Revista Jalea 3 by Revista Jalea

nĂşmero tres/ abril dosmilonce.

Amor

® Jalea es una publicación de Les Sardines. Los derechos se reservan según lo señalado en Creative Commons. Los textos son de cada uno de los autores señalados, reservándose cada uno de sus derechos; Edición: David Guerrero Valenzuela. Website: Andrés Correa Guerrero. Fotografía e imágenes: David Guerrero Valenzuela a excepción de las señaladas: página 17 por Mauro Navarro; página 33 manuscrito por Cula Álvarez; y páginas 20, 36 y 40, encontradas a través de Google. Contacto: revistajalea@gmail.com | twitter.com/revistajalea | facebook.com/revistajalea

Les sardines.

Editorial.

¡Ay! Mariana.

Happiness is a Warm Gun.

El Amor es el odio a la Injusticia.

Amor Enfermizo.

Cuando el Atlántico sea más delgado.

Compuamor.

¡Sálvame!

Amores.

Resaca Parcializada.

¿El Amor?

No nos creamos a nosotros mismos.

Lenta Embriaguez.

Más que un 1313.

Ícarus.

De Meollus Eros Complex.

Jalea Recomienda.

David Guerrero

Sara Silva San Martín

Rocío Lara Arévalo

Silvia Gutiérrez

Gonzalo Orellana Bravo

Andrés Correa

Mauro Navarro

Daniela Vergara

Roberto Urra

Cula Álvarez

Gabriel Vidal Sáez

Carla Castillo

Ingrid Uribe Lastra

Rocknrolla Gutiérrez Ormeño

Sara Silva San Martín + Cula Álvarez

Juan Pablo Valdés

Libro, disco y película.

Editorial. David Guerrero Valenzuela

El amor. Qué no se ha dicho del amor. Es el tópico más recurrente para literaturas, músicas, y cualquier tipo de expresión artística. Y bajo esa realidad pareciera que todo ya está dicho. Hay amor en todos lados. En cada acto. Lo paradójico, es que mientras más se excava en el tema, mientras más pareciera que el mundo está lleno de respuestas con respecto a ello, menos se sabe del asunto. Love is all, love is new. Love is all, love is you. Pero la verdad es que no es nada. Sorry, Lennon. A modo personal, percibo el amor como la opción más válida para sobrellevar. Sobrellevar todo. Hacer todo por amor es lo más políticamente correcto, es la razón que las cosas se mantienen bien, o normal, o estándar. La pérdida de este, o la manipulación lleva a que exista gente mala (definámoslos como caricaturezcos villanos), que aún así no dejan nunca el amor de lado. El amor sigue siendo tema para ellos-nosotros, aunque lo nieguen y lo renieguen. Un loco dice que el amor es la cura de todos los males. Quizás es la razón. Como cristianos en edad media. Lo que sea por el fin superior, mantener el amor. Gente llora por amor. Sufre. Y al referirme a todo esto, creo ni siquiera haber tocado el amor bajo un prisma “romántico”. Uno ama todo. Sin ánimos de analizar, Nietzche manifestó que “la verdad es que amamos la vida, no porque estemos acostumbrados a ella, sino porque estamos acostumbrados al amor.” Como sea, el amor se lleva a cabo. Love is all, love is new. Love is all, love is you. Pero la verdad es que no es nada. Pero la verdad es que, sea como sea, estamos metidos en ello. Como villano o como el bueno (y rubio) de la película. Lennon, tenías razón. A modo personal, dedico esta revista. Y esta, y la anterior, y la anterior; y la siguiente, y la siguiente. Disfruten esta revista. :)

“Pollito”, by dvl.

¡Ay! Mariana. Sara Silva San Martín

- Jefe, acaba de llamar Eduardo Monardes diciendo que no va a poder venir hoy. A él le tocaba hacer el inventario este mes junto con Mariana Astudillo. - Busca un reemplazo rápido, entonces. - Mario Inostroza y Felipe Ávalos están armando las vitrinas, yo tengo que enviar las encomiendas. El único que queda libre es Álvaro Castillo. - Problema solucionado, entonces. La de Alvarito era una suerte extraña: Hacer dos meses seguidos el inventario (el mes anterior le había tocado legalmente) y ésta vez en compañía de Mariana. Cualquiera de los otros simios de sus compañeros de trabajo habría estado fascinado de hacer el inventario ( y quizás qué cosas más) en compañía de la Señorita Mariana Astudillo, que de señorita tenía la pura soltería, pero el caso de Alvarito era distinto. Hace 7 años él tuvo una relación con Mariana y desde que ésta se había incorporado un par de meses atrás al grupo de funcionarios de la tienda deportiva la había evitado de todas las formas posibles aunque no podía evitar las imágenes, a veces un poco indecentes, que evocaban a esa fugaz relación veinteañera. Mariana Astudillo era una de esas mujeres fatales que desprenden aroma hipnotizante por todos lados. Siempre se preocupaba de comprarse jeans dos tallas menos que la suya y un buen perfume. Dios depositó en ella atributos físicos generosamente y pareciera que llegó de las primeras a la repartición de dones porque además cantaba igual que Aretha Franklin. Se dormía cantándoles al oído a sus pololos. Era muy afín con el bossa y cantaba los temas más lentitos en los cuales Pedro, Juan o Diego se perdían de amor, algo que en el fondo a Mariana no le importaba mucho.

Álvaro la conoció en un bar. Estaba sentado sólo en la barra tomando una cerveza cuando llegó Mariana y se sentó en una mesa. Que se sintieran atraídos fue cosa de 20 segundos mirándose 9 fijamente a los ojos. Alvarito se paró decidido a ir a hablarle para quizás prosperar con esta mujeraza en algún rinconcito de la nocturna ciudad, pero no tardaron en aparecer tres tipos que se sentaron con ella, aunque la fatal Mariana, mientras coqueteaba con todos, decidió que el afortunado sería nuestro solitario de la barra. Así comenzaron su relación y Álvaro sabía de sobra que ella era una de esas mujeres con mucha experiencia, pero quiso aprovechar eso a su favor y disfrutar de su merecido turno en la vida de Mariana. Lo que hizo fue peligroso ya que siempre bordeó en la línea que limita el amor, por lo que consecuentemente no tardó en llegar el momento en el que no pudo con su cabeza y terminó enamorado hasta los huesos. Muy lindo el amor pero cuando es debidamente correspondido. En este caso no era así. Mariana nunca se enamoró de Álvaro y como siempre lo hacía un día desapareció. Después de ese día el chiquillo enamorado vivió un año entero entre borracheras, resacas y un disco de Caetano Veloso que su musa impredecible le regaló un día. Nunca más la volvió a ver , pero después de 7 años el destino hizo los trámites para que acabaran juntos vendiendo copas de campeonato, raquetas, pelotas, tobilleras, etc. - Si nos dividimos los estantes va a ser más rápido que acabemos, Mariana- dijo huraño Álvaro. - Si tú lo dices…- le respondió ella. Mientras trabajaban un ambiente denso se generó y Mariana quiso romperlo.

- ¿Pongamos música, Álvaro? 10

- Haz lo que quieras, Mariana. Ante la negativa, Mariana optó por ponerse a cantar suavemente. Álvaro empezó a sentir escalofríos. - Desde que llegué acá, he pensado que podríamos ser amigos- dijo de pronto ella. - No se puede ser tu amigo, Mariana. - Yo tengo muchos amigos. - Todos tus amigos te desean o te aman. Eso no es amistad. El estar contigo siempre tiene una finalidad poco inocente. - Tu te lo pierdes, Alvarito- dijo Mariana mientras finalizaba su parte del trabajo- ¿Estás un poco nervioso o es idea mía? - No me pasa nada. ¿Te vas ahora que terminaste, cierto?- preguntó, con una ínfima e ingenua esperanza de que le dijera que no, que se quería quedar con él. - Sí, Alvarito. ¡Nos vemos, mañana! - Nos vemos, mañana...- dijo Álvaro sin ocultar su nostalgia. Mañana sería lo mismo desde que llegó Mariana: Adivinar el color del sostén de Mariana. Mirar de reojo el calzón que asoma por el jeans de Mariana. Ver coquetear con todo el personal a Mariana. Morir embrujado por esa diosa que era Mariana.

