Russell Robinson, un campeón NCAA en la ACB
El jugador del DKV Joventut Russell Robinson se reunía con Janet, nuestra redactora en Badalona, después del partido de liga ACB que enfrentaba a su equipo con el Power Electronics Valencia. Tras la victoria ante los valencianos, Russell compartía unos minutos con nosotros para hablarnos de su experiencia en la NCAA en las filas de una de las grandes universidades del baloncesto colegial estadounidense, Kansas.
sobrellevábamos la gran presión que supone jugar para un equipo como los Jayhawks”. Aquella generación estaba dirigida por Bill Self. “Coach Self es genial. Fuera de la pista es muy abierto, amable y simpático. Dentro de la cancha nos hacia trabajar duro, ganarnos lo que conseguíamos. Se transformaba en “a serious person, oh my god”, nos decía mientras sonreía.
En los Jayhawks, Robinson fue parte de una brillante generación que acabó convirtiéndose en campeona nacional en 2008, derrotando a Memphis en una final inolvidable. Después de su graduación, el base daba el salto al baloncesto profesional, y el club turco del Erdemir parecía ser su primer destino. La pretemporada en el equipo otomano no salió bien y Russell retornaba a su país donde acabaría jugando en la NBDL, repartiendo la temporada entre Maine y Reno. Su rendimiento en esa competición llamó la atención del DKV Joventut, que ha apostado por él para esta campaña. Russell Robinson, criado en el Bronx neoyorquino, destacó como base de Rice High School, instituto del que han salido jugadores como Felipe López, Keydren Clark, Edgar Sosa, Curtis Kelly o Kemba Walker. Firmó por Kansas en busca de un cambio, saliendo de Nueva York para instalarse durante cuatro años en Lawrence, en los que, por cierto, se graduaría en Comunicaciones. “Un gran cambio de escenario, sin duda. Una ciudad completamente diferente, muy distinta a mi ciudad de origen”. Elegia los Jayhawks porque “buscaba algo nuevo, un ambiente y un entrenador con los que pudiera aprender”. El base del Joventut considera su etapa universitaria “una gran experiencia para mí, Kansas es una universidad increíble. El programa de baloncesto es excelente, los aficionados son maravillosos, que genial”. Robinson compartió equipo con jugadores de la talla de Mario Chalmers, Brandon Rush, Darrell Arthur, Sherron Collins, Sasha Kaun o Cole Aldrich. Un grupo de gran talento que tenía que defender a un equipo muy laureado, casi obligado a ganar año tras año. “Formamos un buen grupo, muy unido. Gente con talento, muy trabajadora, y además era divertido formar parte de ese grupo. Entre todos Guía BasketMe NCAA 2010-11
Texas era la gran rival de Kansas. Un duelo que se repetía temporada tras temporada. “Ellos tenían grandes jugadores como Kevin Durant o D.J Augustine, y además eran capaces de jugar como equipo, aunque nosotros teníamos mucho talento también, lo que hizo más fácil derrotarles”. Tantos duelos, y tan complicados, que Russell no acabó de hacer memoria correctamente al preguntarle por algún partido en concreto. “La final del torneo de conferencia de la Big 12 en 2008 fue realmente dura, creo que jugamos dos prórrogas o algo así, y fue un encuentro complicadísimo”. Se refiere a la final de 2007, en la que cancha remontaba hasta 22 puntos a unos Longhorns liderados por Kevin Durant (37 puntos aquella noche) para acabar ganando en la prórroga. Russell jugó 31 minutos aquella noche, anotando 5 puntos y capturando 4 rebotes. Antes de alzarse con el campeonato nacional, la gran generación Jayhawk vivió duros golpes. Primero engarzaban dos derrotas consecutivas en la primera ronda del torneo NCAA, siendo seeds 3 y 4, ante Bucknell y Bradley respectivamente. La temporada siguiente, Kansas llega a Elite Eight, Pag. 59