Las aventuras de Sam

Page 1

Las aventuras de Sam Raquel Nogal María Fernández Alumnas del CEIP de Burgos “Miguel Delibes” de 6º B de EPO


Érase una vez un niño muy pobre llamado Sam de ojos azules, rubio de estatura media y de unos doce años. Su familia había muerto en un terremoto; sólo la quedaba un hermano, de diez que eran.Tenía un grave cáncer de pulmón y la costaba mucho respirar, a su hermano Sam también le costaba respirar debido al polvo de todas las casas destruidas. Se habían destruido todos los hospitales, casas y demás cosas de Haití. Se iban a morir pronto, y no podía pagar un viaje para España debido a que sus ahorros se habían perdido. Días después de esta tragedia Julia se había muerto, Sam estaba muy triste y se puso todavía peor pero haría lo que pudiera para salvarse y encontrar ayuda. Por suerte ya había llegado la Cruz Roja. Encontró a una mujer, muy amable, que le preguntó: -¿Qué te ocurre pequeño? espero poderte ayudar. -Mira he perdido a toda mi familia y, ahora yo estoy muy enfermo no puedo casi respirar y me cuesta andar mucho. -No te preocupes encontraremos una solución- dijo, casi llorando la mujer de momento súbete a la furgoneta que te oscultaremos. Sam, muy contento subió con las pocas fuerzas que le quedaban. Allí le oscultaron y, después le llevaron a un refugio a pocos kilómetros de allí. Le dijeron que le iban a llevar a un orfanato de España donde estaría un tiempo allí, hasta que le adoptase una familia. -¿Pero sino son mis padres, ellos no me querrán y yo no me sentiría a gusto en un lugar desconocido, además no estaré en mi país? -Te querrán igual, como a su propio hijo, además tu eres un niño muy agradable con quien hablar y eres muy guapo y te acostumbrarás pronto. -Vale... pero si estarías conmigo en el viaje ... me sentiría mejor y me podría despedir mejor de ti. -Vale súbete a la furgoneta.-dijo casi llorando Marta, la mujer. Ya habían pasado tres horas y todavía seguían en la carretera;les faltaba una hora para llegar al aeropuerto. Sam cada vez estaba más triste aunque le quedaban muchas horas de vuelo. Una vez en el aeropuerto tuvieron que esperar dos horas ya que el vuelo se había retrasado debido al terremoto. Entonces decidieron ir a comprar un plano de Madrid, ya que pensaron que les podría ser útil. Ya estaban a media hora de Madrid cuando empezaron a despedirse: -Nunca te olvidaré- dijo Sam con lágrimas en los ojos. -Yo tampoco. Espero que te pongas en manos de una buena familia.


Cuando ya estaban en Madrid miraron el plano e intentaron localizar la calle en la que se encontraba el orfanato que iban a llevar a Sam. Después de media hora llegaron al orfanato Laguna Negra. Este era muy siniestro debido a que se encontraba a las afueras de la ciudad. Llamaron al timbre y les abrió una señora alta, morena, de ojos marrones y con una ropa un tanto peculiar que les preguntó -Vosotros,¿a qué habéis venido aquí?- preguntó un poco mosqueada. -Hemos venido desde Haití para dejar a este niño huérfano.¿Se podría quedar aquí? -Por supuesto, pero antes, le tenemos que hacer a este niño unaen ess preguntas ahora mismo.te momento Una vez contestadas, Sam, se despidió por última vez de Julia y la preguntó: -¿Me prometes que una vez cada tres meses me vendrás a visitar? -Claro yo lo haría encantada. -¡Venga! dijo Pepa, que es como se llamaba la señora. Cuando Sam y Pepa estaban subiendo las escaleras,para ver la habitación de Sam, Sam empezó a llorar. -Sam, ¿por qué lloras? -Porque me estoy acordando de mi familia y de mis amigos. -No te preocupes,aquí empezaras una nueva vida con una nueva familia que te querrá mucho-dijo Pepa, dándole un gran abrazo. Al cabo de una semana Pepa le comunicó a Sam que una familia burgalesa estaba interesada en adoptar a un niño de diez a catorce años. Y Pepa pensaba que Sam podría irse con esa familia: -¿Te gustaría irte con esa familia?-dijo alegremente Pepa. -Vale pero,¿cuándo vendrán a recogerme? -Seguramente el lunes a primera hora así que como hoy estamos a sábado te queda dos días cortos de estancia aquí. Ya era domingo por la tarde cuando Pepa dijo a Sam: -¿Te parece bien si te preparamos una fiesta de despedida mientras tú vas recogiendo tus cosas para mañana? -Sí, me encantaría.¿De cuánto tiempo dispongo para preparar mis cosas? -Pues más o menos de una hora y media;¿qué te parece? -Vale me organizaré bien. Cuando ya estaba en la fiesta, todos sus amigos, que se habían hecho en estos pocos días se despidieron de él: -Adiós Sam nunca te olvidaré-dijo un primero -Espero que te pongas en manos de una buena familia-dijo un segundo -¿Qué voy ha hacer sin ti? -dijo un tercero


