EL FAR edició impresa Nº 1261. ABRIL 2020

PROPERA EDICIÓ: 29 de maig de 2020

Informatiu del Baix Llobregat i l’Hospitalet

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• 24 d’abril de 2020 • Nº 1261

Unidos contra el enemigo

La comarca regala dosis de profesionalidad, implicación local y solidaridad para hacer frente a la pandemia del COVID-19

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Crisis sanitaria COVID-19 EDITORIAL: Resistiremos

os ha cambiado la vida. El COVID-19, que fue declarado como pandemia el 11 de marzo por la OMS, ha dibujado un escenario que ninguno de nosotros podíamos imaginar: calles y plazas vacías por el confinamiento obligado de la población; centros escolares y equipamientos públicos cerrados; parálisis de la actividad económica y comercial; distancia social, utilización cotidiana de mascarillas...

Los ayuntamientos han atendido la emergencia sanitaria desde el minuto uno. Conscientes de las dificultades que el estado de confinamiento comporta, han centrado sus esfuerzos en dar respuesta a las necesidades ciudadanas, sobre todo reforzando el apoyo a los colectivos más vulnerables: a los mayores que viven solos, a las personas con dependencia, a los niños o a las mujeres víctimas de violencia de género. Un trabajo incansable que ha estado arropado de una gran dosis de solidaridad, gracias a la acción desinteresada de ciudadanos anónimos, entidades y empresas, que no están dudando en ayudar en todo lo posible para paliar los efectos de la pandemia. Con compromiso, emprendimiento e innovación.

Y lo hacen como pueden: realizando las compras de alimentos o medicamentos a las personas mayores, confeccionando o aportando material sanitario o distribuyéndolo a los centros y servicios que más lo requieren. Porque una de las evidencias que ha traído consigo el coronavirus es la debilidad de nuestro sistema público de salud, sometido a una década de interminables recortes. Y aunque es algo que el personal sanitario y los pacientes llevan sufriendo durante todo este tiempo, ahora, en plena emergencia, las consecuencias de no apostar por el bien común son aún más dramáticas: hospitales colapsados y con carencia de material o de medidas de protección, para hacer frente a la pandemia mundial más importante de las últimas décadas. Pero, afortunadamente, contamos con profesionales dedicados en cuerpo y alma a salvar a los enfermos. Y por eso, cada tarde a las 20 horas, tenemos una cita ineludible desde nuestros balcones y terrazas para aplaudir a estos héroes de bata blanca.

El COVID-19 también ha aireado la situación que se vive en las residencias de la tercera edad y, sobre todo, la mala gestión realizada en plena emergencia. Se ha llegado tarde y mal, y hay que lamentar el fallecimiento de un gran número de ancianos. Todo ello nos ha de hacer reflexionar sobre un sector que necesita un cambio de modelo en profundidad.

Esta crisis sanitaria, además, viene acompañada de otra económica, que se prevé profunda en un espacio muy corto de tiempo. Conocedores de la dramática situación que viven muchas personas, que han visto perder su puesto de trabajo o reducir sus ingresos sustancialmente a causa de los ERTEs presentados por sus empresas, los consistorios han articulado medidas fiscales para hacer frente a esta paralización de la actividad comercial y económica; y han aprobado, a su vez, nuevas líneas de ayudas.

Pero cuando todo esto pase será más necesario que nunca incidir en la colaboración institucional y orquestar planes concertados con el ecosistema socioeconómico local para volver a impulsar la economía y preservar nuestro tejido productivo y el empleo. Se requiere una suma de esfuerzos. Únicamente unidos podremos salir de esta crisis y de las consecuencias que ya está provocando. Solo así nos reconstruiremos de nuevo, como tantas otras veces ha hecho el Baix Llobregat y L’Hospitalet. La historia nos avala y esta vez también resistiremos.

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ANTONIO BALMÓN Vicepresidente ejecutivo del Área Metropolitana de Barcelona (AMB)

Ante un nuevo enemigo, soluciones concretas

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a crisis global a la que nos ha llevado la pandemia del COVID-19 es una prueba increíblemente demandante; una realidad nueva que nos ha requerido a todos aprender rápido, y a las administraciones hacer un esfuerzo para adaptarse a una dinámica nunca vivida. En el AMB hemos priorizado ante todo el cuidado a la ciudadanía del territorio metropolitano, para amortiguar el golpe que, a nivel social y económico, supondrá esta situación.

Por ello, hemos puesto en marcha medidas contra la propagación del COVID-19, como la paralización de las obras promovidas por el AMB y el IMPSOL, y cambios en los protocolos de las plantas de tratamiento de agua y residuos, así como en los servicios de transporte público y taxi, para garantizar la seguridad del personal, que al fin y al cabo es nuestro activo más valioso.

Precisamente en el transporte de pasajeros, hemos asegurado el servicio para las personas con trabajos esenciales, ajustando la oferta a la demanda real y favoreciendo la gratuidad del servicio en los momentos de máxima afectación. Asimismo, hemos insistido sobre la importancia de quedarse en casa siempre que sea posible.

Pensando en la economía de las familias, además de garantizar los servicios básicos en todo momento, hemos aplazado el pago de la factura del agua y de la tasa metropolitana de tratamiento de residuos (TMTR) para pymes y autónomos, al tiempo que recordamos a las personas más afectadas que pueden acogerse a la tarifa social. Con el mismo objetivo, el cobro de todos los alquileres de pisos y locales del IMPSOL y de REGESA ha sido pospuesto.

Además, el AMB actúa como aglutinador de más de 500 medidas, propias y de los ayuntamientos, en materia social y económica, como programas de ayudas a personas en paro y de soporte a las empresas. Ésta es una crisis que nos atañe a todos y que, detrás de grandes cifras, afecta a muchas familias, con nombres y apellidos, de nuestros municipios. Por eso, más allá de las grandes decisiones globales, los ayuntamientos y las administraciones supramunicipales como el AMB tenemos la posibilidad -y la responsabilidad- de llegar a las personas más vulnerables. Conocemos bien la sociedad metropolitana y sus necesidades, y contamos con los profesionales necesarios para hacer frente a este nuevo enemigo. Entre todos, lo superaremos.

JOSEP MARIA ROMERO Secretario general de CCOO Baix Llobregat

Un acuerdo político y social para una recuperación justa

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sta pandemia nos ha vuelto a mostrar las debilidades estructurales de nuestro mercado de trabajo, marcado por una desigualdad creciente, precariedad, parcialidad no deseada, bajos salarios, pobreza laboral y una división sexual que desvaloriza las tareas de cuidados, verdaderamente esenciales para nuestra supervivencia, tal y como se ha demostrado.

Intuimos graves consecuencias sociales y una gran destrucción de empleo y tejido productivo. Una salida equitativa exige inversión pública como acelerador económico, liquidez a las empresas para evitar una larga recesión y consolidar la transformación urgente de nuestro modelo obligado por el cambio tecnológico y la crisis climática.

Abordar la pobreza y la exclusión social exige un nuevo contrato social que priorice a personas y familias. Implementar una renta mínima para quien no puede acceder a un empleo y no cuenta con recursos, debe ser un significativo avance en esa dirección.

Necesitamos un acuerdo político y social que permita armonizar esfuerzos, compartir costes y evitar una confrontación permanente, no compartida por la mayoría de la ciu-

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dadanía. El conjunto de instituciones, actores políticos, sociales y ciudadanía han de poner las bases de un nuevo contrato social que responda a las transformaciones que necesita nuestro modelo económico y social para contribuir al cambio en nuestras formas de producir, distribuir y vivir. La concertación es una fórmula que siempre hemos sabido conjugar en el Baix Llobregat. Nuestro reto compartido será concretar un desarrollo sostenible e inclusivo que ponga el cuidado de las personas en el centro, garantice bienestar y nos permita avanzar en cohesión social sin dejar a nadie atrás.

La salida, asumiendo desconcierto y vulnerabilidad, exige humildad y contar con una sociedad organizada y movilizada para garantizar la democracia, libertad y derechos, sabiendo que el espacio que deja la política lo acaba ocupando el totalitarismo.

El trabajo continúa siendo la principal fuerza creadora de valor en nuestra sociedad y junto con el refuerzo de los servicios públicos, la recuperación del espacio comunitario y primar la educación, la investigación y la ciencia deben ser los ejes sobre los que reconstruir una recuperación equilibrada, justa y sostenible.

Edita: Premsa i Comunicació del Baix Llobregat S.A. Redacció, administració i publicitat: Alcalá Galiano, 43. 08940 Cornellà.

Tel. 93 474 57 07 - Fax: 474 39 78 e-mail: elfar@elfar.info · Web: www.elfar.cat Directora Periodística: María José Espinosa Redacció: Dulce Valero Departament de Publicitat: Orencio Alamillos Fotografia: Pepa Álvarez, Cristina Diestro i Ajuntaments Impressió: Imprintsa Dipòsit Legal: B-27.254-86

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Crisis sanitaria COVID-19

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El Baix Llobregat se queda en casa CRISTINA DIESTRO

El 14 de marzo empezaba una etapa histórica de confinamiento para los ciudadanos MARÍA JOSÉ ESPINOSA El Gobierno central decretaba el 14 de marzo el Estado de Alarma. Empezaba así una etapa histórica de confinamiento y de medidas extraordinarias, que están afectando, en todos los niveles, a cada uno de los ciudadanos del Baix Llobregat y L’Hospitalet.

Llegaba el momento de quedarse en casa para frenar los contagios y contener el colapso sanitario. Y los ayuntamientos del territorio se activaron de forma inmediata. De hecho, incluso antes de la aprobación del Real Decreto, ya comenzaron a desplegar diferentes acciones, que fueron aprobadas en los comités y planes de emergencia que se constituyeron desde el minuto 1 para coordinar y hacer seguimiento de la crisis.

Las primeras medidas fueron suspender o aplazar las actividades de ocio, culturales o extraescolares que comportaran la concentración de un gran número de personas, y el cierre de los casales de la gente mayor.

Posteriormente, y sobre todo tras la declaración del Estado de Alarma, las medidas fueron ya mucho más contundentes, provocando prácticamente la parálisis total: escuelas y colegios cerrados, así como todos los equipamientos e instalaciones municipales, culturales, juveniles, sociales, deportivas y de proximidad. Los parques, las áreas infantiles y las playas fueron clausura-

das; la gran mayoría de los comercios tuvieron que bajar las persianas y la población, desde entonces, solo tiene permitido salir a la calle por alguno de los motivos expresamente autorizados, como la adquisición de productos de primera necesidad o farmacéuticos, la asistencia a centros sanitarios, el desplazamiento al lugar de trabajo (en los casos previstos) o el cuidado de personas mayores, niños o dependientes, y siempre siguiendo las normas y recomendaciones de las autoridades.

Con el objetivo de velar por el cumplimiento de todas las medidas establecidas por el Gobierno de España, las policías locales de los municipios, conjuntamente con efectivos de los Mossos d’Esquadra, han intensificado sus actuaciones, centradas principalmente en el control sobre los establecimientos que tienen la obligación de permanecer cerrados y sobre la movilidad de las personas en espacios públicos. Pese a que la mayoría de la población está demostrando una gran responsabilidad, en casi todos los municipios de la comarca se han impuesto un gran número de denuncias a personas que se han saltado las restricciones.

Unas sanciones que oscilan entre los 100 y los 600.000 euros (o prisión de tres meses hasta un año), según la gravedad de la infracción que se cometa.

En este ámbito, las alcaldesas de Gavà y

Castelldefels, Raquel Sánchez y Maria Miranda, respectivamente, y el alcalde de Viladecans, Carles Ruiz, han solicitado a la Generalitat que autorice la firma de un convenio de colaboración interpolicial. “El objetivo es que se puedan poner al alcance de los tres municipios los recursos materiales y personales de las respectivas policías locales”, explican. “De esta manera, quedaría garantizado el cumplimiento de las funciones asignadas a los cuerpos locales en casos de falta general de efectivos propios o bien por la necesidad de intervención en cualquiera de las tres ciudades”, señalan.

Al cierre de esta edición, los consistorios no habían obtenido respuesta por parte de la conselleria de Interior.

Los ayuntamientos también se han visto obligados a decretar servicios mínimos municipales y a reducir al máximo la concurrencia de su personal. Por este motivo, y para garantizar el buen funcionamiento de los servicios públicos básicos, se ha priorizado el trabajo telemático y a distancia.

Así mismo, y por primera vez en la historia, han comenzado a celebrarse los plenos municipales de forma telemática, siendo el de Esplugues el primero en realizarse de esta manera.

Además, algunos alcaldes ya han realizado videoconferencias para comunicarse con sus conciudadanos,

como es el caso de Antonio Balmón (Cornellà), que el pasado día 9 de abril analizó con los miembros del Consell d’Infants la situación excepcional que se vive en la ciudad; o de Lluïsa Moret (Sant Boi) y Raquel Sánchez (Gavà), que la semana pasada mantuvieron un encuentro con el empresariado para articular colectivamente mecanismos de reactivación de la economía local.

