Revista de Bellas Artes, núm. 29, 1976

Page 1

....

-

'

; .I

;'I ., 'I

I .


..,

Digitalizado par


SECRET ARIA DE EDUCACION PUBLICA Secretario: Victor Bravo Ahuja Subsecretario de Cultura Popular y Educaci6n Extraescolar: Gon zalo Aguirre Beltran INSTITUTO NACIONAL DE BELLAS ARTES Y LITERATURA Director General: Sergio Galindo Subdirector Generdl : Alejandro Alarcon Nava Subdirector Tecnico路: Fernando Gamboa

REVISTRDEI

BELLAS

ARTES

Direcci6n: Oscar 01 iva Redacci6n: Aure lio Gonzalez Administraci6n: Rossina Larranaga Disefio: Rafael Lo pez Castro L芦 co laboracion sera so li citada por Ia direcci6n; no devolveremos o rig in ales enviados espontaneamente ni acusare mos s u recibo. De lo aqui pu blicado respo nd en so lo los firma ntes. La propiedad intelectual de las obras que aparece n revierte a s us auto res; so lo ell os pueden autorizar su re produ cc ion total o parcial. {Registro e n tramite) Correspondencia: Rcvista de Bellas Artes. Palacio de Bell as Artes, Mexico 1, D. F. Te l. 5 12路60路43. Precio del ejemp lar: $ 15 .00 M.N . S usc rip ci6 n an ua l, 6 entregas: $ 90.00 One year, 6 issues: U.S. $ 9 .00 lmpreso en lmprent a Madero , Avena 102, Mexico 13, D. F .

Digitalizado par

lnstituto Nacional de BellasArtes

t_.CONACULTA


XEEP 1060 Kcs.

RADIO EDUCACION

La Palabra y el Hombre

La tercera posibilidad en Ia radio Revista de Ia U niversidad Veracruzana

TIERRA ADENTRO

YA APARECIO

CAMBIONQ2

Revista del consejo regional de Bellas Artes Digitalizado par

,


SUMARIO 2

Jose Revueltas FOREIGN CLUB (Cuento)

9

Jose Revueltas COME NT ARIOS AL VI CAPITULO DE EL CAPITAL

13

Jose Revueltas DIARIO

19

Jose Revueltas ACUARIUM, SIGNO DE EMA

20

Raquel Tibol LA INFANCIA DE JOSE SEGUN CONSUELO

25

Jaime Labastida CONVERSACIONES CON REVUELTAS (Poesla)

29

Rodrigo Moya EL PAISAJ E DEL HOMBRE (arte fotografico)

37

VIDA CULTURAL Y ARTISTICA NACIONAL E INTERNACIONAL

42

Andrea Revueltas PLATICA CON ARTUR LONDON SOBRE Ml PADRE

46

Taller de Crltica Literaria del INBA EL PROBLEMA DE LA CONFORMACION ARTISTICA EN DOS NOVELAS DE REVUEL TAS

56

Dolores Bravo LOS ERRORES DE JOSE REVUEL T AS: PARALELISMO DE UNIVERSOS MANIQUEOS

61

Jose Agustin EL LUTO HUMANO

FOTOGRAFIAS DE Jesus Martinez

29 SEPTIEMBRE • OCTUBRE I 1976 I NUEVA EPOCA Digitalizado par


Por encima del Jose Revueltas escritor se alza como una presencia siempre vigilante el Revueltas luchador de las causas socialistas y populares. Entre este hombre y este escritor nunca hubo separaci6n, en su obra literaria se conjug6 siempre el espfritu rebelde, atento a su contexto hist6rico, con el artista vigoroso que aportaba su lenguaje con un acento muy personal a Ia narrativa mexicana. Revueltas no cre6 escuela, pero fue el maestro del cual tomaron aliento muchos escritores de varias generaciones.

Esta Revista de Bellas Artes noes un numero de homenaje p6stumo o tardio al escritor y pensador d esaparecido. Es un testimonio de su presencia literaria y humana a traves de te xtos que nos muestran su obra, su vida, su pensamiento y su impacto en los demas, aunqu e se a de manera fragmentaria. 111 1 lnstituto . . I' d Nacional de t ..CONACULTA D1g1ta 1za o por Bellas Artes 1


Digitalizado por


••••••••••••••••••• •• •• 0 •• •• tJ c •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• •• SQ •• rn •• I:J • < E-4 ~ • •• c H •• p •• ~ •• t> •• ~ •• ~ •• ff.s1~ • rn • •• 0 • 0 ~ •• ••••••••••••••• •••• E-4 ~

riiil

..,

"'

:s! c v ..... ..,

..,0 ..,

"'

.s::. <.)

:::l

.., ..... Q)

c

.~

-;;

..,>

~

..,

"'

"'0

0 .....

.... 0

0..

LiJ

1-

z

<:( ....J

0

>

....J LiJ

0

rJ')

LiJ

c::.::

0 0

<:(

~

~

CXl <:(

c::.::

1LiJ

0

t-1

~

0

u z

~

~

LiJ

1-

z

LiJ

c::.::

u....

~

....J <:(

Digitalizado par

Un tabique nos separa de Ia noche, de las calles sin luz y de un silencio que se desparrama por el exterior como u n aceite espeso y sofocante, notable a fuerza de ser claro, preciso, de contornos exactos, alucinante. Pero no. No es una falta de luz en lo absoluto, sino muchas de claridad indecisa, lacerantes, en el centro que van desfalleciendo sin embargo en los extremos, hasta desvanecerse por ultimo como una marea lenta, sonambula, junto a los muros. Tampoco un silencio definitivo y terminante, sino voces distintas, sorprendentemente aisladas, sin relaci6n susbstancial unas con otras y muy semejantes a las que se escuchan en los vagones del ferrocarril cuando este se detiene. Parece como si todo fuera visto a traves de un extrafio sentido que reuniera simultaneamente Ia facultad de o(r y tocar. Mas exactamente, como si se oyera con el tacto y se viera con el o(do . En esta forma, un simple ruido, o el claro-oscuro enigmatico atisbado desde Ia ventana -una ventana de vidrios empafiados y tintineantes- se experimenta en Ia epidermis, como si fuera prohibido por todo el cuerpo a Ia vez, y al mismo tiempo, por alguna parte angustiosamente ignorada del cerebra que aludiera a un suefio remoto y confuso . Aqu ( dentro de Ia sola frontera del tabique que nos separa de ese mundo exterior, ocasiona un cambia brusco, ins61ito. No se explica uno como tal circunstancia, aparentemente sencilla, pero de existencia ficticia tan indudable, puede determinar estados de animo tan diferentes, emociones tan radicalmente distintas. · Una sola mirada por Ia ventana y ya sentimos divorciados radicalmente de este exterior tan d.lido y tan humanamente especial. iQue asombro de Ia frontera irreductible! jQue poca distancia flsica y que gran, que in men sa, que fantastica separaci6n! Afuera estan los hombres ignorandose mu.tuamente, lejanos e indiferentes como monstruosas estatuas en movimiento. Aquf dentro, en este cuarto estrecho, perdi~ ~~t~~(ofio len~o y dudoso del

l'l~e~n¥.~~emt~~oNACULTA

BellasArtes


0 cigarrillos, nuestros rostros se sienten superiores, trascendentales, unidos por una fuerza grande hasta lo sobre-humano, a quien sin embargo se ignora en concreto, en sus dimensiones exactas, en su cabal proporci6n, y vagamente se le imagina como una linfa calida y omnipresente, que todo lo penetra como substancia fabricada con materias infinitas. Fuerza simplemente propuesta, a quien nadie alude, a quien nadie puede aludir, pero a quien se sabe nuestra y eterna, prescindiendo siempre, uniendonos siempre, dando raz6n al gesto, al ademan, a Ia palabra, a todas las menudas acciones que hoy nos ocupamos de eslabonar aqu f. Por esto tienen las palabras una significaci6n extrana como si elias mismas en s(, no fueran otra cosa que una referenda, un puente hacia lo desconocido. Parece como si hubiesen sido pronunciadas desde muy lejos, y sin embargo se ayeran aqul cerca, echando un aliento calido. 0 mejor, como si no salieran de Ia garganta, sino de lo profunda, del vientre, de regiones obscuras y llenas de sangre caliente y cuerpos infinitos luchando. Se comprende facilmente que es Ia Revoluci6n. Que nosotros no estamos ah ( mas que para eso. Que eso podra ser manana en Ia noche una simple escaramuza, pero que de cualquier manera es una parte de todo lo que da raz6n a nuestra vida. Pensamos en el manana de las 11.40 de Ia noche, en una forma objetiva, material, exterior. Se trata de tener Ia cabeza frla, de no vacilar - iPor Cristo! - De obrar rapidos y serenos. Pero al mismo tiempo nos circula una angustia primitiva, atavica, irracional. No es el miedo. No. (Aunque puede ser que precisamente este sea el miedo.) Una pasi6n subconsciente por completo, fuera del radio de acci6n de Ia voluntad, dominadora tanto mas cuanto menos Ia dirije el cerebra, de todos modos claro y dispuesto siempre a obrar. En fin, que sera manana? iSi al menos todo fuera de d (a, bajo Ia luz del sol. .. ! iPero en Ia noche ... ! No se vera ni Ia sangre misma. Nada mas sera un correr calido por el cuerpo, un correr ignorante de sf mismo, emboscado, mudo, definiti-

vo, mas cerca de Ia muerte. iQue hoy mismo hicieramos todo, en este instante, ya! Pero hay que esperar. Hay que esperar a que se desarrollen lentamente, como lagartos tibios veinticuatro horas grandes, redondas, desoladas¡. Nuestros rostros son duros, como tallados en piedra. Las ultimas palabras que pronuncia definitivamente el Presidente de Debates, nos suenan reales hasta lo f(sico, hasta las entranas: - l Estan todos de acuerdo? S(rvanse demostrarlo .. . Levantamos las manos, con unanimidad conmovida, y hacemos un bosque tremulo, humano, noble, angustioso y grande como P.l universo. II

Su gran calva, redonda y reluciente, responde con exactitud a los reflejos de las luces, exactamente igual como responden las perillas niqueladas de las grandes escaleras, inm6viles y eternas. El no es ah( otra cosa que una habitual perilla mas, que contempla, sonrle y bebe un high ball de licor perfumado y penetrante. Junto a el, en Ia misma mesa, frente al mismo high ball, con Ia misma indiferencia, arrastrando Ia misma vida, esta Ia dama a quien, por razones anti-llricas a las cuales son tan afectos los personajes que se mueven en este mundo, no podemos dar el dulce y anorador nombre de "dama de sus ilusiones", aunque a fuerza de ser exactos este es el calificativo que corresponde. llusiones de un d(a, pero no por eso menos diflciles de ser logradas. El caballero luch6 dramaticamente durante todo el dla, valiendose de todos aquellos recursos que poseen los de su clase para apropiarse una bella sonrisa, o un simple lunarcillo: rosas de Madlaine por Ia manana. Un collarcillo de "La Princesa" al mediod Ia. Mensajes apremiantes a todas horas, en que a falta de sesgos poeticos, siempre infructuosos en estos casos, se mostraba una telegrafica redacci6n, convincente y rotunda, muy propia, por otra parte, del caballero: "T odo garantizado. Discreci6n y largueza. No faltara Ud. lverdad? " llllllll il!l~tlnr;,<t/ftRae nte que ~o . Ah ( esta

l !,~~~~raâ‚Ź1em!lr(J@I UQ!)MA.-CULTA

:~~.,~: Bellas Artes


Pero no se sabe que ha ocurrido en el esp(ritu del caballero. Despues de todas sus luchas y ya con Ia pieza en sus manos, se siente enormemente solo y hastiado. Se aburre miserablemente. La conversaci6n Ia parece lenta, fabulosamente lenta. Cuando de los labios de Ia dama sale una palabra, a el le parece que tiene que esperar media hora para o(r Ia siguiente, y esto le hace abrir Ia boca con aspecto de tonto, y preguntar todo azorado: lque, que? Y le pregunta tambien lentamente, como una pesadilla. lEs real todo aquello? lQue hace esa mujer frente a el, un tanto desconcertada, pero dirigiendole miradas intencionadamente Intimas, como si entre ellos existiera un lazo superior al que supone Ia relaci6n accidental y comercial de este d Ia? "iDecididamente hoy estoy indispuesto! " -piensa con algo de terror. La dama por su parte se impacienta, y exclama, al fin, con una puntita de indignaci6n en los ojos y sin recatar el obligado dengue: - iAy! Pero sf que esta Ud. fastidioso. El caballero se sinti6 confundido. La reluciente perilla que es su cabeza, se perla de un sudor fino y transparente. Busca una frase adecuada, que no menoscabe su prestigio de hombre de mundo y arneno conversador. Pero ique diablos! , nada. AI fin explica, torpemente : - Es que siempre me preocupa de todos modos eso de Ia huelga de choferes por lo de Ia gasolina . . . Despues de Ia frase se siente mas confundido aun. La dama ya esta notoriamente inc6moda y aburrida. lQue va a importarle Ia huelga de choferes? lPor que sera tan importuno el, que siempre se muestra ingenioso y divertido? Las cosas han llegado a un grado tal que otro caballero, joven y de buenas maneras, se ha permi tido aproximarse a Ia dama, solicitar de su acompaiiante Ia venia necesaria y ponerse a valsar por los amplios salones encerados. El caballero solo mira tristemente su high ball consumido apenas a Ia mitad. lndiscutiblemente hoy fue un dla de fracaso, al menos en las cosas del amor. Para

Digitalizado par

compensarse piensa en otras mujeres a quienes ha dominado por completo. Pasa revista a las rubias, a las morenas, a las azafranadas, a las vlrgenes y a las que no lo fueron nunca, que han pasado por sus manos regordetas y practicas. No se le escapa una ligera sonrisilla. Embriagado ya por el grato recuerdo del triunfo, examina sus exitos en todos los 6rdenes de Ia vida. Sus admirables negocios. Su ultima y genial proposici6n, aprobada unanimememnte, en el seno del Consejo Petrolero, sobre el medio mas practico de subir el precio de los productos. A .estas alturas euf6ricas, no se resiste a lanzar una mirada por los amplios salones donde danza Ia joven pareja. AI mirarlos tan j6venes, tan elegantes, al sentirse el, en contraste, tan aburrido y tan sin entusiasmos, Ia murria lo amenaza nuevamente, pero reuniendo todas sus fuerzas, exclama ol lmpicamente : iBah! Ill

iSolo dentro de un cuarto de hora! Desde lo alto parece como si se tratara de una reunion de monstruos mecanicos, que despues de aproximarse entre s( cautelosamente, se olfatearan y reconocieran. La ancha plaza apenas si tiene cabida para todos ellos, negros y brillantes, . silenciosos, relucientes, fantasticos. Se reunen aqul por acuerdo expreso del Comite de Huelga de los Choferes. Diferentes marcas y tipos : Buick, Chevrolet, Lincoln, Ford. Pero todos unidos por algo de comun que los ata. Dan Ia impresi6n de que no se trata precisamente de una protesta en que intervenga el hombre, quien desde Ia altura se logra apenas distingu ir, sino de un a sublevaci6n de los autom6viles, de una rebeli6n de maquinas ciegas y precisas como una fatalidad mecanica sobre-humana y monstruosa. Llegan de todas partes con disciplina inexorable, que anuncia una potencia destructiva e invencible, superior a los hombres como el rayo o Ia tormenta. El cielo esta poblado de estrellas que se preriden y se apagan, indiferentes. lQue de todo? lQue col

dlxit~cONAeelJLTA

BellasArtes


cielo limpio y lejano, y estas maquinas puntuales, fervientes, matematicas en Ia hora de Ia muerte y de Ia lucha? Se antoja imaginar Ia indescifrable magnitud del universo, con sus siglos diminutos, pasajeros e insignificantes, y compararla con esta realidad lacerante, presente, inmediata y concreta, donde. los minutos son entidades individualizadas, solemnes, inmensas, apretadas de materia donde Ia vida y Ia muerte tiene realidad de cinco sentidos. iSolo dentro de un cuarto de hora! Y Ia frase quiere decir mil cosas. Quiere decir que nos moveremas vertiginosamente, que entraremos en accion, que habra sangre y gritos, y rostros feroces y ique todo esto ocurrira en unos cuantos minutos, sera cuestion de instantes, de instantes asombrosamente largos y decisivos, como siglos! De pronto, a una vez, Ia reunion de monstruos se descongestiona. Como ciegos que caminan firmemente para virar de subito ante el obstaculo percibido con el sexto sentido, esquivando los cuerpos, se desenvuelven saliendo hacia Ia avenida punteada de fosforecencias. Ahora caminan en parejas por Ia amplia via, sin separarse, sintiendose mutuamente, hermanos. lQuien puede adivinardesdeloalto? Desde lo alto no puede decirse que esto sea cosa de los hombres. Pero sl. Dentro de cada reluciente veh(culo hay un hombre que gula, seguro, firme, cautelosd. Aqu( caminamos. Aqu( saludamos a nuestro . companero que marcha junto, produciendo un fru-fru tibio y sedante con las ruedas de su coche. Las casas grises y manchadas de Ia ciudad nos abandonan violentamente huyendo por los !ados. Aparece Ia blancura insolente y envidiable de los bungalows de las colonias residenciales. Alia arriba el cielo indiferente. El mismo que veremos manana o que ya no veremos nunca. Despues ya es un correr sin sentido y furibundo. Un correr embriagado ya, definitivo para siempre, dispuesto, inhumano, en que no intervenimos para nada, ni siquiera con Ia leve presion del pie sobre el acelerador. Una carrera en que solo actua Ia clase, el conjunto, Ia masa a Ia cual pertenecemos

y obra por nosotros, superior, impersonal, avizora, autoritaria, hist6rica, eterna. Banado de luz, esbelto y brunido, unico, aparece el Foreign ante nuestros ojos. Hay que detenerse. AI detenernos ya solo somos un solo haz alucinante y fantasmag6rico de sombras cinematograficas. En el bolsillo Ia pistola suda en nuestras manos que han querido separarse de ella. El Foreign esta rodeado de lujosos y enormes automoviles brunidos, quietos y apa-

gados. En un momento queda Ia carretera bloqueada por los nuestro. Los carros del Foreign son volteados sin misericordia. Las piedras principian a !lover sobre los cristales del Palacio donde los senores bailaban y beb(an tan tranquilamente. - iAbajo el alza de Ia gasolina! iAbajo el imperialismo! - iViva Ia huelga! Aca, en Ia I(nea, en Ia barrera que impide todo acceso a Ia carretera, un rostro grave -trastornado,


sin embargo- que corresponde a un cuerpo debil embutido en un smoking brillante, acicalado, quiere imponer el orden con frases llenas de cordura. Despues ya no pide tanto. Demanda tan solo poder salir hacia Ia carretera, hacia Mexico. i. .. Ha estallado Ia huelga general! iSI, lahuelgageneral. .. ! iLa huelga general! 51, sf, sf. lQue quiere usted? Respeto, senores, soy el Ministro de Guatemala! Rumores sordos. Gritos violentos, salidos de muy de nosotros, yo creo, del corazon, en modo alguno de una parte tan circunstancial como Ia garganta. Las ordenes son precisas, muy claras para aquella masa que ve parpadear el valle de Mexico a lo lejos, como un "nacimiento" de Navidad. " . . . lMinistro de donde? iAtr<is! iAbajo Ia dictadura de Ubico!" Nos sentimos como aligerados de algo que pesaba mucho. Las sensaciones f(sicas son muy remotas, como si no fueramos dueiios de nuestros cuerpos. Solo Ia garganta, un poco seca, y Ia voz, demasiado ronca. Las cosas adquieren un perfil claro, perfectamente delimitado, y las acciones se perciben completas desde su origen hasta sus ultimas consecuencias. Hay algo, sin embargo, animal y superior. Por ani mal, superior todav(a a nuestras fuerzas y a nuestro cerebro razonador y prevenido. Las voces roncas son solo su expresi6n, / y solo quieren ser aturdimiento, sensacion de que hay vida, de que exisk algo y no esta uno solo en medio de toda esta congestion humana, arrebatadora y brutal. Mi camarada esta aqu(, y mientras el este todavla, seguiremos (? } gritando, accionado, sin miedo a Ia muerte. Si doy un ingenuo salto para librarme de un proyectil -ya del Foreign principian a sonar los primeros, tiros- alcanzo todav(a a sentir verguenza y me repongo inmediatamente porque mi camarada esta aqu(, junto, conmigo, disparando alegremente. El siente lo mismo. El brinca igualmente, pero al advertirme, tambien se repone, y grita y se 路envuelve en ademanes valientes y heroicos. Un ruido nos hace contener el aliento. Es un rumor sordo como

Digitalizado par

de un ejercito de abejas enloquecidas, furiosas y sin piedad. Poco a poco se hace mas claro, mas distinto, hasta que en Ia obscuridad, como rasgaduras feroces, los reflectores nos hieren en Ia propia carne poniendonos sombras por delante, inutilizandonos. Es Ia policla. Pero no ella solamente. Tambien los bomberos. Y los soldados. Con un ronquido cortante se detienen los carros inmensos. Entre las sombras se perciben los destellos de las fornituras y el lubricado ruido de los cerrojos al cortar cartucho. - i Pase, jijos de tal! Se hace un gran silencio, y ninguno nos movemos. Yo no me muevo si mi camarada no lo hace. El, lo mismo. Y los demas tambien, en una cadena reclproca de solidaridad, de espanto comun, de valor comun, de esfuerzo comun, de corazones comunes que Iaten al mismo tiempo dispuestos a lo heroico, a lo imponderable, por caminos bien distintos y contradictorios: por el valor, por el miedo, por Ia sangre, por Ia clase, por el hombre, por Ia muerte. El cielo sigue ajeno, imperturbable. Ajeno a inmortal. No ha pasado media hora aca, abajo. Alia no ha pasado un milesimo de segundo. El oficial, congestionado, miedoso, feroz -despues se asombrara el mismo- grita y gesticula. - iPasaremos ... ! iAbranse, jijos... ! Contestamos con viva Ia huelga, con mueras al gobierno, con vivas a los soldados, y esto es s61o una manera insolita, contradictoria, reconfortante y violenta de manifestar nuestro instinto de conservacion. El oficial estalla. Explica: - iTraigo 6rdenes de no andarme por las ramas ... ! - iPues entrele, esbirro jijo de veinte ... ! El cielo, parpadeante, azul, de obscuro razo, se nos nubia. Mi camarada ya no esta conmigo. Yo estoy en tierra, mojada mi camisa en un llquido espeso, caliente, acojedor, movil y puro.

lnstithtiQ

o路 . Jbr .de.. 1937..

