compartir y transferir el conocimiento, puesto que éste debe ser difundido, distribuido y utilizado en beneficio de la organización; es decir, generar la capacidad de aprender y generar nuevo conocimiento.
El gerente escolar, se encuentra ante el reto del Knowledge Management, por tanto, debe desarrollar estrategias de gestión innovadoras, asociadas a valoraciones y recompensas creativas. Además, debe poseer competencias que les permitan trabajar con el conocimiento y obtener una gran satisfacción personal del trabajo bien hecho; ser capaz de sentir y reaccionar al conocimiento no estructurado, así como de crear y producir conocimiento estructurado, y conectar ambos para proporcionarle valor agregado a la organización.
poseer la habilidad para aprender de la información; es decir, saber cómo y dónde buscar la información, transformar los datos en información, además de estar abiertos y receptivos a nuevas ideas e informaciones.
De
igual manera, deben poseer competencias para mejorar la forma de pensar a través del análisis, como un acercamiento racional y sistemático al pensamiento y a la toma de decisiones; lo cual ayudará a detectar pasos en falso, discontinuidades y lagunas en los procesos. Otra competencia es la creatividad, fundamentada en un acercamiento más emocional y en plena libertad; asimismo, la reflexión entre a formar parte de este conjunto de competencias que debe desarrollar el gerente para un verdadero proceso de gestión del conocimiento.
En
resumen, las organizaciones contemporáneas están ante el reto de gestionar el conocimiento para lograr un aprendizaje organizacional que permita el desarrollo de las instituciones, en función de los bienes que produce y/o los servicios que presta, para lo cual está en la obligación de fomentar la creatividad y la innovatividad, con la finalidad de mejorar la capacidad de las personas para intercambiar, entender y utilizar la información, utilizando la tecnología e incentivando su compartición para aumentar el conocimiento de manera exponencial.
Por
otra parte, los avances en las tecnologías de la información y comunicación, la proliferación del conocimiento y los profundos cambios sociales que se experimentan en el ámbito mundial, conforman el entorno en el cual el director escolar debe desarrollar su praxis; situación que le presenta diversas posibilidades para gestionar el conocimiento en escenarios múltiples de aprendizaje organizacional, que conformen una red que proporcione un acceso colectivo e integrado de información, servicios y comunicaciones.
En
este contexto, Tissen, Andriessen y Lekanne (2000), afirman que los gerentes deben
Guédez, V. (2003). Aprender a emprender. De la gerencia del conocimiento a la ética de la sabiduría. Venezuela: Planeta. Tissen, R., Andriessen, D. y Lekanne, F. (2000). El valor del conocimiento para aumentar el rendimiento en las empresas. Madrid: Prentice Hall.