INTRODUCCIÓN AL CHÖ
por el 12º Kenting Tai Situ Rinpoche
Transcripción de sus enseñanzas dadas en SamyeLing, 1988 El término “Chö” se traduce como “cortar a través” o simplemente “cortar/separar”. Cuando enseño sobre esta práctica, me esfuerzo en dar una imagen completa de ella, de manera de no entregar sólo un aspecto de la práctica total, como si dijera que simplemente se trata de un tipo especial de meditación y el canto que se realiza con un tambor. Por lo tanto, es necesario adentrarse en el origen de esta particular enseñanza. Cuando el Vajrayana fue llevado al Tibet, se introdujo de forma gradual, y se desarrolló o continuó mediante ocho linajes mayores del Vajrayana, de los cuales, el linaje específicamente relacionado con el Chö es el sexto, de acuerdo a la mayoría de los textos históricos. Este linaje se denomina Shee Ché (zhi byed), la enseñanza especialmente vinculada con el principio de pacificar cualquier tipo de negatividad o enriquecimiento, o magnetización o destrucción, que son los cuatro aspectos de especial actividad. El linaje Shee Ché abarca no sólo un aspecto concreto, sino tanto el Sutra como el proceso esencial del Tantra. En el Sutra, toda práctica está dirigida a desarrollar la conciencia, la compasión, lo cual pacífica aquellas cosas como la agresión, el apego, etc. El Tantra, consiste en métodos específicos que son efectivos para transformar la negatividad en algo positivo, lo que también puede verse o entenderse como pacificar la negatividad. De este modo, podemos ver que Shee Ché se trata de un título o designación amplio, general y es especialmente marcado en este linaje particular.
La fuente principal relacionada con este linaje es el gran Bodhisattva Dampa Sangyé, o “Padampa”, cuyo nombre en muchas otras fuentes históricas es Kamalashila, en cierto sentido ambos están relacionados. Este gran maestro que introdujo esta enseñanza y cuyo linaje fue continuado en el Tibet, tiene una forma particular de traducir el título Shee Ché, elaborando su traducción con el título Budista de “Dam Cheu Dukngal Shee Ché Chépa” o “El Profundo Dharma Que Calma el Sufrimiento”. Visitó el Tibet unas cinco veces, cada vez entró desde una zona diferente: desde la frontera de Pakistán/Afganistán, desde Nepal, desde China. Transmitió este linaje a muchos grandes maestros, habiendo entre ellos 54 maestros iluminados (hombres y 1
mujeres). Esta enseñanza no fue una cosa inventada por Padampa, sino que esta enseñanza fue transmitida por Padampa en el Tibet, su fuente original es tanto el Sutra (el Prajna Paramita) como el Tantra. Cada sutra está interconectado y de la misma forma, los sutras y los tantras están interconectados. Sin embargo, estos son sutras y tantras específicos que son considerados como el texto principal, la enseñanza del Buda, el que se vincula con el Dam Cheu Shee Ché, parte del cual se conoce actualmente como Chö. Por ejemplo, con Sutra, todo el Sutra Prajna Paramita tiene 18 enormes volúmenes. Total de 17 textos, y uno es el más grande el Prajna Paramita, texto elaborado, este texto es de 12 volúmenes. Cada cuatro oraciones completas hacen a un shloka. Este texto contiene 100.000 shlokas. Luego otras 16. También hay muchos otros sutras acerca de este principio de la vacuidad, pero Prajna Paramita de alguna manera son los textos originales de Dam Chö Dukngal Shee Ché. En cuanto al Tantra, el “Choo Rim Chenpo Gyud” o “Tantra del Gran Río del Alfabeto y las Consonantes”, expresa como la lengua Sánscrita se desarrolla sobre la base de la nada. De ahí que el sonido que es producido desde la nada es “AH”, y el sonido que es producido por nada es la fuente de todo sonido, tanto aquello que está vivo como lo que es inanimado, todo tipo de sonido que producen está basado en el sonido de “AH”. Si no utilizas el sonido “AH”, no puedes hacer ningún tipo de sonido. De esta manera, utilizando esta forma para describir la última nada de todo, la última nada en el sonido, el lenguaje es su expresión. Todos