se trata de un pueblo singular, que se sitúa en la Montaña Medía Ibérica, entre una altitud de 500 m y 1.330 m, y en el área de transición entre la Depresión del Ebro y las estribaciones del norte del Sistema Ibérico. Configurado


por espectaculares paredes escarpadas de roca, situadas en los tramos medios de los ríos Iregua, Leza y Jubera, que han labrado un paisaje y que describen en algunos casos cañones fluviales como es el caso de las Peñas del Iregua, constituida por un sustrato de conglomerados de borde de cuenca del río Iregua, originan una serie de formas verticales de gran belleza paisajística y valor turístico. Estos conglomerados miocénicos, de matriz calcárea, sirven de enlace entre el Terciario de la Depresión del Ebro y el Secundario de la Sierra y se encuentran atravesados por el río Iregua.

Fotografía: las Peñas del Iregua (febrero 2014) Asimismo, la influencia mediterránea se siente en la las crestas y laderas más cálidas donde abundan los enebros, aulagas y bojes , especialmente sobre suelos calizos, donde se acentúa la sequedad.

Fotografía: El bujo o boj, abunda en el Paraje de Peña Fraile, marzo 2014 El monte tradicional conservado hoy en Nalda, es consecuencia de una prolongada intervención antrópica, que desde la época del Alto Medieval procedió a talar una gran


extensión de los bosques locales, para después construir bancales sobre los que sembrar cereales. En concreto, en Nalda los bancales o terrazas, son conocidos como “mangadas”. Las mangadas, constituyen un elemento esencial de los paisajes de la montaña naldense. Los suelos acumulados en las terrazas de cultivo fueron la base de subsistencia de muchas familias campesinas de Nalda, que pudieron disponer de espacios cultivables en terrenos con abruptas pendientes. Así mismo, se destaca la actividad transhumante del terriotorio, que fue practicada en la Rioja, desde la Edad Media y se prolongó hasta mediados del siglo XIX, generando la necesidad de grandes extensiones de pastos, que se obtuvieron a base del sacrificio de parte de la extensión del bosque de altura. El sistema agrario tradicional, estaba basado en el aprovechamiento sistémico de todo el espacio, lo que dio lugar a un gran número de infraestructuras que fueron soporte de la actividad transhumante; tales como: mangadas, chozos, corrales o huertos.

Fotografía: Bancales con terrazas agrícolas abandonadas de ligera pendiente, cerca del Paraje de las Planas, monte de Nalda. Junio 2014, elaboración propia. Hoy, la mayor parte de dichos bienes han sido abandonados, pero su interés como fuente de información histórica, soporte material de una cultura y una forma de habitar el espacio rural, siguen siendo enormes. Ciertamente, el territorio naldense ha sido muy deforestado desde antiguo, y de cara a la obtención de madera, los montes presentaron muchas limitaciones. Eso explica el empeño de buena parte de las políticas aplicadas sobre los montes desde más o menos mediados del XIX, por expandir los bosques de repoblación artificial, con mayor o menor éxito. principalmente con especies de crecimiento rápido, con pinares. En años recientes las políticas cofinanciadas por la Política Agraria Común (PAC) de reforestación de tierras agrarias, tomaron el relevo en la tarea de ampliar la superficie forestal, junto a la regeneración espontánea de bosques de montaña. Así, en el último medio siglo España. cuenta con un 15 % más de área forestal arbolada, a razón de 170.000 a 180.000 ha/año los últimos años. (FAO, 2011)


Estas repoblaciones de pinar que en su mayoría se realizaron en las áreas del monte con “carácter comunal” el monte público, donde tradicionalmente había pastado el ganado originó graves consecuencias para el sector ganadero, como nos lo explica Marcelino, pastor de Islallana: “Yo la reforestación de los años 60 o 70 no la he conocido, yo las que he vivido más de cerca, son las que se han hecho hace 20 años aquí y ha sido todo un rollo que han especulado con las subvenciones. Se subvencionaba reforestar y se ha hecho por cojones y no se ha tenido nunca en cuenta al ganado, yo las de antes pues no se allí están, pero no hacía falta terminar con las últimas extensiones públicas del pueblo. Porque los ganados siempre ha pasteado entre las fincas y lo comunal, pero en el terreno comunal, se han puesto pinos, y han dejado de ser pastos y ahora es masa forestal. Luego se han hecho cosas mal, todo el hábitat que tenía Nalda para pastos, con buena o mala intención se ha reforestado, donde se reforesta las ovejas no pastan. Todo eso se ha ido arrastrando” (Entrevista al Marcelino, pastor de Islallana, marzo del 2014).

