Las aventuras de Don Quijote Miguel de Cervantes
Trabajo realizado por los alumnos de la asignatura de Educación Plástica y Visual de 4º ESO. Dedicado a los alumnos de Educación Primaria e Infantil.
Colegio J.H. Newman. (2014 – 2015)
"En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un Hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. El resto de él lo concluían sayo de velarte, calzas de velludo para las fiestas, con sus pantuflas de lo mismo, y los días de entre semana se honraba con su vellorí de lo más fino. Rozaba la edad de nuestro Hidalgo los cincuenta años. Era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza."
Don Quijote se pasaba las noches leyendo sin tener en cuenta la hora y los d铆as, pasando de uno en uno; y as铆, del poco dormir y de mucho leer, se le sec贸 el cerebro de manera que se volvi贸 loco.
ยกEn una taberna estรก Sancho Panza! Es un hombre de pueblo, un aldeano pobre, sencillo, de buen comer y le gusta disfrutar de un buen trago de vez en cuando.
Sancho Panza es bajito y regordete y su forma de hablar es llena de refranes. Se quedĂł deslumbrado ante Don Quijote, decide acompaĂąarlo en sus aventuras por que el noble caballero le promete una Ănsula. Don Quijote le tiene como su fiel escudero.
Don Quijote y Sancho Panza van caminando por colinas y llanuras, sembradas por trigo, patatas y otros productos.
Don Quijote ha perdido el
juicio de tanto leer novelas de
caballería. Al salir en busca de aventuras con su fiel escudero Sancho Panza, empieza a ver el mundo como si fuera un libro de caballería. Pensaba que una venta era un castillo, los molinos, gigantes y un rebaño un ejército.
Don Quijote y Sancho se encuentran con unos molinos de viento, el caballero piensa que son gigantes y se dispone a atacarlos. Sancho le dice que no son mĂĄs que molinos pero el caballero estĂĄ ciego en su locura y se empeĂąa en su proyecto de batalla.
¡Llamábase Aldonza Lorenzo y ahora era la señora de sus pensamientos! Don Quijote se enamoró de la doncella y decidió darle un nombre de princesa, como era natural de Toboso, vino a llamarla "Dulcinea del Toboso", la defendería con la vida, con todo su honor.
"Como tengo dicho, se cumplirĂĄ lo que tanto deseo, para poder, como se debe, ir por las cuatro partes del mundo buscando aventuras". Le decĂa Don Quijote a su escudero mientras iban por los caminos, con una gran sensaciĂłn de libertad.
Una noche se salieron del lugar sin que persona les viese. Caminaron tanto que al amanecer se tuvieron por seguros de que no los hallarĂan aunque los buscasen. Sancho Panza iba en su jumento como un patriarca, con mucho deseo de verse ya gobernador de la Ănsula que su amo le habĂa prometido.
Iban los dos por las llanuras, cuando avistan una figura. Don Quijote piensa que es un caballero que lleva el yelmo de Mambrino, y que es su deber recuperarlo. Lo que en realidad ocurre es que el caballero que se acerca es un barbero que se dirige hacia un pueblo en burro a trabajar, y que lleva un bacĂn en la cabeza.
El caballero hizo un trato con Don Quijote, si ganaba Quijote, el caballero admitiría que Dulcinea era la mujer más bella del mundo. Pero si ganaba el caballero, Don Quijote debía dejar las aventuras de caballería y sus libros. Quijote termina derrotado y es obligado a volver a casa y dejar todo por lo que había luchado. FIN