los otros tantras vinculados al Mahamudra, particularmente, son descritos como el origen de Shee Ché. Esto es “Mahamudra Tak (símbolo, signo) Yee Gyud (tantra)” o “Tantra del Mahamudra Simbólico”. Estos son los principales textos tántricos que sirven de base al Shee Ché. Cuando comprendemos la fuente para todo el linaje, podemos hacer pasos involucrados en aspectos particulares de Shee Ché, especialmente de grandes maestros. El Shee Ché en general esta contenido en las enseñanzas tanto intelectuales como prácticas (en tibetano “shépa” y “drubpa”). Shépa trata lo intelectual y Drubpa la parte práctica (la transmisión y las instrucciones para practicar). Sobre esto, existen enseñanzas secretas, las que sólo se dan cuando hay señales de que la persona está preparada. Aunque el discípulo trate de engañar al maestro, o el maestro trate de enseñarle a la fuerza, no dará resultado, porque la persona simplemente no comprenderá. De modo que es este linaje 2
contiene Shépa, Drubpa e instrucciones secretas, tal como los demás linajes del Vajrayana. Estos 3 son el camino por el cual está contenido este linaje, como son todos los otros linajes Vajrayana.
Este linaje en Tibet, cuenta con muchos grandes maestros, como el Loco Jokro (Jokro
era su apellido, su verdadero nombre era “Loco”). No hay nada espectacular en estar loco, pero creo que el debió haber estado loco en el sentido correcto, adecuadamente loco. También hubo muchas mujeres, 24 desarrollaron una gran realización y otras hace 54, a través de las cuales el linaje Shee Ché fue continuado. Significativamente, el Chö es parte del Shee Ché. La enseñanza del Chö fue transmitida por Padampa a una de sus principales discípulas, Machik Labji Drönma (Lab es el nombre del lugar donde nació). La aparición de Machik fue profetizada tanto en el Sutra como en el Tantra, por Buda, así como también por Guru Padmasambhava, como la encarnación de Prajna Paramita, la madre de la vacuidad, y como una encarnación de Tara, la madre de la compasión. Ella es la encarnación 107 de la Prajna Paramita y Tara, encarnada como ser humano. No sé cómo contar porque la Prajna Paramita y la encarnación de Tara pueden ocurrir al mismo tiempo, o manifestarse hace mucho tiempo, y luego ella murió y renació, etc., como un patrón de reencarnación convencional. Profetizado en el Sutra 'Do Tang Nyik Jaypa'. Donde 'Tang' es té, 'Nyikma' significa hojas. Tangma y Nyikma se vuelven inseparables. El nombre del sutra no es 'colador de té', pero es un proceso particular. Buda señaló en el sutra “Do Tang Nyik Jaypa”: “En el futuro, cuando haya una gran necesidad por parte de la humanidad, aparecerá la emanación de la Madre del Glorioso” (es decir, toda manifestación femenina, como Prajna Paramita o Tara, las cuales reciben el nombre de “Madre del Glorioso”, de modo que la sabiduría da nacimiento a la iluminación y la compasión da nacimiento a la iluminación). “En el Norte, en un lugar llamado Lab, una mujer llamada Drönma nacerá y beneficiará a incontables seres a través de la Visualización y Perfección (Sampannakrama y Utpattikrama). Ella rondará por los pueblos y los cementerios”. Esta fue reconocida como Machik Labji Drönma porque su nombre es Drönma, el lugar es Lab, y ella vagó por los pueblos y los cementerios, y estaba involucrada con la Visualización y el método de Perfección en el que estaba bastante avanzada, el método Chö. Esta profecía especial, fue reconocida como la profetiza sobre Machik. 3