Fotografía: Reforestación años 60, en el paraje de Cubaldón, abril 2014-08-25 Esta falta de sensibilidad hacia el sector ganadero está relacionada, probablemente, con el desconocimiento general de la sociedad del rico patrimonio agro-silvo-pastoril que aún atesoramos, de su papel en los paisajes culturales, de la problemática a la que está sometido y del potencial que representan estos recursos endógenos para el mantenimiento de un mundo rural vivo y dinámico. Hoy, gracias a que aún conversamos memoria oral de labradores/as, pastores y ganaderos naldenses, destácandose la activa participación de “Elin”, “Marti”, “Carlos El Che” y “Lucas el de Narcis” se han podido identificar, antiguas sendas y caminos, fuentes, corrales, ríos, barrancos, antiguos cultivos de secano y de regadío y cultivos previos a la reforestación del pinar actual. Para ello, se ha tomado como referencia el Catastro Topográfico Parcelario del Término Municipal de Nalda, fechados en 1944 y 1945, realizado por Gonzalo López García, geógrafo, como instrumento geográfico para el análisis del mosaico de paisajes que componen la biodiversidad del territorio. Todos estos saberes se han recogido en el siguiente mapa que se adjunta, cada color nos muestra biodiversidad de plantas y cultivos presentes en el territorio que hoy en muchos casos están en desuso, de las que se derivan importantes conclusiones relativas a la etnografía, ecología, historia y morfología del paisaje. Obsérvese el mapa, pintado con oleos, donde se recoge de forma detallada:


Mapa: Mapa de la biodiversidad, elementos bioculturales y TopografĂ­a Parcelaria del TĂŠrmino Municipal de Nalda, fechados en 1944 y 1945






B. Caracterización de la biodiversidad del territorio: La salud y sustentabilidad de los territorios rurales en España está en riesgo, y el pueblo de Nalda no es la excepción. La pérdida irreversible de agrobiodiversidad, es alarmante y es por ello, que para su recuperación, conservación y puesta en valor se ha realizado un estudio detallado de la fauna, flora y la memoria biocultural acumulada en torno a la gestión, manejo y aprovechamiento de estos recursos naturales existentes en cada uno de los paisajes tradicionales que lo componen. El matorral predominante está formado principalmente por un denso matorral mediterráneo, que alberga multitud de plantas herbáceas que escapan de nuestra vista salvo durante la floración primaveral. “Aquí tenemos un sotobosque mediterráneo caracterizado por plantas de secarral, que tienen formas como la aulaga, para evitar el golpe de sol directo porque son secarrales, están coscojas, el boj, que tienen las hojas de los matorrales coriáceas precisamente para aguantar el sol directo que viene. Estos ecosistemas de plantas aromáticas, la brótano, muchos dorinium, pues son importantes porque tienen una gran diversidad de especies mediterráneas, que tienen gran importancia dentro de la entomología en general” (Entrevista a Tomás Latasa, junio 2014). En el caso del paisaje de sotobosque o linde compuesto por comunidades vegetales mayoritariamente espinosas que se encuentran en forestas; situándose en los márgenes y claros de los bosques a los que sustituyen; son fundamentales en los ecosistemas forestales, para garantizar la regeneración natural del bosque, además de proporcionar alimento y cobijo a la fauna asociada. Estos lindes, en el sistema agrícola tradicional, se dejaban no tanto por preocupaciones ecologistas entorno a los invertebrado, se hacían por comodidad y por seguridad de las caballerías; aunque ciertamente resultaba ser una práctica amigable para la fauna benéfica que encontraba refugio: “Tenemos que pensar en todos los invertebrados que nos rodean, estamos tan lejos de ellos, y que además todas estas prácticas tan abusivas de la agricultura que se están dando y también estas nuevas prácticas culturales, que ya no respetamos los lindes naturales de las fincas, estamos más interesados de marcar el linde con el vecino, y nos estamos cargando todos sus hábitats. El tema de las abejas está detrás, un invertebrado que no está protegido detrás de una directiva, pero que para nosotras es muy importante” (Marián Roldán, apicultora del valle del Iregua, abril del 2014). “Como se labraba en la caballería, no tenia sentido ponerse al borde de la mangada y que la caballería pudiera lastimarse; antiguamente no se vivía obsesionados con las plagas, las preocupaciones eran otras, más relacionados con el granizo y el tiempo”. (Entrevista Raquel Ramírez, julio 2014) A continuación se muestra el catalogo de Plantas Aromáticas y Medicinales, árboles y arbustos y diversas fibras naturales presentes en los caminos del monte de Nalda; dintinguiéndose diferentes usos para cada especie.