Happiness is a warm gun. Rocío Lara Arévalo

Mi corazón caído del árbol se arrastra por la tierra, llega a tu mano y entra en tu boca; se disuelve delicioso en tu cuerpo, nada por tu sangre roja hasta 11 alcanzar al tuyo y lo hace estallar. Le feu! Todo es rojo alrededor, rojo, rojo, caliente, suave, aterciopelado, envolvente. Semillas esparcidas. Le dices chao al reloj, al clima, al desayuno… « ¡No me gustan los hombres! ¡No me gustan las mujeres! » Me gustas vos. » El amor comunica hombres con dioses, caos y cosmos, cielo y tierra. Del amor nacen criaturas portentosas, siendo no humanas las más maravillosas. Semillas esparcidas. Algunas se asientan en la tierra, a otras los pájaros se las llevan a volar. El otro día viniste y me cantaste lo que no me pudiste hablar, ave de ninguna parte, te fuiste volando hasta chocar con el sol. ¡Yo soy el sol que calienta tu tierra! Te derretiste y llovió miel toda tu ausencia y ahora el suelo pegajoso no deja que mis pies te vayan a buscar. Casi no reconozco mi corazón después del viaje fervoroso que sin mi dio.

El Amor es el odio a la Injusticia. Silvia Gutiérrez

“...Ahora en estos momentos, en mi corazón hay una gran amargura y un profundo dolor, pues uno se da cuenta que el Pueblo no está preparado para recibir el amor y la confianza del militante, del hombre revolucionario. Porque el hombre, la mujer, el joven revolucionario no tienen espacios en esta sociedad, porque no se puede demostrar el amor en plenitud, porque estamos limitados a dar solamente una pequeña parte de nuestro amor y todo lo demás tan puro y sincero, lo tenemos que volcar en la lucha popular...” Rafael Vergara Toledo

Hoy las autoridades preparan los operativos, el plan de contingencia, el vasto despliegue policial. Hoy las organizaciones sociales preparan velas, charlas, lienzos, boletines. Hoy los colectivos y otros grupos salen a recolectar neumáticos, a comprar bencina, y a inventar consignas. Mañana los periodistas mostrarán en las noticias los destrozos y los disturbios del 29 de marzo. Tendrán como fuente al director de carabineros y a algún alcalde facho como Zalaquett. Hinzpeter hablará de proteger la propiedad privada y del progreso. Pero hoy, mañana y todos los días, la señora Luisa y don Manuel recordarán a sus hijos. Se les vendrá a la mente el rostro de Eduardo, el de Rafael… también el de Pablo. Irán a su jardín, ese de árboles frondosos y frutales e intentarán encontrar allí luz y respuestas. Recordarán el primer acto de amor de sus hijos. Verán fotos de cuando eran pequeños, quizás Luisa piense en Eduardo, en lo alegre y llorón que era, en lo travieso, en lo cariñoso, en lo rebelde. A lo mejor Manuel pensará en Rafael, en ese pequeño niño que pesó tan sólo 2 kilos 800 gramos. Es chiquitito, pero risueño, chispeante, con los ojitos brillantes, juguetón y fanático de los insectos, plantas y de todo lo que lo rodea. Sabe que hay un mundo por descubrir… Crecen en una familia comprometida con la fé y con la lucha. Acuden todos juntos a jornadas en la Villa Francia, a reuniones, a toda actividad de organización popular. La vida era un acto de amor constante y consciente para los Vergara Toledo. Despojados de bienes materiales, daban todo por el pueblo pobre, que necesita de nuestro amor comprometido por una sociedad nueva, de hombres y mujeres nuevas, para triunfar con una patria socialista. Luisa y Manuel también son un acto de amor en sí mismos. Decidieron muy jóvenes juntar sus caminos, y cada uno aprendió del otro. Juntos

comenzaron a construir una pequeña historia que pretendían se desatará en una hecatombe, en algo mucho más grande, no sólo para ellos sino para todos nosotros. Nada podía contra ellos. Pero apareció la dictadura, la represión golpeando sus puertas. No sólo la de ellos, sino la de muchas familias en 13 todo Chile. La represión era lo único que podía desintegrar a una familia así de fuerte. Pero llegó, con persecuciones, allanamientos, y finalmente, con Eduardo y Rafael acribillados en manos de la policía. Y es ahí cuando realizan su último acto de amor. Eduardo y Rafael, militantes del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), pertenecientes a las milicias de la Organización, caminaron juntos ese día por su población, por su querida Villa Francia. Muchos vecinos y familiares estuvieron con ellos ese día. Tras una denuncia, apareció Carabineros. Les pidieron detenerse, pero corrieron fuerte, y las balas alcanzaron a Eduardo. Murió de inmediato. Rafael quedó herido, por lo cual fue subido al furgón policial donde es rematado. Fue arrojado junto al cuerpo de su hermano mayor. Rafael aún estaba vivo, e hizo su último acto de amor: estirar su mano para acercarse a su hermano. Así murieron los hermanos Vergara Toledo; como mueren los revolucionarios, en la lucha, con dignidad y en un acto de amor. Hay que saber que la muerte no es en vano cuando hace perdurar la vida. Y la de Eduardo, la de Rafael, la de Pablo, la de Araceli, la de Daniel, la de Matías, y muchas más, no ha sido en vano, sino que crecen con fuego en el corazón de cada revolucionaria y de cada combatiente.

Amor Enfermizo Gonzalo Orellana Bravo

“Amor enfermizo, es lo que equivale a que me pises si te piso” Tiro de Gracia, Decisión, 1999

Diversas son las maneras de concebir el amor, más aún en estos tiempos donde los roles protagónicos entre mujer y hombre se han homologado, de a poco se ha mitigado todo el cuento del machismo, haciendo las cosas equivalentes entre ambos géneros; aunque no en la mayoría de los casos. Historias en las calles abundan, como personas caminan por ellas, y es en las junglas de cemento donde todo se va construyendo, desde lo material, hasta lo emocional; por la calle se mueven las personas con sus diversas formas de amar, se pueden reconocer algunos tipos, como esa persona libre que no se amarra y solo vive lo que le depara el destino, estas personas nos pueden parecer interesantes, porque no podemos negar que la libertad siempre nos atrajo. También están esos seres enamoradizos, que como abejitas se mueven de flor en flor, en busca de un amor intenso y apasionado; están los eternos solteros, regodeones en busca de la perfección para poder acompañarse de un poco de amor, amor de pareja, claro está; y así podemos continuar alargando nuestra lista. Lindo es el amor cuando llega, también martirizante, doloroso y cruel cuando se va, pero independiente de los sin sabores que este también trae, siempre nos volvemos a enfrascar en nuevos viajes, con personas distintas, por nuestro simple gusto de amar y de querer. Pero, ¿qué pasa cuando las líneas del respeto se pierden? Cosa que sucede con mucha facilidad y frecuencia en algunas relaciones. A más de alguien le ha tocado ver alguna escena en plena calle, con gritos, insultos, incluso golpes, lo que resulta ser una situación muy incomoda; he tenido amigos cercanos viviendo esta realidad y lo impactante es como el

nivel de ceguera puede cambiar a las personas de una manera insana, encerrándolas en un mundo amargo, que se transforma en algo solitario, porque ya hemos aprendido que las relaciones de dos no son de Dios. Nunca he logrado comprender cual es el rol del amor en las relaciones enfermizas y violentas, ¿será acaso el masoquismo una forma de amar? O ¿será que hay personas que viven con el temor de estar solas y por esta razón son capaces de aguantar hasta las más sucias humillaciones? En lo personal no estaría dispuesto a sufrir semejante calvario, porque en estos tiempos la tortilla se da vuelta y más de un amigo con un rasguño ha llegado a pedir consuelo y peor aún el caso de mi amigo personal, que por razones de respeto no citaremos su nombre, aún así nos ofreció su caso: Cada mes sufre por tener que hacer un regalo mejor al del mes anterior, gastando así mucho dinero en regalitos y moteles, porque sino la susodicha se siente ofendida. Todo el tiempo escribe en una pizarrita en su pieza las fechas, o mensajitos como “comprar regalito”, “comprar condones”, “buscar motel”, también pidiendo ayuda a sus cercanos para hacer tarjetitas con relieves, o de esas que se abren y salen figuritas, cosas muy lindas, pero que no son innatas, sino que son producto de la tensión para dar en el gusto y evitar las molestias, porque mi socio vive en la tensión, tensión de conseguir el

auto para que ella no se enoje, tensión de superarse cada mes. Y es que como tenemos libertad, también podemos caer presos en relaciones enfermizas, donde el amor se transforma en obsesión y es aquí donde el juego se pone peligroso; factores sicológicos calculando la forma de no desprenderse jamás de lo que supuestamente amamos, falta de valentía en asumir el fin de una etapa, la simple y compleja dependencia hacia una persona e incluso en casos más extremos, el asesinato al ser amado, “machicidio” o femicidio, este último caso tan común y explotado por los medios de comunicación y que según el Gobierno: “Una mujer muere a la semana como víctima de este tipo de ataques”. Lo importante es lograr darse cuenta de estás actitudes y no caer en una relación enfermiza, en el hostigamiento menos en el control telefónico y como decía “Pogo”, vocalista de la banda punk Los Peores de Chile, “El amor es un acto de locura grave, grave, grave”, pero personal es la decisión de vivir sanamente y no caer en la violencia dentro de una relación, respetar las libertades individuales y no convertirse en el dueño de alguien, porque claro está, cada uno es su propio dueño, con el poder de decidir que hacer con su vida, como irse haciendo dedo a la China o casarse con una mijita rica en Los Vilos.