Las nuevas tecnologías también se han convertido en un buen aliado de los establecimientos comerciales de primera necesidad abiertos al público, como los de Viladecans o Sant Andreu de la Barca, que ofrecen servicios de comandas on line, por teléfono o whatsapp, con el objetivo de evitar la aglomeración de clientes.

Los más pequeños llevan casi un mes y medio sin salir a la calle PEPA ÁLVAREZ

Policía de Sant Boi, velando por el cumplimiento de las restricciones

El alcalde de Cornellà, Antonio Balmón, ha mantenido una videoconferencia con el Consell d’Infants

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Sistema sanitario público tensado HOSPITAL DE BELLVITGE

Profesional sanitaria en el Hospital Universitario de Bellvitge, en L’Hospitalet M. J. ESPINOSA DULCE VALERO El Baix Llobregat contabiliza un total de 4.657 positivos por coronavirus, y hay otros 8.040 casos sospechosos de tener la enfermedad; mientras que en L’Hospitalet la cifra es de 2.014 y 2.755, respectivamente.

Sant Boi es el municipio de la comarca que suma el mayor número de personas contagiadas, con 727 (y otros 942 casos sospechosos). A continuación se encuentran Viladecans (532 confirmados), Cornellà (519), El Prat (451), Gavà (346) y Esplugues (224). En algunas de estas ciudades, los casos por 10.000 habitantes superan los 60.

Por el contrario, las poblaciones que presentan menos incidencia son La Palma de Cervelló (con dos positivos confirmados), Castellví de Rosanes (8), El Papiol (13), Pallejà y Torrelles (16 cada una de ellas), Collbató (19) y Begues (27).

En L’Hospitalet, el ABS con mayor número de personas infectadas por el virus es la del barrio Centre (248), seguidas de las dos del distrito de Santa Eulàlia (223 en la zona norte y 208 en la sur) y Bellvitge (201).

Al cierre de esta edición éstos eran los últimos datos actualizados, a fecha del 22 de abril, en el mapa interactivo que la Generalitat puso en marcha a finales de marzo, y que fue elaborado por la Agencia de Calidad y Evaluaciones Sanitarias.

La aplicación se activó tras la insistencia de los ayuntamientos por tener in-

formación concreta y oficial de la afectación de la pandemia en sus municipios. De hecho, un gran número de alcaldes del territorio, a través de la Associació Catalana de Municipis (ACM), solicitó por carta al Govern de la Generalitat un “protocolo específico y continuado” de comunicación con los consistorios para disponer de datos concretos, diarios y detallados sobre los enfermos y las víctimas del COVID-19. “Necesitamos información para compartir las preocupaciones y las decisiones de futuro. Necesitamos datos para poder hacerlos llegar a nuestra ciudadanía. Necesitamos datos para pedir medidas supramunicipales y para tomar decisiones a nivel local. Y necesitamos datos, sobre todo, para apoyar con conocimiento de causa a los familiares de los contagiados y de las víctimas”, expresaban en la misiva enviada a la consellera de Salud, Alba Vergés.

La ACM recordaba que “la información y la transparencia son un derecho y una obligación para las administraciones públicas en el siglo XXI”. En este sentido, alcaldesas y alcaldes estaban haciendo llegar a la entidad municipalista “la necesidad de saber y conocer en concreción la evolución de sus vecinos y vecinas contagiados, así como las causas de su muerte en caso de que se produzca”.

En otra carta, los alcaldes socialistas del Baix Llobregat pedían al presidente de la Generalitat, Quim Torra, que “se pusiera al frente” de

la situación, a la vez que denunciaban la falta de material, de atención residencial y de interlocución con el departamento competente.

“No podemos continuar con actitud dudosa y poco eficaz”, decían en el escrito.

“Por eso, le proponemos que utilice todos los recursos, también los de los ayuntamientos y que constituya un Comité de Emergencias sin partidismo político dispuesto a trabajar día y noche, para ofrecer soluciones a las miles de voces que claman auxilio en Catalunya y que actualmente no reciben la atención que se merecen”, le recriminaban.

Los hospitales, al borde del colapso Aunque en los últimos días se está observando una cierta disminución de la presión asistencial por el COVID-19, lo cierto es que los principales hospitales de la comarca se han visto desbordados por la situación excepcional de alerta sanitaria.

Desde que se inició la pandemia han sido muchas las críticas por la falta de material y de medidas de seguridad que está padeciendo el personal sanitario, que está sufriendo, ahora más que nunca, las consecuencias de más de una década de recortes presupuestarios en el sistema público de salud.

“Hemos empezado tarde a prevenir, y lo que es más importante, la prueba para diagnosticar si hay contagio no se está haciendo a todos los que entran en el hospital, con lo cual mucho personal sanitario entra en

contacto con el virus”, aseguraba el pasado 20 de marzo en declaraciones a EL FAR la representante de la Junta de Personal del Hospital de Bellvitge por el sindicato CGT, Maribel Ramírez.

“El problema es que con los recortes, muchas plantas del hospital se inhabilitaron en su momento y se convirtieron en despachos”, recordaba, tras añadir que “los recortes han dejado a la sanidad pública pequeña e insuficiente y al personal sanitario nos ha traído una sobrecarga que nos impide mejorar en nuestro trabajo”, apuntaba. Así mismo, reconocía que “en estos momentos tan críticos, no tenemos tiempo ni de leernos los protocolos de actuación ni de hacer estudios”.

Ramírez también criticaba la falta de material para los profesionales sanitarios.

“Las protecciones que tenemos no son las adecuadas.

Nos dan una mascarilla y no a todo el mundo, y usamos batas que se utilizan en quirófano que son reforzadas pero no impermeables.

Vamos a caer como moscas”, presagiaba.

La delegada de la Junta de Personal de CGT y miembro de la plataforma en defensa del Hospital de Viladecans, Eliana López, ha sido una de las profesionales sanitarias afectadas por el coronavirus.

“Es chungo. Tengo un poco de fiebre, estoy decaída, me canso y no tengo ganas de nada, pero cada persona tiene sus síntomas”, afirmaba.

El Hospital de Viladecans, con cinco unidades de hospitalización, se ha dedicado íntegramente a los afectados por el COVID-19, según López. Los casos que se complican a nivel respiratorio se derivan al Hospital de Bellvitge o a otros centros, porque se necesitan camas de UCI. “Aquí no hay, cuando llevamos años pidiéndolas”, aseveraba. Aún así, y según fuentes del propio Hospital de Viladecans, la dotación de camas durante la crisis sanitaria ha aumentado un 30% y se está trabajando para incrementar un 10% más sobre la capacidad actual, si fuera necesario. Además, se ha creado un área de atención a los pacientes más graves, “un espacio donde se les puede dar una atención más adecuada hasta que se trasladan a un hospital de tercer nivel, si se requiere”, explican fuentes oficiales.

Además, también se han reservado espacios para los pacientes que no están infectados por el virus, “donde pueden recibir una atención adecuada y se evita el riesgo de contagio”, señalan. Igualmente, en el área ambulatoria hay consultas donde se da asistencia a las visitas y los tratamientos que no se pueden aplazar. La actividad quirúrgica grave o inaplazable se sigue haciendo en el área específica.

Desde el centro aseguran que “para poder dar una buena respuesta a la situación actual, hasta ahora se han contratado más de 65 profesionales y se ha reorganizado toda la plantilla para poder asumir el incremento de las cargas de trabajo”. Así mismo, destacan que el personal dedicado a la limpieza del centro ha aumentado en un 65%.

Por su parte, el miembro del Comité de Empresa de CCOO del Hospital Moisès Broggi de Sant Joan Despí Juanma Villarroya aseguraba, también el 20 de marzo, que el hospital estaba operativo al cien por cien, con todas las plantas abiertas, la UCI llena (18 camas) y doblando boxes de urgencias. “Estamos al borde del colapso”, confirmaba a esta redacción.

Villarroya es otro de los profesionales sanitarios que hacía alusión a la falta de material. “Nos dicen que reutilicemos nuestras propias mascarillas metiéndolas en unas bolsitas, lo cual es un foco para la propagación del virus”, declaraba.

De hecho, las carencias de herramientas básicas para trabajar frente a una pandemia de este tipo han sido motivo de denuncias por parte de los

sindicatos. “No podemos entender que no se abastezca del material necesario de aislamiento a los trabajadores, ni que éste no sea el recomendado por Salud”, lamentaba a mediados de marzo el presidente del comité de empresa de la Fundación del Hospital Sant Joan de Déu de Martorell, Diego López. “Es responsabilidad de la empresa adquirir este material para que los trabajadores, que tienen el derecho de atender con las medidas de protección adecuadas, no pongan en peligro ni a ellos mismos ni a los usuarios”, remarcaba.

Por su parte, la Federación de Sanidad de CCOO de Catalunya ha interpuesto denuncias ante la Inspección de Trabajo por incumplimiento de la normativa vigente en materia de prevención de riesgos laborales a diferentes centros hospitalarios, como el Hospital de Sant Joan Despí Moisès Broggi, el Benito Menni CASM-Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús en Sant Boi y el Centro de Atención Primaria (CAP) de Olesa de Montserrat.

En un comunicado, CCOO asegura que ha observado carencias de protección “que ponen en riesgo la seguridad y la salud del personal sanitario y no sanitario”.

Según el sindicato, “la falta de equipos de protección individual (EPI) eficaces y la utilización de materiales inseguros ha provocado un alarmante incremento de contagios entre los profesionales sanitarios”.

CCOO, que está recopilando la información a través de cuestionarios a los propios sanitarios, solicita a la Inspec-

Nueva app del Consorci Sanitari Integral

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ción de Trabajo “que actúe de urgencia para que requiera a los centros denunciados poner a disposición de los profesionales mascarillas de alta eficacia tipo FFP2 o FFP3, gafas de protección ocular de montura integral o protector facial completo, guantes y batas impermeables”.

Mientras, el personal del transporte sanitario también ha denunciado ante la Inspección de Trabajo “la falta de utensilios básicos” para desarrollar su labor en unos momentos tan difíciles como los que se están viviendo actualmente. A la vez, muestran su queja ante la “cantidad de errores y omisiones de información en multitud de servicios de posibles coronavirus”, según explican desde la UGT. El sector insiste en que los EPIs se han convertido en material de primera necesidad, “aunque ahora cuesten mucho más dinero de lo que habría supuesto de haberse provisto adecuadamente en el pasado”.

La Diputación compra material sanitario Ante esta situación, y después de realizar un análisis de las necesidades básicas, la Diputación de Barcelona ha efectuado la compra de un gran número de mascarillas y monos de protección, guantes o gafas, entre otros materiales.

Además, el organismo provincial ya ha comenzado a repartir kits de detección rápida del COVID-19, que han sido validados por el Hospital de Bellvitge y el Hospital Sant Joan de Déu de Martorell para garantizar su fiabilidad.

Los tests, que han de ser manipulados por personal sanitario, se han distribuido entre los consistorios de la demarcación para la gestión y prevención de riesgos en los colectivos de trabajadores municipales.

App para hacer seguimiento de los afectados El Consorci Sanitario Integral (CSI) ha desarrollado una aplicación para móviles y tabletas (disponible en versión web app) que permite hacer el seguimiento diario de los pacientes dados de alta.

Telecovid-CSI monitoriza la persona después de recibir el alta en el centro y volver a su domicilio o tras visitar Urgencias. Básicamente, hace cinco preguntas sencillas que miden la evolución del paciente y que dan información valiosa a los profesionales sanitarios para hacer su seguimiento diario.

“El COVID-19 es una nueva enfermedad, donde

todavía hay muchas incertidumbres en el diagnóstico, en la evolución y el tratamiento”, recuerdan desde el CSI. “Esto provoca a los pacientes inseguridad, miedos o dudas, y se encuentran solos durante su aislamiento o confinamiento”, apuntan.

Por otra parte, los profesionales también están ante una enfermedad con poca evidencia científica, donde algunos pacientes, aunque es difícil predecir cuáles, presentan empeoramientos bruscos.

“Gracias a la telemedicina, los enfermos están mejor controlados, se sienten apoderados en su salud y los profesionales sanitarios pueden detectar si empeoran de forma precoz y priorizar las llamadas con más valor. Esto aumenta la satisfacción de todos”, aseguran desde el Consorci.

Detrás de Telecovid-CSI hay un equipo de 25 médicos de diversas especialidades y de sistemas de información (incluso algunos de ellos en confinamiento) que están haciendo llamadas para seguir la evolución de los pacientes.

Inicialmente, un grupo de profesionales apoyaba por teléfono a los enfermos que estaban en el domicilio en dos circunstancias: tras un ingreso hospitalario y tras una alta en Urgencias. “El protocolo marcaba llamar al paciente cada 48 horas durante una semana. Pero la eficiencia del sistema era mejorable.

Por este motivo se diseñó una aplicación móvil que ayudara en la toma de decisiones”, remarcan las mismas fuentes.