CATALOGO DE LA AGROBIODIVERSIDAD DEL MONTE DE NALDA PLANTAS AROMÁTICAS Y MEDICINALES Romero (Rasmaris officinalis)

Tomillo (Thymus vulgaris)

Aulaga (Genista scorpius)

Manzanilla real (Helichrysum stoechas)

Lino blanco (Linum suffruticosum)

Lino azul (linum narbonense)

Orégano (Origarum Vulgare Achicoria (Chichourium L.) Intybus L.)

Santolina (Rosmarinifolia)


Orquidea de dama (Orchis purpurea)

Salvia (Salvia lavandulifolia)

Narciso (Narcissus assoanus)

Lavanda Cantueso (Lavandula stoechas)

Espliego (Lavandula latifolia)

Malva (Malva sylvestris)

CalĂŠndula (Calendula officinalis)

Cola de caballo (Equisetum arvense)

Jaguarzo Jara (Cistaceas)


Gordolobo (Verbascum thapsus L.)

Viborera (Echium Vulgare L.)

Centaurea (nigra, jacea y nerviosa)

Tila (tilia)

Hierba jabonera (Saponaria Officinalis)

TĂŠ de roca o monte (Sideritis Hyssopifolia)

Brezo (Calluna vulgaris)

Menta Silvestre (Mentha sylvestris)

HipĂŠrico (Hipericum perforatum)


Escabiosa Mordida (Succisa Pratensis)

Sedum Alpestre

Campanilla española (Campanula hispánica)

Trébol Encarnado (Trifolum Pratense)

Primavera (Primula Veris)

Esparceta (Onobrychis Viciifolia)

Tártago (Euphorbia characias L.)

Nazareno (Mascari neglectum L.)

Lechetrezna (E. Amigdaloides L.)


Fumaria Officinalis

Guisante silvestre (Pisum Sativum L.)

Celidonia (Chelidonium Majus)

LlantĂŠn (PLantago major L.)

LĂşpulo (Humulus Lupulus)

perejil de perro ( Aethusa cinapius)


ARBOLES Y ARBUSTOS Boj o Bujo (Buxus Sempervirens)

Acerolo o bizcobo (Crataegus azarolus)

Endrino (Prunus Spinosa)

Madreselva (Lonicera)

MadroĂąo (Arbutus unedo)

ArĂĄndano (Vaccinium mirtillus)

Frambuesa (Rubus idaeus L.)

Zarza mora(Rubus ulmifolius Schott)

Laurel de Portugal (Prunus Lusitanica)


Espinos albar (Crataegus monogyna)

Enebro (Juniperus communis)

Grosellero de roca (Ribes petraeum)

Gayuba (Arctostaphylos uva-ursi)

Maguillos dispersos (Malus sylvestris)

Arces (Arce campestre)

AbedĂşl (Betula alba)

Sauce (Salix sp.)

Bonetero (Euonymus europaeus)


Avellano (Corylus avellana)

Serbal de los cazadores (Sorbus acuparia)

Sauco (Sambucus Nigra)

Cerezo silvestre (Prunus avium)

Casta単o (Castanea sativa)

Nogal (Juglans regia)

Fresno (Fraxinus excelsior)

Fresno (Fraxinus angustifolia)

Peral silvestre (Pirus sp.)