路~J~ci~路al d\f'ei~CONAt.;ULTA BellasArtes


COMENTARIOS ALVI CAPITULO DE

''EL CAPITAL'' Jose Revuel tas

Carcel Preventiva abril 6, 1971 Querida hijita Andrea: Me temo que esta carta resulte demasiado larga, pero lo peor, tediosa. La causa es el haber recibido el VI capitulo del Capital, envlo que no se c6mo agradecer a las maravillosas Irina Coli y Dominique Eluard. iCuanto lo agradezco y cuantas ideas se desprenden de ah f! Adquiere lo mas pronto que puedas el libro, para que de este modo lo vayamos comentando y nos orientemas mutuamente. La presentaci6n y traducci6n es de Roger Dangeville. No lo digo porque no lo sepas, sino porque hasta en esto -las traducciones y ediciones de ciertos materiales- los dogmaticos ponen su dosis de malicia (ejemplo, Althusser en Ia Advertencia al Capital, recientemente editado por Garnier-Fiammarion, de Ia vieja traducci6n de j. Roy, traducci6n que Engels tomaba con tantas reservas), malicia del todo ajena a una persona como Dangeville, que traduce los "Grundisse", tarea que Ios dogmaticos neo-stalin istas jam as hubieran querido que nadie emprendiera. Althusser no se cuida de ocultar su despecho en Ia pinchurrienta Advertencia del Capital, donde habla de los "Grundisse" como "ensayos traducidos al frances bajo el titulo err6neo de Fundamentos de Ia Crftica de Ia Economfa Politico", y de toda Ia obra de juventud de Marx como "todavla idealista" y escrita en "terminos equlvocos (por hegelianos)". iQue golpe esplendido contra toda esa gentuza representa Ia publicaci6n de "un chapitre ine-dit", del que justamente podrla decirse "interdit"! De hecho nos prohibieron todo lo vivo del marxismo, desde los aiios 30, aunque lo publicaran (como los Manuscritos y los propios Grundisse), puesto que haclan ediciones (exclusivamente en ruso, primero, y luego en tirajes para "especialistas") lejos de cualquier alcance y sin Ia menor publicidad ni comentarios que

llamaran Ia atenci6n hacia elias. Bueno; el capitulo VI se ocupa del problema de Ia mercancla-capital, esto es, devenida en capital, lo que Ia distingue de Ia mercancla simple, pre-capitalista; luego, de Ia doble naturaleza del trabajo, como valor de uso y valor de cambio. Estas cosas, por supuesto, estcin tratadas en El Capital mismo, pero aqu I -en el cap. VI- aparecen en su desarrollo y profudizaci6n, lo que, a mi modo de ver, arroja una luz particular sobre dichas formas en su version "socialista" en los palses de economla planificada por el Estado (o sea, en el mundo de los palses socialistas, a los que ya resulta necesario Hamar de alguna manera que no sea precisamente tan equfvoca como Ia de "socialistas"). La forma mercancla-capital, bajo el sistema capitalista, anula el valor de uso de Ia mercancla, convierte en absoluto el valor de cambio; a Ia inversa, en los pafses socialistas, el trabajo-mercancfa, simetricamente, anula su valor de cambio, para convertirse en un valor de uso absoluto por Ia economfa estatizada. Hay que partir del siguiente punto de arranque: Ia mercancla-capital y el trabajo-mercancla, son formas que encuentran su desarrollo pleno y 6ptimo bajo el capitalismo, ciertamente. Marx se ocupa de un modo especlfico de este problema, por eso El Capital se subtitula: crftica de Ia econom(a politico. Marx hace extensiva su filosoffa cr/tica a un sistema de Ia economla vuelta economfa de Ia polis, es decir, una totalidad determinada. Esto, pues, no quiere decir que las categorfas econ6micas de mercancfa y trabajo (y bajo sus formas modernas: mercancla-capital y trabajo-mercancfa) dejen de existir en otras sociedades y adquieran formas nuevas, del mismo modo en que sus formas yo se han vuelto nuevas bajo el capitalismo moderno, que, no obstante, sigue siendo tan lijt'JiMoel ant~uo Cjpitalismo Nacional de •£CuNACULTA Digitalizado par BellasArtes


de Ia libre concurrencia. El hecho de que las formas mercancfa y valor-trabajo, ya hayan existido en otras sociedades econ6micas no-capitalistas (y aqu ( cabe bien el tan pobremente estudiado '!modo de produccion asiatico") quiere decir, en lo mas profundo de su esencia, que el proyecto humano, ante todo, es su desalienacion de toda economfa, precisamente cuando el proyecto socialista moderno no es otra cosa que Ia sujeci6n de todo el hombre a Ia economfa. Te escribo al correr de Ia maquina y en conceptos muy esquematicos. Pero enseguida copio una de mis anotaciones a Ia recension de Dangeville (p. 15, a prop6sito de una nota de Engels al pie de Ia plana). T6malo como un simple apunte, no obstante que obedece a viejas preocupaciones mfas, que a/ parecer encuentran un punto de apoyo en el Cap. VI, tan oportuna y providencialmente llegado a mis manos. Digo: Esto plantea (el desarrollo de Ia mercanda como una "segunda forma" modificada, de Ia mercanda simple) numerosos problemas dentro del cuadro general de Ia alienaci6n humana, por lo que se refiere a Ia totalidad Historia-Economfa. En esta totalidad concreto historico-econ6mica (y simplemente, nada mas por cuanto a ella y no otras totalidades del hombre situado, del hombre "en situacion") aparece Ia cuesti6n del desarrollo de los contenidos y Ia preservaci6n (mistificada) de las formas. Repito, nada mas por cuantp a esta totalidad y no otras formas y contenidos de Ia alienacion. Tenemos as( (dentro de dicha totalidad EconomfaHistoria) el siguiente cuadro de formas y contenidos: Propiedad Privada; Mercancfa (simple); MercancfaCapital; Producci6n; Plusval(a. Estas formas se aquietan (pierden su in-quietud), se fijan, se hacen inertes, mientras sus contenidos cambian, se desarrollan de una categor(a a otra: de propiedad privada en general (hist6rica), a propiedad de los medios de producci6n de mercandas (capital generalizado); de mercancla simple a mercancla-capital; de producci6n extensiva a producci6n intensiva (produccion de medios de producci6n); de plusvalfa absoluta, a plusvalla relativa (tecnificaci6n). Este desarrollo, en efecto, ha creado, de acuerdo con Marx, una sociedad nueva en su seno y que no se sale del capitalismo porque nace de el. Nuevas formas de Ia propiedad, de Ia mercancla, de Ia producci6n y de Ia plusvalfa. Esto, pues, en lo que se refiere a una nueva sociedad de Ia alienaci6n del trabajo, en Ia que se ha sobre-socializado Ia producci6n de mercanclas dentro del capitalismo. Pero paralelamente, en los ultimos 50 aiios, a partir de Ia decada de los 20, ha tornado forma, tambien, una nueva sociedad, que podrlamos !lamar el Estado del Trabajo (los sistemas socialistas), en el que adquiere un caracter un/voco el caracter equ/voco de Ia Republica del Trabajo (combatida por Marx) de los socialistas franceses a lo Louis Blanc. En estos modernos Estados del Trabajo (que te6ricamente no son sino Ia utopia manipulada, convertida en una especie de utopia factica, "cientifizada" por Stalin-Bujarin con el "socialismo en un solo pafs"), sobreviven bajo formas nuevas, los siguientes elementos: • La mercanda (socializad a, es decir, estatiz ada) ; • La plusval Ia absoluta (como explotaci6n del capi-

tal variable como el "capital mas precioso" -el hombre-, mediante normas intensivas del trabajo); • La plusval fa relativa (como desarrollo tecnico-cientlfico unilateral: preparaci6n belica y exploraciones espaciales); y • La propiedad-privada estatizada (el Estado como propiedad del funcionario y como gestor de Ia produccion de mercancfas). Hasta aqu( mi esquema en este aspecto del proble· rna. La cuesti6n reside en que el trabajo (esencia humana) aparece alienado en cualquier sociedad econ6mica no liberada de esta determinacion. Torno un parrafo de Dangeville en su "Presentaci6n" del capitulo VI. Dice: (p. 22) " ...Como Ia esclavitud y Ia servidumbre, el capital es producci6n de plusval Ia, pero Ia produce de una manera sistematica y a una escala siempre creciente. Como Ia producci6n mercantil simple, el capital se presenta por entero bajo Ia forma de mercanda, pero aqu( tiene una estructura compleja al estar compuesto de una fracci6n de capital variable, de capital constante y de plusval Ia. En suma: esta producci6n de plusvalla es creaci6n de capital : Ia producci6n capitalista produ· ce y reproduce todo el sistema (las relaciones de producci6n y de clases, las condiciones de una nueva producci6n al mismo tiempo que sus productos materiales). Aparece entonces como su propio fundamento, luego (como) eterno, y Marx se aplica a combatir esta pretension exorbitante y esta mistificaci6n que se impone a los agentes que estan implicados en su proceso, los capitalistas igualmente que los obreros." En este parrafo de Dangeville (que no es sino una recencion de Marx), hay que hacer notar, implfcitos, los siguientes elementos: a) La plusvalla como una categorla mas universal o una tota/idad mas amp/ia que: a') Las formaciones sociales determi nadas (esclavitud, servidumbre, sociedad mercantil); a") Ia mercanda misma (o sea, el trabajo aparece como una forma de Ia mercanda antes de que su propio producto se convierta en una mercancla como tal), luego: a·b) que las clases sociales (es decir, hay una explotaci6n, o mejor, una alienaci6n del trabajo, independientemente de Ia existencia de clases sociales). Este es un primer aspecto del problema. Un segundo aspecto, ser(a el siguiente: A. La producci6n capitalista reproduce todo el sistema, es decir, las condiciones de su nueva producci6n y de las relaciones de clase correspondientes: B. Esta autoproducci6n de relaciones de clase (es decir, de una forma de ser de Ia sociedad), aparece como su propio fundamento, crea Ia ilusion de ser un sistema "natural" y eterno; C. Con este movimiento, Ia pro ducci6n capitalista crea - al margen de su voluntad- una mistificaci6n, o sea, un estado social mental : una creen cia, un contexto ideo/6gico. Hago hincapie en esto ultimo, por el hecho de que Ia producci6 n socialista crea tambien, a su vez (pero aqu( no a l margen de su voluntad), un estado ideo/6gico, un "entusiasmo" ·al-re!i&ioso, do nde se mistifi-

. c~n l~s nuevas relac D1g1tahzado par

~g~~~ 1cg~6nt..CONACULTA BellasArtes


Dangeville cita un parrafo muy importante de una carta de Marx a Engels (24-VIII-1867}, que dice: "Lo que hay de mejor en mi libro (EI Capital} es: lo. Que pone en evidencia, desde el primer capitulo, el caracter doble del trabajo, seg(m se exprese en valor de uso o en valor de cambio, y es sobre esto en lo que descansa toda Ia inteligencia del texto; 2o. que analiza Ia plusval Ia, independientemente de sus formas particulares (beneficio, inten!s, renta del suelo, etc.}." En esta doble naturaleza del trabajo alienado desde sus principios, y tambien del producto desdoblado (en valor de uso y valor de cambio} que convierte, mas adelante, a Ia mercanc(a simple en mercanc/a-capital, y al trabajo simple en trabajo-mercancfa, hay un principio de una importancia extraordinaria. Si el trabajo simple (llamemosle asl} y Ia mercancla simple (casi accidental en las sociedades anteriores al capitalismo}, constituyen las premisas del trabajo-mercanc(a y de Ia mercanc(a-capital, luego entonces el capital, trabajo enajenado (o alienaci6n del trabajo}, constituye algo mas profunda que el capitalismo. Las formas socialistas en los pa(ses de "Estado Obrero", no vienen a ser, entonces, sino formas mistificadas del capital, no son sino el disfraz de una alienaci6n "superior", alienaci6n visible del todo en Ia existencia de un regimen de supresion absoluta de Ia libertad. Escrib( Ia siguiente anotaci6n en mi libreta de apuntes: Desde su aparici6n historica, Ia plusvalla senala al Otro antag6nico del hombre. Pero esta relacion represiva del hombre consigo mismo en el Otro, no es supresiva en terminos absolutos, sino en terminos relativos. Es una relaci6n dialectica (hombre contra hombre contra X, como doble oposicion}, que tiene su referenda unificante en X, si tomamos X como Naturaleza en su sentido mas amplio (pues X, puede ser, en un momento dado, una creacion humana}. De esta relacion nace el proyecto humano del hombre, que constituye, al mismo tiempo, su contraproyecto: en apariencia no puede regresar a Ia Naturaleza de ningun modo (o puede regresar del modo mas primitivo gracias a Ia aniquilacion de las fuerzas productivas}. Asf, en Ia medida en que se va haciendo mas humano al separarse de Ia Naturaleza, en Ia misma medida aumenta su tension hacia el Otro, tension que asume un caracter eminentemente represivo mediante instrumentos de destruccion que son cada vez mas aptos para Ia supresi6n del hombre, instrumentos de supresion con los que aventaja a Ia Naturaleza en ese mismo aspecto: mas eficaces que los terremotos u otras devastaciones naturales. Esta superacion positiva de Ia Naturaleza por el hombre, ha sido, hasta ahora, Ia relacion negativa del hombre contra el hombre: repito, aventaja en poder destructivo a Ia Naturaleza, sin haber llegado a igualarla en poder creador. En unos cuantos milenios de habitar sobre Ia tierra, y en el lapso de apenas los dos ultimos siglos, el hombre ha llegado a disponer de una fuerza que puede acabar con las formas culturales del planeta en un lapso de semanas, empeno que a Ia Naturaleza, por s( misma, le llevarfa millones de anos. Esta es una situacion real, hist6rica, y en apariencia tan sin salida alguna, que ha llegado al extremo donde el hombre no puede destruir sus medios de destruccion, colocado ante 路 Ia imposibilidad tecnica de hacerlo (el arsenal

路路r "'

.

.....,"' .

.. :

i , , '\.

IIIIII

Digitalizado par

...

...

.......


::,. .. . . .. ,

..

..

路路

.

at6mico ya no puede ser destruido} . Aqu ( no cabe hacerse preguntas respecto a d6nde vamos ni que queremos. Hasta ahora, el hombre fue un individuo. Un individuo social e hist6rico, cierto; pero nunca una especie raciona!. Lo racional no fue su fuerte, ni tampoco su rasgo colectivo total-humano, sino precisamente su !ado mas debil. Cierto, el hombre ha hecho su historia y con ella se ha creado as( ljl'lismo, pero no en otra forma que en Ia forma emplr icamente demostrada de lo que es como tal demostraci6n practica, no potencial ni ut6pica. Este ser del hombre, tal como resulta de Ia historia, es su propio y unico fundamento y no tiene ningun otro. El hombre pues, social e hist6ricamente, no ha podido producir sino al lndividuo: esta es, hasta ahora, su sola realidad-racional, impotente por lo demas. Bueno; por todo lo anterior te daras cuenta de lo apasionado que estoy en el problema y lo bienvenido que ha sido para m( el libro que me enviara Dominique. De otro modo esta carta hubiera resultado pedan-

ter(a pura; pero al parecer nadie quiere suscitar estos problemas, y antes de tener el atrevimiento de lanzarme en publico necesito bucear dentro de ellos e intercambiar ideas con Ia persona que esta mas enterada de mis puntos de vista, que eres tu. A medida que avance en el estudio, te ire enviando anotaciones y esquemas, pero por separado, para que las cartas no resulten tan pesadas y dispongan de un cierto campo para lo "personal". Bueno. Termino por fin. Espero con impaciencia todo lo que se refiera a ti y a tu nueva vida. No sabes como te quiere, Tu papa. Jose.

P.S. No hice capias de esta carta. Todo /o esencia/lo conservo en mis apuntes, aunque aquf esta mas desarro!lado (en Ia carta misma).

iSalud!

Digitalizado por


DIARIO JOSE REVUELTAS

,por cuanto los dirigentes no cejan de estar en contacto diario con el pueblo sin motivo o con el. iAh, pero los encargados de programa y los espantosos "actores"! . . . La otra noche estuvo en el casino del lnstituto Nacional. Algo abominable, repugnante y sin un gran interes (mas bien el espectaculo terminaba por ser triste) . A una atractiva y mas o menos tonta prostituta, le "preste" 10 a 15 pesos para que jugara. Perd i6, natural mente, pero resultaba extraordinaria Ia pasi6n vehemente, !lena de angustia desesperanzada, que ponla en el juego. (Escribire mas tarde todos los detalles de esta experiencia.}

.. .julio 25. Nunca he pensado en mi edad sino en relaci6n con Ia muerte. 0 dicho en otra forma: referida al tienipo de que todavla puedo disponer para cumplir ciertos prop6sitos, antes de Ia incapacidad y luego Ia derrota final. Lo demas que acarrea Ia edad (nuevo tipo de relaciones con Ia gente y el notorio envejecer} jam as me ha preocupado. Pero lo cierto es que si tal co sa no es preocupaci6n m fa, esto no quiere decir que las demas personas dejen de advertir que soy o voy siendo un ser distinto, del que necesariamente los separa cada ve z una distancia mas grande. (Aqul es donde radica mi imperdonable error con Diana.} Desde luego ella no ha podido ver en m( sino al hombre de quien Ia separa una increlble distancia en el tiempo, en el amor, en el estilo (y por otra parte ella no es una oportunista que quiera vivir con un hombre en atenci6n a sus virtudes o circunstancias intrfnsecas), hombre a quien tendr(a que acompafiar desde otro mundo, literalmente hablando. Este no sentirme en edad, pues, resulta un tanto grotesco, y ante mis ojos aparece a cada momento mas tonto , rid (culo e inhibitorio. He pensado mucho en el problema y de pronto me lo encuentro en un parrafo del Carnet de Dice: "Un novelista debe una creencia infan-