Los enfermeros consideran un “error” cerrar los CAP La Associació de Enfermeria Familiar i Comunitària de Catalunnya (AIFiCC) hizo público hace un par de semanas un comunicado asegurando que es “un error” cerrar los centros de atención primaria (CAP) y desplazar a sus profesionales a los hospitales de campaña y hoteles salud. La Generalitat ha cerrado en Catalunya cerca de una cincuentena de centros de atención primaria y 462 consultorios locales desde el inicio de la crisis sanitaria, un 15% y un 75% del total, respectivamente.

Según el comunicado de la AIFiCC, “en los tiempos de pandemia como el que estamos viviendo actualmente, la población más vulnerable es la que tiene más riesgo de enfermar y, al mismo tiempo, es la que está más cerca de los profesionales de atención primaria”. Desde la asociación insisten en que “las enfermeras y médicos de

Crisis sanitaria COVID-19 familia somos los profesionales que mejor conocemos las necesidades, los recursos que hay en la comunidad y cuál es la mejor atención que se puede ofrecer”.

Recuerdan que desde el inicio de la pandemia, los profesionales de la atención primaria han proporcionado “el acompañamiento adecuado” de cada persona atendida según su situación, “manteniendo el seguimiento en aquellos casos leves, dando apoyo a domicilio en aquellas situaciones que se requería, atendiendo en los CAP cuando era necesario y derivando a nivel hospitalario cuando la clínica lo solicitaba”.

La entidad cree que hay muchos pacientes que a priori están destinados a ser trasladados a hospitales de campaña que “pueden perfectamente ser mejor atendidos en su domicilio, con más cuidados, higiene y apoyo del entorno, que en un pabellón deshumanizado y sin los recursos adecuados”.

Desde la AIFiCC consideran que “ahora más que nunca hay que escuchar a los profesionales de primera línea y crear conjuntamente las estrategias para hacer frente a esta pandemia”, ya que el hecho de no hacerlo “puede empeorar gravemente la asistencia que se ofrezca a las personas que más nos necesitan”. Por este motivo, exigen a las autoridades sanitarias que “se repiensen este tipo de decisiones” y que “escuchen a los expertos más cercanos a las personas que viven en la comunidad”.

Estas críticas vienen provocadas por la decisión de la Generalitat de concentrar los servicios de atención primaria para, según la propia conselleria de Salud, “facilitar el trabajo de los profesionales y garantizar el servicio a la ciudadanía”. En el Baix Llobregat y L’Hospitalet, esta reestructuración ha afectado a los diferentes sectores sanitarios y ha comportado el cierre temporal de ambulatorios como, por ejemplo, los de Can Serra, Gornal y Sanfeliu, en L’Hospitalet; o los de Almeda y Fontsanta, en Cornellà (en el caso de los municipios con más población); así como otros de localidades más pequeñas como Torrelles, Sant Climent, Cervelló, La Palma y El Papiol.

Además, también se han clausurado consultorios locales como los de Collbató y de Castellví de Rosanes. EL FAR ha solicitado a la Generalitat la cifra total de equipamientos sanitarios afectados por esta reestructuración, pero al cierre de esta edición aún no había obtenido respuesta.

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Ensayos clínicos y estudios de investigación sobre el COVID-19 ICO

El Institut Català d’Oncologia (ICO) ha puesto en marcha tres ensayos clínicos sobre el COVID-19 orientados tanto a sus pacientes hemato-oncológicos, en tratamiento activo o en seguimiento, como a los profesionales que los atienden. “Esta nueva pandemia representa un desafío médico y de salud pública, que puede llegar a afectar a un 20% de la población.

Aunque se espera que más del 80% de las personas infectadas sean asintomáticas, el resto de los pacientes presentarán síntomas respiratorios, con un impacto potencial de hasta un 10% de la mortalidad entre los afectados”, explican fuentes del ICO. En este contexto, se han puesto en marcha tres ensayos clínicos. Uno de ellos es el BarCOVID19, mediante el que explorarán la eficacia del baricitinib en el tratamiento de sus pacientes con cáncer y coronavirus que desarrollen neumonía.

“Este medicamento tiene dos mecanismos de acción interesantes, antiinflamatorio e inhibidor de la incorporación del virus en el alvéolo”, señalan.

Por otra parte, a través del ensayo Oncovid estudiarán la eficacia de la hidroxicloroquina, otro antiinflamatorio que in vitro disminuye la carga viral de los infectados. “En el ensayo compararemos los resultados de pacientes con cáncer con profesionales asistenciales que se hayan infectado por COVID-19, todos ellos con síntomas leves-moderados, es decir, sin neumonía”, dicen los investigadores.

Finalmente, con el ensayo PrevenCov en profesionales se estudiará la eficacia de la hidroxicloroquina para prevenir la infección por el coronavirus en trabajadores asistenciales y no asistenciales de sus hospitales mediante un diseño aleatorizado y controlado con placebo. “En ausencia de vacuna, pensamos que este tipo de prevención primaria puede ser una estrate-

gia eficiente para prevenir la infección”, apuntan desde el ICO. Sant Joan de Déu investiga la baja incidencia del virus en los niños El Hospital Sant Joan de Déu de Esplugues ha lanzado la la plataforma KIDS CORONA con el objetivo de impulsar estudios de investigación que permitan averiguar por qué los niños están más protegidos frente al coronavirus que el resto de la población.

El objetivo final es descubrir cuáles son los factores que los protegen y encontrar un tratamiento que permita extender a la población adulta la protección natural que tienen los niños ante el COVID-19. Los investigadores creen que los pequeños son la clave para vencer esta pandemia.

“El coronavirus SARS-CoV-2, que estos días está causando miles de muertes en el mundo, está teniendo, sorprendentemente, una incidencia especialmente baja en la población infantil, aunque es tradicionalmente uno de los colectivos con más riesgo de sufrir graves enfermedades respiratorias”, aseguran desde el centro sanitario. En China, por ejemplo, solo el 2% de los enfermos eran menores, un porcentaje incluso menor en España, donde solo el 1% de los casos contabilizados tienen entre 0 y 19 años.

En estos momentos se desconoce el papel que juega la población infantil en la transmisión de la enfermedad. Los estudios de investigación que se llevarán a cabo en Sant Joan de Déu pretenden aclarar este aspecto y dar respuesta a preguntas que en la actualidad preocupan a la sociedad: por qué parece que los niños no se infectan, por qué algunos de los que sí que enferman presentan sintomatología leve y otros más grave y cómo afecta la COVID19 en las embarazadas y en el feto.

HOSPITAL SANT JOAN DE DÉU

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Polideportivos y hoteles se transforman en hospitales DEPARTAMENT DE SALUT

M. J. ESPINOSA Los ayuntamientos del Baix Llobregat también han liderado iniciativas encaminadas a mejorar la atención asistencial a los enfermos, así como facilitar el descanso de los profesionales que acaban exhaustos tras intensas jornadas laborales. En este sena puesto han tido, disposición de los centros sanitarios equipamientos deportivos, que se han convertido en hospitales de campaña para acoger a los pacientes más leves, o bien hoteles con este mismo fin o al servicio de los facultativos.

En L’Hospitalet, el hospital del recinto ferial ya está listo para entrar en servicio si es necesario. Las nuevas instalaciones, que se han habilitado en el pabellón 4 y que inicialmente tienen capacidad para 300 pacientes (aunque podrían acoger 700 más de forma rápida) dará servicio a todo el área metropolitana. “Contar con este recurso puede permitir afrontar un posible repunte de casos de COVID-19 una vez acabado el confinamiento, y ayudará a los hospitales del territorio a volver antes a su actividad asistencial normal”, aseguran desde el departamento de Salud de la Generalitat. Su gestión operativa irá a cargo del Hospital Universitario de Bellvitge.

La previsión es que los pacientes que acojan estas instalaciones ya hayan superado la fase aguda de la enfermedad, estén estables y tengan un pronóstico de

El Hotel Fira Salut, habilitado en el recinto ferial de L’Hospitalet, cuenta con 300 camas evolución favorable. De esta manera, el Hospital Fira Salut no atenderá enfermos críticos ni semi críticos, que continuarán ingresados en los hospitales de referencia.

En él trabajarán profesionales de diferentes categorías (auxiliares, celadores, enfermeros y médicos), organizados en turnos de trabajo en función de las necesidades de cada momento. El hospital está concebido con módulos de seis camas, con separaciones entre ellos para preservar la intimidad de los pacientes, y equipados cada uno con oxígeno y pulsadores de alarma centralizados. El centro también dispone de imagen radiológica y servicio de analíticas.

El hotel Renaissance Barcelona Fira de L’Hospitalet también se ha incorporado como nuevo recurso asistencial, ofreciendo un espacio de aislamiento temporal para

poder atender las necesidades de personas afectadas por la crisis del COVID-19.

La entrada en funcionamiento de este hotel salud, impulsada desde el Servei Català de la Salut), sirve para para reforzar la capacidad asistencial de la atención primaria, de los hospitales de Bellvitge y de Viladecans, del Hospital General de L’Hospitalet y del Institut Català d’Oncologia.

El equipamiento hotelero actúa como un dispositivo de atención primaria, atendido por profesionales sanitarios del Institut Català de la Salut (ICS), y apoya a los pacientes como si fueran cuidados en sus domicilios. El dispositivo favorece garantizar el aislamiento y hacer el seguimiento de la sintomatología.

La estancia media prevista será de 14 días, desde el inicio de la patología y dependiendo de criterios clínicos.

En este ámbito territorial ya se dispone de tres hoteles para el descanso de los profesionales, que son el Hotel SB Plaza Europa, en L’Hospitalet; el Hotel SB BCN Events, en Castelldefels; y el Novotel, en Sant Joan Despí.

En este último municipio, a finales de marzo también comenzaron los trabajos de adecuación del polideportivo municipal Francesc Calvet como hospital de campaña, que podrá tener hasta un centenar de camas para atender a pacientes leves derivados del hospital Moisès Broggi.

Personal municipal ha colaborado en las tareas de habilitación de este espacio, de forma coordinada con el hospital de Sant Joan Despí, que ha supervisado que se cumplan las medidas de seguridad y distancia entre camas. El hospital de campaña ya está preparando para entrar en servicio cuando sea necesario.

Por otro lado, el Servei Català de Salut ha habilitado como hotel salud el Hesperia Suites, también en Sant Joan Despí. Con capacidad para 120 camas, este espacio garantiza el aislamiento y control a personas a las que se les ha tenido en cuenta un criterio social (sin apoyo familiar o que no pueden aislarse en casa por convivir con personas que tienen patologías de riesgo); o bien, pacientes con infecciones respiratorias calificadas como altas precoces derivadas del Moisès Broggi.

Mientras, en la zona norte de la comarca ya está listo el hospital de campaña levantado en el centro psiquiátrico Sagrat Cor de Martorell, que cuenta con una veintena de camas. Así mismo, también se ha acondicionado el Hotel Ciutat de Martorell, donde se han monotorizado unas 90 habitaciones para poder derivar pacientes del Hospital Sant Joan de Déu.

En el ámbito territorial del Baix Llobregat Nord también hay dos establecimientos hoteleros para el descanso del personal: el Hotel Restaurant Manel, en Martorell; y el Hotel Les Torres, en Sant Esteve Sesrovires.

Por último, en Sant Boi, el Hotel El Castell es otro de los que aloja a personal sanitario, la mayoría trabajadores del Hospital Sant Joan de Déu.

Castelldefels, Cervelló y Vallirana ofrecen espacios Desde el inicio de la emergencia sanitaria, el Ayuntamiento de Castellde-

fels se ha puesto a disposición del departamento de Salud de la Generalitat para colaborar en habilitar espacios y equipamientos para hacerle frente, teniendo en cuenta que Castelldefels, como municipio turístico, dispone de una buena red de hoteles.

En el marco de esta oferta de colaboración, el consistorio ha elaborado a lo largo de las últimas semanas diferentes proyectos con la voluntad de que encajaran en los planes de la Generalitat. Finalmente, “la disposición municipal y las necesidades de la conselleria han cristalizado en la posibilidad de habilitar un hotel medicalizado en la ciudad, un proyecto que cuenta con el apoyo de todos los grupos municipales”, aseguran desde el consistorio.

También, en una carta dirigida al gerente del Ámbito Metropolitano Sur de la Región Sanitaria de Barcelona, el alcalde de Cervelló, José Ignacio Aparicio, y la alcaldesa de Vallirana, Eva Martínez, han ofrecido de forma conjunta diversos equipamientos públicos para “poder contribuir en todo lo que sea necesario, y esté en nuestras manos, en la atención de la crisis del COVID-19”.

En el caso de Cervelló se ha ofrecido la pista polideportiva del Pabellón Xavier Ballber, con 1.500 metros cuadrados, por si se considera oportuno montar un hospital de campaña o cualquier otra necesidad relacionada con esta crisis sanitaria. Mientras, en Vallirana están disponibles el CEM y el gimnasio del CEIP Olivera.