En el tantra “Jampal Tsaway Gyu” (Jampal = Majushri; Tsaway = Raíz; Gyu = Tantra), Buda profetizó: “Cuando mi enseñanza se vuelva como la hoja del té, la encarnación de Gran Madre, cuyo nombre es Labdron, vendrá, y los resultados de su actividad llegarán muy lejos. Todo aquél que esté vinculado a su actividad será liberado”. Guru Padmasambhava, en la profecía llamada “Tenpa Chir Lung” (“Profecía General para el Budismo”), la enseñanza dada por Buda, señala: “Aparecerá una manifestación que “cortará a través” de todos los aspectos del pensamiento negativo, que los dejará sin raíz, los cortará tan profundamente que nunca más volverán a surgir, su nombre es Labji Drönma, que vendrá de un lugar llamado Zang Ree (Montaña de Cobre, Zang Ree es una zona del Tibet con la cual Machik estuvo relacionada)”. Después de recibir esta enseñanza, Machik la transmitió completamente pero en una forma ligeramente cambiada mediante el desarrollo de las prácticas específicas contenidas en el Chö, de aquella que había recibido de Dampa Sanjé,. Por ejemplo: Chö que se hace para desarrollar solo al practicante. Un practicante hará Chö para sí mismo. Chö que se hace para sanar a alguien enfermo, aspecto de curativo del Chö. Chö que se hace para purificar un ambiente en particular, como una casa encantada, se práctica Chö para ayudar a mejorar un entorno negativo en particular. Algo así como exorcizar, pero exorcizar es un poco demasiado aterrador. De una manera más suave y aceptable, Chö ayuda a mejorar un entorno negativo en particular. Cuando alguien está poseído o un lugar está embrujado o maldito. ¿Qué es lo que ocurre realmente allí? Ese tipo de situación significa que existe una conexión negativa entre la persona que frecuenta la casa y la casa. Puede ser que algo terrible haya ocurrido ahí, cuando una persona es poseída por una fuerza negativa. No todas las personas algo “locas” están poseídas, de las muchas personas que son muy negativas, unas pocas de ellas están poseídas, lo que quiere decir que hay una conexión negativa entre esa persona (que es un ser humano) y otro ser sintiente que no 4
es humano ni animal, sino alguna especie de espíritu, fantasma, demonio o lo que sea.
Cuando los buenos amigos desarrollan una conexión entre ellos, se ayudan
mutuamente, y si A es más firme y estable que B, entonces A ayudará a B como amigo. Podríamos decir que ese es un buen amigo. En el caso de los malos amigos, A es mala persona y fuerte, mientras que B está bien pero es débil, entonces cuando se hacen amigos, A cambia la personalidad de B y ambos se vuelven malas personas. De forma similar, cuando una persona y un espíritu desarrollan algún tipo de relación, ésta se crea aunque no estén conscientes de ello. Puede ser amigable o puede ser destructiva, cuando ocurre esto último, es decir, cuando el espíritu es negativo, entonces la persona también se vuelve negativa. Si esa influencia es muy fuerte, puede que la persona pierda su voluntad por cierto tiempo y se vea influenciada por aquella relación. Lo mismo ocurre cuando se trata de un lugar, porque si el espíritu es fuerte y bueno, entonces queremos tener un buen espíritu en nuestra casa, pero si nuestra casa está embrujada por un espíritu que es negativo y con mucha animosidad, etc., hacia el ser humano, lo que pasa es la casa está embrujada negativamente. ¿Cómo deshacerse de él? Claramente existe una forma negativa de hacerlo, que es lo que yo interpreto como exorcismo, pero en el caso del Chö se trata de una forma pacífica. ¿Por qué se forman este tipo de vínculo negativo? Esto se debe a alguna especie de sufrimiento existente de por medio, además de alguna causa y condición negativa. A través de la práctica específica, ese espíritu negativo se vuelve positivo, ese espíritu que embruja nuestra casa se vuelve positivo. De manera que cualquiera que sean las causas y condiciones que hayan provocado la situación (ya sea en la persona o en la casa) dicha negatividad es curada. Esta es la forma particular que utiliza Shee Ché o el método Chö para purificar el vínculo negativo con la persona o el lugar. Estas cosas particulares que fueron desarrolladas por Machik, hacen que el linaje de Machik sea algo único, y es la razón por la cual en la historia del Budismo Tibetano, se hace tanto énfasis en la historia de como la enseñanza le fue transmitida por Padampa y otros maestros, hasta que mediante su propia práctica ella logró obtener realización, y entonces emergió su linaje propio, que fue el Chö. 5
