SOMOS VOCACIÓN 19a. Comisaría Providencia
Suboficial Mayor Ricardo Castillo González
“Aún hay mucho por entregar” Su experiencia en las distintas facetas institucionales es un capital muy valorado por los jóvenes carabineros de la 19a. Comisaría Providencia.
Por Hugo Hernández D. Fotografía: Cristian Chacoff V.
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omo muchos, se fue formando y perfeccionando como servidor público desde un principio. La contingencia que atravesaba el país necesitaba del esfuerzo de todos para ser controlada... y los nóveles carabineros alumnos no estaban exentos de ello. Corría 1983 cuando Ricardo Castillo González ingresó al grupo de Instrucción Ceicar en Santiago. Con sólo 20 días en las aulas ya se estaba preparando para la Gran Parada Militar de ese año y, de vez en cuando, prestaba apoyo en las calles cuando se efectuaban manifestaciones sociales. “Mi carrera comenzó de golpe, pero nunca tuve miedo. El servicio era muy exigente, pero mis ganas de ser carabinero eran fuertes y con la ayuda de los instructores aprendimos muy rápido”, recuerda, ya con el grado de Suboficial Mayor sobre sus hombros.
Consejero de todos Irradia y contagia su alegría al hablar. Escucha con detención a los más jóvenes y los aconseja. Es muy querido en su unidad, la 19a. Comisaría Providencia, en especial por los carabineros más nuevos. Esa empatía con sus camaradas la aplica diariamente como encargado del régimen interno y de victimización en la guardia. Se trata de una unidad de alta demanda, donde a diario llegan cientos de personas a dejar constancias y a estampar denuncias, muchas de las cuales no son de la comuna. “A los recurrentes les pregunto qué necesitan y, según sus necesidades, los derivo donde corresponde. Algunos quieren denunciar en forma privada, otros llegan por violencia intrafamiliar y, también, están los que sólo quieren ser escuchados… para ellos me hago un tiempo”, explica el Suboficial Mayor.
NOVIEMBRE 2012
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