Cuando el Atlántico sea más delgado. Andrés Correa

Cuando el Atlántico sea más delgado podré volver a mentir. 16

No tengo reloj para saber si es que lo hará a tiempo, pero estaré con la brisa en mis ojos viendo impávido como sus costas se vuelven una. Con esa brisa que mantiene congeladas hasta las hojas. Estaré, al final de ese día, entre dos espaldas en el dormir que nunca debería detenerse. Estaré y seguiré estando allí, donde las manos no llegan y solo existe el halito de un Abril que existió solo una vez y que, en su fragancia y en la tuya, guarda los más bellos momentos descritos por el García Márquez de la población. Tanto tomar tés en Londres que olvidé que no sabía nadar y lograr llegar vivo a los lugares donde tienen azúcar en cubos. Y aunque luego de un tiempo aprendí a nadar, definitivamente no he encontrado los cubos necesarios para endulzar el resto de tarde que quedaba para que el sol se perdiera en el mar que quiero seco. Y morí. Morí con el mate amargo y la boca seca. Pero solo basta esperar a que el Atlántico sea más delgado. Mi reloj dice que falta una noche más. Y para cuando el Atlántico sea más delgado estaré ahí, con la misma canción guardada bajo el brazo y con la sonrisa sarcástica que me habla de un continente inútil que ahora no existe. Y será tan noche. Y será tan noche. Tan noche. Que nadie sabrá que junté dos continentes con tal de que todo tuviera sentido.

Compuamor. Mauro Navarro

¡Sálvame! Daniela Vergara

18 Todo el mundo dice:

“el amor es hermoso a tu edad” ¡yo no sé que le encuentran de hermoso! Se pasa de sufrir en sufrir Y de llanto en llanto. Es como la ley de la vida, A porrazos se aprende, Pero no puedo evitar tropezar con La misma piedra y rodar entre sufrimientos, Hundirme entre llantos y Quedarme en el olvido. A veces cuesta aceptar que no te quieren Y por más que te entregues, cabe la Posibilidad de no tener respuesta Y pensamos que se nos acorta la vida Y todo se va a la nada. Pero tu dulce sonrisa me sacó de este hoyo, Dándome alas. Contigo fue que aprendí a volar, también a Incursionar en el fondo de tu alma Como un pez en la mar. Mi dolor se hundió y mis sueños nuevamente Salieron a flote y esta vez me refuerzas Para que nadie me pueda hundir. Pero si esto sucede… Tú serás mi salvavidas para que juntos Podamos sonreír.

Escribe. Dibuja. Opina. Ilustra. Fotografía. Crea. Únete.

Amores. Roberto Urra

En una página de la red se dice que los Beatles incluyeron más de 600 veces la palabra amor en sus letras. Love, Love, Love. Tales canciones siempre fueron de la mano con alguna mujer que bien supimos olvidar al momento de tercermundializarlas, décadas después. Indudablemente en los primeros discos del cuarteto los afanados letristas abusaron desmedidamente del sagrado vocablo. Las razones son muchas: inmadurez de conceptos, necesidad de vender y posicionarse en los mercados, el amor puro a muchachas jóvenes o simplemente el uso de un motivo repetido por los años y los siglos incluso antes de las tinieblas y el capitalismo. Sucede porque me gustas. Lo cierto es que el motivo de estos ingleses y de tantos que no lo son (la mayoría ciertamente) es básico y medianamente universal (concesión a los bárbaros) por culpa de la occidentalización del planeta Tierra: es, pues, el amor a la mujer o al hombre, que deja erosionar sus cuatro letras por el deseo y la pasión. Sin ir más lejos es ese sentir occidental de cartas, pudores, flores, explicaciones a destiempo, cercanía física (“Tu cabeza en mi hombro, la clara música nocturna de tu cuerpo”), verdaderos ritos y todo ese arsenal de combinaciones, a saber: día del amor, prueba de amor, falta de amor, beso de amor y el horrible etcétera. Los poetas del siglo hicieron otro tanto y no es necesario demostrarlo. Basta abrir una página. Por otro lado incluso caminar o aquello que es ‘interactuar con el planeta’, es decir, meterse en lugares donde no pones la música, bailas, tomas y pagas. Por supuesto, “cómo te voy a olvidar” o “tuve sexo mil veces pero nunca hice el amor” vulgarizan el ambiente de la ciudad contemporánea, en la micro en el centro o en los barrios; y de pronto escapan melodías como aquella que dice que mi amor no es amor de mercado porque un amor sangrado…

En fin, no es amor de lucrar, aunque de todas formas todos lucran. La moneda es algo transitorio. El beneficio podría ser el mismo. Te necesito a ti siempre y los terceros más bien estorban. Hay un tercero que podría ser mi enemigo porque también te quiere. O podría ser tu enemigo. Y así triángulos, círculos, indeseables, pasionales, entregados a ese tiempo cotidiano que se baña de aquellos nudos en la garganta, esas cosas en el estómago. En este caso me quedo con el poeta ebrio que en su pueblo verdaderamente pequeño recuerda el rostro de una muchacha (“Donde se reúnen todos los rostros que he amado”) y que camina en un sur dictatorial donde se han escapado todas las mujeres. Ese mismo día dijo sobre la línea del tren: “Saludos a los Beatles que cantaron porque te amo”. * John Lennon dijo en 1966, extasiado por tener la tierra a sus pies, que los Beatles eran más famosos que Jesús. Seriamente hablando se ha demostrado con datos empíricos que El Salvador nunca perdió popularidad ante el cuarteto, aún más, su aceptación no amainó y siguió sumando seguidores mientras los Beatles se traducían al japonés. Jesús ha tenido una envidiable post-vida de traducciones e interpretaciones a todos los idiomas habidos y por haber (en tal caso) lo que lo posiciona como una figura indiscutiblemente universal contando entre sus triunfos libros, musicales, conversos, canciones, muertos, parábolas y otros logros. Antes de seguir con esta historia tenemos que imaginar a El Redentor diseccionado de todas las grandes pajas (esa es la palabra) que La Iglesia Católica Apostólica y Romana utilizó para legitimar bastardos planes. [Imaginarlo también como en South Park, donde actualmente vive]. Hay que imaginarlo históricamente como un profeta flaco, trashumante, líder de una secta, perseguido, torturado y asesinado por la Sacra Ley. Como lo recordó Salvador Allende en la Universidad de Guadalajara: “el Cristo que echó a los mercaderes del templo”. [No hay que ir más lejos: ¿en qué se relaciona el “amar a tu prójimo” con la falta de praxis empírica de algunos Hombres de la Iglesia? En nada. El amor del que dicen habló Jesús debe ser práctica o ser nada, morir.]