Ahora podemos entender a grandes rasgos el origen de la enseñanza, el linaje original que llamamos Linaje Madre Shee Ché, y luego el linaje que derivó de aquél, el Chö (el cual posee una temática particular). En la práctica de Shee Ché, no es algo que esté totalmente involucrado en todos los demás aspectos del Budismo Tibetano, como el Theravada o Mahayana. Está directamente relacionado con este. Ejemplo: con la base de la práctica Shee Ché la persona debe ser alguien que haya desarrollado un máximo de presencia plena (mindfulness) y conciencia despierta (awareness) en sus acciones. Esto es muy importante. No podemos llegar y decir “Ah, soy un practicante de Chö”, y como tenemos el método del Chö, entonces podemos actuar enajenadamente, como locos, porque el primer nombre del maestro era “Loco”, y eso nos autoriza a nosotros para ser locos y actuar como tales: andar trayendo una calavera, soplar una trompeta de hueso, agarrar un gran damaru y partir a cualquier parte. Eso no es así, porque debemos desarrollar el sustento, el suelo de la presencia plena y la conciencia despierta de la acción. Eso es lo primero. Además de lo anterior, está la perfección exterior, y luego la perfección interior, la conciencia despierta y la presencia plena, la intención sincera. Eso es lo segundo. Cuando se realiza una acción (externa) perfecta, si eso es posible, eso es la parte exterior. ¿Qué es lo que hay ahí? Lo que se contiene en ese contenedor es la intención, y eso hace que la perfección de la acción externa sea más válida, más real, en la medida que haya una intención perfecta. Además de lo anterior, en un nivel tántrico, el practicante de Chö debe reunir en si los samayas tántricos básicos, todos ellos. De lo contrario, puede ser que tengamos todo, pero si no hay samaya, si no hay transmisión, no podemos practicar. “El Chö sacado de un libro no es suficiente”. También se corre el gran peligro de entender mal la práctica si no se ha tenido una adecuada transmisión. Una vez que la tenemos, si nuestras acciones están bien y nuestras intenciones están bien, entonces lo único que falta es la práctica propiamente tal para poder progresar. Haciéndolo de esta forma, cualquier cosa que no sepamos manejar bien no se transforma en una equivocación, sino que se vuelve algo que simplemente no hemos desarrollado aún. Pero si no lo hacemos de este modo, entonces sí será una equivocación. Así tenemos: 6
El nivel Theravada: disciplina exterior. El nivel Mahayana: disciplina interior. El nivel Tántrico, la transmisión y el samaya. “Samaya” quiere significar una dedicación real, profunda y total, ese es el núcleo de toda la práctica, es aquello que hace que las cosas sucedan, que funcionen. Hay una serie de cosas que son necesarias en un practicante de Chö desde el comienzo, pero de acuerdo a los progresos en la propia práctica, eso se va desarrollando. Me refiero a la compasión y la vacuidad unificadas. Cuando miramos hacia atrás hasta Machik, la fuente original, ella es la manifestación de Prajna Paramita (que es la vacuidad, “Madre de Vacuidad”) y de Tara (la compasión, la “Madre de la Compasión”). Estando unidas la Vacuidad y la Compasión, uno puede cortar a través de cualquier cosa, de lo que sea. Por esto es que para un practicante de Chö, la clave debe ser la importancia de la unidad de la vacuidad y la compasión. Ahora bien, cuando hacemos Chö puede resultar una práctica muy impresionante y puede que nos quedemos en eso: nos gusta el ritmo de las melodías, hay instrumentos, se permite cierto misterio en todo aquello, y además es posible hacerlo en la noche y en un cementerio. Existe la posibilidad de ser un poco diferente, pero habiendo Vacuidad y Compasión unidas, esta práctica es extremadamente efectiva. Mientras que si no hay nada de esto, puede volverse algo simplemente entretenido y superficial. Incluso puede ser algo excéntrico. Eso no es bueno, yo considero que eso no es bueno, aunque algunas personas sí lo consideran bueno. En fin, ¿cómo podemos comprender la unidad de Vacuidad y Compasión? “TONG DANG NYINGJÉ ZUNGJUK’” (Tong es Tongpa, Vacuidad; Nyinjé significa Compasión; ZungJuk significa “juntas”.) Son como dos cuerdas, si las amarras juntas, se vuelven una sola. La Compasión y la Vacuidad puestas juntas, eso es lo central de la práctica del Chö y en realidad lo es de toda práctica, pero más aún del Chö. Si no tienes TONG DANG NYINGJÉ ZUNGJUK, o 7