La Generalitat mantiene cerrado el hospital de campaña de Sant Andreu de la Barca El Juzgado de Primera Instancia número 5 de Martorell ha abierto una investigación para aclarar por qué el Govern no quiere abrir el hospital de campaña de Sant Andreu de la Barca. La apertura de diligencias es consecuencia de la denuncia presentada el pasado 8 de marzo por un particular, y a la que se ha sumado la Fiscalía, contra el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y la consellera de Salud, Alba Vergés, por la comisión de un presunto delito de homicidio por imprudencia grave. El denunciante considera que Salud ha denegado “injustificadamente” el permiso de apertura

del hospital porque fue montado por la Guardia Civil y justifica sus argumentos en base a noticias de un medio digital y una cuenta de Twitter.

El hospital de campaña fue levantado en el polideportivo municipal en tiempo récord, con la colaboración de efectivos de la Comandancia de la Guardia Civil, el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) y la ONG Médicos sin Fronteras. Desde el pasado 26 de marzo, este hospital de campaña está listo para acoger a un total de 140 pacientes. Pero la Generalitat no ha dado todavía su autorización y no hay fecha para que lo haga.

Desde el consistorio recuerdan el colapso que sufre el Hospital de Martorell, que es el centro de referencia para la población, e insisten en la necesidad de poner en marcha tanto este equipamiento como el Hotel Bristol, que con 47 camas también está dotado de todo el material sanitario y personal para atender a los afectados.

El Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca ha querido dejar patente que “por encima de las posibles diferencias entre administraciones y organismos debe prevalecer el bienestar de la ciudadanía”. Por este motivo, reitera a la conselleria de Salud la dispo-

sición de ambas instalaciones, así como la voluntad de hacerse cargo, con el apoyo de la Diputación, de los gastos económicos que se deriven de su entrada en funcionamiento.

Por su parte, la consellera de Salud recrimina al consistorio haber montado el hospital sin la aprobación del Govern. “Dijimos que poníamos en marcha equipamientos consensuados con el mundo local”, recuerda Vergés.

Según la consellera, el hospital de campaña levantado con la ayuda de la Guardia Civil en Sant Andreu de la Barca “no cumple con las necesidades que tiene el sistema de salud del municipio”.

AYUNTAMIENTO DE SANT ANDREU

La Guardia Civil, montando el hospital

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Situación dramática en las residencias de la tercera edad INSTITUT CATALÀ DE LA SALUT

M. J. ESPINOSA Sin lugar a dudas, las residencias de personas mayores están siendo las grandes damnificadas por la crisis sanitaria del COVID19. Muchas de ellas están viviendo momentos dramáticos, ya que un gran número de ancianos han perdido la vida, desgraciadamente, a causa del coronavirus.

Una de las situaciones más críticas en la comarca se ha vivido en la residencia Santa Oliva de Olesa de Montserrat, donde han fallecido 16 de los internos que habían sido ingresados en el Hospital de Martorell, mientras que dentro del centro se han producido ocho fallecidos más, si bien en ninguna de estas últimas muertes se ha podido probar que sea debido al COVID-19, al no haberse realizado los test.

La Fiscalía ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de todas estas muertes. Ha sido el fiscal superior de Catalunya, Francisco Bañeres, quien ha ordenado la apertura de diligencias y ha hecho llegar la orden a los fiscales de los juzgados de Martorell.

En Olesa de Montserrat también hay que lamentar la muerte de otros cuatro abuelos de la residencia Sant Agustí a causa del coronavirus, y de tres internos más por otras patologías.

La residencia Nuestra Señora de Lourdes de Sant Just Desvern es otra de las muchas que está sufriendo duramente los efectos del COVID-19. El Ayuntamiento se vio obligado a enviar un “escrito de urgencia” al departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia de la Generalitat para alertar de la situación crítica de la residencia, donde desde el pasado 15 de marzo han fallecido 16 internos, aunque únicamente la mitad son casos confirmados de coronavirus. “Pese a la dedicación y atención de las monjas, la dirección necesita ayuda para hacer frente a esta situación”, remarcaban fuentes municipales en el escrito. Días después, el Govern asumía de forma temporal la dirección del centro.

Las pruebas PCR de COVID-19 en los geriátricos comenzaron a realizarse la semana pasada Por su parte, Vitalia (otra de las residencias de Sant Just Desvern) también suma la friolera de 20 defunciones.

Mientras, en la residencia Can Serra de Sant Esteve Sesrovires han perdido la vida una treintena de ancianos, de los cuales cinco eran casos positivos confirmados. La persona más joven tenía 68 años y la de más edad 100 años.

En el caso de Castellví de Rosanes, el virus se ha llevado por delante la vida de cuatro abuelos de la residencia Palau de Can Sunyer; y en Abrera, otros ocho internos de la residencia Canigó han fallecido por las mismas causas.

A todas estas defunciones, hay que añadir la dificultad de muchas residencias por las bajas laborales que han tenido que sufrir estos días. La gran mayoría de ellas han lanzado un llamamiento para incorporar nuevos trabajadores.

Los consistorios se han ido haciendo eco de estas peticiones y han elaborado bolsas profesionales para hacer frente a la carencia de recursos humanos.

Otro de los graves problemas añadidos es la falta de material de protección.

Desde CCOO denuncian que muchos centros geriátricos de la comarca no han contado en esta crisis, y muchos aún siguen así, con las medidas de protección adecuadas, “provocando un elevado riesgo de transmisión entre profesionales, residentes y en las propias familias de los trabajadores”.

Los propios centros han denunciado, por activa y por pasiva, que no han tenido las herramientas necesarias para proteger ni a los ancianos ni a los trabajadores que los atienden: ni equipos de protección, ni test de detección de la enfermedad ni, como señalan desde la UGT, “instrucciones coherentes ante resi-

dentes con sintomatología, ni órdenes ni consignas claras por parte del sector”.

Desde el sindicato remarcan que “cada residencia ha sobrevivido al choque con los medios que han podido conseguir de forma individual, haciendo su propia normativa o elaborando su propio material de seguridad, sin que en ningún caso haya habido una respuesta coordinada y grupal”, por lo que los trabajadores de los centros “se han encontrado abandonados a su destino”.

La UGT reclama que cuando todo esto pase “se haga una reflexión sobre el sistema de atención sanitaria a las personas mayores residentes que queremos, porque se ha demostrado que han fallado y que, a pesar de estar bien dotadas económicamente, no están conectadas entre ellas ni bien gestionadas”.

Así mismo, pide que se abra el debate “sobre un sis-

tema donde sobre el papel se cumplían todas las ratios de personal necesario, pero que la realidad del día a día es que faltaba personal”.

Desde CCOO, además, aseguran que también se incumplen las medidas de prevención e higiene en relación a la ropa de trabajo de los profesionales, “obligándoles a llevarla a casa a lavar, incrementando así el riesgo de transmisión”.

El sindicato constata que este sector, uno de los grandes factores de propagación de la pandemia en nuestro país, “necesita un cambio de modelo en profundidad”, y denuncia “la situación de abandono de las personas residentes por parte de la Generalitat”.

Conscientes de la dramática situación que se vive en las residencias de la tercera edad, los ayuntamientos -pese a no tener competencias- han proporcionado material como gel antiséptico, guantes, viseras, mascarillas y equipos de protección individual (EPI) a los centros. Y todo ello gracias a las donaciones de empresas y particulares, y a la inestimable colaboración de los voluntarios.

SOS del mundo local En una carta, la presidenta de la Diputación de Barcelona, Núria Marín, le ha manifestado al presidente de la Generalitat de Catalunya, Quim Torra, que le “preocupan aspectos de la gestión de esta emergencia por parte de la Generalitat que no funcionan de forma apropiada”. Según Marín, “lo más inquietante es, sin duda, la grave situación de

LA UME se vuelca en la desinfección de los centros Ante el número tan elevado de fallecidos en las residencias, se han llevado a cabo desinfecciones semanales en los diferentes centros y, como complemento a estos trabajos, la Unidad Militar de Emergencias (UME) ha realizado procesos intensivos de descontaminación, a petición de los ayuntamientos y de las propias direcciones de los geriá-

tricos, con el visto bueno del departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias.

Olesa de Montserrat, Sant Joan Despí, Esplugues, Sant Boi, Sant Esteve Sesrovires, Sant Feliu, Viladecans, Cornellà, Cervelló o El Prat son algunos de los municipios de la comarca en los que la UME ha acudido para desinfectar en profundidad las residencias.

Efectivos de la UME, en la residencia Los Sauces de Sant Boi

las residencias de ancianos”, el colectivo más vulnerable y golpeado por esta crisis sanitaria.

“Nunca he visto ni una estrategia ni una autoridad definidas”, le ha reprochado Marín al jefe del ejecutivo catalán. “En esta cuestión se ha llegado tarde y mal, lo que está provocando una gran angustia en los internos, en las familias y en los profesionales”, dice el escrito. Además, Marín ha asegurado que hay otras cuestiones de la gestión que le han generado igualmente dudas, pero ha manifestado que “ahora toca trabajar para superar la emergencia, aprender de los errores y dejar para más adelante el análisis y la crítica”.

En la misma línea, el Ayuntamiento de El Prat ha reclamado a la Generalitat “un plan de actuación urgente que garantice una atención de calidad tanto en las residencias públicas y privadas de la ciudad como en los servicios de atención domiciliaria”. El consistorio pratense, que hace un seguimiento permanente de estos servicios, constata que los recursos humanos y materiales asignados hasta ahora por el departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias “no son suficientes” y, ante ello, solicita “poner en marcha de forma inmediata un plan integral de actuación”.

Por su parte, el alcalde de Viladecans, Carles Ruiz, ha pedido a la Generalitat que asegure “el cumplimiento de todos los protocolos de seguridad tanto para los trabajadores y trabajadoras como para los residentes” del Centro Social y Sanitario Frederica Montseny, gestionado por el Consorci de Salut i Social de Catalunya, y donde han fallecido 27 personas desde el inicio de la pandemia.

Ruiz cree necesario garantizar “el refuerzo de personal especializado y todo el material necesario”.

El alcalde hacía este ruego en una carta dirigida a la consellera de Salud, Alba Vergés, y al conseller de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, Chakir El Homrani, dado que, durante estos días, se están trasladando pacientes de otras residencias a este centro público de referencia.

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Imágenes para la historia

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Vecinos de Gavà, puntuales a la cita de los aplausos a las 20 horas

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Una farmacia informa de la falta de material

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El ejército llega al aeropuerto de El Prat para desinfectarlo

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Paseo Marítimo de Castelldefels vacío en plena Semana Santa

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Imagen aérea de Sant Joan Despí, con la B-23 sin tráfico

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Reconocimiento conjunto a los sanitarios del Hospital de Sant Joan Despí Moisès Broggi

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Trabajos de limpieza intensiva en Castelldefels

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Control policial en Viladecans

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Niñas de El Prat, en casa durante el confinamiento

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Zona infantil de Gavà cerrada al público

Reparto de mascarillas en el transporte público de L’H

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Voluntaria de Esplugues elaborando mascarillas

Comercio sin productos tras decretarse el Estado de Alarma

Ciudadano de Castelldefels haciendo deporte en el balcón de su vivienda

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Planes de choque económicos SEAT

M. J. ESPINOSA La crisis sanitaria del COVID-19 ha puesto freno al mercado laboral y a la economía de nuestro territorio. Los datos de marzo así lo corroboran. A finales del mes pasado, el desempleo registrado en el Baix Llobregat era de 42.501 personas, aumentando respecto al mes anterior en 2.875, lo que significa un incremento del 7,3%.

El mes de abril augura un peor escenario teniendo en cuenta el gran número de expedientes de regulación temporales de empleo (ERTE) que se han presentado. Según el departamento de Trabajo de la Generalitat, la cifra de ERTEs en el Baix Llobregat (a fecha del 21 de abril) supera los 8.700, afectando a cerca de 91.800 trabajadores de todos los sectores de actividad.

El industrial ha estado marcado por la paralización de las compañías automovilísticas Seat y Nissan, lo que ha comportado que muchas empresas auxiliares de la automoción hayan tenido que cesar o disminuir de forma drástica su actividad. Éste es el caso de la multinacional francesa Faurecia, que ha presentado un ERTE para los trabajadores de su factoría en Abrera.

Desde CCOO señalan que la situación actual también está cobrando una importante factura a empresas de los sectores de bienes de equipo, eléctricas, de estampación, química, agropecuario, frío industrial, montaje, vidrio, bienes de consumo, textil o alimentación. En estos dos últimos sectores destacan los ERTEs presentados por la marca de ropa Desigual (que afecta no solo

El sector industrial ha estado marcado por el parón de Seat y Nissan a los empleados de las tiendas, sino a los perfiles de oficinas y de los centros logísticos de Gavà y Viladecans); y el de la cervecera Damm, que también ha presentado un expediente para los trabajadores de la planta de El Prat ante la caída en el volumen de ventas. Por otra parte, Àuriafil (Fundación Privada por la Inclusión Laboral Àuria) de Esparreguera también se ha visto obligada a tomar esta medida ante la imposibilidad de mantener la actividad laboral. En este caso, el expediente afecta a 148 empleados de los 174 que ocupa regularmente en su centro de trabajo en el Baix Nord.