Digitalizado par

~~~~~~ยง~rtfitON~fOLTA BellasArtes


cosas que el sentido comun considera de escasa trascendencia. No debe crecer nunca del todo. Debe interesarse hasta el fin por asuntos que no son ya de su edad." Aunque lo anterior podrfa tomarse como un consuelo, tampoco esta dicho respecto a Ia vida personal, privada, biografica, del escritor. Se refiere a Ia actitud literaria, a Ia actitud ante los materiales de trabajo, pero no a Ia que un novelista de 47 afios debe tener ante sus propios asuntos. Mi tragedia radica en que yo no quiero crecer y me sigo conduciendo infantilmente ante situaciones dentro de las cuales es evidente que ya no soy el mismo personaje por quien yo me tomo, o por el que no me doy cuenta que me tomo. (Recordar esto para describir Ia psicologfa de Jacobo en Los errores.)

. . .A proposito de . Su cornet no puede ser mas util para u n escritor . Tengo numerosas observaciones que escribir sobre esas notas inteligentes, llenas de claridad - tan lejos de las "confesiones mlas" donde el escritor se desnuda y martiriza ante las miradas ajenas- y que plantean de un modo tan simplemente honesto problemas tecnicos y observaciones de las que un buen escritor siempre sacarfa provecho.

... Oividaba describir a un tipo extraordinario con quien me encontre hace lmas de un mes? , en Ia feria del Reparto de Diezmero (dfa de San Juan; bastara record arlo para situar Ia fecha). Se trataba del duefio de los aparatos de Ia feria, quien los alquilaba en concesion a los compafieros de Ia localidad. Rubio, de ojos azules, de complexion robusta, alto. Vestfa un traje que era una mezcla de gaucho y vaquero del Oeste. Botas relucientes, a media pierna, con bordados de oro; camisa de seda, abierta; "bombachas" argentinas y una especie de sombrero de estilo californiano, Es asf como se presentan en las ferias de Nueva Orleans y de tbdos los Estados

Unidos. Aquf en Cuba, eso se me hacfa increfble, fabuloso, aunque Ia gente lo tomaba con naturalidad (a causa de Ia prolongada influencia yanqui respecto a tales atuendos). El tipo hablaba de "servir a Ia Revoluci6n" con sus aparatos, sin entender nada de nada y con tan evidente interes comercial (como se puede hablar ante los o los habitantes de Honolulu), que Ia cosa resuhaba francamente c6mica y no inducfa a que se le tomara con exagerada inquina o molestia siquiera.

... La lnternacional, que antes apenas se tocaba, ahora esta de moda. Con motivo y sin el, a cada momento se escucha por Ia radio, se silba por Ia calle, Ia cantan los milicianos, Ia tararean los camareros al servir y se cubaniza: tambien Ia bailan en conga.

guardia, vemos a Fidel y escuchamos su discurso en TV sobre el canje de billetes. Me preocupa gravemente. Segun pienso de lo que se trata, en el fondo, es de restringir el consumo en una forma dirigida, energica y sin escapatoria posible para nadie (primero el canje de billetes y en seguida Ia estricta limitacion del retiro de fondos} como una medida previa al racionamiento. Combate de hoy {agosto 9) desliza una iniciativa del barrio de , en La Habana, para que se generalice una propuesta para racionar Ia carne, y se dan noticias de las cantidades de trigo, mafz, jam6n (ilOO toneladas!), que llegan en un barco proveniente de los pafses socialistas, Ia situaci6n debe ser mas dura de lo que pod emos percibir. Comienza Ia parte dolorosa que tiene que recorrer toda revolucion y en Ia cual los dirigentes deben cuidarse mas que nunca de conservar todo el dominio de sus nervios y una sagacidad polftica a toda prueba . (Ahora hay que permanecer mas que nunca firmes junto a Cuba.)

... Los marinos finlandeses borrachos de El Universo, Ia cantina del muelle.

Agosto . Parece ser que Ia buena suerte ya ha comenzado a "traicionarme". Lo adivine desde que hablamos de su viaje a Santa Clara (Ia semana pasada, en v(speras de Ia Ley sobre Canje de Moneda del 4 de agosto). Alia debfa reunirme con Eduardo (Ia informacion surgio sin querer). Ahora me habla -hoy- dandome ciertas sospechosas y divertidas (por el desenfado con que pretende darlas). La cosa -en el fondo, malignamente- me Iibera y me descarga Ia conciencia de algo que podrfa haber llegado a parecerme a m f una sensacion de remordimiento. (De cualquier modo es un buen material para cargarselo a Ia cuenta biognifica de Jacobo en Los errores iDios m(o! , si alg(m d(a llego a continuar esa lejanlsima y amada novel a.) un vago novio

Agosto 9. Por Ia noche, en Ia

Digitalizado par

... Holbein, que tambien es pintor (Departamento de "animaci6n" del IEAIC}, es mi jefe de pelot6n en las Milicias. Conversamos de todo, cada vez que hacemos Ia guardia juntos. Se me ocurre hablar del "sentido tragico" de Ia Cuba revolucionaria. La juventud que se Ianza por entero a Ia lucha clandestina contra Ia dictadura no tiene ninguna otra mira que un sentido tragico del impulso: sabe que irremediablemente va a morir; si alguien queda vivo, esto sera un regalo: Ia vida sed sobrevivida. Por tal causa Ia Revoluci6n triunfa (esto lo hago decir en a uno de los personajes), pero Ia Revolucion triunfante no asume Ia nueva existencia sino como dilema: pa~ tria o muerte; sigue predominando el patron de lo tragico y, en mi opinion, rhuy justificadamente. Cuba no esta en condiciones de quedarse en un termino medio: vida o muerte; solo puede ofrecersele una de las dos alternativas. Perecera del modo mas completo, a que no quela sino las cenizas (y

tt~~fUeliLTA


que esta listo para devolver instantanea (o casi simultaneamente) el golpe. Esto puede producir una cierta indecision en EEUU, pero me temo que sea de esas indecisiones relampagueantes que preceden apenas en un segundo a Ia tempestad. EEUU no ha propiciado Ia conferencia de Punta del Este para fracasar. Un fracaso norteamericano en el sera, en todo caso, relativo. Por lo pronto -y de cualquier modo por cuanto a los gobiernos b u rgu eses de America Latinaretaguardia latinoamericana de los EEUU, no sera peligroso para estos sino por cuanto a Cuba. Cuba esta, pues, en el crater de un volcan. Estos tres meses tal vez sean los decisivos. Bien; personalmente se trata de saber ocupar uno su puesto y cumplir sin descanso, sin vacilaciones. Ante todo morir con decencia .

sera fecunda y ejemplar), 0 VIVIra en Ia forma mas esplendida y magnifica. Holbein me escucha y me vuelve a m f. Con su rostro en maranado en las barbas que lo circundan y que le dan un vago aire de semejanza a ciertos rostros de Rembrandt. Sus ojos vivos y negros, de nutridas pestanas, resplandecen brillantes por algo que esta a punto de convertirse en lagrimas. Su voz tiene una entonacion extranamente conmovida y d.lida, en que se traduce una desesperacion animal, primitiva y solitaria. "iEs cierto! - dice- asf es, asf hemos vivido mi mujer y yo en Ia lucha clandestina y nuestra disposicion a morir es Ia misma ahora, despues del triunfo. iTienes que ayudarme, Revueltas! iQuiero aprender como se puede vivir para Ia vida! " - No encuentro ninguna respuesta a Ia mano. Me toma por sorpresa. Creo que le doy una respuesta burocratica, estupida, casi una consigna estereotipada, algun slogan de locutor de radio. (Agosto 7-8) (51; tres, o cuatro de Ia manana) .. .

...Con esa 路resignada actltud de

melancolicos sentenciados a muerte que adoptan las personas -desconocidas instantanea cuando ven en el elevador puede producir una cierta indecision

Agosto 11. A cada momento me siento mas alarmado y tambien mas pesimista. Los discursos de agosto 7 y el de hoy, ante Ia Delegacion rumana, indican hasta que grado Ia URSS trata desesperadamente de presionar hasta lo ultimo, para que Ia Tercera Guerra no estalle este ano. El lenguaje de no puede ser ya mas energ1co ni su tono puede ser ya menos revelador de lo inminente del desencadenamiento de un conflicto armado. En路 ese tipo de lenguaje premonitorio, brusco, grave e inequlvoco que se usa en las vlsperas, cuando los jefes de Estado ya saben que se esta en el ultimo momento, y que ya es cuestion de grados para que las casas se precipiten de una vez. Tal es Ia sensacion que, a mi parecer, trata de infundir tambien a los jefes de Estado capitalistas para hacerles saber que ya no se hace ilusiones y

Digitalizado par

. . .Acudo a Prensa Latina para recoger unos env(os de Mexico (carta de Andrea y una preciosa lata de chiles jalapenos que me manda Dolores de Ia Mora). La miliciana de Ia mota en PL -una negrita- ha colocado una blanca camelia en Ia boca del canon de su fusil, y no parece darse cuenta de Ia infinita gracia que encierra este gesto prodigioso.

Agosto 14. Agosto 14 y au n no se me invita al Congreso de Escritores Cubanos, que comenzara el 18. Son capaces de no hacerlo, lo cual sera extraordinario desde el punto de vista de Ia temible desaprension de los escritores cubanos, por una parte, y por Ia otra del estupido dogmatismo, del miedo, de Ia ignorancia y el espfritu burocratico que reina (o ha de reinar) entre los dirigentes. Por supuesto yo no me hare presente de ningun modo, aparte de que no me he preparado para participar (y luego Ia inmensa pereza de ver, tratar y hablar con los colegas, que en su conjunto cada vez me parecen - los de aqui y los de todas partes- una repugde fil isteos y oportu-

t_.CONACULTA


. . . Las tempestades en Ia bahla se han venido produciendo estas tardes entre las tres y las cuatro. La amplitud del horizonte y el inmenso espacio que ofrece el cielo, permiten verlas en toda su intensidad. Son unos desplazamientos de masas compactas que se desgarran sabre el mar, dentro de un horizonte y un cielo cambiantes, que a un mismo tiempo ofrecen distintas y contrapuestas calidades de color y de consistencia. El mar se encrespa con una calma interior, profunda, insensata y a Ia vez impotente, como de animal vencido. lnmediatamente despues vuelve a su calma, igual que un gigante que hubiese despertado de una pesadilla y comenzara a sonre(r. Un barco tenaz y Iento ha traspuesto hoy (agosto 14) Ia tempestad. Era indevorable y magn (fico bloqueado por las masas de agua gris. Enfilaba directamente al canal de La Habana y por momentos se hacla invisible por completo. Poco despues se escuchaba su sirena ronca, tremula y vencedora, en Ia que parecla adivinarse una especie de emoci6n, como en las voces de los viejos combatientes cuando narran Ia aventura recit~n pasada, y se siente como si las matizara una leve humedad ...

Agosto 27 (1961 ). Nada mas bello que las tempestades en Ia bah Ia. Es Ia il Iada - una guerra de las nubes, pura, de donde estan excluidos los hombres y en Ia que s61o los dioses tienen acceso a Ia batalla. Dioses ebrios y roncos que combaten como ciegos parsimoniosos, unan1mes y , maldiciendose con graved ad, con acompasada resonancia, dignos y majestuosos, sin odio pues no se les permite Ia grandeza de Ia lucha, advertidos como se encuentran por las armaduras con que se cubren y desde donde parecen mas temibles y bellos. Hermanos dioses borrachos y severos dentro de su ollmpica ebriedad, que descargan el gris y furioso de sus espadas cic16nicas sabre el mar como si castigaran a una bestia tremenda de Ia cual son dueiios y esclavos, pero tambien con una ira temblorosa y delicada, amorosos y

acariciantes, cada vez mas innobles sin conceder un segundo de tregua a su divinidad. jamas ere( que pudiera yo compartir con nadie estas tempestades, pero de pronto - aunque despues de soiiarlo, de anhelarlo tantoestamos ella y yo juntos, en media de Ia tormenta, sabre el malec6n, unidos y mirandonos, con todo mi amor puesto en sus ojos serenos, en esa elocuencia negra y at6nha de sus ojos quietos, fijos, atormentados por Ia extraiia profundidad solitaria y desesperada con Ia que miran. Por el sur Ia tempestad se aproxima y Ia esperamos abrazados con un deseo palpitante de que nos envuelva, de que nos fustigue, de que nos haga suyos salvajemente, de que le pertenezcamos sin misericordia. "Sin nuestros d ioses", decimos. Ella tambien acepta que estos sean dioses de los dos. Ah ( estabamos en nuestra il (ada mientras los dioses llegaban con sus escudos , hasta caer sabre nosotros y mezclarse a nuestros besos, entre nuestros rostros fervientes, su mirada abierta y sin llmites de ella en esa soledad donde nos enlazabamos sabre Ia superficie vacla del malec6n, sin nadie, de amor en esa tempestad donde parecfamos estar en un !echo furioso, perteneciendonos como si nos hubieramos dado mutuamente los ojos, como suicidas devueltos, como pedazos de mar. No acabo de comprenderlo, pero ha ocurrido as(, incre1ble, pasmoso y verdadero. ... Encuentro una fabulosa cita de Goethe: "EI ser humano jamas comprende cuan antropom6gico es."

Septiembre 78. Holbein otra vez. Su ternura es increfble. En Ia guardia me muestra los dibujos de su proxima pellcula animada para niiios (Ia historia de como un gusano se transforma en mariposa). Luego llama a su hijo por telefono. Es maravilloso como habla y que dulzura tan conmovedora, con su aspecto tremendo y sus barbas.

Sep. 27. En espera de que manana venga Roman a visitarme.

Digitalizado par

Sep.22- 7967-3:70 am. Debo poner en arden mis notas a partir del 27 de agosto, precisamente en que Omega y yo entablamos relaciones. Dio Ia casualidad que yo habla interrumpido mis actividades del Taller Cinematografico y del Curso de Marxismo, en espera de una reorganizaci6n del ICAIC con motivo del regreso de Alberto Guevara de Moscu. Hemos dispuesto, pues, 0 y yo, de tiempo (para nuestro romance). Ella es una muchachita llena de talento y de un egolsmo que no parece tener I(mites (escribire mas). Acaso -y sin el acaso, muy joven para m(, aunque a ella no le importa nada en absoluto de nada mientras se siente feliz. El tiempo pasa aqu ( en Cuba de un modo vertiginoso: 0 y yo cumpliremos en unos d (as mas, todo .un mes de habernos relacionado.

Escribir notas de BerlIn- Ia casa que habite, cerca del teatro y Ia Universidad. - EI Hotel NEVA (? ) El Prostfbulo de Huehuetenango, Guatemala... ~ Lena, Ia miliciana Personajes (Martucha, Ia muchacha de Cien Fuegos -Diana- , Gama, y Ia tempestad en el malecon) . Sabre ellibro de Tuchman: El telegrama El diario de

Seman a del 10 al 15 de octubre de 1961 (probablemente) Entre una y otra lectura de El Desaflo, de , escribo las ilneas que siguen. (Tomarlas en cuenta para el personajc de Jacobo en Los errores.) E:;cribir es una comunicaci6n ctbsclutamente individual entre un vo y otro yo - cntr:! nadie mas, aunque ese yo sean muchos; cl numero no es aqu( lo que importa. Es un acto privado, particular y secreta como el de quien sc pone .1 conversar con las esti路ellas. De ~ste modo tambien leer se conviertc en un acto identico, cntiendase que, digamos, como hacer cl amor: es individual v n.:catado - entre I

II

~:~~~~ ~~ c~~c~~~(ULTA

BellasArtes


especie. Leer, as(, no viene a ser sino Ia realizaci6n del escribir: alguien escribe y alguien lee y cada quien comprende las cosas, inevitablemente, a su manera. Pero aql.tl es cuando se entrometen los sacerdotes con aquello del pulpito, de Ia redenci6n de los pecados y de "escribir para las masas". Es decir, quieren que se predique. Que todos- hagamos moral, escritores y lectores, que nadie se contamine ni nadie contamine a otros. iAy!, sin duda todo eso es rigurosamente necesario, pero no ataiie ni al que escribe ni al que lee y tambien, sin duda, ni al que predica ni al que escucha a ese sacerdote que esta en el pulpito. Alguien escribe algo y, o puede no ser entendido en absoluto ni por su pals ni por su tiempo, 0 --lo que resulta mas frecuente- sera entendido de otra manera a como quiso darse a entender. AI teatro griego, por ejemplo lo estamos entendiendo cada vez - y esto desde el siglo A de C- - siempre en una forma nueva y distinta. Aqu ( me parece que radica el principia de nuestro trabajo literario .

. . . joaquin me llama por telefono para avisarme que en estos mementos ejecutan por radio musica d c S i I vestr e. Subo. 0 fmos y

Min isterio del Int. Departamento de Vigencia Sr. Luis Sobrado.

Noviembre 14. Reconstruyendo - hacia atras- el ultimo periodo, a partir de lo mas reciente. Mi ultima actividad (el d (a 10) una conferencia sobre los problemas del arte (EI Materialismo Dialectico y los problemas de Ia expresi6n estetica), en Ia Union de Escritores. Los escritorcs bri!!aron por su ausencia, pero a cambio de eso, una nutrida juventud de diferentes escuelas de arte. Me presenta al publico, Baraguiio - de las nuevas generacioncs literarias cubanas. No conozco su trabajo, pero sc me dice que es de las gentes que valen. Opinare mas adelante.


8 o 9 de noviembre de 7961. Echado hacia atras sobre el respaldo de Ia silla contemplo por Ia ventana un trozo de mar, durante una pausa, mientras escribo mi conferencia para el dla 10. El trozo de mar que contemplo no tiene ningun punto de referenda: es un mar aislado, un mar abstracto, como dentro del marco de una pintura. Un hombre flota bocabajo sobre las olas, apenas ligeramente cubierto por una delgada superficie de agua, y se mece, los brazos extendidos como, si con Ia cabeza inclinada, buscase algo en el fondo. La figura del hombre tiene esa precision irreal de las imagenes vistas a traves de unos prismaticos: ese decoloramiento que sufren los cuerpos cuando Ia lente los aproxima desde enormes distancias. Pero hay en el hombre una especie de abandono y laxitud, como si hubiese entregado al mar su cuerpo y lo dejase a Ia deriva, sin voluntad alguna de darle movimiento, esfuerzo, direcci6n, impulso, perdido su viejo poder de pelea. Permanece bocabajo, los brazos en cruz y las palmas vueltas hacia el fondo, mientras los hombros se mecen en un suave balanceo. Pero de pronto me doy cuenta de lo que ocurre con una sensa-

cion de sobrecogimiento que nunca habfa experimentado: no es po· sible que yo pueda ver a este hombre en tales proporciones; ocupa Ia mitad de Ia bahla. Adelanto el cuerpo hacia Ia ventana y en mi angulo visual entran El Mono, a lo lejos, y aqu I, abajo, en un primer termino, el malec6n. Estos puntos de referenda me serviran para re· cobrar Ia magnitud real de lo que sin duda he visto a causa de una extrafia distorsi6n. Lo extraordinario es que aqud cuerpo sigue ahl, ahora descomunal, inmenso, a Ia orilla de Ia bah Ia: es un titan, un gigante que flota en las aguas del mar, y cuyos brazos extendidos, sueltos, podran tener tal vez mas de quinientos metros. Lo observo hechizado y atemorizado a un tiempo, mientras se aduefia de mi un miedo extrahumano, increfble, una especie de miedo c6smico que no acierto a describir - algo como sentirme en el infinito, ante una cosa sobrenatural y nunca revela· da. El gigante logra levantar penosamente Ia cabeza que tenia calda sobre el pecho y Ia mantiene ergui~ da por unos instantes; conserva los ojos cerrados y hay en su rostro un profundo rictus de dolor silen· cioso y sujeto. Nunca, he visto una tristeza mas profunda, Ictal y terri· ble, reflejada ee1 ning(m rostro humano, nunca algo tan callado, tan noble y tan espantosamente sin amparo, ni esperanza ni tan lleno de angustioso y digno sufrimiento. Me paraliza una sensaci6n cosmica de panico, un pavor de Ia inteli· gencia -no un pavor de los senti· dos ni del instinto--, sino el pavor, el terror de las revelaciones. Com· prendo entonces que sufro una alucinaci6n y con un esfuerzo concentrado del cerebro, Ia imagen desaparece y con ello ese terror unico y abismatico. Pero aqu I inicio un juego diabolico: se que puedo atraer Ia alucinaci6n otra vez, que puedo invocarla nuevamente, con un impulso cerebral en ese sentido. Repito entonces Ia experiencia y el titan agonizante aparece de nuevo. Y de nuevo ese terror c6smico, que me reduce y que cuando esta a punto de llegar a su clfmax no puedo resitir un segundo mas, hasta que, temblan· do, angustiado, en el vado, recha· zo Ia vision hasta hacerla desaparecer. No obstante, esto parece irre-

Digitalizado par

nunciable --y ese panico me cauti· va, me tienta, y reanudo entonces el juego tres, cuatro veces mas, hasta darme cuenta que me estoy aventurando a trasponer una fron· tera sin nombre. Cierro los ojos y permanezco largo tiempo con Ia cabeza entre las manos, en el vcrti· go de una extenuaci6n que parece haber agotado Ia ultima de mis reservas. Es natural. La alucinaci6n ha sobrevenido a los cinco dlas de no dormir y de no separarme de Ia mesa, mientras escribo, escribo co· mo un desesperado.

... Bueno. La conferencia, con todo, no result6 absolutamente mal aunque no pude aprovechar, por falta de desarrollo, numerosos rna· teriales, de los que me servire mas adelante.

En Mexico.

21 de septiembre de 1963. Hago una pausa en mi trabajo -seran las "11 pm.- para descansar mientras escucho Radio Universidad. Cornu· nica una voz: Paulino Macip ha muerto. Me causa una pena enor· me. No se por que me pongo en pie y as( permanezco varios minutos, en que se reproducen en mi mente escenas donde Paulino aparece en nuestros encuentros ulti· r:1os. Busco entre mis libros el Diario de Hamlet Garcia para releerlo y sentir que Macip no ha muerto y que puedo encontrarme con el cuantas veces lea un libro suyo. Las palabras con que me dedica Hamlet Garcfa me llenan de una profunda nostalgia y una tristeza amarga y desconsolada. Paulino escribi6 para mf en Ia primera pagina de su libro: "A Jose Revucltas, escritor y hombre de fc robusta, dedico esta historia del maximo con mi admiraci6n y mi amistad cordial lnstituto Nacional de BellasArtes

Paulino Macip"

~~~ULTA


ACUARIUM, SIGNODEEMA Comencemos por decir algo trivialmente triste: el acuarium es el agua, mas el agua dispersa que no tiene contorno hasta que el hombre Ia vuelve una pila de agua, pila de agua bendita para justificarse, para darse nombre o para aprisionar peces. Y he aqu ( que los peces, esos hermoso:; y eternos prisioneros del agua, necesitan otro clemente vivo y contradictorio como ellos que es el aire. Se manejan entonces estos prisioneros eternos, los primeros prisioneros de Ia tierra porque antes ae que el hombre fuera prisionero, antes de que el hombre emergiera en Ia tierra, ya los peces estaban prisioneros en su campo de concentraci6n que era el acuarium. Y ¡ aqu( viene entonces ese ¡desorden c6smico, esa protesta c6smica de Ia constelaci6n acuarium que no quiere permanecer en su sitio, que se quiere rebelar contra nuestra galaxia y queda ahl como constelaci6n alterada, probablemente donde exista un otro y horrible yo semejante a nosotros. Primero fue el agua y en el agua no los peces, sino los pieses de Ia mujer que amamos, a veces llamadatu. Agosto 24/7 4

Digitalizado por ,...,•...,, BellasArtes


LA

A Ia edad que jose muri6 Consuelo comenz6 a pintar. Para Ia exposici6n que en julio de 1975 ella present6 en Ia Casa del Lago elle escribi6 un texto sencillo y certero: "Si de algun artista puede decirse que sea natural, es de Consuelo Revueltas. No s61o por Ia inquietud dominante que Ia mueve hacia Ia .naturaleza y el paisaje, sino por el trazo y Ia inspiraci6n que se antojarfan espontaneos de no ser fruto de una acusada memoria plastica y de un color meditado que surge de su pincel con una gracia luminosa llena de transparencia y pureza. En Ia pintura de Consuelo no hay ninguna buscada ni efectista sencillez: es Ia sencillez misma en su expresi6n mas directa y conmovedora." Lo que Jose dijo de Ia pintura de esta hermana nueve anos mayor que el puede aplicarse tambien a 5U caracter y a SU conducta: sencilfos, limpios. Hay en sus afectos y su memoria transparencia y pureza. Con Ia seguridad de que no agregarla adornos ni tejerla deformaciones en funci6n de p6stumos "prestigios", le fui a preguntar c6mo habfa sido jose de nino. Nos sentamos en torno a Ia mesa de su pequeno comedor, donde ella suele pasar cJatro o cinco horas diarias pintando. Unos dulcecitos, un rico te negro humeante, cl teletono - descolgado para evitar interrupciones. Fernando Moncada, su marido, camina en puntitas de zapata para no molestarnos. El ambiente es lo suficientemente afectuoso como para convocar los anos de infancia de esc muchachito al que en su casa nunca llamaron Pepe, sino jose o josesito. De los hermanos mayores Silvestre y Ferm fn es poco lo que Chelo recuerda. "A ellos desde muy j6venes los mandaron a estudiar en el colegio de San Eduardo, en Austin, Texas. Solo llegaban de vacaciones y poca oportunidad tenia de tratarlos. Uno de los maestros de Silvestre, el brother Luis, 路 le escribi6 hace unos tres o cuatro anos a Rosaura diciendole que se acordaba de Silvestre, de lo apticado y disciplinado que habfa sido. Un modelo de muchacho, como lo era tambien Fermfn. Ningun muchacho a Ia familia fue travieso o desobedientc. Cuando Silvestre y