Ya era lunes por la mañana y Pepa despertó a Sam y le dijo: -Levántate que tienes que desayunar y poco después te vendrán a recoger. -¿Qué hora es? -Las seis y media de la mañana. -Vale ahora voy. Cuando llegó la familia, Sam todavía estaba desayunando y entonces fue la familia al comedor y le preguntó: -¿Cómo te llamas? -Me...me llamo...me llamo Sam-dijo con un nudo en la garganta. -¿Qué te pasa? ¿Estás bien? -Lo que le pasa es que está un poco nervioso -dijo Pepa. -No te preocupes nosotros te trataremos como a nuestro hijo y,además tenemos un bebé de casi un añito y te va a encantar. -Vale -dijo un poco más contento Sam,ya que le gustaban mucho los bebés. -Adiós -dijo Sam a Pepa y a todos sus compañeros que le estaban escuchando. os echaré de menos. Cuando ya estaban en carretera hacia Burgos Raquel que era la madre le preguntó: -¿Ya te sientes mejor? -Sí porque vosotros parecéis que me vais a cuidar bien y eso me hace sentirme mejor. -Me alegro de que estés bien. Cuando ya estaban en Burgos Sam les preguntó: -¿Cómo se llama el bebé? -Se llama Mario y a partir de ahora será tu hermano pequeño. Cuando llegaron a su casa estaba Mario con su abuela jugando.Entonces la abuela de Sam le preguntó: -¿Cómo te llamas cariño? -Me llamo Sam y,¿tú eres mi abuela? -Sí y este es tu hermano Mario,¿a que es muy guapo? -Sí ¿puedo cogerle en brazos? -Claro pero ten cuidado porque aunque es pequeño pesa bastante. Cuando Sam tenía a su nuevo hermano en brazos dijo: -Hay ¡qué majo que es ! -Sam yo creo que deberías ir a ver tu nueva habitación. -Vale -dijo Sam dando un vote y llendo rápido. Cuando ya habían pasado quince días, Sam por la noche no podía conciliar el sueño.De repente oyó unos ruidos extraños.Miró por la ventana y vio a un grupo


de chavales, en el jardín vestidos todo de negro y con un pasamontañas también negro.entonces decidió salir a ver que era lo que estaba pasando. Cuando bajó al jardín dijo: -Vosotros,¿quiénes sois y que estáis haciendo aquí? -Ja,ja ¿es que todavía no lo sabes? -Pues no ¿algún problema? y seáis quines seáis yo estoy dispuesto a proteger a mi familia. -¡Secuestradle! - gritó el jefe de esta banda de delincuentes. -¡ No no por favor! -Y vosotros haced el plan que habíamos ideado ! Estos delincuentes entraron en la casa fácilmente ya que Sam había dejado la puerta abierta mientras el jefe de la banda le estuvo interrogando a Sam. -Y tú chaval, ¿cómo es que te has atrevido a meterte con nosotros? -No lo sé porque todavía no sé quien sois. -Bueno da igual pero te vamos a llevar con nosotros lejos de tu familia porque somos ladrones y no volverás a ver a tú familia.Ja,ja,ja-se rió malvadamente. Mientras tanto el resto de la banda cogió a los padres de Sam y los ataron con una cuerda el cuerpo y con celo la boca.A Mario no le vieron ya que en la cuna casi ni se le veía porque de haberle visto le hubiesen matado.El jefe de la banda llevó a Sam a la furgoneta que anteriormente habían robado. Una vez en la furgoneta Sam vió que había más niños dentro llorando.Sam les preguntó: -¿Qué hacéis aquí? Pero... ¿también os han secuestrado? -Sí. -respondió un niño -Nos han secuestrado hace una hora,estamos muy hambrientos y con mucha sed. Uno de ellos era una chica de unos catorce años que intentaba hablar con los secuestradores para que dejase libre a los niños. -¡Dejadles libres,son muy pequeños no tienen derecho a que pierdan a su familia!-gritó casi llorando. -Y... a ti que te importa sus vidas son unos enanos.-dijo el jefe. -Pues me importa mucho.-dijo Sandra que es así como se llamaba la niña. -Vale, vale negociemos. Hay doce niños,dejo libres a seis y me das mil euros y los otro seis otros mil.-Dijo el jefe. -Vale,esta bien, pero... me tendrás que dejar ir a mi casa a por ellos y al banco,sino como quieres que los coja. -Bueno...te dejo venticuatro horas para conseguirlos y por cada minuto que tardes mataré a un niño. Sandra,fue a su casa vigilada por dos de los secuestradores,ella se lo explicó