Según un estudio realizado por la Asociación de Empresarios de L’Hospitalet y el Baix Llobregat (Aeball), más del 38% de las empresas del territorio se han visto obligadas a cesar totalmente su actividad debido a las limitaciones de movilidad de los trabajadores y alrededor del 48% de las compañías

han tenido que presentar ERTEs. Los ayuntamientos, en primera línea Ante esta crisis económica sin precedentes, los ayuntamientos de la comarca no han dudado en poner en marcha planes de choque urgentes, que engloban paquetes de medidas económicas para paliar, en la medida de lo posible, los efectos de la situación provocada por el coronavirus.

Incluso algunos consistorios como, por ejemplo, Cornellà, Sant Boi o El Prat, han creado fondos de contingencia para hacer frente a todas las ayudas que se están adoptando para atender las necesidades básicas. Desde las administraciones locales recuerdan que son medidas que se suman a las anunciadas por la Generalitat de Catalunya y el Gobierno del Estado.

Muchas de las medidas fiscales que se han tomado

estos días contemplan la suspensión o el reajuste del cobro de cuotas de diferentes servicios ante el cierre temporal de instalaciones o actividades municipales, como las guarderías, los polideportivos, equipamientos culturales, bares y restaurantes de concesión municipal, centros de ocio o las escuelas de música.

Por otra parte, también se han aplazado el pago de

impuestos como el IBI, el de vehículos o el de recogida de basura y alcantarillado; y se ha acordado en muchos casos la suspensión del pago de las tasas de los mercados municipales, mercados ambulantes, quioscos y huertos familiares urbanos.

Además, las liquidaciones tramitadas y pendientes de pago han quedado, en muchos municipios, suspendidas, como las que tienen que ver con el Impuesto sobre Construcciones o las terrazas de los servicios de restauración, que se ajustarán al tiempo real de ocupación. A su vez, se ha establecido la suspensión del pago por estacionamiento en las zonas azules y verdes o la tramitación de multas mientras dure el Estado de Alarma.

Cornellà también ha decidido aplazar la emisión de los recibos de alquiler de los meses de abril y mayo de los contratos vigentes de viviendas, aparcamientos y trasteros de titularidad municipal y gestionados por la empresa municipal PROCORNELLÀ. Esta medida afecta a un total de 163 pisos de alquiler de ocho promociones y a 1.097 pla-

zas de aparcamiento y trasteros. Así mismo, la medida también se aplica al alquiler de espacios para las 159 compañías alojadas en los viveros de empresas y a los contratos de alquiler de locales comerciales gestionados por la empresa municipal.

El objetivo de todas estas medidas no es otro que aliviar, en todo lo que sea posible, la situación que viven muchos ciudadanos y empresas, que con motivo de la declaración del Estado de Alarma han visto reducir drásticamente sus ingresos.

Los consistorios, además, han elaborado planes de agilización de pagos a los proveedores, que básicamente son autónomos, comercios o pequeñas y medianas empresas, a fin de garantizar su liquidez y que puedan continuar con su actividad una vez pasen las medidas preventivas para evitar el contagio del COVID-19.

En el caso de Sant Boi, el fondo de ayudas local para las pequeñas empresas del municipio y personas autónomas se nutrirá del ahorro energético generado, entre otros factores, por el cierre de equipamientos municipaCRISTINA DIESTRO

Establecimiento de Castelldefels anunciando el cierre temporal

La Diputación avanza 50 millones de euros a los ayuntamientos La Diputación de Barcelona ha avanzado 50 millones de euros a los ayuntamientos de la provincia para hacer frente a la situación a la que se ven abocados los consistorios, a raíz de la suspensión hasta nuevo aviso del cobro de los tributos.

Dada la situación excepcional de crisis sanitaria, el Organismo de Gestión Tributaria de la Diputación mantiene parada la recaudación ejecutiva y, por tanto, no dicta providencias de apremio, diligencias de embargo ni otras actuaciones del procedimiento ejecutivo respecto de los tributos correspondientes a los ayuntamientos que tienen delegada la recaudación.

Por otra parte, el organismo metropolitano también ha aprobado una nueva línea de ayudas económicas destinada a los ayuntamientos, para hacer frente a gastos extraordinarios para atender emergencias relacionadas con la pandemia.

“Esta nueva línea de ayudas surge, también, ante la necesidad de ofrecer atención continuada a las personas mayores que viven en zonas donde el virus se está desarrollando con una especial virulencia, así como al conjunto de familias de la provincia, en especial las más vulnerables o con riesgo de exclusión, y a las personas que se encuentran

sin hogar”, explican fuentes del organismo provincial.

Aunque la Diputación de Barcelona se hará cargo de gastos extraordinarios que, en el ámbito de la atención a las personas, los gobiernos locales tengan que asumir como consecuencia de la situación de emergencia, algunas de las acciones susceptibles de financiación son las ocasionadas por ampliar el número de horas del servicio de Atención Domiciliaria (SAD) a las personas mayores en situación de vulnerabilidad que ya son usuarias del servicio.

Además, el apoyo a los ayuntamientos también es extensible a la hora de aten-

der a todas las personas mayores o con discapacidad usuarias de centros de día, para cubrir la actual situación de cierre de estos centros, para que puedan utilizar el SAD o se les pueda ofrecer un servicio de comidas a domicilio.

Finalmente, se están promoviendo las ayudas económicas a familias con niños, la oferta de plazas residenciales a las personas sin hogar en equipamientos temporales de urgencia, y se está haciendo frente a aquellos gastos ocasionados por la situación de emergencia de los servicios de información y atención a las mujeres en casos de violencia machista.

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les y la suspensión de actividades culturales y actos de ciudad, como la Fiesta Mayor, prevista para mayo, que ha sido cancelada.

Gavà, por su parte, ha anunciado que una vez finalizado el confinamiento de la población, realizará una campaña de reactivación del comercio y la restauración local. “La iniciativa tendrá como objetivo poner en valor el papel del tejido comercial como elemento vertebrador y de calidad de vida para la ciudad, la promoción del consumo de proximidad, el circuito corto de alimentación y la calidad y diversidad de la restauración local”, señalan fuentes municipales.

El AMB activa ayudas a pymes y autónomos El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) ha coordinado con las compañías suministradoras de agua que operan en los 36 municipios metropolitanos la puesta en marcha de una serie de ayudas económicas para poder hacer frente a los recibos de agua y a la tasa metropolitana de trata-

promoverá los cambios necesarios en la regulación para permitir el aplazamiento de la liquidación del canon del agua sin intereses mientras dure el Estado de Alarma. De hecho, el Govern de la Generalitat ha aprobado la propuesta del ACA de reducir en un 50% el canon del agua, tanto para el uso doméstico como industrial, durante los meses de abril y mayo.

Así mismo, el AMB -a través del IMPSOL- ha acordado establecer una moratoria para el cobro de los alquileres de pisos y locales, también en abril y mayo. Esta decisión se ha comunicado a través de una carta a todos los inquilinos de los pisos y locales que el IMPSOL tiene en la metrópolis de Barcelona.

Desde el organismo supramunicipal aseguran que “en caso de que la situación excepcional de paralización de las actividades derivada del COVID-19 se alargue, se considerará hacer una prórroga de la moratoria”.

Además, afirman que “cuando se supere la actual situación, se atenderán los

El IMPSOL ha acordado establecer una moratoria para el cobro de los alquileres de pisos y locales durante abril y mayo miento de residuos (TMTR), dirigidas tanto a las pequeñas y medianas empresas como a los trabajadores autónomos.

Se prevén dos líneas de actuación: la congelación de las facturas emitidas por la compañía de agua durante la vigencia del Estado de Alarma (así, durante este tiempo, los beneficiarios estarán exentos del pago de los recibos y las tasas); y el establecimiento de un plan personalizado de financiación de dichas facturas, sin intereses, una vez finalice esta situación excepcional y hasta un máximo de seis meses. Para el otorgamiento de la ayuda, los interesados deben ponerse en contacto con la compañía suministradora de agua de su municipio a través de los canales de los que disponga.

Para minimizar el impacto de estas ayudas especiales sobre las tesorerías de las compañías suministradoras, se han diseñado diferentes medidas. Una de ellas es que el AMB aplaza el cobro de la tasa metropolitana de tratamiento de residuos (TMTR) a los beneficiarios de estas ayudas. Y una segunda es que la Agència Catalana de l’Aigua (ACA)

casos de las familias más vulnerables para las que sea imposible pagar total o parcialmente el alquiler, para que nadie se quede privado de su vivienda”.

El organismo metropolitano también ha decidido aplazar el régimen sancionador de la Zona de Bajas Emisiones Rondes BCN que estaba previsto para el 1 de abril. Una vez finalizado el Estado de Alarma, el AMB -conjuntamente con los ayuntamientos implicados (Barcelona, Cornellà, Esplugues, L’Hospitalet y Sant Adrià del Besòs)- determinará una nueva fecha de entrada en vigor de las multas.

Para dar a conocer todas estas decisiones, el Área de Desarrollo Social y Económico del AMB ha creado un nuevo recurso web donde se recogen más de 350 medidas socioeconómicas destinadas a empresas, emprendedores y ciudadanía en general para hacer frente a las consecuencias del COVID-19 (https://agenciaeconomica. amb.cat/serveis-per-empreses/covid-19).

En esta misma línea, algunos consistorios -como Esplugues, Sant Boi o Sant Vicenç dels Horts- han

abierto nuevos recursos online, donde se puede conocer de manera detallada las medidas económicas y fiscales que se han puesto en marcha. En estos dispositivos también se ofrece asesoramiento laboral, se resuelven dudas o se ayuda a realizar los trámites de la prestación de desempleo.

Pimec refuerza sus servicios Por su parte, Pimec también ha reforzado sus servicios para atender y dar apoyo permanente a las pequeñas y medianas empresas y autónomos que lo necesiten. En este sentido, tienen habili-

tado un teléfono (93 496 45 00), que está operativo de 8 a 20 horas durante los siete días de la semana. La patronal también ha creado un espacio web a través del cual los empresarios pueden consultar las diferentes novedades que afectan a su ámbito, visualizar videos con consejos prácticos para estos momentos de crisis o dejar sus preguntas y dudas.

Así mismo, también ha fortalecido sus departamentos jurídico, laboral y de financiación, teniendo en cuenta el aluvión de consultas de empresas que se están viendo obligadas a tramitar expedientes de regulación temporales de empleo.

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AYUNTAMIENTO DE EL PRAT

Los consistorios facilitan los pagos a las empresas proveedoras

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La atención a los colectivos más vulnerables, máxima prioridad DIPUTACIÓN DE BARCELONA

‘Contra la violencia machista, que no nos detenga el confinamiento’

Las diferentes administraciones realizan seguimiento telefónico a las personas mayores M. J. ESPINOSA La situación ocasionada por la crisis sanitaria actual afecta principalmente a los colectivos más vulnerables, como la gente mayor y las personas dependientes o con discapacidad. Por este motivo, la principal prioridad de los ayuntamientos, tras la declaración del Estado de Alarma, ha sido atenderles y darles todo el apoyo necesario para garantizar su bienestar y que puedan hacer frente a la pandemia.

Todos los consistorios han establecido servicios de atención y de seguimiento

telefónico a las personas mayores de sus municipios para conocer el estado de salud y de ánimo, saber si están bien atendidas, si disponen de una red familiar o vecinal que les ayude o si necesitan cualquier servicio que pueda ofrecer la administración local. La comunicación se está haciendo tanto a las personas que ya tenían expedientes en los Servicios Sociales municipales como a las que no constan como destinatarias, pero que pueden tener dificultades durante el confinamiento. Con estos contactos también se les intenta tranquilizar y se

les orienta en las medidas de prevención, seguridad e higiene.

Para dar una respuesta individual y adecuada a cada uno de los casos, muchos municipios han puesto en marcha teléfonos de emergencia que funcionan las 24 horas del día; y se han reforzado los Servicios de Atención Domiciliaria (SAD), así como el de teleasistencia.

En caso de detectar necesidades de salud, se derivan a los profesionales correspondientes y si lo que requieren es ayuda para hacer la compra de alimentos o medicamentos, así

La Diputación de Barcelona ha diseñado la campaña Contra la violencia machista, que no nos detenga el confinamiento y ha puesto a disposición de los entes locales materiales de difusión, donde están los teléfonos de atención contra la violencia machista, con el objetivo de interpelar directamente a la ciudadanía para hacerla partícipe y corresponsable a la hora de denunciar cualquier caso del que tenga conocimiento.

Estos materiales se han diseñado con la idea de su difusión por las redes sociales y también para ser distribuidos en los comercios de primera necesidad como son las farmacias, tiendas de alimentación, panaderías o supermercados. En definitiva, espacios donde las posibles víctimas de violencia pueden ir solas y pedir ayuda.