Sabina (Juniperus phoenicea)

Coscoja (Quercus coccifera)

Chopo (Populus nigra)

Aligustre (Ligustrum ovalifolium)

Roble albar (Quercus petraea

Encina (Quercus ilex)

Pino silvestre (Pinus sylvestris)

Quejigo (Quercus faginea)

Pino negro (Pinus nigra)


Pino pi単onero (Pinus pinea)

Acebo (Ilex Aquifolium)

FIBRAS NATURALES Anea (Thypa)

El carrizo (Phragmites Communies)

Brezo Blanco (Erica Arborea)

Ca単amo

Saci単a (Salix Eleagnos


C. La comunidad cuidadora de nalda y sus mujeres luchadoras “las lavadoras a la piedra” A la mayoría de las abuelas del pueblo de Nalda todavía les pesan los cubos de ropa sucia que bajaban a limpiar a las orillas del río Iregua. Una tarea realizada siempre por mujeres, que para muchas viudas o mujeres escasos recursos resulto ser un alivio económico puesto que se realizaba para alguna de las pocas familias adineradas que vivían en la villa de Nalda, siendo una labor cotidiana por supuesto para el resto de mujeres naldenses. Todas ellas recuerdan que solo el cubo de zinc pesaba no menos que 3 kilos, con ropa seca cargaban por lo menos 15 kilos de peso en la cabeza de bajada al río, lo malo era subir con la ropa mojada el peso porque incrementaba notablemente la carga y el esfuerzo para subir la empinada la cuesta al pueblo de Nalda era aún mayor. Fotografía: Alicia Martínez con el cubo de zinc que se ocupaba para cargar la ropa. Fuente: Elaboración Propia (2012) -

La Hierba Jabonera (Saponaria Officinalis)


Es una planta que vive en zonas encharcadas, orillas del curso del río Iregua y acequias. Antiguamente, se utilizaba para lavar tejidos, especialmente la lana. “Yo recuerdo que en casa nos lavamos con el jabón tradicional el que se hacía en las casas a partir de las grasas animales y vegetales; y que se usaba el agua de la cocción de la saponaria, se echaba en el balde donde nos bañábamos y quedaba la piel más suave” (Entrevista a Raquel Ramírez, Julio 2014).

Fotografías: Hierba de las jaboneras, la Saponaria Officinalis, en la Rivera del río Iregua

Justo alado del lugar donde se limpiaba la ropa, se hallaba la planta de la diarrea, una planta que destaca por sus flores moradas y que se encuentra junto al río Iregua; y que cuando se tenía mal de estómago se tomaba seca en infusión. Fotografía: planta de la diarrea, en la orilla del Iregua (año 2012).

D. Metodologías de Investigación Acción – Participativa (IAP) para la recuperación y puesta en valor de la memoria biocultural en los pueblos rurales. El proyecto AUMENTO DE LA MASA FORESTAL Y DE LOS SUMIDEROS DE CARBONO en el monte Nalda, además de la investigación cualitativa que se ha descrito con anterioridad, también ha promovido la Investigación Acción – Participativa (IAP) con objeto de que la población local del territorio se apropie de su propio patrimonio biocultural y asimismo en paralelo ir tejiendo un monte social, donde pobladores sean los protagonista y diseñen su futuro. El proceso de IAP que ha tenido lugar, se ha basado en los principios de Ottmann, 2005, es decir: (a) La primera fase es la de compromiso: el grupo “investigador” se involucra con el grupo de “acción” y con la realidad en la que se va a trabajar, que en este caso tendrá un carácter productivo agropecuario y/o forestal. (b) La segunda fase es la de investigación


participativa: se diseña la investigación a llevar a cabo por ambos grupos en función de sus intereses. (c) La tercera fase es la de acción: consiste simplemente en devolver la información a la comunidad/grupo o bien pasar a la acción para cambiar una determinada realidad, mediante una estrategia previamente elaborada. (d) La última etapa del proceso es la de evaluación: En ella se desarrollan dinámicas participativas que permitan la valorización de lo obtenido, así como su problematización. Bajo este prisma, se han llevado a cabo los siguientes procesos IAP, un trabajo de aprender haciendo, para la práctica in situ de usos culturales y aprovechamientos a futuro de una forma sostenible poniendo en valor la memoria biocultural, saber campesino y experiencia existente entorno a estos cultivos por los pobladores del pueblo. -