Tres datos dados por un filósofo: en la tradición griega existe el ‘eros’ (deseo) y la ‘philia’ (amistad), ambos son amor, ambos en el orden de la Ley. La otra tradición, judeocristiana, que también cayó de los yelmos, habla del ‘agápe’. Y esto es: el amor al otro como Otro, al débil, oprimido y explotado; no es amor interno (lo mío sobre lo tuyo) sino intersubjetivo, histórico y políticamente subversivo. ¿De qué mueren los guerrilleros y el luchador social? Ernesto Guevara acertó: hay que “sentir 21 como propia cualquier injusticia cometida contra cualquiera en cualquier parte del mundo”. Y eso es la responsabilidad comunitaria, la conmoción ante la exclusión. Los guerrilleros mueren de dignidad, de profundo amor. El amor comunitario ha sido olvidado, sin embargo seguimos siendo seres sociales (si no, qué), humanos que vivimos y trabajamos en comunidad (Marx), solamente el desamor social es capaz de producir la injusticia (el fundamental acto de desamor de apropiarse de la plusvalía generada por el trabajador) y solamente el amor social podrá cercenar esta realidad. De tal amor debe empezar toda práctica política, de ahí el fundamento prístino de toda ética necesaria. Somos herederos de todos: de los Beatles, de mi abuelita, de las suyas, del patético love me do, de El Salvador, de amar al otro, de don Jorge y las guerrillas. El amor interno, que amarra, moderno, dual, filial y formal. El amor externo, libertario, social y subversivo. No excluyentes entre sí, escondidos a veces, claro, como cuando no queremos decir las cosas y cerramos los ojos. Una vez más: en el diario caminar, aquello de recorrer los surcos del planeta, deben convivir los dos amores, imposibles de disociar al menos potencialmente de estos cercos como cuerpos. Convivir los amores, simplemente porque el potencial ya demostrado por todos los cuentos e historias libertarias y de amor es gigante como dos galaxias. Me quedo con el poeta enorme que escribió: “Y así esta carta termina sin ninguna tristeza: están firmes mis pies sobre la tierra, mi mano escribe esta carta en el camino, y en medio de la vida estaré siempre junto al amigo, frente al enemigo, con tu nombre en la boca y un beso que jamás se apartó de la tuya.”

Resaca Parcializada. Cula Ă lvarez

Para cuando desperté, ella ya se había ido, haciéndome pagar por todas esas veces que hice lo mismo. El desayuno fue un trámite absurdo y solitario, de esos en los que no sabes por qué se te quema el pan en el tostador, el azúcar escaseaba, y además ese olor horrible viniendo de no sé dónde. Quizás para ella era más fácil y soy yo quien sufre solo en una cocina por la mañana, espero sea así. Otra vez abrí el refrigerador sin saber por qué, desde niño lo hago, cuando estoy aburrido abro el refrigerador, miro, y lo cierro, en una secuencia estúpida que se transformó en rutina. Al menos esta vez me sirvió para percatarme que no es necesario comprar carne, las meticulosas bolsitas ocupaban todo el congelador y la tercera parte del conservador de alimentos. La ducha fue rápida y certera, desodorante, ropa y a la calle. Me acabo de percatar de varias heridas en la espalda, y sonrío pensando en las brutalidades que quizás hicimos. Inusualmente no huelo a alcohol, debe ser por la calidad del mismo, en realidad no me importa, la resaca siempre me llega parcializada.

Las calles de esta ciudad están rotundamente sobrevaloradas, son tan grises como mi corazón, tan abundantes como mi pelo, largas como mis penas de amor, y llegan a la nada, como todos los 23 proyectos que empecé... son iguales a mí, no sé por qué las aprecian tanto... y en eso mi estómago quiso decirme algo con un sonido gutural… entiendo, estoy cagado de hambre. Llego a la casa, el olor de mierda en la cocina me recibe, hay arroz, hay tomates y carne de sobra. Cuando abro el refrigerador saco una de las bolsas, parece ser pollo, o algo así. Rompo la bolsa y recuerdo de golpe... las sabanas en tu cuello, los rasguños en la espalda, el olor putrefacto, el último aliento y tus labios soltando un “te amo” que se funde en un beso. No puedo ni creer ni entender, pero tengo ese sentimiento de que hay algo que debo terminar, no lo pensé mucho ni le di más rodeos... hoy te llevo conmigo, eres mi sangre y mi energía, como solía decirte; “somos uno, somos 2, somos todo, somos nada”. Al fin terminé un proyecto.

¿El Amor? Gabriel Vidal Sáez

Naturalmente que escribir acerca del amor presenta variadas aristas, es obvio que lo primero que se nos viene a la cabeza es el amor de pareja, 24 pero existen una variedad inmensa de sentimientos que pueden ser cómodamente ubicados bajo el calificativo de Amor. El amor de padre. Es un amor que promete ser desinteresado y absoluto, aunque hay ejemplos donde esta “regla” no se cumple. Al principio nos aman como si no hubiese nada más, sin embargo, al crecer y comenzar a competir con nuestro padre, a él ya no le pareces aquella cosita tierna absolutamente dependiente de ellos, ya eres amenaza y estas lo suficientemente grande como para “volar” solo, te pagan estudios y te piden con amabilidad - o no, según sea el caso - que te largues. Ya es tu hora. Además hay que analizar qué motiva a un ser humano a tener hijos. Aburrimiento, “mejor no dejar para mañana lo que puedes hacer hoy”, “ya se va el tren”, frase célebre generalmente usada para que las mujeres se apresuren a procrear y formar familia, repetirte, proyectarte, llevar tus genes con éxito a la siguiente generación, realizarte como persona, porque mi madre quiere nietos antes de ser vieja, porque yo quiero hijos antes de envejecer y no poder jugar con ellos, para que alguien con tu sangre haga o logre lo que tu no, etc. Casi nadie te responde que tuvo hijos “por amor”. NADIE. Al menos hasta ahora. Si algún lector lo pensaba, le pido mis más humildes disculpas. El amor al prójimo. aquel que tanto Jesús trató de inculcar en nuestros durísimos corazones de hombre. Cómo no amar a esa señora que te choca en la calle fingiendo que eres invisible, o a esa compañera de trabajo que nunca “le toca” y te hace la vida imposible, o al jefe que se levanta idiota porque no ha ganado la suficiente plata este mes y no puede cambiar el auto o viajar al paraíso de moda con sus amigotes, o el cajero del banco que

siempre anda de malas, o al nunca bien ponderado chofer de micro que descarga sus frustraciones de vida en ti o en tus pares que están igual de obligados que tú a tomar el transporte público. Como no amar al prójimo como a ti mismo… La gente no se ama a sí misma, al menos no en forma consciente y constructiva. Se tiñe el pelo, se opera, engorda como vaca, o se obsesiona y come sólo lechugas; lucha por tener “cosas”, en lugar de subir su plusvalía a través del desarrollo personal, se mete en oficinas a podrir sus traseros hasta hacerlos inutilizables, le hace la vida imposible al resto, con la premisa de salir a “luchar” por el pan para sus seres queridos que suelen ser sus hijos, a quienes están a punto de echar a volar (en términos poéticos), para que mantengan su propia familia y vean lo que es bueno. O sus esposas o esposos, a los que a duras penas soportan, como no, si apenas los conocen, si hablan un poco con ellos, lo hacen masticando algo que no saben que es, mirando algún estupidizante programa de TV, antes de dormir. Egoísmo no es sinónimo de amor propio. Sin embargo, existen ejemplos maravillosos de amor. Un sacerdote polaco que en la Segunda Guerra Mundial pidió clemencia por la vida de un hombre a punto de ser ejecutado, clamando que este hombre tenía familia, esposa e hijos que esperaban por él, etc. Los soldados respondiendo al alegato del sacerdote con el ofrecimiento de cambiar su puesto, es decir, ejecutarlo a él en lugar del otro. Sin dudar, el sacerdote evaluó su situación y viendo que en realidad no tenía mucho que perder, ni familia ni amigos que lo esperaran (quizás todos muertos para ese entonces) entregó su vida a cambio de la del hombre que estaba a punto de ser ejecutado primero… da para pensar y tener esperanza en la humanidad.