INFANCIA. DE JOSE SEGUN CONSUELO

RAQUEL TIBOL

Digitalizado par

I

~:~tt~acre df~E6~icl.JLTA BellasArtes


Durango eran Ia sensaci6n de rmestras amigas, los dos muy bien vestidos y hablando ingles. Entonces era una novedad que los muchachos estudiaran en el extranjero."路 Despues de esta breve introducci6n entramos a los anos de infancia de jose. -Era un nino magnifico, muy obediente, muy sumiso. Cuando vivlamos en las calles de Uruguay debe haber sido un chamaco de siete u ocho anos, cuando mucho, y con frecuencia sal fa de Ia casa a ver a un "Cristo", un sant6n que trala una tunica blanca, una barba rnuy crecida y hablaba mucho de comunismo. AI regresar escribfa con todo cuidado lo que el sant6n aquel decfa. Blanca es un decir, porque Ia tunica estaba bien sucia y el sant6n bien grenudo. Explicaba Ia igualdad entre los hombres. jose hac(a sus apuntes en unos papelitos que guardaba con verdadcro esmero. lnftuido por lo que o(a solla decirle a mi mama: "La voy a entrevistar ." Agarraba papel y lapiz y comenzaba las preguntas: "LCree usted en Dios? , lCree usted que algun dfa seremos todos iguales, que no habra ricos ni pobres y todos tendremos de que vivir? " Esas entrevistas tambien me las hac(a a mf y a Ia prima Margarita que vivfa con nosotros. Como si dudara de mi credulidad, Chelo insiste: "iVieras que nino tan bueno era! " y vuelve a escarbar en sus recuerdos. _:_ Antes habfamos vivido en Ia planta baja de una casa en las calles de Guanajuato. Arriba viv(a Ia duena que seguido vela a jose con los libritos que vend fan en las iglesias con Ia vida de los santos. "lQuc estas leyendo? ", le preguntaba. "La vida de los santos." "lQue santos? " "Santa Margarita de Alocoque, Santa Margarita de Cortona, de San Pablo que lo iri6 1..111 rayo y que entonces vio a Dios." Chelo insiste en Ia bondad. -- Era buenc , se conformaba con lo que se le daba, no exigla mas de comida, de zapatos; el muchachito mas conforme que quieras vcr. Lo que no le gustaba era que ten (amos muchos pretendientes. Una manana muy temprano le dej6 a mama una carta en un florero. Dec(a as(: "Me voy de Ia casa porquc mis hermanas son muy no-


f i

ot-~tt

4 {n ~

t

ao~,. t.A.~

0,0~ CAt~ -~

oo=£3k;=trt~~:e~

~

ta e.&• &1AD\IliU46,

It tAJ4 f}~ I ~-~ ·~l bi/W.IO

l\tJ4

rr.o k.C wUM

..Ju"~~" fftit ~"'"'te

l

"'~' ~-\o

vieras." La apuraci6n de mi mama y de toda Ia familia fue muy grande. Lo buscamos por un lado y por otro. A bs dos dlas lleg6 mas ralido que un lim6n. Habfa estado todo el tiempo en Ia Alameda sin comer. De ah( se cur6 para siempre de los celos. Ten fa entonces unos doce aiios. Quiero saber cuando comenzo Pepe a trabajar. - Cuando vivfamos en las calles de Revillagigedo y Pescaditos, junto al jardln Pacheco. Tenia mas o mcnos trece aiios. La casa se llamaba Ricoy y Trujillo, ahi tuvo compaiieros que cran absolutamcnte de izquicrda, segun lo que yo se. Otros dicen otras cosas, tal vcz sepan mas que yo. Tc digo lo que vi, senti y pasc. Cuando trabajo en Ridoy y Trujillo empezo a tener Ia cabeza !lena de esas ideas. Como lo velan chiquillo, lo mandaban con el bote de engrudo y una brocha ancha. De por s( tan chaparrito. . . Fue cuando lo agarraron por primera vcz y lo meticron a Ia Corrcccional. Ahl 1bamos a verlo mama y yo, todo flaco, terco en sus ideas. Mama le decfa: "Hijito, l.por que andas en esas cosas? , te van a llevar a Ia carcel y te van a hacer algo." "Mama, el mundo es muy injusto", respondfa. En una ocasi6n fuimos a verlo, lo tenfan en una caseta al fondo del patio, lo hab (an llevado de castigo parque se quiso escapar, pero los encontraron. Eran tres y cuando ya estaban en el agujero del techo un chiquillo les dijo: "Lievenme, no sean malos." Conmovidos lo quisieron sacar y les cayeron . jose Revueltas Gutierrez, el padre de Pepe, murio el lo. de diciembre de 1923. La mama era hija de un minero y de una senora hija de espaiioles. Los abuelos maternos se llamaron Edelmira Arias y Fermin Sanchez. A don Fermin le encantaba el trago, pero era tan habil como gambusino que siempre lo buscaban como gran experto. - Despues del fallido intento de fuga, se lo llevaron con otros compaiieros a Tamaulipas, a un Iugar fronterizo, Antes de eso lo habfan pasado a Ia Penitenciar(a y mucho nos conmovi6 cuando fuimos a visitarlo y vimos que lo trafan sostenido entre dos. No podia caminar solo porque se habia puesto en huelga de hambre.

Digitalizado

El primero en tener ideas de izquierda en el hogar de los Revueltas fue Silvestre. - Silvestre no ejercio una influencia directa en los demas. No nos in flu (amos unos a otros. Cad a quien hac(a sus cxperiencias, sus lecturas y tenia su modo de vida. Lo que nos influy6 es que veiamos las injusticias con los pobres. Mi padre tenia su buena biblioteca y desde muy chicos empezamos a leer a Valle lnclan, Martinez Sierra, Ricardo Leon, Balzac, Emilio Zola, Dostoievski, Ivan Bunin ... Desde muy chicos nos enseiiaron a leer todo eso. Los Iibras influyeron en nuestras ideas. Muere el padre y las mujeres, sobre todo las mayorcitas, se pusieron a trabajar para sostener Ia casa. No recibieron ayuda de nadie. - Ocupados en sus cosas los hermanos mayores no se preocupaban si comfamos o no, si nos hartabamos o no. Tampoco se enteraban demasiado de las andanzas de Jose. A mi mama le dolio mucho verlo como habia quedado por aquella primera huelga de hambre. El Ia consolo diciendo que ya estaba tomando aguita de limon. Un d ia nos avisaron que se iba una cuerda a las Islas Marias con los subversivos, los presos pol (ticos. Ahl fuimos mi mama y yo aver si ve(amos a josesito. No, no iba en esa cuerda; pero que doloroso fue ver a los pobres muchachos en carros de ganado, dandoles un jarro de comida. No lo vimos, despues · nos avisaron que de Tamaulipas le llevar(an a Mazatlan y de ah f a las islas. Dicen que cuando llegaron a Mazatlan para embarcarse, se en· contro que el lanch6n era conducido por el teniente de corbeta Alfonso Vertier, que enamoraba a lucha, mi hermana. AI ver a jose lo conoci6 y le dijo: "l.Que andas hacienda por aqul, chamaco? iMira nomas! " Como respuesta agarr6 sus tilichcs y paso el puente del lanch6n cantando Ia lnternacional. Entonces uno de los soldados le dio un bofet6n que le hinch6 Ia cara, pero Jose no cedio, sigui6 adelante. Los maestros hideron una manifestaci6n llevando en cartel ones su retrato; ped (an que regresaran de las islas a el y a otros menores de edad. Me parece ~ftwo Gil hjz_.o .-llW"bq, .JWI;, Nacional de •&\.UNA\.ULTA par BellasArtes


ellos para que los regresaran, y !os regresaron. La manifestaci6n no fue muy grande: unas cicn gentes llevando en palos rusticos los retratos de los muchachos. Le pregunto a Consuela cuando se fue Pepe de Ia casa. - Desde muy chico dej6 de vivir con nosotras para no compro~ meternos porque todas eramos muy jovencitas y mi mama una dolorosa. Cuando regres6 de las islas se cas6 con Olivia. La ponla por las nubes, Ia comparaba con personajes de Ibsen. Nos llevamos muy bien con ella hasta que se separaron. Cuando se cas6 con Marla Teresa dejamos de verlo hasta 1968 ya en Ia carccl. Como yo disponla de mas tiempo iba a verlo todas las semanas. Emilia y Rosaura trabajaban, Marla vive en Cuernavaca y Cuca en Alemania. I ba los jucves. Ahl estaban las mismas piedras, las mismas descascaradas que velamos cuando lo visitibamos de chamaco. Ah( estaba Ia b6veda y Ia gran mesa de cementa con bancos alredcdor. jose me decla: "Vamos a tomar un cafecito." Cuando miraba a los otros presos el me comentaba: "Ves ese de los ojos muy tiernos, mat6 a su mujer a hachazos." De cada uno contaba su historia. Una vez como a las 12, cuando empezaba cl retrcte, me dijo: "Vete porquc va haber bronca." Mientras me alejaba vi que todos, como changos, se sublan a las rejas. Quiero saber cuando comenz6 J ose a tomar. -- De muy joven. Como yo detesta el vino no se que pensarla. Pienso que hubiera sido mejor que no tomara. iQue lastima que tomara! Mi papa no tomaba. El abuelo Ferm(n sl. No creo que sea hereditario. Jose cambi6 radicalmente cuando se separ6 de Olivia. Sablamos que escribla, que tomaba; pero hasta ah f, nada mas, completamente alejados. Su caracter. -- TenIa mucho sentido de humor. Se burlaba de el mismo y de 'toda Ia familia, no en forma ofensiva. No dejaba tltere con cabeza, de todos ten fa algo que decir con gracia, con tal en to. i Inventaba cada cosa! Segun el, ten fa su angel de Ia guarda que le hada montones de cosas. Dec(a que una vez el

angel lo dcj6 desamparado y llegaron unos monos y lo golpearon. Y se quejaba: "lPor que me dejaste solo, no te doy gusto, por que me fuistc a dejar? " Todos en Ia familia tenemos sentido de humor, Silvestre tambien, pero era mas ir6nico. Fermin no tenia sentido de humor. ijose contaba cada mentira... ! Cuando chiquito, era tan curiosillo. Delante de las visitas cantaba: "Marchita el alma, triste el pensamiento" y otras canciones que nos ola a nosotras. Cuando tenlamos reuniones papa nos ponla a tocar a Emilia y a mf a cuatro manos. jose y Marla no

tenlan gracia. Los domingos papa nos lela muchos versos muy bonitos, de Santos Chocano, juan de Dios Peza, Manuel Gutierrez Najera. Tenia bellos volumenes de todas esas cosas. Aqul, como en Santiago Papasquiaro, tuvo tienda. Mi abuelo se llamaba Vicente Revueltas y era espafiol de padre y madre. Vino de paseo y se encontr6 con mi abuelita en una casa de unas ricas en Sinaloa. Ahl Ia tenlan recogida, resguardada o encomendada. Se llamaba Consolaci6n Gutierrez. La pidi6 en matrimonio a las viejecitas que Ia hablan adoptado. AI padre Vicente le gustaba


r

~~a~~~~ ~m, at

t1 a.\'

~(~6

~ni~~~~,.t.. ;;. qol--. et."" Ji alT )

•h~lh~ \tn .. ptdi' 0

t kll~ • ~- ~ JC t!!C\to V\ tt

t1t

.

Ut ~i &tu l" ~"'Leo#l lt6J dtl ~ uk\t. fA~}' ·~

~·~ 4t ~f ~ Wt.N \o. bu~, ~till ~ a I&:MM:i!2\. Mt ~ ~ ~.41 O:i~UIA~ IJt ~ iJ~\4\~-­ Odiota

~ fri~ 1 ~fa

/flf

~

& dMAAY~ f&l'J'-&i~ Milia I( ~f'~co , .~

-~&c&a£tt't tti

lli

~

~Ia Gk'" tlt ••· f., lo ~C¥$o'. ~

t""6o

Ia Jibaci6n. Era afinador de metaJes y en su casa tenia peroles, fuelles y fraguas. Le pagaban bien, pero botaba el dinero y no tenia un centavo; por eso desde muy pequenito ya estuvo mi papacito en una tienda despachando, cuando apenas alcanzaba el mostrador para dar los quintos de azucar. De ah ( su afici6n al comercio. Las relaciones familiares. - Nos hernos querido mucho todos. Cuando Rosaura tenia dinero ayudaba a Silvestre y a jose cuanto podia. Cuando no en una cosa o en otra, todas las hermanas los ayudabamos. Nunca supieron si eramos santas o pecadoras, si ten(amos para comer o no tenlamos. Para Ia educaci6n tanto de los hombres como de las mujeres mi papa no se puso J(mites. Siempre nos pon(a a estudiar, nada de quehaceres en Ia casa. T odas estuvieron en el Colegio Aleman, ah ( hicieron primaria y secundaria. Mi papa querla que siempre estuvieramos estudiando. En Durango, Rosaura, Emilia y yo tenfamos maestra de piano. Mi padre se asoci6 con don jesus Gutierrez en las tiendas "Las Mariposas" y "EJ Naranjo". Nos tenlan por gente rica pero ranchera. La maestra de piano r.os pedla las sillas prestadas para los conciertos, pero no nos invitaba. Sentlamos muy feo que nos discriminaran, y mas cuando estaban sentadas en nuestras sillas. iC6mo me pudo doler tanto! La familia y las ideas de jose. - T odas estabamos al pendiente de sus cosas. "lPor que mejor no escoges algo distinto? ", Je dedamos mientras pod (amos hablar con el. Siempre tuvirnos un respeto absoluto a su vida, a su familia, a su casa, a sus ideas, a su comporta· miento. Que si tomaba, que si dejaba a Ia mujer, eran cuestiones suyas. Entre todos el respeto mas absoluto y mucho amor. Yo adoro a mis hermanas y a mi hermano Agustin, que vive en Los Angeles, California. El pinta, pero no quiere que se sepa. Tiene mucho sentido del humor, es muy simpatico para platicar. Hay cosas que el escribi6 que me parecen hermoslsimas, so· bre todo sus cuentos se me hacen fabulosos. Otras se me hacen demasiado crudas, demasiado descarnadas. Yo le deda: "iAy, a fuer-