Producción y monitoreo de cereales, leguminosas y fibras naturales antiguas:

Se ha sembrado cereal (cebada y trigo) y también lino y algunas legumbres como el garbanzo. Todo ello en ecológico para asegurar la recuperación de la tierra, la viabilidad de las semillas, la no presencia de pesticidas o químicos fitosanitarios en las áreas de intervención y así favorecer la regeneración de los suelos y favorecer los sumideros de carbono. (a) El cultivo del cereal A continuación se detalles las actividades que se han realizado para el cultivo del cereal: trigo y cebada ecológica: 1. Preparación del suelo: Para obtener germinación y maduración uniformes ha sido necesario nivelar el terreno antes de iniciar la labranza. El método de preparación profunda y el tipo de arado se deben escoger de acuerdo con las condiciones, en las cuales un factor fundamental es la conservación del suelo. En la región tradicionalmente se ha empleado el sistema de barbecho, que consiste en arar superficialmente y se siembra en una sola operación, con el objeto de aprovechar al máximo la humedad de la tierra, evitándose además la erosión por vientos. Este ha sido el método que se ha elaborado.

Se realizaron camas de cultivo para facilitar el acceso y labores de limpieza, como puede observarse en la fotografía, marzo del 2014


Fotografía: diseño de las camas de cultivo 2. Fertilización y ciclo de nutrientes: Los nutrientes más requeridos por estos cereales son el nitrógeno (N), que ayuda a mantener el follaje verde; el fósforo (P), que estimula el crecimiento de raíces y acelera la maduración de los granos; y el potasio (K), que fortalece los tallos. Los nutrientes se pueden aplicar en forma de fertilizantes orgánicos, como el estiércol o el abono verde. En nuestro caso se han incorporado estiércol de ganado maduro. 3. Siembra: Para obtener una buena germinación se debe establecer la cantidad de semilla a utilizar, el sistema de siembra, la época de siembra, y la densidad y profundidad de ésta. La siembra del trigo y la cebada se realizo al voleo y en hileras, para aprender poniendo en práctica las diferentes alternativas. Así Con ayuda de Elín pastor y agricultor naldense con experiencia se sembró el cereal, investigación acción participativa.

Fotografía: Elín muestra como se siembra el trigo, variedad espelta, marzo del 2014 4. Manejo del cultivo: El manejo de plantas arvenses (malezas) se ha realizado mediante control físico, con herramientas manuales. Se ha realizado labores de escardado de forma manual durante el mes de junio y julio, una vez que el grano ya se había desarrollado. 5. Manejo de plagas y enfermedades. El control de las enfermedades se puede prevenir mediante medidas sanitarias, como el uso de semilla certificada “ecológica”, en nuestro caso no se hemos sufrido problema de plagas probablemente debido a la buena calidad de la semilla. Para el manejo de plagas ha sido imprescindible la inspección periódica de los cultivos de manera tal que se pudiera prevenir o evitar su rápida propagación. 6. Suministro de agua en caso de riego. En nuestro caso no se han realizado riegos al trigo y la cebada, se han aprovechado el agua de lluvias.


7. Tarea del monitoreo del estado del cereal. A continuación se muestra el desarrollo del cereal en el Paraje de Las Planas mediante una secuencia de fotografías: Fotografía: El cereal en abril del 2014, en el paraje de Las Planas:

Fotografía: El cereal en mayo del 2014:

Fotografía: El cereal en julio

Fotografía: el cereal en Agosto del 2014:


8. La cosecha: Los cereales se han cosechado cuando los granos ya estuvieron maduros y contienen cierto porcentaje de humedad. En general, la siega o corte de los tallos, empieza cuando los granos tiene una humedad cercana al 40%. En nuestro caso esta tarea se ha llevado a lo largo del mes de Septiembre. Además, hemos detectado que el cereal no ha granado en abundancia, probablemente debido a que el suelo llevaba bastante tiempo sin labrar y acusa una falta de nutrientes. Fotografía: Mero cosechando de forma manual el cereal