Podemos contar el amor a nuestras actividades también entre las “clases de amor. No me refiero a cualquier actividad, no nuestros trabajos, que en realidad es tiempo valioso que nos pertenece y que le “vendemos” a alguien más, que le da pereza hacerse cargo de las tareas que nos encarga. NO. Hablo de nuestras actividades, aquellas que hacemos para darle sentido a nuestras vidas, no simple recreación, sino que verdadera pasión. No nombraré ninguna para no herir a nadie. Sin duda sé que saben a lo que me refiero. Pero este amor es traicionero. ¿Qué pasa cuando tenemos que compartir el tiempo, que siempre es muy limitado, entre nuestra(s) pasión(es) y nuestra pareja, por ejemplo, o nuestros hijos, o padres? ¿Pasan a segundo plano? ¿Hipotecamos nuestras relaciones personales? Les quitamos importancia a esas personas, las herimos, las olvidamos y al final de cuentas hacemos que esas personas nos quiten su valioso apoyo que antes no notamos y era lo que en primer lugar nos brindaba la energía necesaria para llevar a cabo nuestros proyectos y planes referentes a nuestra pasión. Aquellos que tienen una pasión de ese tipo entienden que el amor a eso, es amor a sí mismos, es egoísmo en práctica, y jamás será tolerado por nuestros cercanos, si es que eso significa que se conviertan en nuestros “lejanos”. El amor a dios, que más bien es temor. Temor a la perdición en el infierno, temor al poder del todopoderoso, temor a la omnipresencia que todo lo ve, incluso lo que pensamos, temor a Satanás que anda por ahí tentándonos a hacer lo que no corresponde, para lo cual no tenemos protección. Como no sentir temor con semejantes poderes peleándose la posesión de nuestras insignificantes (y quizás inexistentes) almas. Sin embargo, en las líneas del libro sagrado se profesa un amor fuera de este mundo para con nosotros, solo que en la práctica se nos condena a un sufrimiento más allá de nuestro control y hasta cuando se le antoje al creador, al final de cuentas fuimos malos hijos que se comieron una fruta y que deben pagar con un castigo más que desmesurado, fuera de todo contexto por la desobediencia. El amor de pareja, que no es más que la proyección de lo que quiero yo, en una persona del sexo opuesto (o del mismo… no hay discriminación en esto). En lugar de amarla y solo eso, tratamos de explotar lo que a nosotros nos parece bien del actuar de esta persona, que con inocencia e ilusión deposita en nosotros sus tímidos sentimientos.

Claro que a su vez, también su mentecita trabaja en pos de lograr que cambiemos nuestros “malos hábitos” para convertirnos en el príncipe azul que las películas de Disney y las comedias románticas nos han impuesto como vara a superar. Es tan estúpido pretender que los seres humanos no tenemos defectos, aprehensiones, traumas, mañas, ilusiones (contrarias a veces de lo que quiere la pareja), etc. Cuántas características que una vez fueron admiradas, luego de un par de años (si tuvimos suerte y duramos “años”) son enrostradas como lo peor de nuestra personalidad. Cómo nuestras pasiones se vuelven nuestra “amante” y terminan minando la relación; o el ajetreo de la vida, las grandes distancias de la ciudad, la presión del trabajo… de ser cómplices, las parejas pasan a ser dos extraños masticando algún determinado alimento antes de irse a dormir e iniciar otro día. Cómo el dejar cada vez más de ser nosotros mismos, para dar paso a ser, “la pareja” de un tercero, trae desazón y rutina a nuestras relaciones, además de una creciente amargura a nuestras propias vidas. La cruel realidad contrasta con las películas cebollas de la televisión donde siempre el jovencito se queda con la jovencita y viven felices para siempre, o las típicas escenas que nos hacen llorar porque soñamos con que alguna vez las viviremos, y cuando estamos al final de una relación nos decimos: “para la próxima será…”

Lo que nos mueve como humanos a despegarnos del asiento y hacer algo por alguien tiene irrevocable conexión con lo que nos conviene, con lo que recibimos a cambio. Si hacemos un favor, si ayudamos a alguien, si regalamos algo o acudimos a un llamado. Quizás lo que separa a los buenos de los cínicos, es que, sin ambos dejar de pensar en la recompensa, el cínico la espera inmediatamente de la persona a quien ayuda y el “bueno” la espera de la vida, o simplemente ÉL se siente bien haciendo determinada acción. Nadie hace algo sin que dentro de él se genere un sentimiento positivo para hacerlo, lo que ya es una compensación en sí mismo. El novio que va a cualquier hora a una cita o no come por ir a ver a su amada… no lo hace por ella, lo hace por lo que siente cuando esta con ella. O iría a ver a cualquier persona sin comer o sin dormir. El personaje que es capaz de hacer inmensos favores, sin pedir nada a cambio, intenta no darle las gracias y no le cuentes a nadie que él te ayudó…verás cómo reacciona. El espera gloria, cumplidos, homenajes, esa es su paga. El amor se confunde en estos casos cuando sublimamos acciones o pensamos en las virtudes relacionadas al amor, qué importa lo que digan filósofos y pensadores, basta con mirar alrededor y darse cuenta de que si existiera amor no veríamos niños morir de hambre, trabajadores rogar por justicia, madres maltratar hijos, esposos maltratar esposas, el mundo destruirse a manos del progreso, etc. En resumidas cuentas, el amor, como el sentimiento sublime, que todo lo entrega, que nada quiere a cambio, que todo lo perdona, que es puro y blanco, ese amor perfecto, el amor bíblico que es sufrido, benigno, sin envidia, que no es jactancioso y que no se envanece; no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita ni guarda rencor; no se goza de la injusticia, todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera y todo lo soporta. No puede existir en un mundo como este, un mundo imperfecto… es ilógico pretenderlo. Quizás lo vemos por breves instantes, cuando sostenemos la mano enanísima de un bebé (símbolo de otra oportunidad para la raza humana), o cuando miramos a los ojos sonrientes de nuestra enamorada en la etapa del “idiotamiento”, o en la mirada siempre bondadosa de nuestra madre, o en la desgracia, cuando aflora momentáneamente lo mejor de nosotros. Quizás tenemos el potencial de sentirlo y de vivirlo, pero por ahora sólo podemos contentarnos y sentirnos afortunados por aquellos efímeros instantes en que la gloria toca nuestras vidas.

Este lugar puede ser tuyo._

Escribe. Dibuja. Opina. Ilustra. Fotografía. Crea. Únete.

No nos creamos a nosotros mismos. Carla Castillo

No nos creamos a nosotros mismos, como podemos saber para que fuimos creados? Existo desde antes de la creación del mundo, vivía en la oscuridad, y recorría el silencio del infinito. Cuando se creó el mundo me dieron una misión, en todo lo que se creo me pusieron a mi, desde una planta, una roca, hasta en el interior de aquello, la más preciada creación, el hombre, para que cada vez que pensaran en mi sus corazones se alegraran y recodaran que en todo estoy yo y encontraran el sentido de la vida. Para que cada día, cada noche, el hombre me sintiera y supiera que me llevaba con el a todo lugar, yo estaba en su pensamiento, en su alma , en su corazón, yo actuaba libremente en sus vidas y fluia como agua, ardia como fuego y se gozaban gracias a mi, en cada acción ,en cada deber. Pero el hombre conoció otros sentimientos: la rabia ,la pena, el dolor, el egoísmo, el orgullo y muchos tantos sentimientos mas que vinieron a compartir mi hogar dentro de ellos, dejando cada vez menos espacio para mi, me fui a pagando y solo a veces cuando en sus mentes se acordaban de mi y me añoraban volvia a despertar, pero la mayoría del tiempo en sus cabezas yo no estaba, ellos podían recordar el odio, la rabia , la preocupación, soñar con cosas que probablemente jamás sucederían,trasladarse al pasado y revivir viejas heridas y volver a sentir pena por ellos mismos y crecia el rencor y el lamento era fuerte y maldecían diciendo: ” maldito amor!” y yo volvia a la oscuridad...

Cada mañana vuelvo a renacer detro de cada persona , y cuando estoy listo para salir y vivir junto a ellos , escucho “mmm que lata levantarse, pasaría todo el dia acostado”, “aaa ¡! Nose que ponerme hoy!”, “tengo tanto que hacer , estudiar, trabajar,ir de compras”. Cuando llega la tarde, se me es mas difícil aun , la gente esta tan ocupada en sus quehaceres que por mas que intento que se den cuenta que estoy ahí, no puedo. Por la noche, los escucho lamentarse aun mas, reclaman por el dia que tuvieron de lo cansados que están, de lo injusta que es la vida, de porque no son infelices, porque todo les sale mal! , algunos dicen :” nose para que estoy en esta tierra, no entiendo para que me crearon!” Recorri la tierra y encontré a muchos que si vivian pensando en mi y sus vidas sin duda eran mas calmas, y encontraban paz en sus mentes. Habian personas que en vez de cuestionarse cada cosa decían lo siguiente al despertar:” gracias a ti por darme otro dia de vida”, al caminar destino a sus labores pensaban” que hermosos arboles, que bello cielo, que rico que salió el sol, que bien huele la tierra recién regada” y yo me contentaba y vibraba dentro de sus corazones y colocaba buenos pensamientos, pensamientos positivos, y me dejaban trabajar en sus vidas,entonces no importaba la dificultad yo los abrazaba, y sus actitudes eran diferentes y a pesar de que se entristecían jamás calleron porque yo estaba ahí y ellos creían en mi.

