U-238 - Tecnología nuclear para el desarrollo

Page 19

El momento llegó

Energía a gran escala: la única solución posible Por Roberto Vidal. Responsable de Relaciones Institucionales y Comunicación del Grupo Electroingeniería. El mundo moderno demanda cada día más energía. La única manera de abastecer esta necesidad es la energía nuclear, no hay otra forma de producir energía a gran escala. El resto de las alternativas de diversificación de la matriz energética son muy caras, escazas o con limitaciones insalvables. La electrificación del planeta es vertiginosa, no da abasto, hay que insistir con todas las formas de producción al máximo y, sobre todo, hay que cuidarla.

había personal capacitado. Algunos de los que participaron de la industria nuclear años anteriores habían pasado a otras especialidades. Otros, buscaron en el exterior mejores horizontes. Quienes estuvieron al frente en nuestra empresa, uno de ellos tenía 70 años; otro más de 80. Esto implicó el desafío de recuperar a aquellas personas valiosas que quizás no tenían la vehemencia de la juventud pero sí la experiencia, el conocimiento y el coraje del vivir y no sólo del existir.

Para la historia de la humanidad, la energía eléctrica es muy joven. El primer megavatio se comercializó en Londres, en 1873. En la actualidad hay cinco millones de megavatios instalados en el mundo. El primer millón tardó 80 años para instalarse mientras que el último millón se hizo solo en los últimos 13 años. Hablamos de vertiginoso porque no hay nada que frene la demanda: el mundo necesita energía.

En Atucha II sólo habían quedado 90 personas para seguir con la obra paralizada. Como unos guardianes custodiaron los 85 mil componentes que estuvieron sin usar entre 10 y 15 años sin usar y velaron por las 40 mil toneladas de materiales almacenados. Al momento de la reactivación se observó su acto de pasión y entrega; sólo repararon un elemento de los 85 mil que ya casi tenían el rótulo de “chatarra”. Además, conservaron información de proyecto: 120 mil documentos en papel realizado por ellos. Sin este acervo escrito la reconstrucción hubiese resultado imposible.

Para abastecer esta demanda el resto de las energías difícilmente puedan contrarrestar esta problemática considerando la limitación de los recursos naturales, la escasez de los combustibles fósiles o la particularidad de las condiciones hídricas de los ríos para dicha generación. Las energías limpias difícilmente puedan considerarse para la generación en gran escala. Para generar un megavatio de potencia, una granja eólica necesita amplísimas extensiones y vientos óptimos. Esta limitación trastoca otras alternativas como la biomasa, la energía solar u otras y todas ella se caracterizan por su imposibilidad de producción de electricidad a gran escala. En 2006 se implementó, en Argentina, una política de Estado interesante: se puso en competencia a la energía nuclear. A partir de la Ley 26566, que contó con la aprobación de todas las fuerzas políticas, se extendió la vida de útil de las dos centrales existentes y se decidió la construcción dos centrales más. Ello derivó en la culminación de Atucha II, una tarea monumental e increíble que se produjo luego de haber sido abandonada por más de una década. Para la construcción de Atucha II los responsables operativos tuvieron que apelar al ingenio debido a que no

18

U238

“Lo que sí estaba desmantelado era el Recurso Humano y las empresas”, se solía escuchar decir al ingeniero José Luis Antúnez, presidente de Nucleoeléctrica Argentina S.A., (administradora del manejo de las centrales nucleares argentinas) cuando asumió el cargo una década atrás. Hoy, por acción de políticas de Estado acertadas, la realidad es otra. La Argentina cuenta con la Central Néstor Kirchner (Atucha II) completamente nueva, la Central Nuclear Embalse en pleno trabajo de extensión de vida útil, la Central CAREM 25 en construcción y la firma, el pasado 19 de julio, de acuerdos para una nueva Central más, con la participación del gobierno chino y otras tratativas con Rusia. Situación impensada y en un rumbo adecuado para la generación a gran escala de energía, que es lo que, hoy, el mundo y nuestro país necesitan. Actualmente, la potencia nuclear instalada en el país es de más de 1750 MW y no sólo con la posibilidad de abastecer nuestras necesidades, sino también con la capacidad de exportar la experiencia al mundo.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.