“El confinamiento obligatorio que ha derivado del Estado de Alarma ha trastornado la vida de la población de manera general y de manera específica de las mucomo tirar la basura, se les da respuesta principalmente a través de las bolsas de voluntarios que se han creado a nivel local. De esta manera se evita que los ancianos, el principal colectivo de riesgo de la pandemia, salgan a la calle.

Por otro lado, se han distribuido a domicilio, evitando el desplazamiento de

jeres”, remarcan desde el organismo provincial. “Uno de los impactos de género que está teniendo es que muchas mujeres, y sus hijos e hijas, están obligadas a convivir con su agresor, al tiempo que los servicios de atención especializada están sufriendo una reconfiguración, ante esta situación de excepcionalidad, y no pueden garantizar las mismas prestaciones que en condiciones normales”, apuntan las mismas fuentes.

Además, con el fin de avalar una información y atención eficiente ante los casos de violencias machistas que se están sucediendo durante estos días de confinamiento, la Diputación también ha editado un decálogo de recomendaciones de actuación dirigido a los cuerpos de policías locales con el objetivo de facilitar estrategias de actuación homogéneas en la provincia de Barcelona y, al mismo tiempo, contribuir a que se continúe ofreciendo un servicio de proximidad y confianza.

las familias, las tarjetas monedero dirigidas al alumnado de educación primaria y secundaria beneficiarias de becas comedor del Consell Comarcal del Baix Llobregat.

Cada tarjeta contiene saldos de entre 40 y 100 euros (dependiendo de los casos), destinados a comprar productos de primera necesidad y alimentación.

Así mismo, otros muchos municipios, como Sant Just Desvern, Esparreguera, Molins de Rei, Sant Feliu, Esplugues, Sant Boi, L’Hospitalet, El Prat o Castelldefels, han puesto en marcha servicios de comida a domicilio para las personas vulnerables. En esta última ciudad, además, igual que en El Prat o en Sant Esteve Sesrovires, se

Servicios de asesoramiento psicológico y emocional La situación de excepcionalidad generada por la crisis sanitaria está teniendo un coste emocional elevado tanto en determinados sectores de la población como entre el personal municipal que da servicios directos a la ciudadanía. “Estos profesionales se encuentran con una alta carga de trabajo, atendiendo en algunos casos situaciones de extrema urgencia vital, tales como asumir el riesgo que conlleva para la salud el hecho de estar expuestos al coronavirus y sin poder disponer de la totalidad de los recursos humanos y técnicos habituales”, remarcan desde la Diputación de Barcelona.

Para poder dar una respuesta a esta realidad, desde el organismo provincial se ha impulsado un servicio de atención psicológica para el personal municipal de todas las localidades de la demarcación.

Articulado a través del Col·legi Oficial de Psicologia de Catalunya (COPC), se presta vía telefónica (93 472 50 50) durante los siete días de la semana, con horario de 9 a 20 horas y, en principio, estará activo los meses de abril y mayo.

El Ayuntamiento de Gavà también ofrece un servicio de apoyo emocional a través del dispositivo Gavà te ayuda, en colaboración con el Centro de Salud Mental de Adultos (CSMA). El objetivo no es otro que el de acompañar a las personas que no pueden gestionar por sí mismas las emociones de miedo o angustia que les provoca el confinamiento. Todas ellas pueden contactar a través del número de teléfono 93 263 91 33, que está operativo de 9 a 20 horas.

Cornellà, con la colaboración del Centro de Higiene Mental y del centro Khepri, también es otro de los municipios que ofrece apoyo psicológico a aquellos ciudadanos que sufren cuadros de ansiedad o de decaída emocional. Estos casos se detectan durante los contactos telefónicos que un equipo de profesionales del Ayuntamiento desarrolla diariamente a personas mayores que viven solas o que se encuentran en una situación de vulnerabilidad. Con estas llamadas, además de conocer sus necesidades básicas, también se detecta su situación de salud física y mental.

Viladecans ha creado un Círculo Nodal Comunitario, un espacio telemático realizado a través del sistema de videoconferencia o de reuniones virtuales Zoom, para que las personas que necesiten un espacio para compartir ideas, sentimientos o preocupaciones puedan hacerlo, con la supervisión de profesionales psicólogos. Asimismo, el consistorio también ofrece atención psicológica profesional a familiares de enfermos.

El Círculo Nodal Comunitario está pensado, según los responsables, para que todas las personas que quieran “puedan encontrarse y ayudarse a transitar los estados emocionales, mentales y físicos en los que se encuentren”. El servicio se celebra con una sesión semanal, los jueves a las 18 horas, pero está pensado para que puedan establecerse relaciones entre los participantes en el momento en el que ellos quieran. La conexión se realiza mediante la plataforma telemática Zoom, de manera gratuita.

El Ayuntamiento de L’Hospitalet, gracias al acuerdo alcanzado con el COPC,

también ha habilitado un dispositivo de atención y apoyo emocional y psicológico dirigido a la ciudadanía, a través del teléfono gratuito 900 922 272. Y en Sant Vicenç dels Horts, la administración local está poniendo todos los medios necesarios para que las personas que trabajan en las residencias o bien tienen algún familiar interno puedan recibir apoyo emocional y psicológico. En este sentido, diferentes profesionales que prestan este tipo de servicios en el Ayuntamiento estarán a disposición de todas estas personas.

Por su parte, el Servei Català de la Salut ha creado la aplicación Web App, GestioEmocional.cat, una nueva herramienta a través de la cual se da apoyo emocional y psicológico a toda la ciudadanía. Las personas que accedan a la app pueden hacer una evaluación de su estado emocional a través de un test. En función de las respuestas, la herramienta determina cuáles son sus necesidades y le ofrece una serie de recursos y consejos para mejorar su estado, o bien se le recomienda que reciba ayuda profesional.

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han aprovechado los alimentos de los centros escolares cerrados para abastecer a los colectivos con más necesidades. Unas acciones que responden al llamamiento realizado por Protección Civil, que ha pedido la colaboración de ayuntamientos, escuelas o entidades sociales para dar salida a los alimentos que se conservan en los equipamientos educativos.

Iniciativas locales L’Hospitalet ha creado un dispositivo especial de atención a las personas dependientes en el equipamiento de la calle Tecla Sala, con un servicio de guardia de 9 a 15 horas y con atención telefónica para casos urgentes. Este dispositivo está formado por dos responsables del servicio, seis trabajadores sociales y educadores y un administrativo.

Además, el Servicio de Atención a Domicilio (SAD) garantiza los servicios a las más de 2.000 personas atendidas habitualmente en sus casas. Estos días también suministra la comida a parte de las personas más vulnerables que hasta ahora comían en los casales de la tercera edad municipales, actualmente cerrados.

Por su parte, el Ayuntamiento de Sant Joan Despí, en colaboración con los centros de atención primaria, la Creu Roja y todas las farmacias de la ciudad, ha elaborado un circuito para garantizar la medicación de las personas más vulnerables durante el confinamiento, con lo cual se evita que tengan que salir de casa para ir a la farmacia. Este circuito permite que estas personas puedan recibir a domicilio los medicamentos que requieren. La Creu Roja es la encargada de recoger los productos en las farmacias y de llevarlos a los domicilios.

En el caso de Sant Boi, el consistorio ha puesto en marcha un nuevo servicio dirigido a las familias de personas con discapacidad que tienen alteraciones de conducta como, por ejemplo, personas con diagnóstico de espectro autista u otras conductas disruptivas como TEA o TDAH. El objetivo es dar un respiro a las familias de estas personas (sean niños o adultos) que necesitan seguir sus rutinas y que tienen especiales dificultades para entender y afrontar una situación de confinamiento como la actual.

El apoyo ofrecido consiste en el acompañamiento de un

profesional especializado para que estas personas, que lo necesitan por prescripción médica, puedan salir a la calle durante una hora. El servicio se debe pedir previamente llamando al teléfono 607 02 14 99 (de 9 a 15 horas). Se proporcionará material de protección tanto a las personas atendidas como al personal encargado del servicio de acompañamiento.

El Ayuntamiento de Sant Feliu ha habilitado itinerarios en cada barrio que pueden utilizar aquellas personas que sufran problemas diagnosticados de salud mental y que tengan necesidad de salir a la calle. La medida consiste en habilitar unos recorridos para garantizar que estas personas puedan salir de su casa de manera ordenada, y sin generar ni sufrir ningún problema de salud pública. Así, pueden salir durante una hora al día con un acompañante, aunque es necesario acreditar su situación en caso de que la Policía Local lo solicite.

El Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca, por su parte, ha creado un grupo de apoyo integrado por empresas que se dedican a hacer pequeñas reparaciones y con las que los ciudadanos pueden contactar durante el confina-

Sant Joan Despí cuenta con un circuito para garantizar la medicación a los más vulnerables miento. “Que se estropee la nevera, la caldera o la lavadora puede suponer un problema estos días donde los ciudadanos no pueden contactar directamente con empresas abiertas al público”, señalan desde el consistorio.

Por este motivo, se ha querido facilitar a los ciudadanos los datos de contacto de las empresas que realizan estos trabajos.

Gavà también ha incorporado un servicio de reparaciones urgentes a domicilio.

El objetivo es atender las necesidades de personas mayores que viven solas o que,

ante una avería o incidente en el hogar, tienen dificultades para contratar los servicios de profesionales o desplazarse hasta un establecimiento comercial. Para solicitar el servicio hay que llamar al 93 263 91 33, que está operativo de 9 a 20 horas.

Las reparaciones a domicilio se atienden por orden de urgencia. Los profesionales se desplazan a los hogares para efectuar la reparación de urgencia o sustituir el electrodoméstico o pieza estropeada. Van debidamente identificados y con equipos

de protección personal facilitados por el Ayuntamiento.

La persona solicitante se tiene que hacer cargo del coste del servicio, aunque las empresas colaboradoras aplican tarifas solidarias, es decir, cobran únicamente los gastos mínimos.

Este servicio forma parte del dispositivo Gavà te ayuda, que se ha puesto en marcha con un doble objetivo: por un lado, ofrecer apoyo para necesidades básicas a personas que no pueden salir de casa; y, por el otro, canalizar las demandas de voluntariado de la población.

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La solidaridad, la mejor medicina AYUNTAMIENTO DE SANT JOAN DESPÍ

M. J. ESPINOSA Una vez más, el Baix Llobregat está demostrando ser una comarca solidaria y comprometida con la cohesión social y el bienestar de todos los ciudadanos. Miles de personas están dedicando su tiempo en ayudar a los demás en esta compleja situación.

Este movimiento solidario es, sin duda, la parte positiva de estos días difíciles y supone un gran empuje para seguir adelante.

El Ayuntamiento de Sant Joan Despí fue el primero en hacer un llamamiento solidario para conseguir personas voluntarias que quisieran colaborar en la confección de material textil sanitario. La respuesta fue inmediata y, en pocas horas, un grupo de personas comenzó a trabajar en el taller de costura que se imparte en la Escola Municipal d’Art, ubicada en el Centre Jujol-Can Negre. El llamamiento municipal estaba dirigido a personas profesionales de la costura interesadas en colaborar confeccionando material textil sanitario para evitar la propagación del coronavirus.

En seguida, el resto de municipios hizo lo propio, obteniendo en todos los casos una respuesta proactiva. Gracias al compromiso e implicación de personas anónimas, y de los tejidos asociativos y comerciales, se comenzaron a fabricar mascarillas de contención, uno de los elementos de protección que las autoridades sanitarias recomiendan cada vez con más insistencia.

Pero a día de hoy, y gracias al material aportado de

Personas voluntarias cosiendo mascarillas en el Centre Jujol-Can Negre de Sant Joan Despí forma altruista por un gran número de empresas, también se confeccionan batas de un solo uso, guantes, protectores de brazo, viseras con pantalla, gorros de celulosa, fundas protectoras para zapatillas o gafas y monos de protección.

Todos estos elementos de protección se han repartido entre las residencias de las personas mayores, los paradistas de los mercados municipales, los comerciantes, las farmacias, los equipos de atención domiciliaria, los hospitales y los centros de atención primaria, asistenciales y sociosanitarios, así como entre los trabajadores de los servicios esenciales. Un reparto que se realiza a través de voluntarios y personal de las brigadas municipales.

En El Prat, además, algunos hoteles de la ciudad han

cedido camas a la nueva unidad asistencial que se ha montado en el vestíbulo del edificio de consultas externas del Hospital de Bellvitge.

La impresión 3D, gran aliada contra la pandemia Las empresas están volcando todos sus esfuerzos y recursos propios para dar respuesta a las necesidades de la sanidad pública y ayudar también a aquellos otros sectores y personas más afectadas por la coyuntura actual.

La Asociación Empresarial de L’Hospitalet y el Baix Llobregat (Aeball) pone en común a diferentes empresas y entidades “para conseguir estas sinergias tan necesarias ante la actual crisis sanitaria” y publica en su web las diferentes ofertas para impul-

sar más colaboraciones y proyectos conjuntos, según explican desde la patronal.