si incluso tenemos un poco, quizás NYINGJE, tal vez TONGPA. La Vacuidad por si sola es un objeto válido como entendimiento intelectual: “Nada existe”, “Todos los fenómenos son sólo reflejos de algo más”, todo ello muy cierto, pero si sólo tenemos eso, nos volveremos una persona muy extraña, tal vez impecable, pero más allá de ser impecable, ¿que otra cosa se puede ser? Si sólo conoces la vacuidad, y estás convencido de ello, y sólo eso, es un entendimiento válido, pero no es suficiente, es sólo una cara de la moneda, una parte solamente. Sin las dos manos no se puede aplaudir, sólo vacuidad es como tener una sola mano. NYINGJÉ (Compasión), es buena: sentimos pena por quien no tiene nada que comer; sentimos pena por quien no entiende lo que nosotros entendemos; sentimos pena por alguien, porque pensamos que las cosas son simples para nosotros y complicadas para ellos. Pero si sólo tenemos NYINGJÉ, nuevamente tenemos una sola parte. Puedes convertirte en una persona agradable primero, luego puedes volverte una persona agradablemente cargante y finalmente puedes llegar a ser una persona muy irritante por andar metiéndose en los asuntos personales de todos los demás. Cuando la compasión y la vacuidad se ponen juntas, se solucionan ambos defectos, se vuelve saludable. Tienes compasión pero al mismo tiempo sabes que todo está vacío. Sabes que todo está vacío, pero aún así tienes compasión. Este es exactamente el propósito del Budismo, especialmente del Vajrayana. Antes que cualquier cosa, la verdad última y la verdad relativa se repiten una y otra vez, hasta que se graban en tu cráneo. Esta es la razón de por qué la vacuidad y la compasión van juntas: tu entendimiento de la vacuidad no se volverá puramente cerebral, filosófico, intelectual; tu compasión no se convertirá en nada más que una obsesión. A medida que encuentres el equilibrio, tu compasión y tu entendimiento de la vacuidad se harán más efectivos. No te convertirás en una persona que no tiene nada más que una gran cabezota y un cuerpo grande, sino que todo ello será con una gran mente. De esta manera estarás completo. Lo que acabo de señalar es muy importante en la práctica del Chö. Por ejemplo, si un practicante de Chö quiere hacer Chö en un lugar muy poderoso, que son lugares donde ocurren ciertas cosas, no va a ser algo fácil, de modo que cuando algo ocurra, si uno tiene compasión, si uno tiene un entendimiento de la vacuidad, eso bastará para hacerse cargo de la mayoría de las cosas que podrían sucedernos. Si algo impactante llegará a 8
sucedernos en un lugar y momento poderosos, el tener esas dos cosas nos permitirá manejar la situación. Si no tenemos suficiente compasión o comprensión de la vacuidad, entonces va a ser mejor que hagamos Chö durante el día. En la tarde, en nuestra casa estará bien, y tendríamos que hacer la forma de Chö más simple, no la avanzada, pues puede que no estemos preparados aún para ella. Hasta el día de hoy, no he escuchado hablar de ningún practicante de Chö que haya enloquecido o se haya vuelto loco, pero puedo imaginar lo que podría pasar si una persona hace las cosas mal, en el lugar equivocado. Algo podría salir mal. Hubo una vez que Padampa Sanjé estaba llorando mucho. Su discípulo le preguntó: “¿Por qué llora?” – se suponía que Padampa era una persona que se veía muy poderosa – al verlo llorando, su discípulo probablemente pensó que algo terrible había pasado. Entonces le dijo a su discípulo, “Puedo ver que estamos en un tiempo realmente triste. Hay una señal de que las personas están perdiendo lo más