Lenta Embriaguez. Ingrid Uribe Lastra

Él la beso apasionadamente antes de irse, sabían que este beso tal vez sería el ultimo ,y se dejaron sumergir en él olvidándose del exterior, se besaron hasta embriagarse del otro, trataron de dejar ese sabor impreso en su memoria para el resto de sus vidas. Esta era la temida despedida, la que se veía tan lejana y que rápidamente ya estaba entre ellos, removiéndolo todo, haciéndolos querer que el tiempo se detuviera. No podían dejar escapar estas sensaciones ,pero tampoco podían aprisionarlas, quizás solo existirían en ese momento remoto y se esfumarían al igual que el sabor de aquel último beso. Pero no era eso lo que mostraban sus corazones que palpitaban rápidamente, como intuyendo que debían aprovechaba al máximo cada segundo. Ella sintió en él la respiración intranquila en un abrazo desolador, y las lagrimas corrieron por sus mejillas , como una gota de rocío que cae de una hoja ,como la expresión de tener que renunciar a eso que sentía, que en realidad no podía definir. No había lugar para palabras , estas cortarían aquel momento mágico, y lo resumirían a un atado de sórdidas letras que finalmente no tendrían sentido. Ya no podían más ,este sentimiento se acrecentaba, y ya no era lentamente, ya no crecía como un arroyo que baja la cordillera ,sino como un torrente escandaloso que causaba estragos en sus esquemas. Ninguno quería amar al otro, siempre se habían negado a sentir más allá, limitándose solo a sentir volátiles sensaciones, sin mas compromisos, sin posibles sufrimientos. Habían estado tan ocupados luchando contra este sentimiento que no se dieron cuenta cuando los burló, y que ahora, en este momento, se hacia presente ante sus escépticos ojos enamorados. Era imposible que dependieran del otro, que hubiera algo que los uniera de aquella manera, dejándolos tan vulnerables. No, esta historia tenia que terminar rápido, tal como había empezado. Era sólo una aventura, nada más, debían estar simplemente

confundidos, y estaban malinterpretando lo que les sucedía. No podía ser amor, no era conveniente para ninguno de sus corazones endurecidos, ni para sus mentes imperantes, no , no podía ser amor, era solo querer estar juntos por siempre; y en realidad ahí comprendieron que eso era amor. Se miraron fijamente a los ojos y les pareció estar mirando los propios, eso era, se habían convertido en el otro, mimetizándose paulatinamente, y si ahora se separaban quedarían incompletos. En ese momento descubrieron que ya no podían hacer nada, era inútil oponer resistencia a algo tan fuerte. Así fue como una palabra tan grande que no parecía caberle en la boca salió de él, fue un “te amo” que salió al exterior como a presión, que estalló, revelando la más grande verdad. Los dos quedaron absortos, ya no sentían miedo, sabían que el amor los había infectado por igual y estaban dispuestos a disfrutar esta enfermedad. Fue esa noche cuando lloraron como nunca, se descubrieron como nunca, se embriagaron del amor.

Más que un 1313. Rocknrolla Gutiérrez.

ya en la juventud es algo más serio, es algo que tiene que ver con las proyecciones, cuando quieres dormirte todos los días en los mismos brazos, y despertar cada mañana con el mismo beso. Estar enamorado es una de las sensaciones más bellas e interesantes que uno puede vivir en el proceso de estar vivo, es decir te quiero sin esperar nada a cambio, cambiar tus planes sin decir que es un esfuerzo, ser capaz de que la sonrisa de tu pareja sea tu motivación, que sin importar donde estés te 31 sientas orgulloso de quien tanto admiras, amar de verdad es una convicción incuestionable. Prostituido amor. Vender el amor no ha sido difícil. Películas, libros, poemas, calendarios, revistas, discos, canciones. Son referentes archiconocidos. Todo esto tiene su génesis, la cual no creo saber ni mucho menos, sólo quiero opinar sobre algo que me parece macabramente peligroso, el vil y puto negocio del amor, el cómo de algo tan noble que supuestamente parte del alma termina en una tarjeta de crédito, cheque o simplemente efectivo. Montones de fechas para lisonjearnos con regalos y estímulos, como si el amor fuera algo temporal y actuara en determinadas fechas, dicen que el amor a una madre es el amor más grande que alguien puede sentir, me pregunto ¿es necesario un regalo, es necesario proclamar con objetos el sentimiento que por ellas sentimos?. La verdad no lo creo. El amor por los hijos, el amor por la pareja y cualquier clase de amor no es coherente con nada que se vende en una multitienda. La condición que la publicidad dispone para cuantificar el cariño a veces nos nubla, nos impide ver lo que realmente es el amor. Para mí el amor es algo que envuelve muchas cosas, dignidad, admiración, respeto, cariño, bondad, sinceridad, honestidad, casualmente un montón de valores y no precios, lo entiendo ahora, quizás antes nunca lo entendí, vi como el amor fue mutando en la medida en que los años pasaban, hasta llegar hoy a estar completamente enamorado (sí, es cierto), cuando estás en la niñez, el amor es algo conmovedor, en la adolescencia es algo mas práctico y tiene mayor relación con las hormonas,

Ahora recuerdo que esta reflexión no sé trata de mí, se trata del prostituido amor, en fin… Finalmente el amor es algo que no puede ser comercializado. Quien lo haga sólo prostituye lo que siente, dando veracidad a marcas o empresas que se apropian de cosas tan particulares que en ningún caso están cerca de lo que nosotros los simples sujetos enamoradizos llegamos a sentir. Me parece que el día de San Valentín no es un referente, que los osos de peluches están lejos de expresar lo que uno pueda sentir, recordando que los osos son los animales que mayor numero de humanos han matado en la historia del hombre… quién sabe. O que los teléfonos celulares no aseguran el amor eterno, que el perfume de moda no te asegura fidelidad, que la ropita de marca exclusiva envuelta en una cajita con diseño, no te honrara con monogamia, que las afeitadoras de verdad no aseguran que las mujeres se enamoran de ti, que al verdadero amor no está en los cuentos, ni en desodorantes en espray, el amor es solo lo que tú quieres que sea, es lo que te haga realmente feliz, yo le recomiendo que se preocupe de decir lo que siente, que haga regalos con sus manos, que diga lo que de su mente sale sin titubear. Sin duda el amor es algo que no se puede criticar, solo disfrutar, para terminar y tomándome la licencia que solo un Jaleano puede hacer, quiero decir que me demore 30 años en encontrarte y no dejare pasar un día más sin ti, te amo mi querida compañera…

Ícarus. Sara Silva San Martín + Cula Álvarez

“Hoy por la mañana las autoridades gubernamentales y regionales decretaron la emigración hacia la Zona Norte del país de las Regiones VIII, IX, X, XI, XII, producto del inminente choque de la tormenta solar “Ícarus” con la Tierra. El traslado comenzará por la Región de los Lagos vía tren, mientras que las regiones más australes se movilizarán por barco. Se ruega a los habitantes de esta zona que a partir del día 28 del vigente mes se presenten con cédula de identidad en la estación de trenes que le corresponda, según la inicial de su primer apellido. El traslado por medio de buses y aviones queda descartado por la improbable importación de petróleo hacia el país y la inseguridad debido a la eventual falla en los sistemas de electricidad. Para más información acercarse lo más pronto posible a las oficinas de su municipalidad.” “Ícarus” es una tormenta solar como nunca antes se ha visto en la historia espacial de la Tierra. El sol nos recuerda por qué es la fuente de vida y de muerte expulsando un viento solar de radiación y partículas cargadas eléctricamente en impacto directo al planeta. Estas partículas generan la inutilidad de la energía eléctrica, satélites, telecomunicaciones, etc., dejando al mundo en la más absoluta “Edad Oscura”. Por esto, se ha vuelto inevitable la utilización de artefactos del siglo anterior. Trenes y barcos a vapor son ahora la única alternativa para movilizarse a grandes distancias.”

