COMO TENER UNA PIEL SANA La piel sana muestra una energía vibrante. Es radiante, suave, elástica y también presenta un ligero rubor debido a la buena circulación. Los antioxidantes están trabajando, las hormonas están equilibradas y el estrés se encuentra bajo control. La piel sana y de aspecto juvenil experimenta un estado constante de renovación, regenerando y eliminando las células cutáneas. Cada célula de tu cuerpo se comunica y trabaja en armonía. Este magnífico y delicado equilibrio es, en realidad, el modo en el que reacciona tu piel y puedes ponerlo en peligro muy fácilmente. Algunas veces no nos damos cuenta de que nuestras actividades rutinarias están dañando nuestra piel. A continuación presentamos algunos consejos para tener una piel sana:
Controla el Estrés: Cuando estas bajo un excesivo estrés, tu cuerpo tiende a desviar de forma natural una cantidad extra de sangre nutritiva a los órganos internos, privando a la piel de su suministro de sangre, y por lo tanto, causando estragos en su aspecto. Recuerda que adonde vaya un pensamiento, va una molécula. Visualiza una piel hermosa, medita, respira profundamente, baila o haz lo necesario para relajarte y vigorizarte. De esta forma, calmarás tus hormonas y descubrirás un cambio enorme en el estado de tu piel, en particular en lo que se refiere al problema de acné.
Alimentación Balanceada: Es importante una dieta balanceada, pues necesitamos las proteínas para el crecimiento y regeneración de las células y el suministro de antioxidantes para evitar el daño de los radicales libres. También puedes beneficiar la piel reduciendo el consumo de grasas saturadas animales y evitando los ingredientes artificiales y las sustancias químicas contaminantes.
Protección Solar: Aún cuando el sol produce Vitamina D para el organismo, necesitamos tener mucho cuidado en lo que se refiere a la exposición a los rayos solares. Muchas de las arrugas de la cara y el noventa por ciento de los cánceres de piel se deben al daño producido por el sol, por lo que es importante evitar exponerse directamente a los rayos solares cuando son más intensos (entre las diez de la mañana y las tres de la tarde) - y cuando salgas de casa utiliza siempre protección solar SPF 15 o más.
El Cigarrillo: Fumar es prejudicial por dos razones: en primer lugar, los movimientos faciales constantes producen marcas y en segundo lugar, la acumulación de nicotina reduce el diámetro de los vasos sanguíneos que nutren la piel.
Humectación: El agua es el humectante más barato y eficaz que existe, así que toma mucho agua. El agua oxigena y optimiza el metabolismo de todo el cuerpo, en particular del cerebro, hígado y de los riñones. También hace trabajar las funciones de evacuación muy bien. El agua es absolutamente fundamental para una hidratación apropiada porque mantiene la piel húmeda, flexible, suave y limpia.
Ejercicio Físico: El ejercicio beneficia la piel al aumentar la circulación de la sangre, que a su vez nutre las células de la piel y ayuda a eliminar las toxinas, a controlar el estrés y a permitir un sueño reparador.
Cuidado de la Piel: Una vez que hayas establecido las bases de una buena salud, aprovechándote al máximo del aire fresco, del descanso, del agua y de la comida, será el momento para el cuidado de tu piel, que incluye como pasos básicos: limpieza, tonificación, hidratación, exfoliación y protección.
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