precioso que actualmente tienen aquí en Tibet: las enseñanzas de Buda”. Al escuchar esto, su discípulo le preguntó: “¿Qué quiere decir con eso?” Entonces Padampa Sanjé le explicó: “En estos tiempos, si tú le das a alguien tu corazón, esa persona te lo robará. Si le das a otro tu cabeza, le quitará tus ojos y te la devolverá con las cuencas vacías. Las personas se están volviendo cada vez más y más codiciosas. Se han vuelto tan codiciosos que desean estar bien y saludables, sin hacer ningún esfuerzo, sin hacer nada. Cada vez se atreven menos a hacer cosas buenas, y están más inspirados a hacer cosas negativas”. Como dijo Padampa, podemos ver hoy en día, que se ve bien, que está de moda emborracharse, drogarse, volverse loco, estúpido, despreocupado, atrevido; y por otro lado, es vergonzoso ser amable. Veo esto en nuestra sociedad cada vez más y más. “Cuando hay una persona que miente, todos piensan que está diciendo la verdad; cuando hay alguien que dice la verdad, todos creen que está mintiendo. Siendo que hay alguien que ha sido la persona más amable contigo, tú tienes mucho resentimiento hacia ella; mientras que hacia quien ha sido contigo la persona más descortés y menos gentil, tienes mucha aceptación. Pero tengo una esperanza, que es como una estrella en el día: y es que hay unos cuántos que están bendecidos por el precioso linaje viviente, de manera que estando bendecidos tienen posibilidades de superar este tipo de cosas. Esta es mi única esperanza, y tú hijo mío, la razón por la que 9
lloro, es porque quiero que sepas esto y lo propagues, para que esa pequeña estrella diurna se convierta en el sol del día”. Cuando veo como están las cosas, todo esto resulta ser muy cierto en la sociedad actual, basta con mirar las vidas de la mayoría de las personas, para que se haga muy evidente que es vergonzoso ser gentil y amable, mientras que resulta estar muy bien, casi a la moda, el ser agresivo o flojo. Es muy probable que nuestro maestro nos esté diciendo muy seguido esto mismo. La definición de “progreso” viene de este simple proceso: cualquier limitación, cualquier apego con el que estemos personalmente involucrados, en cualquier tipo de estado de desarrollo actual, cuando “cortamos a través”, o simplemente “cortamos” o “separamos”, eso se convierte en progreso. Mientras no “cortemos a través”, nos mantendremos en el mismo lugar, no habrá avances. Así que cualquier desarrollo puede ser entendido como "corte a través". En el concepto y los principios de la práctica del Chö, este proceso particular es exagerado un poco, mediante el énfasis que se hace en ello. En el principio del Chö, en su idea directriz, el término “cortar a través” se aplica básicamente de tres grandes maneras: 1. La primera es externa. Externamente hay ciertas cosas específicas que nos impiden desarrollarnos. Significa que hay algo que existe fuera de nosotros que nos hace imposible desarrollarnos, volviéndonos incluso, más oscurecidos y distorsionados. En este sentido, el Chö es un método que atraviesa aquello, las conexiones entre tú (que estás siendo afectado) y el obstáculo externo, cualquiera sea este y que además es una obscuración. El Chö “corta a través” de estas dos cosas, y por lo mismo, la conexión existente entre el obstáculo externo y tú, se elimina. Como es sabido, desde el punto de vista de la filosofía Budista fundamental, no podemos cortar una conexión de manera agresiva, rechazándola o poniéndole trampas y engañándola. No hay forma de cortar esa conexión si lo hacemos así, y si llegáramos a hacerlo, pasaría a transformarse en otra conexión, igualmente negativa. De esta manera, mediante el método del Chö, aquello que hace que te relaciones con el obstáculo externo, las causas, circunstancias y condiciones que hacen que te vincules con ese obstáculo en específico, esas causas y condiciones, son transformadas. Si todo funciona bien, esto se hará rápidamente, si no, será de una forma más gradual. Esta es la única forma tangible por la que una conexión negativa ya presente pueda ser superada, es decir, mediante el trabajo con lo que sea que cree esa conexión, no rechazándola 10