Digitalizado par

zas tienen que poner estas cosas tan feas! " En el libro Material de suefios, editado en 1974, Revueltas puso esta dedicator ia: " Para Ia gran Consuelo, hermana, consuelo e imagen de bondad y de talento. Su hermano jose." Mientras hojeo el libro Chelito recuerda: - Cuando regres6 por primera vez de las Islas Marias Jleg6 a Ia casa con paludismo. Vivlamos en Las Delicias y San juan de Letran. Se pasaba temblando, consumido. iPobre! Cuando tenia cuatro o cinco anos le gustaba jugar a los toros. Ten(a una muleta chiquita y un capote. Alguna vez Je sacamos una foto. Entonces le gustaba llenarse las bolsas de sapos, ranas, abejas. "Te va a pi car algun animal ponzonoso", le dedan tas vecinas ... Los Revueltas cambiaban mucho de casas. - Cuando llegamos de Durango vivimos en las calles de Guanajuato, despues mi papa compr6 casa en las calles de Queretaro, despues vivimos en las calles de Uruguay. Cuando mi papa muri6 nos fuimos a vivir a Revillagigedo y Pescaditos. No nos gustaban los barrios tan pobres y tan feos, se nos hadan muy s6rdidos esos mundos. Mi papa habfa luchado por algo mejor. Mi papa era muy bonito. Mi mama era bajita, rosada y de cutis muy fino. Cuando enamor6 a Olivia Peralta le describi6 nuestra casa como algo miserable; ella sc imagin6 que Ia traerfa a una vecindad y al llegar de Ia sorpresa se querfa salir. Silvestre y Jose se adornaban diciendo que eran muy pobres. Pero no era de pobres educarse en el Jnstituto de Chicago, como lo hicieron Silvestre y Fer· min. Para Ia ultima mujer de Pepe, Ema Barron, Consuelo tiene palabras de afecto y reconocimiento por Ia manera como lo cuid6 en los ultimos anos de su vida. Piensa que quizas haya problemas entre los hijos de Jose y ella; pero en Iugar de hacer tremendismo piensa que todo podra solucionarsc. Le pido que me muestre los ultimos paisajes que ha pintado. Son, como sus sentimientos, como sus palabras, como sus recuerdos, diatanos, sen-

~~~Pde ali~CONACULTA BellasArtes


CONVERSACIONES CON REVUELTAS

JAIME LABASTIDA Esta tarde, y desde hace cinco d las, pienso que solo Ia lluvia podrla llegar hasta tu cuerpo endeble, averiado por una y otra destrucci6n de cirugla, reducido a cuarenta y tres kilogramos minutos antes de tu muerte . lC6mo hablarte, entonces, con que !engua de cal, y as! no acida, encender las dos 0 tres palabras que nos reconozcan? N u nca te vi junto al mar, sino en los s6tanos, frente a cinco camaradas o entre Ia multitud de octubre. No importa ahara esta forma sorda y s6rdida del dialogo: siempre estuviste encerrado, hoy un sarc6fago, una cascara antes, las prisiones o un cuarto, Ia botella de ron, las discusiones asperas y largas en las que jamas nos o(amos, siempre. La lluvia, aguda espada de ruina , entra tan espantosamente como un alfiler de ponzofia en el coraz6n . Llueve, Jose, lo mismo que otras veces. Lo mismo que otras veces, el hueso ya destruido, el arbol y su t6rax congelado. Otra vez, igual que ahara, o(amos a mitad de Ia lluvia un oboe y un lamento. "Esta no es musica para charlar, escuchamos 0 discutimos." y una vez mas las palabras espesas y el alcohol lnstituto y tres voces y un grito y los pe

Digitalizado par

Nacional de BellasArtes

t_.CONACULTA


los arboles dulcemente cansados, como huerfanos que buscaran, igual que tu, calor. lgual que tu, en los tranv(as y en las calles, los arboles se derrumbaban, dormidos. "La muerte es 路maravillosa. En el momenta de morir presenciamos Ia transicion de una frontera a otra frontera incre(ble. La muerte es privilegio por excelencia de Ia materia humana." Desesperado por no encontrar trabajo, Pedro Barcenas Hultzil, de treinta afios de edad, se suicido comiendo un pan con raticida.

La 16gica de este sistema es de una simplicidad extrema: el represor inactiva Ia transcripci6n y, a su vez, es inactivado por el inductor. De esta doble negaci6n resulta un efecto positivo, una afirmaci6n. La 16gica de esta negaci6n no es dia/ectica: no conduce sino a Ia simple reiteraci6n de Ia proposici6n original, escrita en el c6digo genetico. Es cierto que dudabas, tu el perseguido, el inconforme, el prisionero, el que escribiste sabre una patria muda, tu el expulsado, tu el que dijiste "Soy el responsable de todo". lQue hemos hecho de ti, ahara? Apenas puedo creer que solo seas esa imagen atroz, imperceptiblemente estatua, un gesto blanco. Porque tu tambien propusiste una cacer(a contra los dogmaticos, ensoberbecido de humildad, violentamente un santo que deseo morir y arrastrarse hasta las vias del ferrocarril y mansamente tenderse como un perro, igual que un perro, con objeto de que esa masa enorme, (gnea, tranquilamente aplastara tu craneo, ese craneo las ultimas veces fatigado, apenas suavemente colerico, solo en ocasiones irritado. "Me matar(a, si no me detuviera el dolor que provocar(a en los seres que me aman." Beb(as entonces para destrozarte. Horas enteras luchabamos para darte dos cucharadas de caldo, un pufiado de arroz, un pedazo de queso y tu te gastabas en silencio. "EI acto sexual es un acto tlpicamente mortal", o sea, una destruccion. lAcaso ten (as miedo de dar alguna parte de ti y en el acto de amar se desprend (a un toxico y Ia vida? El obrero Juan Gonzalez, desesperado por no ten er con que alimentar 11!1ijij11!1\D

. . I' d D1g1ta 1za o par

Nacional de Bellas Artes

t ..CONACULTA


estuvo a punta de morir porque acudi6 a vender, cuatro veces en una semana, casi toda su sangre al Hospital de Urgencias.

La 16gica de este sistema es de una simplicidad extrema: Ia ffsica nos ensefia que, salvo en el grado cera, /(mite inaccesible, ninguna entidad mi,crosc6pica puede dejar de sufrir a/teraciones de arden cuantico, cuya acumu!aci6n, en el interior de un sistema macrosc6pico, a/terara Ia estructura, de modo gradual pero inexorable. Por eso eran cada vez mas delgados tus brazos, mas intransitable tu tos que arrancaba verdaderamente pedazos de rafces y bronquios averiados; y tu pancreas, tu hlgado destrozado (como si fueras un pequefio y moderno Prometeo, comido por el pico del alcohol, unico buitre capaz de corroer tus intestines y herir cada una de las celulas de tu dafiado organismo) . "La clase obrera mexicana ha carecido, hasta hoy, de su vanguard ia." lgual que una piedra feroz esta evidencia. "EI gran organizador de derrotas, el extrafio monstruo bicefalo, tambien llamado Rey Midas de Ia muerte", es incapaz de transformarse; "construiremos una nueva organizaci6n revolucionaria". Pero luego olvidaste estas palabras. En Ia sierra del estado de Guerrero, los padres cambian a sus hijas menores de edad por guajolotes, gallinas, corderos o conejos.

La /6gica de este sistema es de una simplicidad extrema: los seres vivos, pese a Ia perfecci6n de su maquinaria, que asegura Ia fide/idad de Ia traducci6n, no escapan a esta ley. La muerte de los organismos p/uricelulares se explica par esta acumulaci6n de errores accidenta/es de traducci6n que degradan poco a poco, de manera fatal, Ia estructura de los organismos. De modo que es eso solamente, jose. Por esa raz6n estas ahora dolorosamente incrustado, como una semilla espantosa que no germinara jamas porque el sarc6fago impide todo movimiento de putrefacci6n y vida mas alia de sus Ilm ites. Lleg6 un momenta en el que tus celulas no pudieron ya mas con el peso de su propia reproducci6n y todas las que manten(an Ia cantidad normal de azucar en tu sangre, las que contribu(an a Ia eliminaci6n del alquitran en tus pulmones fallaron o siguieron una ley ~~~~~~~de necesaria e im placable: Ia del erro Digitalizado par BellasArtes

t_.CONACULTA


"La nueva contradiccion aparece de modo necesario como una correlacion entre superestados nucleares en su conjunto. No distinguimos entre Ia Union Sovietica, China o los Estados Unidos." Apenas puedo escuchar entre tantos acentos uno tuyo. Aqu( ya no opon(as Ia clase obrera a su enemigo, sino Ia humanidad contra el estado nuclear. No pod (amos comprendernos mas. Cualquier punto tocado era como una llaga purulenta, un muro seco, un polvo duro, mas pesado que el viento ; como si Ia garganta, el esofago, Ia lengua fueran solo de yeso y produjeran sonidos blandos pero ni una frase que tocara en verdad el o(do del otro . El 18 por ciento de Ia poblacion latinoamericana, o sea, entre 45 y 50 millones de habitantes, vive por debajo de los !(mites de indigencia, mejor dicho: muere de hambre.

La 16gica de este sistema es de una simplicidad extrema: esta ley determina una acumulaci6n de miseria proporcional a Ia acumulaci6n de capital; lo que en un polo es acumulaci6n de riqueza es, en el polo contrario, acumulaci6n de miseria, tormentas de trabajo, despotismo, ignorancia y degradaci6n moral. l Unicamente el azar se encuentra en Ia base de toda novedad , de toda creacion en Ia biosfera? l El azar puro , solamente el azar, Ia libertad absoluta pero ciega, en Ia ra(z misma del prodigioso edificio de Ia evolucion, hace que todo sea posible? lHara el azar, o el error, que una muchacha vibre como un coree! herido? lAiguna ley obliga a los amantes a que sean "dos naufragos adentro de un tenebroso y encendido oceano, agitados por una locura animal, combatientes hasta el exterminio, con Ia furia mas tierna y enemiga, con Ia prisa mas lenta y amorosa"? Debo decir: no se, no se. Debo decir : te quiero con un dolor extrafio y mutilado , como podr(a tal vez amarse el pedazo de mano que nos falte, Ia porcion del encefalo mas ro(da de luz, mas hambrienta de sombra. Oigo el rumor del r(o y un eco de nostalgia vegetal invade el cuarto: otros d(as, otras voces, Ia medida y Ia lucha, Ia necesidad dolorosa del amor y el amparo. Mi lengua ya fue de cal , tu cerebra ceniza, quiero decir res idua de combustion y llama inapagable . Agosto de 1976

Digitalizado par

lnstituto Nacional de BellasArtes

t ..CONACULTA


EL PAISAJE DEL HOMBRE Arte fotogr&ftco de RODRIGO MOYA

El hombre, de cualquier edad y en todas sus actividades, siempre ha sido, como es 16gico, un tema que ha ejercido especial atracci6n para los artistas plasticos, pero muy especialmente para los fot6grafos, pues ellos - debido a las caracterlsticas de su testimonio- son los que pueden captar Ia realidad instantanea y convertirla en un documento grafico fidellsimo. Esta serie fotografica de Rodrigo Moya tiene como tema al hombre captado en situaciones anguspre deriva de Ia realidad vivida por tiosas, pero esta angustia no siem-

el personaje, sino de Ia nueva realidad creada que impacta al observador de las fotograflas. Rodrigo Moya parte en sus creaciones de una gran sensibilidad personal y de una capacidad de observaci6n de Ia realidad aguda y sutil (los personajes de las fotos de Moya rara vez descubren que una camara los ha detenido en el tiempo y el espacio). A estas caracterlsticas se a(ma un deseo de perfecci6n en Ia realizaci6n material de Ia fotografla, es Ia busqueda del tono perfecto, del negro, de los grises; es el oficio de fot6grafo

Digitalizado par

llevado a Ia categorla de virtuosismo en todos sus aspectos tecnicos. Los hombres y las mujeres captados en esta serie de impresiones sobre papel, forman parte de una realidad lacerante y ajena al observador en muchas ocasiones, pero que sin embargo, viven y transcurren por los mismos lugares que este. E/ paisaje del hombre visto con los ojos de Rodrigo Moya es una serie fotografica que impacta tanto por su belleza compositiva, como por su perfecci6n tecnica, como I~M8 sentido huma no .


Digitalizado par

lnstituto Nacional de BellasArtes

t ..CONACULT'A


__... -<--

Nacional de BellasArtes

t ..CONACULTA


Digitalizado par

lnstituto Nacional de BellasArtes

t ..CONACULT'A



Digitalizado par


Digitalizado par

lnstituto Nacional de BellasArtes

t ..CONACULT'A


Digitalizado par

lnstituto Nacional de BellasArtes

t ..CONACULT'A


VIDA CULTURAL y

ARTISTICA

INTERNACIONAL El lnstituto Nacional Smithsoniano presenta, con motivo del segundo centenario de Ia independencia de los Estados Unidos, una serie de exhibiciones sobre el arte en todas sus manifestaciones durante estos doscientos aiios. Entre las muestras que forman este ciclo · estan America como sfmbolo, La frontera y Ia America indfgena, £1 pariente americana, Sfmbolo en Ia ciudad americana y 7876: arte americana del centenario.

• En un concierto extraordinario Zubin Metha dirigi6 a Ia Orquesta de Los Angeles y a Ia Filarm6nica de Israel en un concierto en el cual Ia solista fue Ia soprano Beverly Sills .

• En el lnstituto de Arte de Chicago se present6 Ia exposici6n Art Noveau: Belgica-Francia que contiene mas de 700 trabajos de destacados artistas de este estilo que floreci6 a principio de siglo, muchos de los cuales nunca hablan sido exhibidos en el continente americana. Entre los artistas incluidos en esta muestra estan Lalique, Horta, Guimard, Mucha, Tiffany, Galle, Bracquemond y Livemont.

• Expertos en teatro procedentes de diecisiete palses europeos, de los Estados Unidos y de pa(ses asiaticos, se reunieron en el antiguo castillo imperial de Viena para discutir Ia historia del publico del teatro internacional. La conferencia fue organizada por Ia Federa-

LTA


tion Internationale pour Ia Recherche Theatrale (F IRT) y por el lnstituto de Investigaciones sobre el Publico de Ia Academia Austriaca de Ciencias. En el curso del congreso internacional se llevaron a cabo conferencias sobre diversos temas, como .las caraterfsticas del publico de teatro en Ia Union Sovietica, en Ia India, en el japon, en Turqu(a y en Bulgaria.

• Como contribucion al festival "Otofio en Estiria", los teatros "Vereinigte BUhnen" de Graz, capital de Estiria, Austria, presentaran en 1977 por primera vez en Austria Ia opera E/ Para/so Perdido de Krzysztof Penderecki. Se trata de Ia segunda opera dramatica que el maestro polaco ha compuesto segun Ia epopeya del poeta renacentista John Milton; el libreto es obra de Christopher Fry. Despues del estreno mundial que tendra Iugar en el proximo diciembre en Chicago, y despues de una serie de funciones previstas en el Teatro della Scala de Milan para mayo de 1977, Ia ciudad de Graz sera Ia tercera etapa de dicha opera~

• Pellculas rodadas por directores de prestigio internacional, como Pietro Germi e lngmar Bergman, se presentaron al publico durante Ia "Vienal 76", que se llevo a cabo en Ia capital austriaca. Bergman ha adaptado al cine Ia opera Flauta Magica de Wolfgang Amadeus Mozart, y Germi puso en escena el film Amici miei, una pellcula satfrica sobre los hombres italianos; dicho film fue terminado por Mario Monicelli despues de Ia

muerte de Germi. El programa del festival "Vienal 76" se compuso de pel fculas procedentes de los sigu ientes pafses: Australia, Belgica, Republica Federal Alemana, Republica Checoslovaca, Francia, Grecia, ltalia, Japon, Noruega, Persia, Polonia, Suecia, Senegal, Union Sovietica y Estados Unidos.

• En Ia "Fiesta de Hellbrunn" se presento este aiio en el escenario al aire libre Ia opera Orfeo de Claudio Monteverdi, en Ia puesta en escena del profesor Oscar Fritz Schuh, director artfstico del festival austriaco. En el jardfn delante las murallas del castillo tuvieron Iugar representaciones de Ia opera El maestro cantor de Domenico Cimarosa, y en el "Patio de Honor" se llevaron a cabo representaciones de Ia comedia Medico a Ia fuerza de Moliere. En torno a los juegos de agua, los solistas del cuerpo de baile de Ia Opera Nacional de Viena presentaron una seleccion de "pas de deux", y en el "Theatrum" hubo representaciones de Ia comida Striptease de Mrozek. Ademas, los programas de Ia "Fiesta de Hellbrunn" comprendieron ciclos de canciones, representaciones pantomfmicas, y conciertos de coro .

• Su primera opera larga, Boulevard Solitude, estrenada en Hannover el aiio 1952, ha sido escenificada ahora por su autor, Hans Werner Henze, a invitacion de los WUrttembergische Staatstheater, de Stuttgart. En los proximos aiios, el mismo conjunto de Ia Opera de Stuttgart quiere presentar bajo Ia direccion del compol!fl~l!#tp esceniJ:a d..eJi.e!l~e~ sitor Ia mayor , , , Nacional de .... CONA~ULTA D1g1tahzado par BellasArtes


distintas versiones representativas. Con su escenificacion de Boulevard Solitude -Ia pieza se basa en Ia novela ya antes utilizada por Massenet y Puccini, Manon Lescaut de Abbe Prevost. Henze quiere dirigirse tanto al publico de opeta como a los amigos del ballet; las escenas de ballet son parte importante de Ia opera. En este punto se distancia el compositor de Ia escenificacion de Jean-Pierre Ponnelle, que en 1974 presento en Munich en Iugar de bailarines de ballet, mufiecos de tamafio natural sobre Ia escena. Como Ponnelle, tampaco situa Ia accion al comienzo de los afios 50, tiempo del estreno, sino en el presente. Henze ha alud ido repetidas veces a que Ia realidad de hoy ha adelantado a lo que se anticipaba entonces, por ejemplo en Ia huida a las drogas, 0 a lo que el llama el fetichismo de las mercancfas. "Las aguas de Ia historia han arrastrado Ia obra mas cerca de Ia realidad actual de lo que uno pudiera nunca haber pensado". "Por eso hay que realizarla siempre con nueva gente joven." La interpretacion ofrecida en Stuttgart convencio en opinion de Ia crltica por Ia direccion de Henze, y por su extraordinario nivel musical bajo Ia direccion del joven director invitado Dennis Russell Davies .

• La expos1c1on ambulante Nefertiti-Akenaton, ha atraldo una inesperada afluencia de visitantes en Munich. En las primeras tres semanas se contaron ya 70,000, que comparados en el total de 400,000 personas que contemplaron Ia exposicion en sus anteriores estaciones en Estocolmo, Oslo, Viena y Bruselas, supone una cifra muy esperanzadora para los organizadores muniqueses.

De las 90 obras de arte exhibldas de Ia epoca de Amarna, 71 proceden de tres museos egipcios: el Museo Egipcio del Cairo, el Museo de Luxor y el Centre Franco-Egiptien; el resto del material pertenece a Ia ciudad de Munich. Las obras de arte son de Ia epoca de Ia 18 dinastla. Se agrupan alrededor del faraon Amenofis IV, que luego se llam6 Akenaton, y de su esposa Nefertiti. Se trato de un soberano que en una grandiosa proeza aislada introdujo el monotelsmo, proclam6 al sol como unico dios, y le construyo una ciudad, Amarna. Los testimonies de esta epoca de mas de 3,000 afios de antigOedad, y en su mayorla dafiados por el tiempo, se han presentado esplendidamente en Munich en Ia nave central de Ia Casa de Arte, totalmente revestida de negro. En BerlIn -proxima estacion de Ia exposicion- se mostraran ademas el famoso busto berlines de Nefertiti, junto con otros tesoros de las existencias del Museo Egipcio en Berlin-Oeste y los prestamos egipcios.

.......

Simbolismo en Europa. Un proyecto realizado en estrecha colaboraci6n de los cuatro organizadores, el Museo de Rotterdam, los Musees des Beaux-Arts de Bruselas, Ia Reunion des Musees Nationaux de Paris y Ia Staatliche Kunsthalle de Baden-Baden. Con esta exposici6n, que despues de exhibirse en Rotterdam y en Bruselas se mostro en Baden-Baden quieren los organizadores dirigir su mirada a una epoca de Ia pintura relegada casi por complete a Ia "trastienda de Ia historia" por el posterior triunfo del lmpresionismo. Unas 260 pinturas, dibujos y I ffas de ~8 artistas, procedentes de • 1,6 p~ lses europeos 1~~~~16JO•(ite~l'C:\JLTA

D1g1tahzado par

BellasArtes


el "talante anlmico" de esta epoca, que no se manifesto en un estilo unitario, sino en multiples formas de expresion. La seleccion ofrece Ia posibilidad de trazar lfmites claros entre el arte simb61ico, fantastico, surrealista y finalmente simbolista, y asf visibilizar Ia esencia de Ia pintura simbolista. El panorama abarca desde los prerrafaelistas ingleses {Burne-jones, Rossetti, Watts), los simbolistas franceses en sentido estricto (Puvis de Chavannes, Moreau, Bresdin, Redon, Gauguin, Maillol), los artistas alemanes y suizos de Ia misma epoca, entre los cuales se cuentan Klinger, Marees, Stuck y Bocklin, llegando a los lfmites del Jugendstil y el Art Nouveau, de forma que se presentan importantes obras de Hodler, Klimt, Munch, Thorn Prikker, Toorop, Beardsley, Vallatton, Mucha y otros artistas belgas, italianos, daneses, finlandeses, noruegos, polacos, rusos, espafioles y checoslovacos. Las rafces de esta pintura llegan al Romanticismo y sus impulsos alcanzan hasta los periodos azul y rosa de Picasso, el Orfismo y el Surrealismo, pero tambien hasta el reciente "performance art" europeo, de artistas franceses y suizos. "EI Simbolismo, como se muestra en esta exposicion, era hacia 1890 un movimiento verdaderamente europeo que se habfa impuesto tanto en Helsinki como en Praga, San Petersburgo, Cracovia, Glasgow o Amberes. Fue Ia internacional de un nuevo Arte", "Lo que agrupo a sus discfpulos fue ... ante todo un sentimiento vital comun: Ia repulsa al Positivismo con su ciega fe en el progreso" .

• El Teatro del Estado de SaarbrUcken se presento en Tiflis {Union Sovietica) con tres operas y tres piezas de teatro. Se present6 E/ buque fantasma y Lohengrin de Richard Wagner, La Flauta magica de Wolfgang Amadeus Mozart, Ia Visita de Ia vieja dama de Friedrich DUrrenmatt y Nathan el sabio de Gotthold Ephraim Lessing, asf como una pieza popular georgiana. El publico de Tiflis pudo ver algunas de estas obras en doble version: una vez en Ia escenificacion original alemana, y otra en una interpretacion con cantantes y actores georgianos bajo direccion alemana.

NACIONAL Septiembre Artes Plasticas En el Museo de Arte Moderno de Chapultepec se presento, hasta el d fa 12, Ia exposicion Los artistas mexicanos, los de otras partes del mundo y Olivetti. Se inauguraron las siguientes exposiciones: Seis decadas de pintura mexicana, juan Soriano, Cruz Diez y Enrique Estrada. En el mismo Museo se proyectaron pelfculas sobre arte frances, brasilefio y venezolano los d las 2, 7, 9 y 30 y se realizo un ciclo sobre problemas del arte latinoamericano con Ia participacion de Juan Acha, Manuel Felguerez y Rita Eder de Blejer. En las Galerfas del Palacio de Bellas Artes se presentarori las exposiciones de Leonardo Brooks, 77 pintores ingenuos de Cuba, Paisajes de j esus Gallardo, Humberto Naranjo, Alberto Fuster y Salvador Ferrando y Salon anual de Ia pl<istica. Continuaron las muestras de Guillermo Zapfe, Nuevas valores del Salon de Ia P!Ostica Mexicana y Retrospectiva de San tos Balmori. En Ia Galerfa Ch sieron Luis Mauricio, Lisette Parodi, Mi

Digitalizado par \

miic~NA~bLTA


jose Clemente Orozco, Enrique .Bostelman expuso Fotomorfosis; en Ia Velasco tuvo Iugar una colectiva de los 25 afios de Ia galerfa. En Ia Galerla y en el Salon de Ia Plastica Mexicana expusieron, respectivamente, Esther Gonzalez y Mario Orozco Rivera. En el Museo de San Carlos concluyo Ia muestra de Ia coleccion del museo de Grabados y dibujos europeos y se inauguro una sobre Arte neoc/asico. Danza El Ballet Folk/6rico de Mexico se presento en sus funciones habituales de miercoles y domingos, y el grupo de coros y danzas de Ucrania Veriovcka los dlas 6 y 7, ambos en el Palacio de Bellas Artes. Musica En el Palacio de Bellas Artes Ia Orquesta Sinf6nica Nacional inicio su temporada de Otofio 1976 en homenaje a Manuel de Falla con un par de conciertos celebrados los 路 d las 3 y 5 con musica de Falia, Liszt y Dvorak, bajo Ia direccion de Uri Segal. La temporada continuo los dfas 10, 12, 17, 19, 24 y 26, con Ia orquesta bajo Ia batuta de Segal, jacques Bodmer y Erich Berge!. Los solistas de estos conciertos fueron Guadalupe Parrondo, Malcolm Frager, Myung Wha Chung y Cristina Ortiz. El d Ia 2 se presentaron en un recital de arias de opera Guillermo Sarabia, Guillermina Higareda y Cristina Ortega, acompafiados por Ia Orquesta Sinf6nica del Estado de Mexico dirigida por Fernando Lozano.

