Esferas—Issue Two

Page 36

—Así es. Espere. —¿Con quién hablo? —El portero. No tardo en abrirle. Era lógico. Si hubiera sido su pareja no lo habría podido conseguir, y cada paso que daba a las interminables escaleras hubiera sido un tropiezo. Procuró ir despacio y tomó con fuerza el libro sobre Remedios Varo que compró de regalo. No pudo tocar la puerta, ella ya lo estaba esperando. Fue un saludo emotivo. Ella mostró entusiasmo con sus palabras y fue a un abrazo directo. La preocupación ahora era mayor, tenía miedo de que no sólo mostrara sus intenciones sino que tuviera una erección con ella tan cerca. Pasaron al departamento y le dio algo parecido a alegría por ver que Lucy no había abandonado sus deseos de ser pintora. Ahora hablaba de becas y otros jóvenes artistas que se encontraba en fiestas. «Me da gusto verte», repetía. Se habían visto muy poco desde que comenzó su relación con Mariel. Ella seguía en lo suyo, haciendo preguntas que rebotaban. Así averiguó que su último novio era español y que habían terminado hace tiempo por problemas que no estaba dispuesta a repetir en ese momento. No preguntó su nombre, imaginó que se llamaba Carlos, mayor que Lucy, pelón, alto. Ver a Lucy ahí, con el té que había preparado, y sobre todo escuchándola, sólo le recordó a Mariel. Tenía que hacer algo, si no iba a perder toda posibilidad de conseguir más información sobre ella. —¿Y has visto a Andrea? Respondió que hace tiempo no la veía y que prefería evitar el tema. Fue poca la información que consiguió a lo largo de la tarde. Quizá si probaba en páginas porno españolas tendría más suerte. Anochecía y debía irse. No era el momento de probar suerte con Lucy, no se quitaría el vídeo de la mente. 36


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.