Esteban comenzó a armar diligentemente su bolso de viaje, aunque en esta ocasión la finalidad no era la diversión estival, sino algo completamente distinto. Desde hace tiempo que le venían apareciendo lunares en distintas zonas del cuerpo, pero hasta hoy nunca tuvo la verdadera noción de los hechos. Hoy, en que el caos medioambiental era inminente. Llegó a la estación que le correspondía lo más rápido, a lo que daban sus piernas. Mitad confundido, mitad temeroso. Pensó en lo atochada que estaba la estación, en lo repleto que estaban los vagones y en la larga fila que debía hacer para identificarse con los carabineros. Empezaba a experimentar la sensación de estar en alguna película bélica de Steven Spielberg, los clásicos del cine que solía ver con su padre en la niñez, cuando de pronto una chiquilla toca su hombro. - Oye, disculpa. ¿esto es tuyo? – pregunta la mujer en tono amistoso, mientras extendía su mano derecha para dejar ver una hoja arrugada de tono amarillento, fruto de la humedad y el paso del tiempo sobre él. - Creo que no…….. - respondió Esteban, algo enredado entre lo atractivo de la chiquilla y lo confuso del contexto. - ¿No?, olvídalo entonces dijo ella en tono despectivo al juzgar desinterés en su interlocutor. ¡Espera!…dijo instintivamente Esteban, quien solo quería un poco más de tiempo para ver a la muchacha. – Déjame leerlo, por favor. - No, olvídalo, no es nada importante - volvió a negarse la chiquilla. - Insisto, déjame leerla.

Pero el desinterés de antes por el papel ahora se convirtió de pronto en un deja vú. Una vez terminado de leerlo, levantó sus ojos hacia la mujer y le preguntó su nombre. - “Sofía”, dijo ella. - “¿Sofía?”, se preguntó Esteban. No sabía por que ese nombre le sonaba tan familiar. “Sofía….” - ¿Tienes miedo, Sofía? - preguntó Esteban. - ¿Miedo de qué? ¿De esto? ¿De ésta hecatombe que por tanto tiempo predijeron los dioses? - No, miedo de que te resulte familiar este papel. 34 Sofía sintió como si hubiese sido descubierta en un crimen. - No entiendo por que me preguntas eso. - Sofía, este papel me resulta muy familiar, y noto en tus ojos que a ti también te sucede lo mismo. - ¿Debería sentir miedo?, ¿Te da miedo a ti? – preguntó Sofía en tono displicente para ocultar sus sentimientos, como siempre lo hace. - Emmm……No es miedo, pero me genera una extraña sensación, algo así como tener en mis manos un pedazo de mí. Algo curioso hay en este papel, ¿no te parece a ti? - La verdad es que me pareció desde el momento en que lo vi tirado al lado de la boletería. Más que el atochamiento, más que la fila, más que el pánico colectivo, me llamó la atención ese papel. Ese papel y tú. ¿Cómo te llamas? - Esteban. - ¿Eres de por acá? Me parece que te he visto antes en alguna parte. Poco ahora les importaba la deportación, la radiación y el pánico. En un instante cambió la escena. Ahora sólo estaban ellos dos sentados en una tarima. Habían dejado sus bolsos de lado y sólo admiraban el papel en tono sepia. Al cabo de varios minutos, Sofía pareció despertar de la abstracción. - ¿Sabes, Esteban? Intuyo fuertemente que los protagonistas de este cuento somos tú y yo. - ¿Y entonces seríamos como una especie de seres reencarnados. Las almas de esos dos hospedadas en nuestros cuerpos? – preguntó incrédulo Esteban. - ¡Sí! Somos parte de un conjuro que no se acabará con nosotros dos. Mi intuición jamás me ha traicionado. Lo siento con todo mi corazón desde que leí ese papel - dijo tiernamente Sofía, tomando la mano de Esteban.

- ¿Y qué debemos hacer, entonces? ¿Qué pasará cuando todo esto acabe, cuando incluso nosotros ya no existamos? - En ese momento esas almas enamoradas seguirán la sombra de otro par de errantes que un día se encontrarán y sellaran el pacto. El pacto de que ese amor no puede terminar. Si bien el encuentro con Sofía le parecía un regalo, el escepticismo de Esteban necesitaba urgente un poco de realidad. Mientras pensaba en alguna explicación más o menos lógica buscó en uno de sus bolsillos su petaca para dar un trago. - Sofía, ¿te das cuenta que el tren ya salió? - Sí, estaba pensando lo mismo. Mañana sale otro tren, por si te preocupa. - La verdad es que eso me da lo mismo. Lo que me preocupa es lo que va a pasar con nosotros. Si te volveré a ver, si moriremos en el caos de las ciudades del norte, si alguna vez haremos posible el encuentro. - ¿Y si nunca nos vamos? – preguntó Sofía sonriente. Ambos miraron hacia el cielo. La aparición de una de las ya habituales auroras boreales, efecto de la tormenta solar, llenó los ojos de ambos en colores verdes y violetas, en un baile celestial. Hermosa antesala para el final y para el comienzo. La unión de cada movimiento para la hermosa sinfonía “Quasi Una Fantasia”,“Adagio Sostenuto”, “Allegretto” y “Presto Agitato” …Ludwig Van de fondo, la última gran sonrisa de Dios.

De Meollus Eros Complex. Juan Pablo ValdĂŠs

Amor, amor es todo lo que necesitas. El amor mueve voluntades, y eso ya es mucho decir si tenemos en cuenta que las grandes empresas parten de este combustible. No obstante el amor plantea una serie de problemáticas y posturas que nuevamente nos sitúan ante un caleidoscopio de realidades tangentes. Pero concretamente ¿Qué es amor? ¿Qué no es amor? ¿Qué es obra de este fenómeno? Con seguridad nos atendremos a múltiples dudas, para ello haremos un repaso general de las principales y esenciales visione acerca de este don humano. Platón en su Banquete nos cuenta como Sócrates después de un pomposo discurso al amor del poeta Agatón responde: “Yo creía tontamente que es menester decir la verdad acerca de lo que se elogia, pero por lo visto no es así, y lo que os ha importado es acumular alabanzas hiperbólicas, atribuyendo al amor lo más grande y bello que se pueda encontrar, sin preocuparse de si es verdad”. Platón, sois un mostro. Muchas veces hemos tratado de exagerar el papel del amor a lo largo de nuestras vidas. Asumiéndole muchas veces crédito y responsabilidad de cosas que en realidad no tiene la menor cabida más que una razón conyugal o social y la mayor parte susceptibilidades físicas. Y Platón prosigue apuntando que perseguir la afectividad es un deseo de complementación de algo que se carece y solo el otro puede proporcionar. Entonces, es por una necesidad, de una premisa de vacio inherente en el humano. ¿Pueden los dioses amar partiendo de una necesidad? ¿Puede entonces Dios ser absolutamente autosustentable si nos ama?

Estas preguntas fueron recurrentemente trincheras frente el cristianismo. Platón no hace reparos en las futilidades que apunta Agatón acerca de la belleza de mujeres y hombres, los ideales canónicos de cuerpo; Platón apunta que el amor no depende estas subjetividades y que porque uno no sea bello no quiere decir que sea feo, ni que quien no es sabio sea ignorante. Apunta a un concepto de belleza no físico sino un algo más, lo trata como amor: “Belleza que existe eternamente, y ni nace ni muere, ni mengua ni crece; belleza que no es bella por un aspecto y fea por otro, ni ahora bella y después no, ni tampoco bella aquí y fea en otro lugar, ni bella para éstos, y fea para aquellos. Ni podrá tampoco representarse esta belleza como se representa, por ejemplo, un rostro o unas manos, u otra cosa alguna perteneciente al cuerpo, ni como un discurso o como una ciencia, sino que existe eternamente por sí misma y consigo misma. Dijo la sacerdotisa, que este es el momento de la vida, que más que otro alguno debe vivir el hombre: la contemplación de la belleza en sí”. El amor es un plus ultra a la naturaleza medible y es por esto que el concepto de amor platónico trata a lo que el filósofo ateniense apuntó: la fijación de ideales, imágenes, utopías sin concretar. Para Platón es menester de todos aprender amar, porque es amor lo que posibilitaría una mejora a la sociedad. Claro esta es la visión filosófica. La visión del logos, no del mito griego. En el mito griego se detalla la aparición del andrógino, un ser que vivía ambivalente entre los dos sexos, pero que los dioses celosos de sus potencialidades los separaron.