La American Simphony se presento en Bellas Artes los d las 11 y 13 en el Palacio de Bellas Artes interpretando musica de Revueltas, Ravel, Copland, Wagner, Liszt y Beethoven. El director fue Enrique Batiz y como solistas actuaron Eva Marla Zuk y Gyorgy Sandor. Charlie Byrd, Barney Kessel y Herbelis - The great guitars- se presentaron en Bellas Artes los d Ias 23 y 25. Dave Brubek y su grupo de jazz actuaron en el mismo escenario los d las 28 y 30. En Ia Sala Ponce tuvo Iugar el d Ia 24 un concierto a cargo de Leticia Sanchez. En Ia temporada de Musica de Camara en Ia Pinacoteca se presentaron Elzbieta Milczarek, Edilberto Lopez, Manuel Enriquez, Luisa Duron, Camerata Instrumental de Mexico, juan jose Calatayud, Coral Mexicano, Carmen Betancourt, Federico Ibarra, Quinteto de Alientos de Ia OSN, Coro de Madrigalistas de Guatemala y Marla Teresa Castrillon. En el Museo Alvar y Carmen Carrillo Gil tuvo Iugar una serie de conciertos en Ia cual participaron Gloria Tapia, Quinteto Clasico de Alientos, Guadalupe Campos y Karl Sakofski. Teatro En el Teatro Gorostiza se presento Manuel Lozano y su teatro para nifios {sabados y domingos) y Ia temporada de teatro escolar para primarias con las obras Sancho Panza en Ia Insula y El caballero de Olmedo, dirigidas por Edgar Vivar y Miguel Flores. En el jimenez Rueda se present6 el teatro escolar para secundarias co II a pueblo feliz. . I' d Nacional de t ..CONACULTA

. D 1g1ta 1za o par

Bellas Artes


PLATICA CON ARTUR LONDON SOBRE MIPADRE

Paris, 20 de mayo de 1976. Querido Oscar Oliva:

ANDREA REVUELTAS

Digitalizado par

Me has pedido que escribiera algo sobre mi papa, pero por el momento me resulta bastante dif(cil, el dolor y su presencia, aun tan proxima, me impiden un juicio claro. Por esta razon prefiero platicar sobre el con una de las personas por Ia cual mi padre sintio un profundo afecto y sobre quien estaba escribiendo un ensayo desde hace algun tiempo: me refiero a Artur London. Cualquier aspecto que se aborde de Ia vida de mi padre siempre estara Iigado a su pasion fundamental, Ia lucha revolucionaria por Ia transformacion del mundo en que vivimos, Ia lucha por el socialismo, con sus periodos sombr(os: el estalinismo, los procesos de Moscu y mas tarde los de Hungr(a y Checoslovaquia, y sus momentos de esperanza como el XX Congreso del PCUS y Ia llamada Primavera de Praga en 1968. Mi padre desde el primer momento se entusiasmo cori las noticias que llegaban de Praga y segula con gran interes todo lo que pasaba alia. Recuerdo aun su indignacion y congoja cuando Praga fue invadida por los tanques sovieticos. Pues bien, Artur London esta lntimamente ligado a 路 Ia experiencia checoslovaca, sufrio en carne propia el periodo estalinista; acusado en el Proceso Slansky de los aiios 50, en Ia primavera del 68 se encontraba al !ado de sus compatriotas luchando por Ia construecion de un socialismo diferente. Sobre todo esto, comienzo por hacer unos recuerdos con Lise y Artur London: Artur London. Me acuerdo que Ia primera vez que tuve noticias sobre Ia actividad de Jose Revueltas fue cuando viniste a nuestro departamento, poco tiempo despues de haber sido publicada La confesi6n; me hablaste de el, quien en esa epoca se encontraba en Ia carcel. Yo acababa de recibir Ia edicion espanola y te di un ejemplar para que se lo hicieras llegar a Ia prision. Andrea Revueltas. Se lo remitf en septiembre de 1970. El libro causaba inmensa conmocion en

nii~6if~aJLTA


en Mexico. Su lectura lo apasiono de manera increlble. Se trataba del primer libro en el que un comunista, vlctima de los procesos estalinistas, analizaba este fune~to periodo. Cuando lo volvl a ver, en mi siguiente visita a Lecumberri, no hablaba sino de las impresiones que le habla causado su lectura. Le parecla sorprendente el paralelo que existfa entre Ia vida de London y Ia suya. De Ia misma generacion de comunistas, los dos habfan comenzado a militar desde temprana edad, antes de los 14 afios, y a partir de ese momento se hab fan entregado por entero a Ia lucha revolucionaria. Muy jovenes ambos hab fan comenzado a conocer tambien Ia carcel, y en uno y otro habfan influido en Ia formacion de su conciencia pol ftica las noticias referentes a Sacco y Vanzetti; mas tarde fue-

ron delegados de sus respectivos partidos al Congreso de Ia lnternacional en 1935. A.L. Cierto, tuvimos un destino comun, mas o menos de Ia misma generacion, seguimos el mismo camino de lucha. El en America Latina, en Mexico; yo en Checoslovaquia primero, luego en Espana durante Ia guerra civil y despues en Francia. Los dos hemos tenido que hacer frente a los mismos problemas, a las mismas inquietudes y compartimos igual esperanza en el porvenir. (Mientras escucho las palabras de London me viene a Ia mente una frase que mi padre escribfa en una de sus cartas: "Tu relato de Ia conferencia de London, te lo confieso, me hizo llorar . iLos comunistas ... ! Es decir los comunistas autenticos. Disto mucho de ser un buen comunista, pero

Digitalizado par

no disto nada de nuestro sufrimiento y lpor que no decirlo? de nuestra amargura. Cada que me encuentro con un comunista de los 30 -y quedan pocos- me basta mirarlo a los ojos: son un pozo de tristeza, de larga e inere fble soledad . Queda algo importante: el amor que nos tenemos y Ia decision desesperada, si lo quieres, de seguir luchando.") A. R. Con el mismo entusiasmo que manifesto ante mf les hablo del libro a sus compafieros de cruj fa. El libro paso de mano en mano y fue lefdo con enorme interes. A. L. Siempre me acordare de Ia emocion que experimente cuando recibl Ia carta de un joven mexicano, compafiero de carcel de Revueltas. En ella me relataba las reacciones de los prisioneros ante Ia lectura del libro. A. R Sf, una carta de Echeve-


8

Digitalizado par

rrla, quien se encontraba en Ia misma crujla. A. L. Nuestro amigo nos contaba que Revueltas habla organizado un seminario dentro de Ia prisi6n para analizar el libra. Y como era el (mica ejemplar, para que todos pudieran conocerlo, nadie pod(a quedarse mas de dos dlas con el, y en ese lapso deblan leerlo. Su lectura habra suscitado mucha emoci6n, y en torno a el, auspiciadas par Revueltas, se hablan promovido largas discusiones. Saber esto me conmovi6 intensamente y me infundi6 muchos alientos. A. R. Desde entonces mi padre sinti6 par ustedes inmenso carina; a traves de una amiga les envi6 el manuscrito de su obra de teatro Nos esperan en abril. El decfa que hablan pasajes de esta pieza que paredan extraldos del relata de tu encarcelamiento a causa del proceso Slansky. Desde entonces naci6 en el el proyecto de escribir un ensayo sobre el libra y sabre los procesos. En una de las cartas que me escribi6, cuando se encontraba aun en Ia carcel, me deda: "Puedes decirle a London que me he propuesto un trabajo extenso sabre L 'A veu, no solo en el sentido literario-pol(tico, sino en todas sus significaciones par cuanto a los procesos, como real idad del socialismo enajenado, Ia real subversion hegeliana de Ia Idea Absoluta convertida en historia objetiva. Ya estoy en ella." Para el era sumamente importante sefialar los errores cometidos en Ia lucha revolucionaria. Este mismo afan te impuls6 a escribir sabre tu experiencia, l no es as!? A. L. As( es. Pienso que se trata de alga indispensable, Ia de denunciar los errores, los cr(menes del periodo estalinista. Si estos hechos no son denunciados, si no se hace un analisis profunda de sus causas, Ia situaci6n no podra corregirse y Ia construcci6n de un socialismo diferente, tal como lo concebimos y deseamos, no podra abordarse. Considero que se trata de una cuesti6n muy seria: Lenin deda que el silencio sabre un error es a veces mas grave que el error mismo. A. R. lC6mo concibes tu el socialismo? A. L. Por lo pronto mi concep~gst:jl~c~~~amen~ te6ri~ J:>Ues 11 Nacional de ,_.CO.,.ACULTA BellasArtes


creo que el socialismo no existe todavfa a ningun pafs: se encuentran estructuras socialistas en ia Union Sovietica, en las democracias populares, pero se trata solo de estructuras socialistas y no de un socialismo integral, floreciente, que realice totalmente al hombre. El social ismo no significa unicamente Ia socializacion de los medias de produccion, el socialismo implica algo mas que eso, algo que no ha sido solucionado: Ia cuesti6n de Ia libertad y del humanismo. Ambas integran el proyecto socialista, son inseparables de el, mientras no sean resueltas no podra hablarse de existencia de socialismo. Este debe incluir e impulsar todas las conquistas democraticas, que algunos consideran "formales", adquiridas precedentemente por el ser humano, obtenidas a traves de numerosas lu chas y numerosas v fctimas, y que conservan su validez, tales como Ia libertad de expresi6n, Ia libertad de impugnaci6n, Ia libertad de reunion. . . El proyecto socialista, en su forma actual, ha sido por desgracia deformado, por Stalin y otros, y no toma en cuenta al hombre. En 1968 se intent6 en Checoslovaquia de manera muy seria Ia renovaci6n del socialismo, tomando en cuenta las rafces hist6ricas del pafs, su desarrollo economico, social, politico y cultural, y las experiencias dolorosas del pasado mas reciente, es decir, el periodo estalinista. Se quiso construir un socialismo democratico, un socialismo denti路o de Ia libertad; esta experiencia era impulsada a Ia vez por el partido comunista checo, por sus dirigentes y por todo el pueblo. Por desgracia, esta tentativa no pudo triunfar, pues 600 000 soldados y 6 000 tanques del contingente del Pacto de Varsovia invadieron Checoslova.quia y destituyeron al Gobierno de Ia Primavera de Praga, electo democraticamente y en forma mayoritaria por el pueblo checo . A partir de 1969 se volvi6 a las practicas del pasado, repudiadas por el pueblo; y es asf como el autentico socialismo no pudo realizarse. Los otros pafses "socialistas" tuvieron miedo de que el ejemplo de Checoslovaquia se propagara: por eso aplastaron esta

tentativa de renovaci6n que el pueblo habfa denominado tan justamente, "socialismo de cara humana". Aun recuerdo todas las preguntas que sobre ella me hizo Revueltas cuando vino a verme por primera vez a Parfs. A pesar de Ia gran distancia que separa a Mexico de Europa y de los acontecimientos europeos, el manifestaba un gran conocimiento sobre todo lo ocurrido en 1968. Se interesaba por conocer Ia situaci6n de Ia oposici6n checoslovaca despues de Ia ocupaci6n de Praga, de como se continuaba Ia lucha. _Su interes me conmovi6 al mismo tiempo que me caus6 gran placer. A. R. Tu vida ha estado dedicada por entero a Ia lucha revolucionaria : me gustarfa saber que consejo darfas a las nuevas generaciones de revolucionarios. A. L. Algo que dijo Marx a su hija cuando ella le pregunt6 cual consideraba como cual idad humana mas importante. Marx respondi6 : Ia duda. Eso mismo digo yo a Ia juventud: poner todo en duda, cuestionar todo, ver, examinar, jamas creer ciegamente sin examen ni reflexi6n, como lo hizo mi generaci6n durante tanto tiempo, y por desgracia durante un periodo que es como una sombra negra sobre el socialismo. Por otra parte, tomar el mismo camino que tu padre y yo seguimos, el camino de nuestra generaci6n, seguir adelante Ia lucha, dejando a un lado todo lo negativo, e impulsar Ia realizaci6n de un socialismo verdadero, reclamado por un numero cada vez mas grande, que aporte al hombre, a Ia humanidad, Ia libertad en todos sentidos. (Me despido de Lise y Artu_r London y pienso en Ia ultima carta que me escribi6 mi padre donde me dice: "Releo La confesi6n, y esto me hace recordar muy vivamente a los London. Saludamelos con gran carifio de mi parte. La relectura de La confesi6n no es gratuita, sino obedece al proposito de escribir un ensayo sobre el sentido esencial de los procesos desde el punto de vista de Ia aparici6n de un tipo nuevo de estado (es decir de violencia) en las relaciones humanas de este bestial mundo contemporaneo .")

Digitalizado par


G

EL PROBLEMA DELA CONFORMACION ARTISTICA EN DOS NOVELAS DE REVUELTAS* TALLER DE CRITIC A LITERARIA DELINBA EDUARDO CASAR SILVIA DURAN PAYAN CARLOS MUCINO ARMANDO PEREIRA

La contradictoria realidad que muestra Revueltas en sus personajes no es solo Ia contradiccion de las actitudes de los personajes, sino que alude a una concepcion del hombre como un ser esencialmente contradictorio, como "Ia floracion mas alta de Ia materia". El hombre es el producto del desarrollo de Ia materia, donde esta se muta dialecticamente y crea su contrario en s( misma: el pensamiento. Asl, el hombre nace "impuro", como "materia que piensa"; es contradictorio, pues, porque ha sido engendrado por Ia contradiccion. Todo es materia, mas el hombre es materia pensante, su cualidad especlfica radica en su lucidez posible. La obra de Revueltas esta configurada artlsticamente no solo por los argumentos antes expuestos, sino, sobre todo, porque su concepcion del mundo esta organicamente integrada a Ia forma. Esta concepcion del mundo dinamiza y dirige Ia materia objetiva que Ia obra se plantea, construye un contenido determinado al cual Revueltas debe dar forma adecuada hasta crear esa nueva realidad donde -como seiiala Hegel- "el contenido no es mas que Ia mutaci6n de Ia forma en contenido y Ia forma no es mas que Ia mutaci6n del contenido en forma". 1 Revueltas realiza esta tarea (propia de todo gran escritor) en el conjunto de su obra: tanto en el nivel de Ia configuraci6n de los personajes como en el de Ia estructura general que preside las novel as. Por ejemplo, en Los d/as terrenales Ia historia esta descrita en dos pianos diferentes y en cierta forma contradictorios; por una parte, aquel en el que suceden los hechos, mlnimos; y, por otra, el de Ia subjetividad de los personaEl presente trabajo es una parte de Ia investigaci6n titulada La producci6n li-

teraria de Revue/tas en su contexto hist6rico. Dicha investigacion obtuvo el premio de l Primer Concurso Nacional de Ensayo Literario co nvocado por Ia Casa de Ia Cultura de Gomez Palacio conjuntamente con el IN BA . Debido a su caracter de parte de un todo mas amplio, algunas de las afirma路 ciones contenidas en el presente trabajo no aparecen desarrolladas.

Nota: El presente trabajo es una parte de Ia investigaci6n titulada La producci6n literaria de Revue/tas en su contexto hist6rico. Dicha investigacion obtuvo el premio del Primer Concurso Nac ional de ensayo literario convocado por Ia Casa de Ia Cu ltura de Go me z Palacio conjunta mente con cl INBA. Debido a su caracter de parte de un todo mas a mplio, algunas de las afirmaciones conte nidas en e l presente trabajo no aparecen desarrollada s.

1. Hegel, citado por Georg Lukacs en una esthica marxista,

Digitalizado par

de

t_.CONACULTA


jes. Este plano, el de Ia conciencia, es el mas importante de Ia novela, no solo cuantitativa, sino, sobre todo, cualitativamente. Si el plano de lo real, donde ocurren los hechos, es el encargado de mostrarnos el caracter r(gido y dogmatico de los dirigentes del Partido en ese momento (Fidel, imperterrito, redactando un informe para el Comite Central junto al cadaver de su hija y frente a Ia desolaci6n de Julia ante ese hecho), el plano de Ia conciencia, en general, es el terreno donde se despliega ampliamente Ia cr/tica humanista al dogmatismo como linea pol(tica. As(, a lo largo de toda Ia novela, el plano de Ia conciencia incidira constantemente en el plano de Ia realidad factica para minarla, para criticarla, para corroer desde una cierta etica (humanista) Ia frla e inapelable 16gica de los hechos (sirvan de ejemplo las reflexiones de Bautista mientras atraviesa el enorme basurero o las reflexiones de Gregorio a lo largo de toda Ia novela}. Es cierto que visto de este modo podrfa resultar un tanto esquematico el planteamiento, pues tambien en el plano de Ia subjetividad de los personajes se da Ia lucha entre las dos posiciones comunistas {crftica y dogmatica}. Pero hablamos de estos dos pianos en terminos de su fun cionamiento general y privativo, y no extrapolando o exagerando momentos particulares de su desarrollo . Por otra parte, es necesario destacar aqu( que el uso de esta tecnica de hacer confluir dialecticamente dos pianos narrativos d istintos, no se da, como ocurre con otros narradores de Ia Hamada "nueva novela latinoamericana", como un elemento ajeno al contenido. En Ia obra de Revueltas las tecnicas narrativas se hacen forma en Ia medida en que se diluyen en Ia historia misma, desaparecen en lo narrado, devienen el contenido mismo de Ia obra, algo intr(nsecamente necesario y no impuesto desde fuera por Ia pura volici6n del au tor. 2 Pero aqu ( Ia estructura no in teresa en s/ misma en Ia medida en que, como dijimos antes, no existe 路2 . Cf. Georg Lukacs, "Arte y verd ad objetiva", en Problemas del realismo , en op. cit.

Digitalizado par


en s/ misma, sino hecha contenido. Los dos pianos narrativos de Los d/as terrenales son una forma, Ia

necesaria, de decir lo que su autor concibio como Ia problematica central de Ia novela: el juego dia路 lectico, contradictorio, entre dos concepciones del mundo, o mejor: entre dos concepciones del hombre en el mundo. En este mismo nivel de Ia con路 formacion de Ia estructura de Ia novela, otro ejemplo de como Ia concepcion de Revueltas acerca de Ia preeminencia de Ia conciencia se convierte en forma, ocurre en Los d/as terrenales donde Gregorio vive en unos instantes "un aprendizaje extraordinario" y para Ramos, un "lapso inmenso" transcurre en apenas unos segundos. Aqu(, el frecuente recurrir de los personajes al recuerdo, obstaculizando Ia homogeneidad temporal de Ia novela (es decir, obstaculizando que Ia accion narrada transcurra siempre en presente} no es un recurso arbitrario o puramente estil (stico, sino un medio necesario para que este contenido se transforme artlsticamente. Revueltas logra esta coformacion organica en Los d/as terrenales porque su vision del mundo, que se caracteriza por una prioridad ontologica de Ia conciencia sobre Ia materia, fundamenta Ia transformacion dialectica de los contenidos en estructuras especlficas, una de las cuales consiste en Ia presencia de un narrador omnisciente que racionaliza las reflexiones singulares de los personajes, imprimiendoles su sentido mas profundo, su significacion real. En Los errores encontramos una estructura de distinta especie (aunque con igual sentido: el de ser adecuada a los contenidos que Ia obra se plantea}. lCual es Ia razon que fundamenta este cambio? La razon es que Revueltas tiene un cambio en su concepcion del mundo y con esto un cambio en sus estructuras literarias. Desde Ia publicacion de Los d/as terrena!es hasta Ia de Los errores transcurrieron quince anos que permitieron a Revueltas tener acceso a una concepcion del hombre mas etica que Ia que se expresa en Ia primera novela mencionada. Esa concepcion se sintetiza en Ia sentencia, puesta en boca de

Digitalizado par

Jacobo, de que "el hombre es un ser erroneo". 3 En Los errores el problema ya no es tanto como en Los d/as terrena/es: el de Ia contraposicion entre el ser y el deber ser cuanto el de Ia naturaleza equ (voca del ser. Ahora, para Revueltas, el hombre esta enajenado a s( mismo desde el momento en que surge como tal, es decir, como conciencia. En Los d/as terrena/es, el esp(ritu pensante era "Ia floracion mas alta" de Ia materia y Ia contradiccion se ubicaba entre Ia capacidad de adquirir una mayor riqueza sensible y consciente y Ia dificultad terrenal y contemporanea de realizar esa capacidad, entre el hombre posible y el hombre presente. En Los errores el hombre es de nuevo "Ia floracion mas alta" pero este hecho constituye ahora una enajenacion permanente. Esta concepcion tiene su ra(z en Hegel, para quien Ia enajenacion es, al propio tiempo, Ia posicion de cualquier objetividad. En realidad, Ia objetivaci6n es una forma universalmente huma路na de las relaciones de los hombres entre sl; los pensamientos, los sentimientos son objetivados; el propio trabajo es una objetivacion. La identificaci6n que Revueltas hace entre objetivacion y enajenacion puede encontrarse tambien en sus escritos te6ricos, en el pr61ogo que escribe en 1967 para su Obra literaria, donde considera que objetivar Ia conciencia abstracta en una obra equivale a una enajenaci6n al contexto historico-social hasta que alg(m lector, al comprender perfectamente lo que el escritor 路dijo en su obra, rescata Ia conciencia abstracta de este y se inauguran ambos como momentos de un "lector eterno", que es en realidad un proceso de autoconciencia vac(o de todo contenido. En Los errores Revueltas pone el acento, no en los hechos de Ia conciencia, sino que logra un equilibria entre los actos concretos de los personajes y sus reflexiones. Esto se debe: 1) a que el ambito en el cual se desarrollan los personajes aparece en esta novela con un mayor numero de determinaciones que en Ia anterior. Ya no es un dogmatismo en general sino

t_.CONACULTA


una forma concreta de este, el estal inismo y sus consecuencias. En esta novela se refleja, entonces, de una manera concreta ese sectarismo al que Revueltas critica desde Los dfas terrenales y concluye en Los errores; 2} en esta etapa se observa un cambia en Ia ideologfa de Revueltas que se nos presenta en esta novela a traves de un mayor acento (para el desarrollo de sus personajes} en los hechos concretos que realizan estos. Esto significa que Revueltas concibe ahora a sus personajes (desde el punto de vista narrativo} en una interrelacion dialectica entre materia y pensamiento y que Ia conciencia (con su preminencia} cede paso a Ia actividad objetiva de los personajes. Ya no es el Revueltas de Ia conciencia sino el Revueltas del sujeto actuante. En Los dfas terrenales Ia mitologla blblica juega un papel activo en Ia vision del mundo de Revueltas. Es una referenda que sirve para intentar lograr mayor universalidad en cada una de las acciones singulares. Mas adelante, en Los errores, el autor se desprende de este apoyo ideologico. Las referencias a Ia mitologfa cristiana seran mlnimas y casi inexistentes, por lo menos, su valor funcional dentro de Ia novela sera nulo, y con ello, Ia narrativa de Revueltas habra ganado considerablemente en profundidad cr(tica; 3} en esta novela Revueltas logra expresar que los hechos concretos condicionan a los hombres, pero los condicionan de acuerdo a su contorno etico. Los personajes de Revueltas encuentran una nueva dimension, Ia dimension de ser sujetos presos de una clase social y de acuerdo a esto sujetos a una etica determinada. Por esto es que los hechos cobran mayor importancia, por esto es que Ia conciencia cede su puesto privilegiado y se convierte en uno de los elementos de actuacion. Actuando con esa etica determinada a cuestas, los personajes nos Ia dejan ver a todo lo largo de Ia novela en un terreno, en unas situaciones peculiares en las que lo contingente (el "error" propio de las circunstancias} tiene un papel destacado y activo. Los hechos siempre suceden como hechos objetivos y esta caracterlstica de Ia novela de Re-

Digitalizado par

~~!~~?~~ic~lafb~rl:ULTA

BellasArtes


