De Yare a Miraflores. El mismo subversivo

Page 179

José Vicente Rangel

Entrevistas al comandante Hugo Chávez Frías (1992-2012)

anterior, de Carlos Andrés Pérez, ni eso nos permitía. Gracias, doctor Ramón Velásquez. Nunca olvido cuánto aprendí, y aquí tengo en mi memoria, y aquí en mi espíritu y en mi conciencia, ese monumental trabajo de Ramón Velásquez, que es la Caída del liberalismo amarillo. Gracias, Ramón Velásquez. Gracias. Un gran venezolano.

— Ésa es una internacional que siempre funciona, el rival miserable, antipatriótico. Estamos en un recinto, esta entrevista se está haciendo en un recinto donde se cruzaron nuestras vidas el 11 de abril. De ese episodio yo conservo tu coraje, tu capacidad para razonar en momentos difíciles, la capacidad que tuviste para sortear esa situación. Ahora, en esa noche límite, precisamente en esa esquina que tú y yo llamamos esquina caliente...

— Y este libro de Olga Wornat, una gran periodista argentina, sobre Cristina Kirchner, amiga tuya. — ¡Ah! Hermana, más que amiga. ¡Cristina! Cómo quiero yo a esta mujer, cómo la admiro. Y ahora ella y su desafío, después de la muerte de Néstor. Tú sabes que me fui hasta Río Gallegos, allá en la Patagonia, a sembrar a Néstor, y cómo conversamos ese día, a pesar de su dolor y su tragedia. Mira, esta foto de Cristina.

— Donde está la puerta gomera. — Exacto, ahí. Yo te preguntaría, porque hay que vivir esos momentos para hacerse esta pregunta: ¿En qué consiste el miedo? Y ¿en qué consiste el valor? — Creo que el miedo y el valor son inherentes a la naturaleza humana. Ahora, pudiéramos decir también que se contraponen, que se chocan. Yo, y esto pudiera parecer pretencioso, o pudiera parecer un alarde, pero en verdad no lo es, lo digo con mi verdad espiritual, hace rato que el miedo para mí no es. No, no tengo miedos. Tuve miedos, que se reflejaban mucho en sueños y pesadillas. Me la pasaba con pesadillas, antes del 4 de febrero, y todavía en prisión; ahora no. Sueño mucho ahora con cuarteles, con viejos compañeros, sueño mucho con las sabanas. Tú me preguntabas por el Chávez íntimo. Me gusta oír estas canciones. Hace poco me mandaron este regalo: Adilia Castillo y Magdalena Sánchez. [Canta:]

— Jovencita. — Cuando era una joven estudiante, seguro. Es una gran mujer, es una gran compañera, es una digna hija de San Martín, de Perón. Cristina, un beso para ti y para Argentina. Gracias, voy a disfrutarlo. Ella me recomendó un libro que por ahí lo tengo, me escribió por @chavezcandanga y me dijo: “No te pierdas este libro: El loco Dorrego, Manuel Dorrego, el primer bolivariano de estas tierras”. Y conseguí el libro, me lo regaló el autor en Buenos Aires, por cierto. El coronel Dorrego, un gran bolivariano, amigo de Bolívar. Lo fusilaron allá en Buenos Aires, casi al mismo tiempo que Santander estaba mandando a matar a Bolívar en Bogotá, y detrás de ambos hechos, la embajada yanqui, para impedir la unidad de esta tierra, para impedir el proceso unitario que hoy ha renacido. Somos esa esencia, José Vicente.

356

La luna noche traía la cara muy risueña pues de San Carlos venía una linda cojedeña.

Me gusta cantar, me gusta pintar, por ahí estoy pintando un cuadro que no he terminado —hace tiempo lo estoy pintan357


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.