Comer juntos fortalece los valores familiares Principios Es un conjunto de normas absolutas y rectas, que dan convicción para regir normas o regular la conducta humana. Los 10 mandamientos son los principios universales. Valores Es un principio aplicado en la vida diaria por una persona y apreciado particularmente. Hace años muchos hogares del mundo occidental seguían un ritual, todos los miembros de la familia se reunían alrededor de la mesa, por lo menos una vez al día para compartir los alimentos. ¿Qué se considera una comida en familia? Cualquier momento en que la familia se reúna para comer ya sean alimentos traídos de un restaurante o una cena completa preparada en la casa. La comida familiar una costumbre en decadencia ¿Qué factores han contribuido a este fenómeno? El alto costo de la vida obliga a ambos padres a trabajar más horas. (Economía) El trajín de la vida moderna fomenta la comida rápida y el hábito de comer apurados. Los compromisos sociales, los horarios de trabajo y el creciente tráfico, obligan muchas veces a comer fuera de casa, en distintos horarios. Hoy en día las notas pegadas al refrigerador sustituyen la conversación en la mesa, cada cual llega, calienta una comida precocinada y se sienta frente al televisor, la computadora o la videoconsola. La costumbre de la cena familiar se ha ido perdiendo y con ella los enormes beneficios que se obtienen de comer en un ambiente relajado acompañados de la familia. Otros factores son las malas relaciones familiares, demasiados compromisos deportivos y padres tensos. Reúna a su familia a la hora de la comida Comer en familia fomenta la buena salud y tiene un impacto positivo en el desempeño de los niños y adolescentes. Las familias que conversan y comparten durante las comidas refuerzan sus lazos familiares. Cuando la familia se reúne se estimula la comunicación, la autoestima, el respeto mutuo y se mejora la alimentación ya que se escogen alimentos más sanos y porciones moderadas. La comida familiar juega un papel decisivo en la transmisión de hábitos y costumbres, además de dar a los niños seguridad y sentido de pertenencia a la familia. Recientes estudios señalan que los niños que cenan con sus padres todos los días tienen una mejor alimentación que aquellos que no lo hacen con frecuencia, al igual que los jóvenes que comen en familia presentan menos problemas de ansiedad, aburrimiento y poseen mejor rendimiento académico. Investigadores han descubierto que comer en familia durante la adolescencia promueve dietas equilibradas y sanas cuando son adultos. El estudios, publicados han establecido los efectos positivos de comer habitualmente en familia durante la adolescencia. No importa lo sencilla que sea la comida, prepararla en familia y disfrutarla juntos es una magnífica manera de crear buenos recuerdos y sembrar tradiciones que los hijos llevarán consigo toda la vida.
Las comidas en familia mejoran la salud y la nutrición al: • • • • • •
Alentar a los miembros de la familia a que prueben alimentos nuevos. Aumentar la cantidad de frutas y verduras en el plato. Promover comidas nutritivamente ricas. Apoyar hábitos para un peso corporal sano. Desarrollar hábitos alimenticios para toda la vida. Disminuyen las probabilidades de que los niños fumen o beban alcohol cuando sean adultos.
Recomendaciones para su comida familiar: • • • • • •
Apague el televisor, la computadora y los videojuegos. No converse por teléfono mientras están sentados a la mesa. Limite la comida chatarra en su casa. Acompañe su comida con leche, agua o jugos naturales en vez de soda. No fuerce a los niños a terminarse todo el plato de comida, permítales terminar de comer cuando estén llenos. Premiarlos cuando prueban una comida, vegetal o fruta nueva. Limite el consumo de la grasa, evitando comer comidas fritas y cocinando los alimentos en el horno, asándolos en la parrilla o cocinados al vapor. Establecer horas de comida de manera que se puedan servir alimentos nutritivos y cuando todos puedan estar presentes. Tal vez tengan que comer un poco más tarde porque uno de los niños está en la práctica de deporte. Es posible que en los fines de semana tengan que fijar una hora especial cuando todos puedan reunirse en familia, por ejemplo, preparar una combinación de desayuno y almuerzo los domingos.
Mantenga un ambiente agradable • • • • • •
Mantenga conversaciones positivas y un tono agradable. No use la hora de la comida para regaños o confrontación. Hable, escuche y ríase. La hora de la comida es el momento de conectarse y aprender. Para hacer este momento más atractivo para los hijos adolescentes, puede permitirles que inviten a un amigo a la cena. Incluya a la familia, es más divertido: Hasta los pequeños pueden ayudar en la preparación ya sea poniendo los puestos, preparando la ensalada, lavando las frutas o llevando las servilletas. No apure a los niños, permítales que coman a su propio ritmo. Permita que sus niños escojan la música que se va a escuchar durante la hora de la comida. Los miembros de la familia pueden tomar turnos escogiendo la música.