mente por sus contenidos. A toda hora subraya Revueltas que las cosas "estan ya en marcha" como r(o compacto e indetenible a cuy a corriente deberan los personajes adecuar sus actitudes. Este rio lleva en su cauce piedras y errores, azar ... "Estaba hecho, de todos modos. Aun cuando Mario ya no hubiera querido ir mas adelante, estaba hecho, no podia caber Ia menor duda." 4 Desde un punto de vista estetico, el azar se justifica en una obra en cuanto que promueva y soporte Ia jerarqu(a t(pica que se configura, en cuanto no Ia confunda ni opaque. En el caso de esta novela de Revueltas el azar es justamente el s(ntoma del error, su abundancia es consecuente con Ia concepcion del hombre que subyace a esta totalidad configurada; es pues aqu(, mas que en cualquier otra obra, una determinacion imprescindible del contenido y no un medio auxiliar de este. La asimilaci6n de las tecnicas narrativas al contenido puede verse mejor si atendemos a Ia evoluci6n que estas tecnicas sufren de Los d/as terrenales a Los errores. Una evoluci6n que paralelamente manifiesta, por otra parte, Ia propia evoluci6n ideol6gica de Revueltas. Cambia Ia perspectiva ideol6gica a partir de Ia cual Revueltas habra de enfocar el problema. La crltica del estalinismo en las filas del partido se hara desde una etica, y por lo tanto, desde una po//tica. Son las consecuencias pol (ticas de esa I(nea partidaria (y no sus efectos morales) lo que ahora interesa destacar, y las consecuencias pol(ticas se dan en los hechos mismos y no solamente en el nivel de Ia conciencia. Es a partir de esta necesidad del contenido que los dos pianos narrativos que se presentaban como imprescindibles en Los d/as- terrenales ceden terreno hasta casi desaparecer, o por lo menos perder su caracter funcional, en Los errores. Ahora sera desde los hechos mismos (hechos pol lticos) desde donde se critique Ia desviaci6n estalinista dentro del partido. Y en esto radicara basicamente Ia

Digitalizado par

!r~!it)J39 Nacional de BellasArtes

t ..CONACULTA


estructura art(stica de Los errores. La narrativa de Revueltas, con esta novela, habra ascendido hacia un realismo de fonda (no de forma), en el que los hechos, y no Ia pura subjetividad de los personajes, t[enen Ia palabra. Revueltas habla aqul todavla de "el partido como nocion moral superior, no solo en su papel de instrumento poHtico, sino como conciencia humana, como reapropiacion de Ia conciencia". 5 No el .partido como instrumento politico para Ia toma del poder por el proletariado, sino el partido como "nocion moral superior". Sin embargo, esta nocion no constituye, ni mucho menos, el elemento rector en torno al cual habra de desarrollarse Ia obra; por el contrario, incluso se ve rebasada, negada, por los hechos mismos que se nos narran. Ahora son ellos, los hechos, los portadores de esa nueva concepcion del mundo que recorre las paginas de esta novela. El hombre, el militante, el disidente del dogmatismo estalinista en las filas del partido, no enfocara mas su crltica a estas practicas estalinistas desde "problemas personales". Ahora son otros los problemas que interesa destacar. Problemas eminentemente politicos, que quedan sefialados por los hechos mismos y no solo por Ia pura conciencia individual de los personajes. Otro aspecto de esta dacion de forma -y, por cierto, noel menos importante- es justamente el que se refiere a Ia creacion de un ambito t(pico como centro dinamico, dentro del cual operan las determinaciones de los personajes. El realismo de Revueltas se impone como una exigencia esta tarea: Ia creacion de este ambito tfpico cuyo contenido consiste en una jerarqu(a de tipos. lQue significa esto? justamente el hecho de elevar un personaje desplegando su riqueza hasta alcanzar su tipicidad. Sl, pero no solo eso: Ia tipificacion de un personaje supone necesariamente Ia del resto de los personajes de Ia obra. La multiplicidad entre las relaciones de los personajes en una obra, Ia complejidad en el caso de estas novelas, es una expresion de Ia diversidad de las determinacio5. Ibid., p. 105.

nes sociales que concurren a ella. Objetivamente, pues, el autor tiene una jerarqu(a de contenido que le sirve de base para Ia creacion de una jerarqu(a t(pica. AI crear un ambito t(pico, al desarrollar de manera artlstica un momento particular del 1 desarrollo_.,_de Ia vida social, el contenido de Ia novela gana en universalidad. Es as( que Ia vision del mundo de Revueltas se nos muestra, partiendo de Ia novela misma, como una "jerarqu (a de tipos"; no solo, pues, en uno u otro personaje sino en el conjunto de las relaciones entre todos ellos. En Los dlas terrenales, en estas relaciones hay una que tiene mayor peso espec(fico (tal vez en tanto antagonica): Ia que existe entre Fidel y Gregorio. A lo largo de Ia novela, Ia relacion contradictoria que existe entre estos dos personajes sirve, en cierta forma, para definirlos en su tipicidad. Pol lticamente Fidel ha quedado anulado, aniquilado por Ia irrupcion de problemas persona-

les en su vida de militante,comunista. El personaje ant(poda de Fidel es Gregorio (uno existe por el otro). Aunque Ia evolucion de Gregorio es distinta, su aniquilacion se da desde otro punto de vista: en Ia medida en que siempre se acept6 como un ser interiormente contradictorio, en Ia medida en que no nego Ia importancia de su vida Intima, de sus "problemas personales" ("problemas humanos") y Ia incidencia de estos en Ia actividad polltica, no sufre el aniquilamiento emocional de Fidel. Mientras que Fidel termina devorado por sus problemas personales, Gregorio acaba organizando y dirigiendo una manifestacion popular por Ia que va a parar a Ia carcel (una culminacion de destinos un tanto paradojica, aunque internamente necesaria; u n personaje -Fidelaparece acabado, el otro -Gregorio- aparece aun como hombre de accion). Pero Ia actitud con Ia que Gregorio va a esa manifestacion es Ia misma con Ia que se acuesta con


Ia prostituta enferma a fin de que lo contagie: Gregorio va a probar, cargando Ia cruz del sentido cristiano de expiaci6n, Ia capacidad de sacrificio del "Hombre". Asf, el sentido que desde el punto de vista ideologico gula a Gregorio a Ia manifestacion, es pollticamente endeble. Empero, no solo este sesgo apocalfptico manifiesta Ia escasa fortaleza ideologica de Gregorio, sino que Ia manifiesta sobre todo en su concepcion de Ia historia y de las clases sociales (su concepcion del hombre}, Ia cual explicaremos un poco mas adelante, despues del examen de Ia tension dialectica de Ia conformaci6n artlstica de estos dos personajes. En su lucha individual y constante Fidel no duda un solo momento: "Es muy distinto - se dijo Fidel para tranquilizarse-, absolutamente diferente, sacrificar el imperativo de hacer el Bien cotidiano y concreto a pretexto de que se esta a servicio de Dios, al hecho, ese sf real y doloroso, de dominar y reprimir nuestras tendencias sentimentales hacia Ia practica de ese mismo Bien concreto y cotidiano, cuando no s61o no se esta al servicio de un mito como el de Dios, sino ante Ia existencia de una causa social tangible y verdadera, a Ia cual es preciso entregar sin regateos todo el esfuerzo y Ia vida. Es absolutamente distinto. " 6 Gregorio pensaba que si bien Fidel habfa perdido el alma "para sustituirla por un esquema de ecuaciones", 7 junto a su esquematismo Fidel ten fa virtudes grandes.8 Pero el esquematismo de Fidel no es tal, en realidad, en cuanto a personaje de Ia novela. Fidel alcanza una tipicidad que lo libra de ser un esquema desde el punto de vista artfstico. Lo tfpico, en arte, no representa, como comunmente se cree, el "termino medio", el promedio de los rasgos mas frecuentes de los individuos de un 6. Lukacs, Georg, Problemas del realis-

mo, p. 28 . 7. Revueltas , jose , Los d !as terrenales, op . cit., p . 412. 8. Ibid. , p. 487 .

Digitalizado par

estrato social equis; conformar un personaje tlpico equivale a marcar sus relaciones (externas: con otros personajes; e internas: consigo mismo) de Ia manera mas desplegada "en el supremo nivel de su real contradictoriedad" -como seiiala Lukacs. 9 La caracterizaci6n efectiva de un personaje parte, entonces, del desenvolvimiento maximo de sus determinaciones contradictorias:10 partir del "termino .nedio" desgasta y neutraliza esas contradicciones. Revueltas parte de que el individuo posee, anlmicamente, una "compleja estructura, mutabilidad y versatilidad extraordinarias (... ) inaprehensibles aun para el propio dueiio". 11 Y hay que !lamar Ia atencion sobre Ia acuciosidad y profundidad con que Revueltas revela el cataclismo interior de Fidel cuando se quiebra el amor que Julia tenia hacia este ... "Sus ojos se posaron sobre los senos de Julia con un agudo y opaco deseo, entre filial y sexual. Julia. No volvt:rla a poseer. Perderla para siempre. Hab(a en este alucinante proceso interior, que lo indujo a aceptar al jarro de cafe despues de haberlo rechazado antes, una especie de miedo impreciso 路 pero con angustia a que Julia llegase a no pertenecerle, llegase espantosamente a ser de otro hombre. Un miedo que creda y se transmutaba en el momento mismo de sentirse, penetrandose de nociones de vez en vez mas dolorosas, y que de pronto, mediante un horrible salto en el vaclo, ya no era el temor a una posibilidad futura de que Ia mujer se entregase a otro, sino el panico a adquirir Ia certeza de un hecho que, con solo intuirlo, se daba ya como precedente, como ya ocurrido e inevitable y se unfa entonces a una .estupida, agitada y deprimente sensacion de inferioridad cuyos turbios esfuerzos para compensarse encontraban salida apenas en una cascabeleante excitaci6n que consist(a en imaginar el de9 . Lukacs, Georg, Proleg6men os .. ., op. cit., pp . 279-280. 10. Cf. ibid ., p. 291 . vlheJ~~td ose , Los dias terrenales,

Rrac1ona1 de BellasArtes

t_.CONACULTA


como entidades abstractas". 14 Gregorio, en cambio, pensaba "en el unico hombre que existe, en el hombre contemporaneo, real, esencialmente sucio, esencialmente in15 noble, ruin, despreciable". Ahora bien, Gregorio es igual de unilateral que Fidel. Lo unilateral de este ubicado en Ia contradicci6n que ya se ha dicho, y lo de Gregorio en su concepcion falsa de Ia historia. Empero, igualmente que Fidel no es un personaje esquematico, Gregorio tampoco lo es. Gregorio llega tambien (como ant(poda de Fidel) a una "imagen acabada" del hombre, Ia cual se sustenta en Ia "imagen acabada" de Fidel. Partiendo de Ia absolutizacion de una situacion historica, de "una distinci6n capital entre los individuos del genero humano: Ia distinci6n que consiste en que una mayorla de los hombres carecera siempre de inquietudes y preocupaciones metaflsicas, en el mejor sentido de Ia palabra, .e n tanto una minorla -que es Ia que los representa- vivira siempre torturada en el potro de Ia incertidumbre, de Ia duda, de los por que y los para que, , ;16 toman do como eterna Ia diferencia entre dirigidos y dirigentes; haciendo abstracci6n de Ia historicidad de Ia vida humana, Gregorio llega a ver Ia misma "atroz mueca de fe" de los verdugos en las vlctimas ...

Ieite solapado, oculto, no dicho, lleno de disfraces, pero tanto mas real cuanto pod"la referirse, en comparaci6n, a los momentos de deleite propio, que habr(a experimentado ese otro hombre con Ia mujer que ahora, de subito, ya no era suya, al extremo de no ser ya sino una sefial, una forma abstracta de cierta dolencia sin nombre, pese a su estar ah( tan proxima."I2 Fidel esta a punto de restablecer su amor con Julia al demostrarle un sufrimiento del que ella no lo cree capaz, pero lo contingente, una mera casualidad se encarga de impedirlo ... "EI sollozo de Ia mujer se escuchaba claro y distinto en el interior de Ia habitaci6n. Fidel giro hacia ella los ojos velados por un sufrimiento hondo, terrible y verdadero. Pero Ia mujer, que ya se inclinaba ante el cuerpecito de Ia nina muerta, no pudo alcanzar a ver Ia luz dolorosa de esos oj os. "1 3 Lo importante, desde el punto de vista estetico, es que Revueltas demuestra esa real contradictoriedad de Fidel a traves de los hechos de Ia novela y no simplemente diciendo que Fidel pose(a esa real contradictoriedad y pidiendo al lector que, por favor, lo crea. Los d!as terrena/es no constituyen una "crltica de los sacrificios" sino mas bien una crftica de los sacrificios concretos de Fidel, esto es, una crltica a lo inutil y gratuito de dichos sacrificios. Fidel es un personaje que, como ya sefialamos anteriormente, acaba devorado por Ia contradiccion entre sus principios partidarios y su vida Intima. Su proceso de aniquilaci6n moral se nos va demostrando a lo largo de Ia novela: surge del choque de sus ideas con Ia realidad. El fundamento de esta aniquilacion - se nos dice en Ia novela- esta en que "Fidel tenia una imagen acabada del hombre, pero era un hombre no comprobado por Ia experiencia, resultado de Ia deducci6n pura. As(, ignoraba en absoluto a los hombres vivos y pretend Ia manejarlos

"EI rostro del ferrocarrilero, sf, y pese a su sinceridad atras de sus facciones el rostro del verdugo, plenamente convencido de Ia justicia de su causa, alterados sus rasgos por Ia empavorecida convicci6n de esa justicia." 17 De Ia falta de conciencia comun a v (ctimas y verdugos, Gregorio formula en aras de "el rostro de los hombres", Ia inexistencia de las clases sociales. Gregorio contribuye, dentro de Ia concreta jerarqu (a t(pica 1 8 de Los d/as terrenales, insustituiblemente a Ia determinacion y con14. Ibid., pp. 433-434. 15. Ibid., p. 507. 16. Ibid., p. 509. 17. Ibid., p. 536. 18. Sobre el problema de Ia "jerarqu (a de tipos" , vease: Georg Lukacs, el capflos Proleg6menos a una

12. Ibid ., pp. 362-363. 13. Ibid., p. 377.

Digitalizado par

op.fiCONACULTA BellasArtes


crecion de Fidel por medio de las relaciones con que se vincula a el viva y dinamicamente. Gregorio queda como un personaje definido fundamentalmente por su caracter intelectual y, mas adentro, por el caracter abstracto de su pensamiento. Alcanza tambien Ia estatura, Ia particularidad adecuada a su contenido. Gregorio y Fidel se refuerzan y complementan redprocamente para hacer nacer una nueva totalidad, una nueva realidad que no estaba ah ( antes: Ia obra. La tipificacion en el sentido preciso antes mencionado, aparece tambien en Los errores. Por to general, Ia mayorla de los personajes de Los errores son conformados con una tipicidad propia. Sin embargo, es tal vez en Mario Cobian donde esta tipicidad alcanza su grado mas alto. (Recordemos que Ia tipicidad implica el despliegue maximo de las contradicciones internas del personaje.) Mario Cobian, de quien ya hemos mostrado Ia caracterizacion que Revueltas hace de el -atendiendo a Ia decision individual de Cobian de cambiar de vida y at hecho de que esta decision se da dentro de los marcos de Ia pertenencia de Mario Cobian at lumpenproletariado-, revela a lo largo de Ia novela Ia contradiccion propia de su conformacion social. Esto es, Mario Cobian, asumiendo su decision dentro del ambito del movimiento que le perm ite su posicion de clase, acabara integrado a las fuerzas represivas del sistema despues de demostrar algo de simpat(a hacia los comunistas -aunque esta simpat(a se da en tanto que Mario Cobian percibe a los comunistas como individuos iguales a el. Marx ha senalado expl(citamente: "EI tumpenproletariado, ese producto pasivo de Ia putrefaccion de las capas mas bajas de Ia vieja sociedad, puede a Veces ser arrastrado at movimiento por una revolucion proletaria; sin embargo, en virtud de todas sus condiciones de vida, esta mas bien dispuesto a venderse a Ia reaccion . . b para serv1r a sus man1o ras. ,19 Esto queda perfectamente ilustrado, como contradiccion interna del personaje (y por lo tanto como 19. Marx, Carlos y Federico Engels, Manifiesto del Partido Comunista, en Obras escogidas en dos tomos, ed. Progreso , Moscu, 197 1, tomo I, p. 29.

Digitalizado par

afirmacion de su pos1c1on social), en los siguientes parrafos: Si manana mi viejo se mete en eso de Ia huelga, me lo van a matar. Endenantes le dije mentiras: pero ya Ia maldita tis no me le da reposo. i Mlrelo no mas como esta! Solo con que lo me tan preso se me salva. T enga por seguro que habra balazos y el es de los meros jefes del dichoso comite. Avise uste a Ia polida. Con que apunte las ptacas del coche, con esto tiene. "EI chofer Ia tiro de Ia cabellos con una mano y con el puno de Ia otra le dio un golpe seco y preciso en los labios. Su voz tenia el mismo diapason opaco, suplicante y amoroso. - iCaaallese, cabrooona! Uste no sabe de esas cosas. Y fuego, hacia Mario: -No le haga caso, senor -en un tono cortes, de disculpa. ''Mario Cobian, a tiempo que bajaba del coche, hizo en el aire un ademan apresurado e indiferente. - i Muy bien hecho! - aprobo por el golpe. Ya en Ia acera, se detuvo unos pasos mas ade-


lante-. Conmigo puedes estar tranquilo, mi viejo -dijo hacia el chafer-. iYo no soy ningun 20 chiva! "

no y no un hombre que sea nomas bestia. Haremos una vida nueva, mi Luque, y v.a vera que . ' . ,21 f eIIZ sera conm1go.

''La mirada delirante de Lucrecia, mas alia del panico, no pod (a apartarse de Ia figura de Mario Cobian, ah (, sentado a los pies de Ia cama, en Ia sala de Ia cruz roja, que le acariciaba suavemente los muslos por encima de Ia colcha. "-lYa lo ve, mi Luque? Lo que sea de cada quien. Hab(a de hacersenos Ia nuestra. "Ex trajo de Ia bolsa de su saco una tarjeta a Ia que cruzaban de un extremo a otro los colores nacionales. "-Mire, mi Luque: me hicieron agente de Ia reservada. Ora ya no sere un Don Cualquiera; ya no volvere a ser El Muiieco de otros tiempos; soy alguien, soy gente, me reconocen, me necesitan, me tratan como lo que debe ser: un hombre huma-

En esta路 cita se nota ampliamente el caracter contradictorio que define Ia tipicidad de uno de los personajes de Los errores. Este caracter contradictorio es el propio de Mario Cobian (su amor a Lucrecia y su deseo de matarla, etc.) pero es, al mismo tiempo, aqu{, el de Ia contradicci6n del estrato social al que pertenece Cobian (y que Ia cita de Marx que se anot6 arriba expone desde el punto de vista de Ia lucha polftica} . El personaje de Revueltas no va retrasado respecto de Ia generalidad -por as( decirlo- que encarna (el lumpenproletariado}; el personaje de Revueltas es un miembro de ese estrato social pero es, sobre todo, Mario Cobian, un miembro singular de ese estrato social. En Ia medida en que esa singularidad de Cobian sea dotada por el novelista de contenido propio; es decir, en Ia medida en que esa singularidad aparezca

(...)

20. Revueltas, jose , Los errores, op. cit., pp. 115路116.

21. Ibid., p. 351.

Digitalizado par

no como una singularidad indeterminada (con lo que Mario Cobian se percibir(a como un individuo aislado}, sino como una singularidad inscrita en un contexto social y determinada por este; en esa medida Cobian tendra un Iugar particular dentro de Ia obra y sus actos seran necesarios para lograr Ia expresi6n art{stica de un momento particular de Ia vida social. El personaje t{pico se hace en Ia obra, se crea en ella partiendo, claro esta, de una cierta tipicidad objetiva; pero el contenido t(pico que el autor ha elaborado solo culminara en una obra artfstica (en un objeto sensible} tras de una daci6n de forma adecuada a ese contenido. Revueltas no quiso mostrarnos un modelo general de padrote, no quiso mostrarnos.a "el Padrote", sino que quiso crear a Mario Cobian, a un sujeto determinado, a un sujeto cuya determinacion fuera tal que lo hiciera capaz de actuar dentro de las situaciones de Ia novela y actuar de tal forma para que esta novela expresara, de manera intensiva, un momento determinado de Ia realidad.

lnstituto Nacional de BellasArtes

t ..CONACULTA


LOSERRORES de Jose Revueltas paralelisDlo de • • un1versos n1an1queos para Jose

DOLORES BRAVO

Digitalizado par

La novela de Revueltas patentiza, primordialmente, un fuerte desencanto hacia Ia realidad vital y social mexicana de Ia post revoluci6n mexicana. La acci6n se situa al inicio de Ia decada de los cuarentas, cuando Ia Revoluci6n (transformada ya en mito propagand(stico nacionalista) se ha i nstitucionalizado como regimen, y el contorno de los valores efectivos de una sociedad -en sus inicios planteada con posibilidades socialistas- se ha vuelto burguesa en sus estructuras esenciales. En neo-porfirismo, Ia mentalidad reaccionaria y conformista, y el capitalismo alentado por los diversos estratos del gobierno y de Ia clase alta econ6mica se asientan como unica posibilidad de sociedad presente y futura. A partir de esta evidencia, el novelista define, como primer prop6sito, plantear Ia historicidad de su obra. La ideolog(a marxista de Revueltas se proyecta en su teoria estetica trazada en dos lineamientos tematicos fundamentales: por un lado se demuestra objetivamente como el proceso equ(voco de un movimiento revolucionario ha degradado los diversos estratos humanos de una sociedad hasta divid i ria en casta econ6micas que, por serlas, buscan ideales ilusorios y degenerados; por el otro, Ia posibilidad de redenci6n social colectiva emblematizada en el Partido Comunista, como fuerza real antagonica al poder establecido, ha desvirtuado sus postulados primordiales en un dogmatismo-ideal y, por esto mismo, equ fvoco. Alrededor de estos dos ambitos de enajenaci6n, Los errores se desarrolla como una cr6nica veraz de una realidad presenciada y analizada desde los mas diversos vertices de una totalidad; cuyos apartados se encierran en Ia limitaci6n de un universo cerrado, asfixiante, en el que los personajes transitan con Ia angustia actualizada de vivir el mito de Ia caverna, con relaci6n al absoluto de Ia libertad. La Libertad se problematiza en Ia identidad de cada ser humano; identidad disociada en un universo de claroscuros chinescos, en el que cada ser de ficci6n vive una historicidad visceral, aparente, y moralmente equ lvoca e i nsignificante, y otra rleR!ftmoobjeti~.._ de clase testiNacional de •.aCONACULTA BellasArtes


monial, perfectamente situada en un tiempo y en un espacio definidos. Revueltas, para lograr este proposito, traza dos anecdotas, mas que paralelas, simbioticas, que se bifurcan, desembocan y se unen una narracion que concluye en una situacion anecdotico-tematica despiadadamente Iucida y crltica. En uno de los ejes narrativos se plantea un ambiente infrahumano, placentario, que simula una enorme jaula, en el que los protagonistas se mueven en una confusion axiologica de apariencias. El Mal como imperativo categorico se desprende del hermetismo confinado a una enajenacion vivencial y clasista. Es el universo del lumpen, reflejado por los personajes en lo mas autentico y profunda de sus propias negaciones etico-sociales. Revueltas traza en este apartado de Ia totalidad, un universo plena de objecciones, en el que Ia agudeza de las descripciones sugieren tonos diversos que oscilan desde Ia mas certera truculencia hasta grados extremos y efectivos de morbosidad suqlime. 路 Estas variantes en Ia descripcion permiten que el lector obtenga una perspectiva crltica, abstracta, en el sentido en que el escritor motiva diferentes reacciones concienciales, sugeridas por las diferentes motivaciones descriptivas. Es clara que, a Ia manera Lu kacs, nos encontramos en un universo degradado con personajes degradados, que buscan ideales degradados. Estos paralelismos de contenido componen Ia teorfa del realismo crftico: Lukacs se refiere a los escritores que, aun a partir de Ia dislocacion y pluralidad del relata, iniciado por Mann, joyce y Ia Woolf y Proust, insertan al hombre dentro de una historicidad y causalidad concretas. Es Ia continuacion y Ia culminacion estetica de Ia gran escuela burguesa realista del siglo XIX. En Jose Revueltas percibimos los problemas de estructura novel fstica . No en vano Revueltas presenta, al inicio de Ia novela, el mundo Infima de seres consumidos, por lo que Goldmann llamarla un "determinismo economico". El planteamiento de un robo y un asesinato por seres degradados en su con-