todo a sus padres para que intentaran conseguirlos,también llamó a las diferentes casas para que los padres de los niños secuestrados intentasen recaudar más dinero. Sandra se fue al banco que trabajaba su tía así la podría dar quinientos euros ,que es lo que la faltaba. -Buenos días,¿está la señora Lucía? -No, lo siento ahora mismo no está,¿la puedo ayudar? -Pues...bueno,querría que me donasen quinientos euros porque hay unos secuestradores que tienen a unos pobres niños. -Sí si,¿tienes algunas pruebas señorita? -¡Sí! Mira,ahí hay dos chicos con un pasamontañas de negro,¿no crees que es raro? Por favor solo tengo doce horas para recaudar el dinero y por cada minuto que tarde matarán a un niño. -Esta bien,lo pondré a la cuenta de tu tía. -Gracias.le debo la vida mía y la de esos niños-Sandra salió supercontenta. Solo quedaban cien euros por recaudar,pero los padres de los niños ya los tenían. Sandra fue a hablar con ellos para decirles que tenían que recaudar otros mil euros. Los padres se pusieron en contacto con todos sus familiares y el dinero se lo dieron a Sandra. Esta fue corriendo porque no quedaba mucho tiempo; tan solo quedaba una hora. -Bueno, ya está el dinero aquí.Ahora suelta a los chavales. -Ja,ja; ¿os lo habíais creído?.Ya sabéis que no se puede hacer tratos con delincuentes.así que nos quedamos con el dinero y vosotros os quedáis aquí. -¡No! Vosotros sois unos estafadores y nosotros tarde o temprano nos vamos a ir de aquí cuando vosotros no os enteréis. -Ja, ja ¡cuánto dinero hemos recaudado en un día sin hacer nada! ¡cómo me gusta el dinero fácil! -Sí,sí muy bonito,no me parece nada bien lo que estáis haciendo con los niños y conmigo. -Oh,que miedo,que vas hacer llamar a tu mami.Ja,ja,ja...-dijo el jefe de la banda. -Pues no algo mucho mejor,llamar a la policía.-dijo Sandra muy valiente. -Si, con qué,¿con tu móvil imaginario?- dijo uno de ellos. -Pues va a ser que no. Sabéis que tengo catorce años ¿no?-preguntó burlándose de ellos. -Si, sabemos que tienes catorce años y qué... -Pues que no soy una niña enana,qué tengo móvil pringados.-dijo Sandra marchándose de la furgoneta. -¡Corred,corred, no la dejéis escapar!-gritó el jefe


Los secuestradores empezaron a correr pero,mientras Sandra corría marcaba el número de la policía y la cogieron y dijo: -Estoy en la calle de San Juan de Ortega y... me están persiguiendo.-dijo Sandra desesperada. -Vale,muy bien es seguida llegamos,lo primero que tienes que hacer es refugiarte en un lugar muy seguro y que no te vean-dijo el policía. Después de hablar se cortó porque se la había caído el móvil. Sandra se fue corriendo a buscar un lugar seguro.Se escondió en la casa más cercana y para que dejasen entrar la tuvo que explicar todo. -Buenos días.¿Me podría alojar aquí hoy? -¿Por qué te quieres alojar aquí y no en otro lugar? -Pues...porque unos señores me habían secuestrado y me he escapado de allí;también tenían a más niños. -Está bien, pero solo para un día -Gracias. Pero...¿me podría dejar llamar a mi familia?es que se me había caído el móvil y se me ha estropeado. -Bueno...pero...¿no deberías llamar antes a la policía? -Ya he llamado a la policía. Cuando ya se habían presentado,la señora la había dejado llamar a su familia y a la de su vecino Sam.También llamó a Sam al móvil para que se intentase escapar y viniese aquí. -Perdone, ¿podría venir un amigo mío que también le han secuestrado? -Por supuesto pero también solo se puede alojar un día. -Vale con tal de que esté aquí conmigo. Sam estaba sentado en la furgoneta cuando le sonó el móvil: -¿Qué demonios es eso? Se hizo un silencio sepulcral durante unos minutos. El móvil seguía sonando y Sam dijo algo a una niña: oyó el jefe de la banda. -¿He dicho que qué es eso que está sonando? Entonces Sam le dijo de nuevo algo a la niña y ésa le preguntó algo al delincuente. Mientras tanto Sam aprovechó para escaparse de la furgoneta y coger el móvil: -Diga ¿quién es? -Soy yo Sandra y estoy en una casa que me han dejado alojarme durante esta noche junto con una persona y quiero que seas tú. -Vale ¿me puedes decir las señas? -Vale C/ San Juan de Ortega número ocho. -Está bien ahora mismo voy. Pero no me vuelvas a llamar que casi me pillan.