Luego de la siega, la siguiente actividad es el agavillado, que consiste en poner los atados de las mieses en forma tal que los granos empiecen a madurar y a perder humedad. Para la siega se pueden usar herramientas manuales como la hoz y la guadaña, o máquinas especializadas las cosechadoras de granos. Fotografías: Tarea de cosecha del grano y agavillado del cereal, Fugas, Hugo y Mero realizando la tarea


9. Actividades de post-cosecha: Las operaciones de post-cosecha incluyen actividades de secamiento, trilla, limpieza y almacenamiento. Cuando la humedad de los granos ha bajado a 28%, aproximadamente, se puede empezar a trillar. Posteriormente, hemos realizado la limpieza. Cuando los granos alcanzan una humedad del 15%, se pueden almacenar y guardar sin necesidad de secarlos más. Se ha obtenido paja como subproducto del cereal, que podremos incorporarlo en las huertas a modo de acolchado. (b) Cultivo del garbanzo: A continuación se detallan las actividades realizadas en el cultivo del garbanzo: 1. Preparación del suelo: Con respecto a los suelos, el garbanzo tolera, normalmente, los terrenos más variados. El garbanzo es una planta que tolera muy bien la escasez de agua. Incluso un ligero exceso de ella, durante su período vegetativo, le puede llegar a perjudicar si las precipitaciones son suficientes como para producir encharcamiento del terreno, ya que es una especie muy sensible a la asfixia de raíces. Estas características han dado origen al refrán que dice «al garbanzo el agua al nacer y al cocer». Para facilitar la siembra se aro el terreno a fin de que quedará lo más llano posible y con objeto de romper los terrones y dejar la tierra lo más fina posible, además de eliminar las malas hierbas que puedan salir. 2. Abonado:Puesto que el garbanzo es una leguminosa, sus necesidades en nitrógeno las cubre directamente. Se ha incorporado estiércol de ganado para aportar nutrientes al suelo. 3. Siembra: La época normal de siembra es a finales del mes de marzo en las zonas más al norte de España y así se ha hecho en nuestro caso. Se utiliza una dosificación de 80 a 100 kg de semilla por hectárea de cultivo. Con esta proporción se ha sembrado


1 kg de semilla de garbanzo, como cultivo experimental. Al ser un cultivo de secano, no se regó en la siembra. Fotografía: Elín sembrado el cereal, 4 granos por surco.

La siembra se realizó a chorrillo, de forma manual, con 4 granos por surco, en líneas separadas de 60 a 80 cm, para poder realizar posteriormente las labores de limpieza con objeto de eliminar las malas hierbas. La siembra manual ha desaparecido prácticamente, habiendo sido reemplazada por la siembra mecanizada, realizada con sembradoras de líneas a las que se les adapta o ajusta su mecanismo de distribución de acuerdo con el tamaño de la semilla. En este proyecto se quieren recuperar prácticas sostenibles con el medio ambiente, que no aumenten las emisiones de CO2 a nuestro medio natural, por eso todo el manejo del garbanzo fue manual. Fotografía: Abderraman armando los canteros para la posterior siembra.

4. Labores del cultivo: Consisten en dar un par de pases con la azada con el objeto de eliminar las malas hierbas. No se pueden dar, en general, más pases, porque el cultivo se cierra y no lo permite.


5. Monitoreo del cultivo. A continuación se recogen la secuencia de fotografías que muestra la evolución del cultivo: Fotografía: El garbanzo en abril, sano libre de enfermedades_

6. La recolección: Esta actividad se ha realizado de forma manual, segando con hoz las plantas para formar gavillas trasladándolas a la era. En la era se forma la denominada «parva», amontonando toda la producción en montones en la era. Fotografía: Fabiola recolectado manualmente el garbanzo