ciencia de clase, confiere a Ia obra un interes de novela policiaca que se continua por el hilo anecdotico de estos personajes tan ambiguos, como el determinismo de su destino de clase social. La degradacion es inconsciente, y se postula en Ia necesidad misma de Ia sobrevivencia. "EI Muneco" y "Elena", identificados y simbolizados en Ia vaguedad de su sobrenombre, son arquetipos individualizados de una clase social inconsciente. Los individuos que no lo son estrictamen路 te, al no saber su funcionalidad historica y Ia meta ejemplar de su realizacion, son el desecho moral de una casta que los ha confinado por el determinismo econ6mico, a Ia enajenaci6n absoluta. Por eso Revueltas, al referirse a ellos, multiplica Ia posibilidad descriptiva de sus reacciones emocionales, epidermicas, y sugiere alusiones inusitad as, casi surreal istas, mas bien irreales, pero adecuadas al mundo reflejo de su condici6n infamante y abyecta. "EI enano {Elena) abri6 los ojos, con Ia rapidez de quien jamas ha tenido parpados ... brincando cada vez con mayor fuerza, pero al mismo tiempo, con mayor impotencia y desesperaci6n, parecido a un pajaro ciego, un pajaro con alas de plomo." Las tinieblas de este mundo placentario se parecen a oscuras jaulas en las que habitan los diversos prisioneros de Ia misma enajenaci6n; los seres del lumpen; rateros, prostitutas, fen6menos deformes que comparten su destino Infima con el prestamista, formulas dual de un sadismo en el que todas son, conjuntamente, vlctimas y victimarios. Este destino compartido infalible en su ciclo mas que tragico, determinista, hace que, estillsticamente, los capltulos se inicien en acci6n retrospectiva, de un acontecimiento pasado, a nucleos anecdoticos presentes y progresivos. Esta estructuraci6n estetica nos refiere dialecticamente a un movimiento cfclico, universal constante y eterna de relaci6n causa efecto, en Ia que los prisioneros de Ia realidad vislumbran apenas un Infima reflejo de verdad. Por ello, Revueltas hace de su novela, con referenda al dualismo lumpen-capitalismo, un ritual inmanente, premeditado, en el que Ia mutua dependencia de verdugos y sacrificados se expo ne como religion

Digitalizado par


simb61ica, cruel, sacrificante de una clase dominante en el valor relativo (dinero.) Los senores son al igual que los siervos componentes de una inconsciencia colectiva, primitiva incomprensible, y fatalista, como un ritual absoluto. La alusi6n a u n ambito tan brutal y cruel como incierto hace que los seres que. pueblan Ia novela se muevan en este ambiente fetal que conduce constantemente del relativo ideal (el bienestar econ6mico) a un descenso paulatino al infierno real. Nacimiento y muerte se debaten en el destino personal y clasista de cada personaje; todos ellos habitan en un mundo regido por el Mal, que proviene de una desocia-

cion absoluta entre Ia individualidad y Ia conciencia de clase a Ia que se debe proyectar ese individualismo. La realidad vive en Ia orfandad de valores, a Ia manera balzaciana en Ia que el dinero se mistifica a Ia altura de categorla absoluta. Revueltas relaciona el mito del poder-dinero con una serie de mitos b1blicos y clasicos que designan una tlpica cultura de Ia represi6n. Dios-Destino se ofrenda a los seres enajenados como una conjunci6n !lena de premoniciones sociales. Los personajes del lumpen son esencial, existencialmente, entidades que viven en un estrato prel6gico de Ia realidad. Asl, los habi-

tantes de esta caverna-reflejo, tantean sus posibilidades de sobrevivencia en un hermetico cosmos social en el que Ia verdadera realidad se plantea como apariencia difusa. De esta manera, en Ia busqueda anecd6tica y estructural de fusionar pianos y hacer coincidir anecdotas, Revueltas intercala siempre, junto al ambito realista, el simb61ico; Ia designaci6n esoterica e inexplicable de un destino significado por un Mal similar a Ia ignorancia de Ia autentica verdad. Las cavidades infrahumanas del lumpen se resuelven siempre en muerte o destrucci6n; sus moradores, eternos prisioneros fetales, como los sefiala el escritor, !levan


G una existencia temporal inmediata que los conduce dialecticamente a su ineludible aniquilacion. Los desechos humanos y los personajes de los cuales dependen en su destine de ideales degenerados forman un hemisferio cosmico-social. Don Victoriano, el prestamista, verdugo enajenador de todo u n estrato real, olfatea su muerte segura y se aferra ilusionamente a Ia de un ideal que lo reivindicara en su condicion historica. Su misi6n -Ia lucha contra el Partido comunista- se mitifica, en Ia confusion de un enorme error. "La Bestia" llama a los comunistas, lo que nos refiere a Ia alusion irracional de una incomprension tradicional de su realidad historico-ambiental. El equlvoco se retrae en Ia pasividad absoluta y Ia carencia de perspectiva efectiva. Los narradores del lumpen, el prestamista, los polidas, seres i nsertos en un sistema, actuan ciegamente en relacion a las ''leyes de estructura" sefialadas por Goldmann: determinismo economico, funci6n hist6rica de las clases sociales y Ia conciencia posible. Este ultimo factor se anula en estos prisioneros de su condici6n enajenada. No obstante, Ia oscuridad latente y constante que las circunda, los condena en Ia infelicidad presentida de un destino absurdo. La soledad se traduce en carencia de libertad y en un sufrimiento intermitente, que a veces es borrado por las satisfacciones materiales, unicas posibles que relacionan a los prisioneros del submundo axia16gico. La primera que logra el novelista en relaci6n a los personajes citados es Ia falta de evoluci6n salidaria y clasista colectiva. De ah( que Ia "conciencia posible", reflex ion acerca de Ia posibilidad de acci6n de Ia conciencia individual para transformar, solidariamente, Ia estructura social a que pertenece, no exista en ellos. Los personajes a los que hemos aludido son solo una parte de Ia totalidad novelada. Revueltas, como escritor, critica, y cercano a Ia gran tradicion realista busca en su obra Ia forma dialectica del genero narrative; Ia basa en Ia existencia coincidente de Ia "oposicion constitutiva", en Ia que distintos exponentes del universe totalitario degradado enfrentan anta-

gonicamente sus formas de degradaci6n. Desde el principia de Ia narracion existen colateralmente el universe de los seres tactiles pre-16gicos a los que hemos aludido, y el mundo paralelo y coincidente de los miembros del Partido. Esta inserci6n de las dos esferas narrativas propicia diversas tramas entrelazadas que acrecientan el interes y que complican y aclaran el desarrollo tematico de Ia obra. Cada universe tiene su tono descriptive; el de los "angeles ca(dos" en Ia irrealidad de su propia miseria, es un tono efectista, melodramatico, insertado en Ia accion misma, que permite externar los apartados internos de los personajes y produce los efectos de una realidad compleja. La no-comunicaci6n de estos seres determinados, prefijados en su limitaci6n se diversifica en su propio aislamiento ya que aun estando relacionados, se alslan entre sl .en sus propias distancias morales. Este es el resultado de una soledad existencial y esencial sobrellevada en un universe anarquico y devorante. El Manique(smo se revela en Ia enajenaci6n y su orfandad como mal concreto, soeial. Un obsolutomaligno contiene los reflejos de seres que tienen una vision negativa de Ia existencia y de Ia realidad axiol6gica y que, por eso mismo, estan destinados al error. Revueltas los describe en sus eternas prisiones de "monos" con un cierto romanticismo combative, hacia el malestar ontologico: en cada uno de ellos hay una afioranza hacia un pasado id Iii co y Ia sensacion brutal de vivir en un destierro que es Ia vida misma y que conduce, siempre violentamente, a Ia muerte. AI lado de este mundo enajenado, existe otro mas evolucionado y, sin embargo, marcado tambien con el destino del error. En Ia epoca en que se situa Ia narraci6n, el Partido Comunista era un genuino e inquietante antagonista del regimen institucionalizado por Ia Revolucion. Revueltas plantea el Partido Comunista como una posibilidad teorica de redenci6n. En el se presentarla Ia nocion de "conciencia posible", o sea, "las posibilidades de pensamiento y acci6n en una estructu ra social dada, se-

Digitalizado par


gun Ia define Goldmann. En un nivel emp I rico es Ia unica fuerza contraria al Mal generico y absoluto representado por Ia estructura existente; lo que disminuye, mas que eso, anula, su funcion historica positiva es que es, al igual que el contorno social burgues degradado, un reflejo erroneo se han derivado equivocadamente su accion sobre Ia realidad. En el Partido Comunista, tal como lo presenta Revueltas, hay un dogmatismo que equivale, en Ia estructura social burguesa, a Ia degradacion colectiva de valores y que, paralelamente al otro universo maniqueo, funciona como espejismo de Ia praxis original. Cuando el novelista relaciona los dos ambitos es cuando se observa Ia traslacion de una fatalidad a Ia otra; de un determinismo economico degradante, a un articulo de fe degenerado en su funcionamiento objetivo esencial. En el Partido Comunista existen como en Ia caver-

na ilusoria, distintos desteltos deformes de una misma verdad. La potencialidad heroica, tragica en el sentido agonista de lucha autentica, permanece en los miembros del Partido en cuanto este les permita su accion libre individual. AI negar Ia libertad de eleccion y al imponer un dogmatismo abstracto e irracional, el Partido castra no solo a sus miembros, sino que se autoaniquila como conciencia real y positivamente pragmatica en su funcionalidad historica. As(, Revueltas habilmente hace Ia traslacion de una divinidad (el reflejo ilusorio del dinero), a otra (el reflejo equlvoco de Ia justicia); de un fatalismo determinista condicionado por Ia enajenacion economica a un fatalismo ideologico condicionado por el dogmatismo ilusorio. La novela revela en el ambito teorico-practico Ia enajenacion social de cierto sector fariseo de una pretendida accion revolucionaria,

y falsamente redentora. El lector no puede menos que adentrarse en una reflexion de Ia situacion dialecticamente equ(voca del hombre actual. La autentica evolucion, a cargo de Ia "conciencia posible", se frustra en un dogmatismo inoperante, alejado de Ia autentica conciencia clasista colectiva. El burocratismo del Partido, planteado como un absurdo contemporaneo, se refleja en Ia realidad ambiental, en el slmil paralelo entre Ia insensibilidad cruel y enajenante del mundo de "afuera" (lumpen, realidad social establecida) y el de "dentro" (el Partido como mito-reflejo de un absoluto inexistente). Con estas correlaciones el universo del Partido Comunista se ofrece como verdad muerta, como disociacion total entre Ia ideolog(a comunista original y Ia realidad circundante. De esta manera los dos universos coinciden en identidades similares como realidades degradadas, prisioneras en sus propias limitaciones enajenadas. En ambas esferas relativas se observa Ia preponderancia injusta y tiranica de castas que han delineado su falso reflejo maniqu eo. En ninguno de los dos universos hay posibilidad efectiva de herolsmo y redencion. El sentido etico de Ia accion individual que redunde en Ia realizacion catartica colectiva desaparece en los dos mundos y solo queda, en el universo desesperado de los sobrevivientes, Ia sombra envolvente del Mal. La novela profundiza en una slntesis negativa con relacion a Ia axiolog(a del Partido: Ia demostracion causal implacable de una concepcion ambigua e irracional de los valores teorico-practicos de una ideolog(a lt evada at fanatismo extremo. Revueltas delata esteticamente Ia decepcion testimonial hacia un proceso his to rico mal concebido. Los universos paralelos de Los errores develan el pesimismo extremo y Ia decepcion ante Ia esterilidad de una ideolog(a que puede ser eficaz solo teoricamente. La novela se cierra, como el mundo mismo, en Ia prision hermetica de los dos universos, en Ia orfandad de un reflejo lejano, oscuro y relativo. El absoluto que sobrevive es, no verdad Iucid a de Ia


EL

El catorce de abril de este afio perdimos a Jose Revueltas, uno de los mas grandes escritores latinoamericanos, en el momento en que mayor madurez habla logrado en el planteamiento de sus ideas y de su inmensa creatividad. La perdida es monumental para nuestro pals, a pesar de que -aun en el momento en que falleci6- las fuerzas vivas intelectuales y el gobierno procuraron adoptar una cautela que implic6 un desconocimiento tremendo de Ia importancia de este autor para nuestra historia. Esto siempre ocurri6 con Jose Revueltas. Su caso, creo, es (mico en nuestro pals, pues ha sido el ejemplo mas vivo e importante de conducta -artfstica e individualque en verdad luch6 contra todas las corrientes, que finc6 su existencia en un compromiso fundamental consigo mismo y que; por tanto, jamas quiso apegarse a ningun tipo de precepto que no fuera el que le dictara su propio coraz6n. No se "disciplin6", jamas, ni a ret6ricas literarias ni a "principios" dogmaticos en Ia pol ltica ni a "modos de conducta" establecidos, y de esa manera cuestion6 hasta sus cimientos todas nuestras maneras de concebir Ia realidad, el arte y el compromiso politico. Se gui6 solamente por los dictados de su propia etica -de una pureza inconcebible en estas. epocas enajenadas-, que, aunque no correspondiera a Ia de Ia epoca, sl contenla una coherencia y una luminosidad de primer orden. Revueltas, de esa manera, es el primer arquetipo del futuro, y Ia profundidad de su arte, sus concepciones filos6ficopol fticas y su modo de vi vir solo podran ser comprendidas debidamente cuando nuestro pueblo se airee y despeje las sombras vastas que ahora lo conducen a Ia peligrosidad extrema. La Iiteratura de Jose Revueltas, siendo mexicanlsima, alcanza el mas alto valor universal. Dos temas fundamentales conforman el material de este gran autor: por una parte es Ia problematica interna: el "material de los suefios". Como Dostoievski, Revueltas penetr6 hasta lo mas profundo del alma humana, y esos estratos eran tan subterraneos que muchos de los es que surgieron de all I

LUTO BUMANO

Jose Agustin

Digitalizado par

laf1~bWiranTA


andrajos humanos, prostitutas, entes primaries, primigenios, en los que Revueltas sabla ver Ia luz brillantlsima de Ia existencia misma; y esto surgi6 como otro gran tema recurrente de Revueltas -al igual que Lowry y, otra vez, Dostoievski-: Ia lucha de Ia luz contra Ia oscuridad, de Ia conciencia en su estado incipiente pero ya luminosa contra lo desconocido, lo instintivo, lo inconsciente. Por tal motivo a Revueltas siempre le preocup6 el Caos y Ia Muerte, pues s61o de ellos podIa surgir el orden y Ia vida. La extrema religiosidad de Revuelta -que en Ia vida externa se canaliz6 a traves de Ia fe comunista- lo llev6, siempre, a Ia introspecci6n, al deambular literariamente por aquellos espacios "fuera de todo mapa" en los que siempre se hall6 mejor orientado que cualquier otro narrador latinoamerlcano, a excepci6n, quiza, de Borges. En sus ultimos libros, £1 material de los suefios y £1 apando, esta rama de su obra literaria alcanza

su max1ma expres1on, pero es leit motiv de toda su obra: desde Los muros de agua hasta Dormir en tierra, y alcanza uno de sus mementos culminantes en £1/uto humano. La otra parte de su tematica es Ia externa, Ia social, Ia polltica, que tambien es esencial en el y que tambien recorre toda su obra, desde el principio y el final. Revueltas pasa por las fases de Ia guerra cristera, las prisiones, los problemas campesinos, las luchas populares, Ia explotaci6n en las urbes y Ia problematica de los partidos comunistas, y aqu(, como siempre, busc6 ver las cosas con Ia mayor claridad posible para plantear su vision crltica de Ia realidad sin limitaciones de ninguna especie, aunque se las impusieran sus mismos compafieros de militancia. En ambos temas Revueltas manej6 historias, personajes, al igual que Ia mas alta y profunda abstracci6n; su lenguaje result6 -cuando no era coloquial por exigencias del contexte- de una belleza y una densi-

Digitalizado par

dad hermeticas. La belleza poetica de Revueltas, como era de esperarse, no se fincaba en el uso de "palabras bellas" o de "ritmos nobles", sino que surg(a por s( misma como resultado del contenido, de los conceptos y las situaciones, que eran de una gran transparencia -aun en sus profundidades mas terribles- y su importancia para nuestra existencia era lo que los hac(a hermosos, poeticos. La obra literaria de Revueltas siempre estuvo en relaci6n estrecha con sus ideas filos6ficas, sus convicciones pollticas y su propia militancia. Revueltas siempre se consider6 marxista, y lo era, pero tambien era algo mas que eso, pues sus ideas -que eran de un hegelianismo total- no eran repeticiones o elaboraciones de tesis de Marx, sino que inclu(an sus propias aportaciones personales, obtenidas a traves de una observaci6n m inuciosa, rigurosa, del tiempo hist6rico que vivi6, y este, naturalmente, disponla ya de fuentes de info r maci6n que Marx hubiera querido tener. Sus obras basicas en este sentido son Mexico, una democracia barbara y £/ ensayo sabre un proletariado sin cabeza, pero igualmente importante -o· rnasson las tesis filos6fico-pol fticas que Revueltas plante6 en ensayos, artfculos, entrevistas, conferencias y anotaciones poco antes de su muerte; Revueltas, para entonces, habla reflexionado profundamente en sus ideas anteriores y las vela ya desde un punto de vista conceptual y emp(rico mucho mas rico. Me refiero concretamente a sus ideas acerca de Ia necesidad de una democracia social ista, en los partidos y en los pa(ses, al requerimiento de una desmitificaci6n y desacralizaci6n de las ideas revolucionarias, para quitarles Ia pasi6n religiosa y dejarlas en el plano objetivo que les corresponde. Revueltas nunca fue ni sectario ni dogmatico, pero tampoco un militante abulico o influenciable, y en esa forma no solo naveg6 contra Ia corriente pol ltica del pals sino contra Ia misma corriente de Ia militancia comunista. El que hayan privado como fundamentales sus propias convicciones por encima de Ia religiosidad acr(tica de sus esto se tradujo en su i 11J>edot!>tO~~ebLTA BellasArtes


tos revolucionarios en que particip6, incluso de Ia Liga Len inista Espartaco, que el fund6. Esto corrobora Ia tesis de que Revueltas dispon Ia de una firmeza de ideas y de una fuerza espiritual que no cab(a en ninguan organizaci6n, y por eso su militancia mas efectiva siempre fue en los problemas concretes: en las largas luchas pol (ticas de los 30s, 40s y 50s y, fundamental mente, en el movimiento estudiantil de 1968; su participaci6n en este conflicto popular -el mas importante que el pudo vivir, como Revueltas reconocio- fue decisive para su observacion de Ia realidad y aunque naturalmente no se trataba de que el fuera "el principal responsable de los sucesos de 68", como adujo el gobierno para encarcelarlo, s( vino a ser una especie de esplritu rector, de punto de convergencia espiritual y teorica que dispuso todo el movimiento de 1968 una vez que Ia represi6n ceso, y cuando poco a poco fuimos comprendiendo -como el lo supo intuitivamente, primero, e ideo16gicamente, despues- que hablamos vivido Ia etapa mas importante de nuestro pafs desde Ia revolucion de 1910. La vida polltica de Revueltas fue mas alia de grillas, y resulto tan sincera y efectiva que amerit6 varias estancias en las Islas Marias, en Lecumberri y otras carceles. Estos aprisionamientos eran para el "como una beca", en los que estudiaba y escrib(a profundamente. Tanto evit6 componendas y rehuy6 los medios oficiales, y fue tan autentica y honesta su lucha polltica, que incluso su muerte sirvi6 para que se llevara a cabo uno de los eventos pol (ticos mas justos, importantes y valientes, precisamente por su espontaneidad. Por otra parte, Ia manera de vivir de Jose Revueltas tambien fue un desaflo abierto a nuestra enajenacion social, en Ia cual participan por igual contrarrevolucionarios y revolucionarios. Revueltas rehuyo, desde un principia, las cofradlas, las mafias, los elogios mutuos, las "relaciones publicas", las rencillas, las envidias y las mezquindades. Naturalmente, no quiso formar parte de Ia "cultura ofi-

Digitalizado par

cial", pero tampoco quiso erigirse como "gran sacerdote de Ia cultura". Por esa razon tanto las mafias literarias como gubernamentales lo despreciaron. AI no cultivar el favor de los faraones de Ia cultura -fuesen crlticos, funcionarios o simples personas influyentes- su obra no encontro mas apoyo que el de los lectores desinteresados. Au n hasta mediados de 1960, cuando se publico Ia "obra literaria" de Revueltas, este autor no encajaba en ningun esquema o patron literario. Cuando se citaba a nuestros grandes autores, Revueltas nunca aparecla entre Paz, Fuentes, Rulfo o Arreola. Los cr(ticos declan que era un novelista de altibajas, confuse en Ia exposici6n y sin idea de Ia gramatica: solo se le consideraba valor en sus cuentos, pero tampoco se emitlan juicios entusiastas y reiterados como para construirle un prestigio nacional. N uestros autores que alcanzaron renombre internacional jamas se preocuparon por dar a conocer Ia obra de Revueltas en el extranjero, y solo hasta ahora su obra empieza a ser conocida. De hecho, fueron los j6venes -escritores y lectoresquienes en los sesentas empezaron a revalorizar a Jose Revueltas, perque -a partir de 1968- eran los unicos que empezaban a tener un cambio total de valores y pod(an empezar a apreciar los de Revueltas. Este, quien nunca se preocupo por buscar prestigio, reconocimientos, exito 0 dinero, que vivio para cumplir con su honestidad y sus convicciones revolucionarias, que escribi6 porque naci6 para eso y porque eso lo llenaba, lo realizaba, que prodig6 su generosidad y sus conocimientos a quien quisiera escucharlo, sin querer convertirse en un guru cultural, result6 un modelo que solo podia ser reconocido por las nuevas generaciones, pero estas empezaban a comprender que Ia actitud de Revueltas era, precisamente, Ia que mas falta hac(a en nuestro subdesarrollo moral y cultural. Porque, a partir de 1968, se hizo cada vez mas patente que viv(amos en un mundo de transas, de falta de convicciones, eudo11Jateriales 9. ue Nacional de BellasArtes

,_.CONACULTA


solo hab(an gestado una deshumanizaci6n extrema, y lo que hacla falta ahora era el esp lritu de lucha del Che Guevara, de Salvador Allende y de jose Revueltas, en los que predominase el amor y Ia claridad, y tambien una actitud ante Ia vida mas humana, mas natural, mas intensa. . . Naturalmente, Revueltas no fue un hombre perfecto, quiza una de sus grandes fallas fue Ia que lo condujo a Ia muerte : el alcoholismo. Y el alcoholismo esta mal no porque resulte atentatorio contra Ia moral, sino porque, en el caso de Revueltas, le limit6 Ia vida, lo hizo morir a los sesenta y dos alios de edad, cuando habla llegado a una lucidez portentosa y a un dominio de su talento como nadie en nuestro pals lo habfa logrado, salvo, quiza, Octavio Paz, ipero que diferencia en Ia actitud humana! Revueltas ten fa que haber vivido mas alios porque estos se hubieran traducido en mas obras de trascendencia universal. Simplemente, ahora, Hegel y yo y ÂŁ/ tiempo y e/ mJmero han quedado inconclusas. El alcohol aport6 a Revueltas un esplritu dionisiaco, de apego a Ia vida y a Ia tierra; como a Malcolm Lowry le sirvi6 para penetrar en do m inios del conocimiento del mundo exterior y del mundo interior. Revueltas bebla "hasta Ia sobriedad" y escucharlo en sus raptos alcoh61icos era una experiencia portentosa, en Ia que Ia receptibilidad nunca era suficiente para asimilar todo lo que de el surg(a, que no era otra cosa que un autentico extasis de Dionisio. Sin embargo, a cambio de tales exaltaciones, su organismo se fue mermando hasta agotarlo por completo y hacerlo fallecer cuando mas necesario era que continuase vivo, cuando hab(a empezado a vislumbrar Ia sublimidad de Ia existencia, cuando habfa logrado fundir a Apolo y a Dionisio. Revueltas, que fue el primero en percibir las coordenadas mas invisibles de Ia enajenaci6n y lo hizo proclamar Ia tesis de Ia geometrfa enajenada que encarcela a todos los que nos sentimos libres, no logr6 salir de Ia marana, del laberinto de paralelos y meridianos que lo mismo ahogan el alma como el mundo, pero nos seiia16 el camino : el camino de oro a Ia

Digitalizado par

i~~,~~t~~tef~CONACULTA BellasArtes


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.