-Vale pero también es culpa tuya de tener el móvil con sonido en vez de en vibración. -Bueno vale. Pero que no es hora de hablar de esto,Sandra. Te cuelgo,que me están persiguiendo ahora voy para allá. -¡Socorro!-gritó Sam mientras le perseguían. Mientras Sam iba hacia la casa donde se escontraba Sandra,ella oyó el grito de Sam y abrió la puerta para que entrase rápido. -Por fin, ya me estaba preocupando. -Y yo, porque no encontraba la casa.-dijo San con la voz cansada. -Pero...hay un problema. -¡Un problema! ¿Qué ha pasado!.-gritó Sandra muy histérica y preocupada! -Bueno...que los secuestradores...me vieron al entrar aquí y... Sandra no le dejó terminar y dijo: -...y... ¡y qué,contesta! -Pues que nos han rodeado y no vamos a poder salir de esta casa y también hemos puesto en peligro a la señora. -Pues...¡rápido llama a la policía! -¿Qué teléfono es? Es que en Haití es el 441. -Es el 112 ¡corre que están empujando la puerta! -¿Sí? ¿Es esta la policía? -Sí ¿qué quería? -Mira yo y una niña estamos en la calle San Juan de Ortega número ocho y la casa está rodeada de una banda de delincuentes y enfrente un furgoneta blanca con matrícula BU 8792 C. -Vale ahora mismo envío a una patrulla. -Pero mi amiga con la que estoy,ya había llamado y aquí no ha aparecido nadie. -Que sí, que te lo prometo en cinco minutos como mucho estamos aquí pero mientras tanto subiros al último piso. -Adiós. -Por fin ya has terminado de hablar. -Es que nos ha dicho que nos tenemos que subir al ático ala habitación que tenemos tranco... -Pues ¡vamos,a qué estamos esperando!. -¡Hay que decírselo a la señora! Cuando ya estaban arriba poco después llegó la policía: -Vamos abajo que ya están aquí y habrá que abrirles la puerta. Una vez abajo llegó la policía y les interrogó a cada uno de ellos,y también al los delincuentes. Finalmente,a los delincuentes les condenaron a diez años de prisión ya que esta


no era su primera vez que hacían una cosa así. Luego Sam dijo a Sandra: -Mis padres están preocupados porque vieron lo que pasó.¿Me podrías acompañar a mi casa? -Vale,me encantaría acompañarte una vez más. -Pero,¿como vamos a ir? -Se lo tendríamos que decir a la policía. -Vale, ya se lo digo yo. Perdone nos podrías acercar a la calle Victoria Balfé 23. -Sí, lo haría con mucho gusto. Me encanta ayudar a la gente, especialmente a los niños. Cuando la furgoneta ya estaba en frente de su casa, Sam bajó de un salto, fue corriendo y llamó al timbre. Abrió su madre y la primera reacción de Sam fue darle un abrazo enorme: -¡Mamá! ¡Estás bien; cuánto me alegro! -¡Sam hijo! ¡Cuánto me alegro de que estés a salvo! Al cabo de un rato salió su padre que también se alegró de que Sam estuviera bien. Estaban tan contentos que ni se dieron cuenta de que Sandra.después de un rato, cuando empezaron a reacionar pregutaron: -¿Quién es esta niña tan maja? -Esta es Sandra y gracias a ella todos los niños secuestrados ahora están a salvo. ¿Podríais llevarla a su casa? -Vale ahora nos vestimos, cojo a Sam y vamos a su casa. Cuando llegarona su casa su madre no podía evitar llorar: -¿Podría Sandra venir a mi casa todas las semanas o yo a la suya?-dijo Sam -Vale os prometemos que todos los sábados por la tarde que podamos quedaremos. -¡Vale!-dijeron dando saltos de alegría los dos al unísono. A partir de ese día Sam y su familia vivieron felices y nunca les volvió a pasar nada malo. Cuento realizado con las palabras HERMANO, TOXICO, POBRE, URGIR


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.