Una vez extendida la parva, se trilla y después se aventa para separar el grano de la paja, dejando de este modo el garbanzo listo para limpiarlo con ayuda de una criba. (c) El cultivo del lino: El clima más favorable para el crecimiento del lino es el templado. El lino es una planta dicotiledónea de la familia de las Lináceas, género Linum usitatissimum. Entre 80 y 100


hojas sésiles alternas crecen en cada tallo de la planta, que mide aproximadamente un metro de altura. Las flores son blancas o azules y producen pequeñas esferas globulosas formadas por cinco lóbulos, cada uno de los cuales contienen dos semillas. La fibra del lino se encuentra en el tallo, debajo de la superficie externa. El lino es un considerado un excelente cultivo rotativo. Es recomendable rotar la ubicación de este cultivo. A continuación se explican las diversas tareas que se han realizado para el caso del lino: 1. Preparación del terreno. Se labró el terreno y realizaron camas de cultivo. 2. Siembra del lino: Al sembrar el lino se debe cuidar que la distribución de las semillas sea lo más pareja posible, tanto en sentido horizontal como vertical y una profundidad de siembra de 2 cm, con el fin de obtener una semilla homogénea. El periodo normal de siembra en la península ibérica comienza el 15 de marzo y acaba el 15 de abril. En nuestro caso lo hemos sembrado a finales de marzo. La densidad de siembra optima está entre 1.800 y 2.000 plantas por metro cuadrado, que supone la relación optima entre rendimiento y calidad de la fibra (finura, resistencia, etc.). Después de echar la simiente se ha agregado turba. Fotografía: Blanca sembrando al voleo el lino, marzo del 2014

3. Monitoreo del desarrollo del lino Fotografías: El lino en el mes de mayo


4. Cuidados del lino: Se han realizado limpiezas de malezas mediante azadilla. Para protegerlo contra la invasión de malas hierbas. 5. Monitoreo de plagas y enfermedades: El lino no es muy vulnerable a las plagas ni a los parásitos, y así lo hemos comprobado.

6. Riego: El lino es un cultivo bastante exigente en agua. Por eso, es recomendable regarlo todos los días hasta que germine, luego se precisa regar pero de forma más intercalada cada 3 días, todo dependerá de la temperatura ambiente. En nuestro caso fue una primavera bastante lluviosa y nos evitamos bastantes riego. El riego se hizo a manta. Para ello tuvimos que limpiar el regadío de la finca “Los Linares” perteneciente al Río Torredano. Fotografía: Matilde y Raquel regando el lino a manta en la finca de los Linares


En esta jornada de limpieza, se aprovecho para trabajar un protocolo de limpieza de los regadíos. Tarea que tradicionalmente, se hacía a vereda “entre todos”, pero que con el paso del tiempo se ha ido perdiendo esta práctica, agravándose con el abandono de la actividad agroganadera. Como resultado se consensuo un protocolo orientativo que nos permita replicar esta tarea en otras fincas:

Protocolo de limpieza 1. Desbroce mecánico con la desbrozadora, acompañado de arnett, guantes y casco protector. 2. El desbroce manual lo haremos con la hoz y tijeras. 3. Para la limpieza usaremos el rastrillo y azadón con el que retiraremos la broza y restos de poda. 4. Después de la limpieza en el primer regadío limpiaremos la maleza que pudiera aparecer en la superficie. 7. Monitoreo del lino salvaje del lino, que prolifera en los caminos del monte de Nalda: Paralelamente a nuestra producción de lino, se realizó un monitoreo sobre el estado del lino salvaje que aparece de forma espontanea en nuestro monte: el lino azul y blanco; para poder comparar la evolución de ambos.


Fotografía: Lino azul encontrado en el paraje de las planas, en el mes de mayo.