Y he ahí la razón por la cual un humano busca desesperadamente su “otra mitad”. Los griegos entendían amor como un fenómeno inherente de la sexualidad, pero es con la cultura cristiana que esto se difumina y bifurca en dos sentidos, uno piadoso el otro pecaminoso encaminado únicamente a la procreación. Según la Biblia el amor más grande proviene de Dios. Los judíos empero catalogaban de amor la máxima misión esto era “Ama a tu prójimo como a ti mismo” y “con todo el corazón, con toda el alma y con todas las fuerzas”, donde el amor se mueve en la fraternidad como hijos del dios de los cielos. El amar a la mujer (“Observa la vida con la esposa que amas”) y la condena a la sodomía es otra particularidad que heredara el cristianismo. Donde la escritura en el nuevo testamento en griego vuelca un cambio mucho más conservador. Puesto que incluso en el Cantar de cantares se denota una reflexión de la sexualidad en los judíos no ocurre así en el inicio de las mismas escrituras cristianas que omiten lo sexual. Lo sexual es un ámbito orientado exclusivamente en el matrimonio para procrear, es decir cumplir la orden divina. En el griego hay diferentes palabras de diferentes formas de entender amor, por ejemplo para amor sexual “eros” y amor entre padres e hijos “storge” no existen en el nuevo testamento, y su noción es exclusivamente fraternal y divina. Pablo dice El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece, no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido, no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad. El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta”. La sexualidad es ocultada y así lo seguirá estando por milenios. El cristianismo y el judaísmo empero adjuntan una nueva dimensión de amor, el amor a Dios, esto es la devoción. El amor a Dios es una entrega con convicción del culto a un ser súper poderoso, ya sea único o no. Esta devoción es un carácter original si entendemos que dios en el ambiente judeocristiano es uno solo. Los musulmanes según el Corán entienden también el papel de Allah como un dios amoroso, donde uno de los 99 nombres de dios es Al-Wadūd, “el amante”. Pero nuevamente es un aspecto muy personal, aunque en el Islam el

amor de un hombre no es exclusivo en tanto puede depositarlo por igual a muchas esposas, que de paso lo amaran. En India el amor placentero, kāma, y es uno de los fines de la vida en el ser humano. Denota el placer mutuo de la sexualidad cuyo máximo fin es el bienestar y el placer. Para ello se conservan enseñanzas de diversas índoles para su práctica sana y que fueron recopiladas en el kamasutra. Por el contrario también están insertos los conceptos karuna como amor de misericordia y compasión y de bhakti como amor devocional 39 a un dios. Hoy en día hemos ido entrando en la comprensión de esta óptica del amor y que cada vez ha servido para complementarnos adecuadamente entre seres humanos. No obstante el amor es también un problema, por ejemplo en el budismo, donde conlleva al egoísmo. Por esto el amor según Buda, es placer y el placer cae en el ego, el yo, que se busca anular. El budismo es un camino hacia la supresión de los deseos, ya que solo así se está libre de la eterna cadena de pesares, el samsara y así alcanzar una vez terminada la vida el nirvana. Lo que se busca es el amor puro, un amor sin interés y con desapego y por ese camino más la meditación que se logra el amor incondicional a todos seres sintientes. Así y todo, la mujer en Occidente era denigrada particularmente por ser la acarreadora de males, la que seduce. Pero en el siglo XI aparece una nueva dimensión, el amor caballeresco, el amor cortes. Este amor medieval nace como fruto de la búsqueda de agradar a las damas. No obstante el lado oscuro es que este era entendido igualmente como adultero ya que existía fuera del matrimonio y era verdaderamente una competición entre nobles por el trofeo. Así y todo, los engranajes de nuevas tendencias se moverían hasta el renacimiento para cuando el neoclasismo renaciera las concepciones de los griegos y romanos. Amor es un concepto vivible, que integra sexualidad, compromiso y afectividad en la pareja, en otros ámbitos podemos englobarlo en la idea de amor fraternal, pero no podemos descartar que no sea amor en tanto sea correspondido por personas de legítimo discernimiento, sean quienes sean los caracteres.

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Supervielle

Bajofondo Tangoclub 2004

El Rey de las Máscaras Tian-Ming Wu (Director) Minglun Wei (Guión)

Bajofondo Tangoclub es quizás el grupo de tango electrónico más conocido de esa rama musical. Dudo si es el mejor. Pero este disco es especial: donde el señor Luciano Supervielle toma la batuta del asunto, y crea un disco que realmente vale la pena escuchar. Sobrecargado de atmósferas sobrecogedoras y realmente bien logradas, “Supervielle” abarca diversas temáticas. Bajo mi opinión, percibo que cada uno de esos recorridos es una clara evocación amorosa a éstos. Por ejemplo, “Centrojá” es una melodía intensa y melancólica al amor de hincha al fútbol. “Perfume”, a estas alturas un verdadero clásico. “Pulso” es el amor desolado, el amor golpeado por la distancia; “Decollage” un instrumental que realmente permite a uno recordar cosas, siempre con cariño. Me sonrojo al confesar que tuve la suerte de recibir este disco de manera romántica. Quizás estoy muy influenciado por ese detalle. Y no creo que eso afecte en lo más mínimo la calidad del disco, pues realmente es una joya. Creo que es el disco más interesante de Bajofondo Tangoclub, por lo muy bien elaborado de las melodías, la consistencia del disco en sí. Al empezar, “No Quiero Otro” señala que hay una seguidilla de historias que sinceramente no se pueden saltar, el disco funciona perfecto de corrido. D.A.G.V.

1997

Una obra cruda, intimista y sensibilizadora que se desarrolla en una sociedad hundida en la pobreza más extrema, ésa que no sólo delata escasez de recursos económicos sino también la falta de valores para llegar a traficar y maltratar niños por dinero. Dentro de ese ambiente vil, donde existe la más aberrante discriminación hacia las mujeres, un artista de la calle busca desesperadamente a un sucesor varón para transmitirle sus enseñanzas, talentos, destrezas e ingenio de su espectáculo callejero de cambiar de máscaras en forma increíblemente rápida. Por ello estamos en presencia de una obra sobre maestroaprendiz con mucha carga sentimental de por medio. Donde el prejuicio lleva a no prestar atención a una niña que quiere ser la receptora de los conocimientos por el sólo hecho de su condición de mujer, donde todo se hace cruel y duro por caprichosas razones. Hasta tal punto llega la necedad humana de convertir a una niña en esclava por su género, hasta el punto de dejar morir el arte antes de aceptar que una niña sea a quien se le transmita los saberes. Sólo una desinteresada prueba de verdadero amor podrá ser capaz de ablandar corazones a pesar de que el infortunio del destino juegue una injusta mala pasada.

El Baile de la Victoria Antonio Skármeta. 2003

Una amnistía para presos comunes junta los destinos de Ángel Santiago, enérgico y Nicolás Vergara Grey, técnico y experimentado. Ángel Santiago está apasionado por la idea de hacer justicia ante la situación tan injusta que lo llevó a la cárcel. Mientras que Vergara Grey está en un status quo, esperando impaciente que su mujer y su hijo lo acepten de vuelta en casa después de su salida anticipada de la cárcel. La leyenda que encarna Vergara Grey para el cuerpo delictual es inversamente proporcional a los deseos que tiene su familia de verlo de nuevo, pero es ésta misma fama, equivalente a la de Don Vito Corleone, la que conduce a Ángel Santiago donde Don Nico a ofrecerle llevar a cabo “El Gran Golpe”. En un principio éste se resiste, pero es la mezcla de nostalgia, necesidad y soledad la que lo lleva a aceptar estar al mando de esta operación. Por su parte, al noble Ángel Santiago, con el transcurrir de las páginas, se le suma otra razón por la cual participar en su primer quebrantamiento de la ley: “La Victoria”, su bailarina trashumante.

Sin duda un muestra de que el amor en sus máximo esplendor puede conmover hasta las tradiciones mas ancestrales, excelente fotografía y mejor música adaptada, sin duda una cinta que tienes que ver…

No sé si Skármeta escribió este libro pensándolo previamente en guión cinematográfico, pero qué manera tan magistral de hacernos creer que en vez de estar leyendo un libro estamos viendo una película. Y una gran parte del mérito se lo lleva la gracia con que se hila la historia de estos tres solitarios que al encontrarse en el camino por fin tuvieron a alguien que les entregara un poco de amor.

R.G.O.

S.S.S.M.

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