Habla nuestro Prioste

Un año más, sale a la luz el boletín de la juventud crucera, este año en su octava edición, en el que quisiera dedicarle unas palabras a nuestro capellán y amigo don Juan. En primera lugar darle, en nombre de los cruceros, nuestra más sincera enhorabuena por su nombramiento como canónigo de la Santa Iglesia Catedral. Estoy seguro que es un merecido reconocimiento a su dilatada y excepcional labor como sacerdote, aunque sé que no precisa de reconocimiento alguno para seguir transmitiendo el mensaje de Jesús de una forma tan comprometida como lo ha hecho hasta ahora. Desde su llegada a Baeza, como párroco de El Salvador, se ha ganado el cariño y respecto de toda su comunidad. Para los cruceros jóvenes y los no tan jóvenes, tenerlo como capellán nos ha supuesto un verdadero revulsivo en nuestra Fe, además de todo un ejemplo de entrega a la Iglesia, de amor al prójimo y de sentido de la caridad. Don Juan no es solo nuestro capellán, es todo un amigo al que apreciamos y con el que compartimos buena parte de nuestras vidas y la de nuestras familias. El gran cariño que le tienen los cruceros y el pueblo de Baeza en general, lo pudimos constatar el día de su toma de posesión en la Santa Iglesia Catedral de Jaén, en la que fue acompañado por una numerosa representación de baezanos, además de compañeros de ministerio, familia y amigos. Quisiera, para finalizar, agradecerle la labor que ha realizado y realiza con nuestro Grupo Joven y desearle todo lo mejor en esta nueva etapa de su vida como canónigo, a la que seguro tendrá muchas cosas buenas que aportar.