Como ejemplo, hay empresas que han cedido material de protección; una ingeniería que ha diseñado un modelo de mascarilla reutilizable con filtro intercambiable para impresión 3D; una empresa proveedora de productos de higiene y limpieza industrial que trata de priorizar las necesidades más urgentes ante el colapso, un taller que ofrece su tecnología para desinfectar vehículos o empresas que han tenido que cerrar y aún así quieren ser útiles y ofrecen sus naves, maquinaria y equipos.

Sin duda, la impresión 3D está siendo una de las grandes aliadas en la lucha contra la pandemia y estamos viendo a escala local la transformación

que se está viviendo en el mundo en el siglo XXI con las impresoras 3D. El Ayuntamiento de Gavà y la empresa Imes3D, por ejemplo, han puesto en marcha la fabricación de equipos de protección individual (EPI) mediante esta técnica.

Los modelos de máscaras que se están fabricando son viseras con pantallas de protección facial, que se componen de una pantalla de propileno fijada en unos soportes impresos en 3D y una goma de fijación en la cabeza. Estas máscaras se pueden esterilizar y pueden ser reutilizadas.

La impresora 3D del Institut de Begues también se ha puesto al servicio del proyecto Coronavirus Makers por el cual desde el municipio se imprimen unas piezas que sirven para la fabricación de viseras de protección. Coronavirus Makers es una iniciativa ciudadana que fabrica con impresoras 3D viseras de protección, respiradores o manillas para abrir con seguridad las puertas de los hospitales. Forman parte más de 4.000 voluntarios en Catalunya y 10.000 en toda España, siendo ellos mismos los que distribuyen los productos en función de las necesidades.

Todo el material elaborado por las personas o entidades voluntarias se centraliza en varios centros logísticos (en el caso de Begues, el Ayuntamiento de Sant Feliu), donde se montan y se acoplan las piezas que formarán las viseras, los respiradores y las manillas.

También destaca la iniciativa de BCN3D, empresa ubicada en Castelldefels, que ha entregado un gran número de

viseras avaladas para proteger a los sanitarios que asisten a los enfermos. Las ha fabricado con tecnología de impresión 3D con la ayuda de más de 50 empleados y 63 impresoras.

Por su parte, el laboratorio de fabricación con impresoras 3D de Viladecans W! Lab se ha sumado a la creación de viseras de protección para profesionales de la salud y de piezas para los respiradores que se utilizan con personas infectadas por el virus. El servicio se ha puesto en marcha después de realizar las gestiones adecuadas para garantizar la seguridad del trabajo y para funcionar de forma homologada. Las viseras fabricadas y recogidas son distribuidas por los voluntarios de Protección Civil entre los centros que se consideran más necesarios.

El W!Lab está fabricando estos materiales de protección en coordinación con las redes de fabricación COVID 3D NodE Delta, CoronaVirusMakers.org y 3D Covidtech (impulsada por la industria 3D y de producción digital catalanas y en coordinación con el Hospital Parc Taulí y el Col·legi de Metges de Barcelona).

También en Viladecans, el laboratorio Mesoestetic ha desarrollado y producido un gel hidroalcohólico para manos seguro y efectivo en un tiempo récord. Tras poner las unidades necesarias a disposición de aquellos empleados que no pueden hacer teletrabajo, ha donado íntegramente la producción al Ayuntamiento de Viladecans, para ayudar a proteger a las personas que, de manera presencial, siguen trabajando en la administración local.

Respiradores para hospitales con tecnología 3D La alianza entre el Consorci de la Zona Franca (CZFB), HP, Leitat (Tecnio) y SEAT, junto al CatSalut, a través del Consorci Sanitari de Terrassa (CST) y el Hospital Parc Taulí de Sabadell, ha permitido desarrollar el primer respirador de campaña industrializable preparado para dar apoyo a los hospitales y UCIs. Atendiendo a la rápida expansión del virus, que ha generado escasez de material médico, Leitat ha diseñado un respirador de campaña fabricado en 3D, que ya se ha puesto a disposición del sistema sanitario.

Respiradores asistidos también han sido fabricados estos días por trabajadores de la factoría de Seat en Martorell. Un equipo de ingenieros comenzó sin descanso el diseño de varios prototipos, 13 en total, hasta llegar al modelo final. “La motivación de todas las personas que participamos en este proyecto es ayudar de la manera que nosotros sabemos, que es fabricar en serie

un equipo, esta vez para salvar vidas”, explicaba Nicolás Mora, del área de Producción.

Con engranajes impresos en Seat, ejes de cajas de cambio y el motor adaptado de un limpiaparabrisas, el proyecto comenzó a coger forma. El objetivo era fabricar los respiradores con la máxima calidad y el resultado ha sido el Oxygen.

Así, unos 150 empleados de diferentes áreas de la planta de Martorell cambiaron su lugar habitual de trabajo para ensamblar los respiradores, donde antes se montaban partes del Seat León. “Modificar una línea de montaje que fabrica una pieza de coche, y poder transformarla y fabricar respiradores ha sido un trabajo duro en el que han estado implicadas muchas áreas de la empresa”, comentaba Sergio Arreciado, del área de Ingeniería de Procesos.

Cada respirador, que se ha diseñado en colaboración con Protofy.XYZ, cuenta con

más de 80 componentes electrónicos y mecánicos y pasa un exhaustivo control de calidad con esterilización de luz ultravioleta.

Por otra parte, los Servicios de Neumología y Medicina Intensiva del Hospital Universitario de Bellvitge y un equipo de ingenieros de la empresa DOGA también han trabajado intensamente estos días para diseñar un nuevo modelo de respirador. “Se trata de un ventilador diseñado no solo para resolver una situación puntual, sino que lo podríamos usar en un paciente durante días”, explica el doctor Jordi Dorca, jefe del Servicio de Neumología del Hospital de Bellvitge.

El nuevo modelo automatiza el funcionamiento de un respirador manual tipo Ambu@. Cuenta con un dispositivo mecánico propulsado por un motor eléctrico montado sobre una estructura de piezas diseñadas con tecnología 3D, fabricadas por diferentes empresas de forma altruista. El

ventilador va conectado a un ordenador integrado, de tal manera que se pueden regular fácilmente diferentes parámetros como el volumen o la frecuencia.

Mientras, la UCI del Hospital de Sant Joan Despí Moisès Broggi, ante la falta de suministro de fungibles para los respiradores, también ha decidido imprimir las piezas con tecnología 3D. La digitalización de la pieza se ha llevado a cabo por el equipo del Hospital Parc Taulí, que lo ha validado técnicamente. El Área de Innovación del Consorci Sanitari Integral (CSI) adquirió el año pasado una impresora 3D, que se estaba utilizando para preparar intervenciones del Servicio de Traumatología, y que ahora está produciendo el fungible.

Aparte de esta iniciativa se han iniciado otras, como la fabricación de una pieza que permite duplicar la función de un respirador y ventilar a dos pacientes, así como mascarillas o pantallas protectoras.

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La voz de los que están en primera línea EL FAR ha querido recoger el testimonio de personas que se exponen al COVID-19 al estar en primera línea de fuego • Una investigadora científica, un celador del Hospital de Viladecans, una sargento de la policía local, un conductor de autobuses de TMB y una trabajadora de un supermercado son algunos de nuestros grandes protagonistas de la crisis sanitaria TEXTOS: DULCE VALERO

“Es una barbaridad el trabajo que ha generado el coronavirus”

Carlota Dobaño Investigadora

La investigadora pratense Carlota Dobaño trabaja sin descanso para encontrar un remedio contra el coronavirus. Lo hace desde el Institut de Salut Global de Barcelona (ISGlobal), centro impulsado por ‘la Caixa’, donde dirige el Grupo de Inmunología de la Malaria, aunque ha tenido que dejar apartada esta línea de investigación para centrarse en la actual

pandemia mundial. “En el momento en que todo empezó, por responsabilidad, nos pusimos de inmediato a analizar cómo podíamos volcar nuestro conocimiento y tecnología en el COVID-19”, asegura.

Entre los trabajos que dirige desde el laboratorio, está la colaboración en un proyecto para detectar el número de infectados entre el personal sanita-

rio del Hospital Clínic y el desarrollo de una técnica para localizar anticuerpos. Estos dos proyectos “no nos dejan tiempo para hacer nada más.

Es una barbaridad el trabajo que ha generado el coronavirus”, admite.

Tras años de investigación de otros virus, del COVID-19 le ha sorprendido la gran capacidad de convertirse en un fenómeno global de forma tan

veloz. “Además de contagiarse muy rápido, ha tenido una grandísima distribución en el planeta y provoca manifestaciones graves, que es lo que más nos preocupa”, señala.

Sobre la posibilidad de contar con una vacuna, asegura que los plazos de los que se está hablando, de un año y medio, son razonables. “A ver si hay suerte y la conseguimos antes”, dice.

“No somos héroes. Hacemos lo que tenemos que hacer”

Juanma Martín Celador

Juanma Martín tiene 43 años y lleva dos décadas ejerciendo de celador. Lo hace en el Hospital de Viladecans, uno de los equipamientos sanitarios catalanes con una mayor incidencia del coronavirus.

“Creemos que en Viladecans hemos podido ser un foco de transmisión elevado, pues cerca de un centenar de trabajadores, el 14% de

la plantilla, han cogido el COVID19”, asegura.

Hace dos semanas estuvieron al borde del colapso, alcanzando la cifra de 120 ingresos, lo que obligó a habilitar zonas nuevas para atender la pandemia. Ahora la presión ha descendido a la mitad, aunque recomienda no relajarse “porque los picos son imprevisibles”.

Se queda con la imagen positiva de los aplausos del personal a los pacientes que logran superar la enfermedad.

“Es un momento muy especial en el que se te ponen los pelos de punta”, reconoce. Aún así, vive cada día con mucha tristeza por la situación de los enfermos, “personas que las ves entrar por urgencias y que a las cinco fallecen y no podemos hacer nada”.

Los aplausos que los ciudadanos dirigen desde sus casas, cada día a las 20 horas, al personal sanitario, le parecen “un gesto bonito”, aunque considera que “no somos héroes”, ya que “hacemos lo que tenemos que hacer”.

Eso sí, le gustaría que, cuando todo esto pase, los aplausos se conviertan “en pancartas para reivindicar una sanidad pública al cien por cien”.

“Ver las calles desiertas es una sensación rarísima”

Rafael Ibáñez Conductor de TMB

Vecino de Cervelló, Rafael Ibáñez, de 59 años, lleva 28 como conductor de autobuses para Transports Metropolità de Barcelona (TMB), y como muchas otras personas, jamás se podía imaginar encontrarse en una situación como la provocada por la actual emergencia sanitaria y ver imágenes que se le quedarán grabadas en la memoria, como las calles desiertas de Barcelona. “Es una

sensación rarísima atravesar la Diagonal y ver las calles así”, reconoce. “El panorama es desolador, sobre todo los fines de semana”, asegura.

Con la declaración de la pandemia, mandaron a los trabajadores en riesgo a casa y redujeron el servicio.

“Ahora cada día trabajo en una línea diferente”, explica. El servicio se ha ido adaptando en función de la de-

manda y de las normas de seguridad establecidas: 20 pasajeros como máximo en los vehículos estándar, 30 en los articulados y 10 en los microbuses. “Las últimas semanas de confinamiento total, en un servicio de 8 horas he podido llevar a un máximo de 25 personas en el autobús, cuando antes trasladaba en la misma línea hasta 500, con gente prácticamente encima

mío”, detalla Rafael, para dar un ejemplo del brutal descenso del número de pasajeros.

Asegura que estos días los usuarios hablan constantemente de la pandemia y que la gente “es respetuosa y mantiene las distancias”. En su caso, lo que más le preocupa ahora es saber cómo se va a ir normalizando un servicio con tanto volumen de pasajeros.

“Hay gente que pasea al perro a más de dos kilómetros del domicilio”

Marta López Policía Local

Sargento de la Policía Local de Sant Joan Despí, Marta López es responsable de la unidad de proximidad, aunque la pandemia ha obligado a “focalizar los recursos en dar respuesta a las medidas excepcionales”, asegura.

Para minimizar los posibles contagios entre los agentes, se han establecido dos turnos alternos de trabajo semanales. “Por suerte, no ha habido hasta el

momento casos positivos de contagio confirmados, aunque sí hay compañeros con síntomas que están en situación de confinamiento”, explica.

La sargento recuerda que “cualquier actividad en la vía publica supone un riesgo” y remarca que “para nosotros, ese riesgo se ha elevado”. Por este motivo, “intentamos extremar las medidas de seguridad, pero nuestra

profesión nos obliga a veces al contacto físico”, señala.

Con 205 actas levantadas a particulares y 12 a empresas hasta el momento por incumplimiento de las restricciones, estos días se da prioridad absoluta a los controles de tránsito de personas y de usos comerciales. “Nos hemos encontrado con gente que saca a pasear a su perro a más de dos kilómetros de su

domicilio o a un señor que salía con las barras de pan duro de su casa”, dice.

