Entre los siglos XII y XIV se desarrolla en el occidente peninsular una importante corriente de poesía lírica en lengua gallego-portuguesa. En las cantigas de amigo, de influencia popular, de nuevo aparece la confidencia que una muchacha hace a su madre; sin embargo, tiene mayor peso el mundo rural. Ondas do mar de Vigo, se vistes meu amigo? E ai Deus, se verrá cedo!
Ondas del mar de Vigo, ¿visteis acaso a mi amigo? Y, ay, Dios, ¿acaso vendrá pronto?
Ondas do mar levado, se vistes meu amado? E ai Deus, se verrá cedo!
Ondas del mar alzado, ¿visteis acaso a mi amado? Y, ay, Dios, ¿acaso vendrá pronto?
Se vistes meu amigo, o por que eu sospiro? E ai Deus, se verrá cedo!
¿Visteis acaso a mi amigo aquel por quien yo suspiro? Y, ay, Dios, ¿acaso vendrá pronto?
Se vistes meu amado, por que ei gran cuidado? E ai Deus, se verrá cedo!
¿Visteis acaso a mi amado, por quien siento gran cuidado? Y, ay, Dios, ¿acaso vendrá pronto?
7