Fotografía: Lino blanco encontrado en el Paraje de San Marcos, en el mes de abril:

8. Producción de fibra de lino: Se ha procedido a la recolección de semilla de lino, para poder seguir reproduciéndola en año que viene y también para poder consumir su semilla que es un alimento muy sano y nutritivo: Fotografías: sobre la recolección de la semilla del lino



(e) Elaboración de un documental de la memoria biocultural en Nalda Fruto del trabajo de entrevistas realizado, se ha sistematizado la experiencia, dándoles voz a los informantes de esta memoria biocultural en una video documental, llamado Nalda: un pueblo con memoria. Un proyecto que rescata la memoria de nuestros abuelos, sus costumbres, los usos de la tierra, sus palabras, sus rostros. Su manos tejiendo el tiempo pasado, para encontrarnos en este presente que nos ha hecho olvidar tantas cosas. En marzo del 2015, se realizó una devolución del mismo a sus protagonistas, este fue el cartel de la actividad y algunas fotografías de la actividad


(f) IAP de los niños/as del colegio de Nalda y sus sabios informantes mediante metodología Aprendizaje Servicio (APS) Durante varios meses se realizaron actividades para dinamizar y vitalizar el conocimiento tradicional campesino en Nalda. Para ello, se diseñaron propuestas metodológicas para llevar a cabo procesos formativos participativos que fomenten el diálogo intergeneracional, la valorización del saber campesino y la reflexión permanente sobre propuestas de desarrollo rural sustentable basadas en conocimiento tradicional. Con esta intención y dando continuidad a la metodología de trabajo que la Asociación Panal viene desarrollando, se considero idóneo, trabajar con metodología APS en el colegio de Nalda con los niños/as de tercero, cuarto, quinto y sexto de primaria del Colegio de Nalda. Siendo objetivo del estudio y/o intervención la recuperación y valorización de la memoria biocultural del monte naldense y de los saberes de sus abuelos/as; investigando la evolución de los paisajes y los usos de los recursos locales del monte; las características de los árboles del monte, la evolución de los cereales antiguos, las propiedades de las Plantas Medicinales del monte de nalda y finalmente la gastronomía local a través de las recetas.

El aprendizaje-servicio es una propuesta educativa que combina procesos de aprendizaje y de servicio a la comunidad en un solo proyecto bien articulado donde los participantes aprenden al trabajar en necesidades reales del entorno con la finalidad de mejorarlo. En definitiva, el aprendizaje-servicio es un método para unir compromiso social con el aprendizaje de conocimientos, habilidades, actitudes y valores.. Aunque es una metodología de aprendizaje, no es sólo eso. También es una filosofía que reconcilia la dimensión cognitiva y la dimensión ética de la persona; una pedagogía que reconcilia calidad educativa e inclusión social. Los principales actores han sido los jóvenes del pueblo, pero al mismo tiempo destaca la implicación de la dirección del colegio y del profesorado. Indiscutiblemente, los abuelos/as, vecinos/as y madres y padres han sido parte necesaria en esta IAP. Las actividades se han realizado de forma colectiva y colaborativa. Como resultado, con apoyo del equipo editor de la Asociación Panal se ha sistematizado la información recolectada en este proceso de IAP, culminándose con una publicación singular con el título de “La memoria biocultural del monte de Nalda desde los niños/as, año 2015, con ilustraciones a color elaboradas por los propios alumnos. INCLUIR FOTO PORTADA DE LA PUBLICACIÓN Y SI QUEREIS ALGUNA FOTO DE LAS ILUSTRACIONES.. QUE NO TENGO ACCESO AHORA AL DOCUMENTO, PERDON En el año 2014 este trabajo fue presentado en el marco del encuentro de APS estatal que se realizó en la Rioja, donde los protagonistas narraron la memoria biocultural de su pueblo a los asistentes.


FOTO DEL ENCUENTRO DE APS yo no tengo Finalmente, en mayo del 2015, los autores de la publicación “ La memoria biocultural del monte de Nalda” en salón sociocultural de Nalda, presentaron el trabajo realizado a sus informantes, promoviendo el mantenimiento de la memoria biocultural de su pueblo viva. Fotografía: Día de la devolución del trabajo de la memoria biocultural del monte de nalda desde los niñxs a sus informantes, mayo 2015.

Fotografía: Cartel de la actividad “La memoria biocultural contada desde los niños/as del monte de Nalda”


“Los saberes se tejen cada día, en cada gesto, en cada labor, en cada plato, en cada huerta, en cada paseo, solo hace falta ponerlo en valor y sentirlos nuestros, de nuestras raíces.” Palabras de Naiara Ferrer, autora e investigadora de la momoria biocultural de Nalda.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.