Pese a que se han focalizado los esfuerzos en los controles, tanto Policía Local como Mossos d’Esquadra están atendiendo el resto de demandas, aunque reconoce que éstas han disminuido notablemente. “Se ha tenido conocimiento de menos robos, hurtos o conflictos entre personas”, afirma.

“La pandemia nos ha mostrado el egoísmo de algunas personas”

Montse Ballesteros Sector comercial

Los ocho empleados del supermercado Consum de la calle Molí de Esplugues trabajan a destajo en primera línea para abastecer a los ciudadanos con alimentos y productos de primera necesidad. Montse Ballesteros, responsable del establecimiento, ha podido comprobar cómo esta situación ha sacado lo peor y lo mejor de las personas. “Antes de que se estableciera un horario limi-

tado, esto ya era una locura: estanterías vacías, aglomeraciones... La gente se volvía loca comprando”, recuerda.

Montse asegura que “la pandemia ha mostrado el egoísmo de algunas personas”. Y cita numerosos ejemplos: “clientes que en vez de quedarse en casa vienen cinco o seis veces al día, hay peleas en las cajas, nos recriminan que no encuentren determinados pro-

ductos y nos han empujado para quitarnos las cosas de las manos, por lo que hemos tenido que poner un límite de compras en lo que más se gastaba o quedaba fuera de stock”.

Además, remarca que en su sector también están muy expuestos, incluso a la violencia. Un día se encaró a un hombre que acababa de robar en la tienda. Se llevaba más de 80 euros en

carne. “Nos empezó a amenazar, a tosernos y a decirnos que teníamos coronavirus. Fue un horror”, lamenta.

Pero también reconoce que hay gente “maja y respetuosa”. Muchas personas “nos preguntan cómo lo llevamos, nos dicen que si no fuera por nosotros no comerían y que cuando todo esto acabe nos darán un abrazo por lo bien que lo hacemos”, explica.

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Cultura y deporte entre cuatro paredes AYUNTAMIENTO DE SANT JOAN DESPÍ

Los polideportivos municipales de Sant Joan Despí han activado un canal en Instagram

A través de la cuenta @des- del Ayuntamiento. Así, los piesportacasa, cientos de perfiles en Facebook, El confinamiento ha personas disfrutan en sus ho- Twitter e Instagram publicambiado por completo gares de sesiones diarias de can diariamente contenidos todos nuestros hábitos. La entrenamiento en directo. sobre actividad física en casa obligación de permanecer DespíEsport en casa o nutrición saludable. en casa y no poder seguir ofrece sesiones de entrenaEn El Prat, los centros con nuestra rutina diaria, ha miento de 30 minutos de deportivos municipales tamcomportado que surjan nue- duración todos los días de la bién han abierto un servicio vas iniciativas municipales semana. La oferta es muy de tutoriales online con para que los ciudadanos, variada, con actividades ejercicios físicos. desde sus respectivas casas, aeróbicas, de fuerza y ejerciDisfrutar de la cultura sigan teniendo acceso -de cios de flexibilidad y movi- desde el salón es otra de las manera gratuita- a activida- lidad articular, impartidos finalidades del gran número des deportivas, culturales o por instructores de los poli- de propuestas que se han dilúdicas. deportivos municipales. Así, señado. En Sant Joan Despí Evitar el sedentarismo es a través de DespíEsport en se ha creado en Instagram el uno de los objetivos princi- casa se puede hacer pilates, canal @culturaacasaSJD, pales de muchas de las dance, HIIT, estiramientos y que incluye actividades culacciones que se han puesto TBC. Las sesiones se reali- turales y sesiones de entreteen marcha en esta situación zan en directo a través del nimiento en directo, como de excepcionalidad. Vilade- canal de Instagram y se pue- cuentacuentos y talleres cans, por ejemplo, ha acti- den seguir desde cualquier para los más pequeños, o revado una aplicación web dispositivo móvil. comendaciones literarias y que permite el acceso a un El programa Gavà Ac- vermuts musicales, para los plan de ejercicios personali- tiva’t es otra de las iniciativas adultos. zado de ocho semanas en que ofrece una serie de pauTambién Sant Andreu casa para mantener la salud tas para mantener un estado de la Barca ha creado un y el bienestar físico. Los ciu- óptimo físico y, sobre todo, banco de recursos culturales dadanos pueden disfrutar de mental. Incluye dos líneas gratuitos que se puede conesta app, llamada Muvi- de acción: una pensada para sultar en la web municipal y ment, gracias a un acuerdo las personas abonadas e ins- que ofrece a los ciudadanos del Ayuntamiento con las critas en los programas de diferentes alternativas para empresas TECH Friendly y los equipamientos deporti- realizar en casa. En función Runnea, que la han desarro- vos municipales, que pue- de la edad y de los gustos de llado recientemente. den acceder a más de 350 cada persona, se pueden ver Los polideportivos muni- propuestas impartidas por espectáculos de teatro, docipales de Sant Joan Despí profesionales del sector; y cumentales y películas, así también han puesto en mar- una segunda dirigida al con- como escuchar música. cha un canal en Instagram junto de los ciudadanos, con La Diputación de Barcepara vivir de forma activa y propuestas que se vehiculan lona, además, ha abierto los saludable el confinamiento. a través de las redes sociales servicios virtuales de la Red M. J. ESPINOSA

Personalidades de Cornellà se suman a la campaña #joemquedoacasa El Ayuntamiento de Cornellà también ha puesto en marcha una campaña de concienciación sobre el confinamiento. El lema de esta iniciativa es #joemquedoacasaacornella y ya son muchas las diferentes personalidades de la ciudad que la están apoyado. De este modo, las redes sociales municipales se están llenando de vídeos de personajes relevantes del mundo de la cultura, la comunicación y el deporte. Son grabaciones hechas en sus propios domicilios y donde animan a la población a quedarse en casa y explican cómo pasan ellos el tiempo.

De momento, se han sumado a la iniciativa los periodistas Jordi Évole, Marta Romagosa, Sara Pellicer, Manuel Campo Vidal y Xavier Aldekoa. También Tony aguilar, locutor y DJ; Jaume Funes, psicólogo, educador y periodista; además de Paula Gonu, una de las YouTubers más importantes del país, con más de dos millones de seguidores. Reyes Estévez es uno de los deportistas que se han adherido a esta iniciativa; y del mundo de la cultura, se ha sumado la escritora cornellanense Empar Fernández.

En Cornellà, también se han diseñado otras dos iniciativas interesantes: #L’Auditoridesdecasa, con proyecciones de obras de teatro, producciones y películas; y #CCFdesdecasa, que incluye recomendaciones y reflexiones de muchos de los conferenciantes que forman parte de la familia del Cornellà Creació Fòrum, como Manel Fuentes, Kepa Aulestia, Bisila Bokoko, Lluís Bassat o Txabi Franquesa, entre otros.

Con el lema Ens en sortirem. Gràcies, Esplugues, el Ayuntamiento invita a todos los ciudadanos a hacer visible en las redes sociales su actividad y sus mensajes positivos durante estos días de confinamiento a través de la etiqueta #EspluguesACasa. En Instagram, por ejemplo, se puede ver como el cantautor espluguense Israel Duran ha construido una mini home-studio o como los museos muestran piezas cerámicas de gran interés. Además, desde las cuentas municipales de Twitter, Facebook e Instagram se proponen juegos caseros, en línea con el proyecto Playful, para utilizar el juego entre personas de todas las edades como herramienta de convivencia y cohesión.

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de Bibliotecas Municipales a todos los residentes de Catalunya aunque no dispongan de carné bibliotecario.

Así, cualquier ciudadano que lo solicite, a través del formulario correspondiente, puede hacer uso de los servicios virtuales de las bibliotecas, como el que ofrece la plataforma de préstamo digital eBiblio, con acceso a libros, películas y revistas; pero también a las bases de datos Naxos Music Library, con un amplio repertorio musical, sobre todo del género clásico; al In-edit TV, con documentales musicales, o a los audiolibros.

Fomentando la lectura y la escritura creativa El Ayuntamiento de Sant Andreu de la Barca ha convocado un concurso de microrrelatos con el fin de que la población pueda describir la situación que vive actualmente en la ciudad desde su balcón. De hecho, el microrrelato, que se puede escribir en catalán o en castellano, debe comenzar con la frase Salí a mi balcón... La extensión máxima es de 150 palabras y cada participante únicamente puede concurrir con una pieza.

El concurso otorgará galardones a las mejores obras, que serán elegidas por un jurado experto. Hay un total de cinco premios que incluyen comidas en restaurantes de la ciudad, entradas para el cine y el teatro, juegos y libros. Los relatos todavía pueden enviarse hasta el 27 de abril al correo electrónico cultura@sabarca.cat.

Por su parte, el científico de Cervelló y docente de la UAB, Francesc Torres, junto con Iona-Teresa Riera y Joan Olivas, ha creado la primera novela colaborativa por una buena causa. Pese a que cuentan con currículos muy diferentes (Torres es profesor de la asignatura de Nanotecnología en la UAB, Riera es economista y ha publicado algunos poemarios y Olivas, tras vivir 17 años en Londres, justo ha vuelto a Catalunya y se dedica al mundo del deporte), los tres han sumado sus esfuerzos para conseguir sacar hacia el exterior las inquietudes literarias y las ganas de escribir que pueda tener la población durante estos días.

Se trata de que teniendo un párrafo de novela como punto de partida, cada participante pueda escribir como quiere continuarla.

Así, entre todos, se obtiene una novela totalmente colaborativa y transversal. Cada

día, antes de enviar el próximo texto, el participante debe leer lo que previamente han escrito otras personas, y así poder seguir dando forma al relato.

El primer párrafo lo han redactado a cuatro manos los promotores a partir de un texto previo de Riera, quien ha manifestado que “queríamos que fuera un tema fresco y con algo introspectivo, ya que la situación de confinamiento en la que estamos sumergidos actualmente puede hacer surgir mucho sentimiento, emoción y cambios personales que se pueden trasladar a la novela de una manera agradable y ligera”. El proyecto está abierto a cualquier tipo de público sin limitaciones.

Espacios virtuales para canalizar sentimientos Con el objetivo de dar respuesta a la necesidad de muchas personas de sentirse acompañadas en momentos como el actual, en el que se pide aislamiento y distancia social, también se han creado nuevos espacios virtuales donde poder canalizar todos estos sentimientos. En L’Hospitalet, por ejemplo, se ha creado el denominado Libro de las Emociones, accesible desde la web municipal, y donde todo el mundo que lo desee puede escribir mensajes de esperanza y compartir buenos deseos.

Cornellà también ha puesto en marcha la iniciativa El Álbum de los Afectos, donde se están recogiendo diferentes mensajes de apoyo hacia los otros, imágenes de solidaridad y los dibujos de los más pequeños que expresan las emociones y valores que esta situación está provocando. “Ganaremos la batalla a este virus y queremos que tú y los tuyos colaboréis con nosotros para difundir este gran gesto comunitario y humanitario”, señalan desde el consistorio.

En esta línea de transmitir mensajes de ánimo, pero esta vez a los enfermos y a los profesionales sanitarios, el Hospital de Viladecans ha impulsado la campaña Palabras que curan, animando a la ciudadanía a que escriban cartas de apoyo a los que más están sufriendo la pandemia del COVID-19.

Cualquier persona puede inyectar un soplo de aliento en estos días tan difíciles. El centro imprime el mensaje que se recibe en el correo paraulesquecuren.hv@gencat.cat y lo entrega al destinatario. Así ellos saben que no están solos y que todo va a salir bien.

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Los archivos municipales quieren preservar la memoria popular de este momento histórico Con el objetivo de recoger, ordenar con criterios archivísticos, preservar y poner en valor las principales expresiones, creaciones e iniciativas que la población está llevando a cabo estos días históricos con motivo de la crisis sanitaria del COVID-19, muchos ayuntamientos quieren hacer un archivo de memoria popular.

Las colecciones contarán con materiales como dibujos, relatos, fotografías, vídeos, pancartas, canciones o recetas de cocina, tanto en formato digital como físico. En este sentido, los consistorios hacen un llamamiento a la ciudadanía a preservar y hacer llegar -cuando el confinamiento lo permita- aquellos elementos que puedan tener valor histórico para documentar esta situación excepcional. Testimonios de las iniciativas surgidas para confeccionar material de protección, las redes ciudadanas de

ayuda a las personas con más necesidades, los vídeos de las calles vacías y los balcones al atardecer repletos de vecinos aplaudiendo la labor del personal sanitario o los carteles de comercios y tiendas explicando el cierre, son algunos de los materiales que se piden.

“El momento histórico por el que pasamos nos obliga también a cuidar de objetos que ayudarán a contextualizar la historia de nuestra ciudad a las futuras generaciones”, explican desde Sant Joan Despí, uno de los municipios que quiere documentar esta crisis. “Por eso pedimos que se guarden los objetos que se consideren que pueden ser importantes y que pasarán a formar parte de la historia”, manifiestan desde el consistorio.

El Prat, Sant Andreu de la Barca, Castelldefels, Sant Feliu o L’Hospitalet también harán lo mismo.