agresivamente, no por el simple deseo de no quererla, no por el sólo hecho de olvidarse de ella, sino trabajándola. El método del Chö, por lo tanto, es un medio hábil para lidiar con todo ello. Esto es lo que se llama “Chö externo”. 2. Cuando se trata de una condición interna. Este principio del Chö es mirado con una visión interior o interna. Cuando una persona tiene obstáculos solamente internos, por fuera todo parece estar bien, todo se ve ok., pero internamente esa persona se ve enfrentada a obstáculos. Generalmente se tiene el conocimiento de que todo obstáculo externo está relacionado con un obstáculo interno, pero existen obstáculos externos más sutiles que otros, más y menos evidentes, en estos últimos encontramos los obstáculos internos. Este obstáculo interno, tiene la misma estructura del obstáculo externo. Cuando se tiene la condición perfecta para superar cualquier obstáculo, ya que estamos internamente libres de todo obstáculo, no somos la encarnación de obstáculos, sino la encarnación de la iluminación o la sabiduría, que es todo el antídoto que se necesita para cualquier obstáculo. Pero como no reconocemos esto, mientras más obstáculos tengamos, se está mostrando cuán poco reconocimiento tenemos de ello, cuán poco nos hemos dado cuenta y cuán poco lo hemos realizado. Esta es la fuente de los obstáculos internos. Mediante el método del Chö, trabajamos la conexión que existe entre nosotros que estamos libres de obstáculos por naturaleza y las existencias de obstáculos debido a que no tenemos el reconocimiento de que estamos libres de obstáculos. Esta conexión no es un tercer elemento, son sólo dos cosas, estamos libres de obstáculos, somos la encarnación de la solución. Al no reconocer esto, como es natural, de manera temporal nos volvemos la personificación de los obstáculos. De modo que es un camino de dos sentidos: si se tiene el reconocimiento, se termina el obstáculo; si no se tiene el reconocimiento, el obstáculo va a estar presente. Esto significa que a través del método del Chö, que se considera como una de las formas más rápidas de lograr el reconocimiento, hará que se manifieste espontáneamente la esencia de ese obstáculo en particular, ya que lo habremos reconocido. Esta forma del Chö se denomina “Chö interno o interior”. 3. El aspecto sagrado del Chö. La idea misma de que según una visión última no tenemos obstáculos, y que según una visión relativa si los tenemos. Esta dos cosas, la visión última y relativa, con y sin obstáculos, en si misma es un gran obstáculo que debe ser “cortado a través”, utilizando el método del Chö. Una forma de describir esta situación es mediante el uso del sonido impactante que uno produce en el Chö, llamado “Pe”. No significa nada en particular, no es la palabra de ningún idioma, pero cuando lo dices, cuando lo gritas, el sonido mismo está “cortando a través”. Al menos mientras lo 11
dices, tienes que “cortar a través” de todo, de lo contrario lo más probable es que no digas “Pe”, y digas algo como “Si” o “No”. Así que “corta a través” del material crudo, sin refinamiento del momento presente y genera una presencia de una fracción de segundo acerca de lo que realmente se trata todo, de cómo son las cosas realmente, y luego, lentamente la realidad entera de la relatividad regresa y toma el control. Esto es más o menos “el aspecto sagrado del Chö”. En toda instrucción sobre la práctica del Chö, siempre se encuentran presentes estos tres aspectos (externo, interno y sagrado), pero cuando realizamos la práctica, primero nos enfrentamos con el aspecto externo, luego el interno y después lo sagrado. Esta es la única forma, porque si queremos llegar a la parte superior de una casa, primero debemos entrar y luego subir la escalera. Así es como la práctica se desarrolla, pero cada una de estas cosas son en cierta medida la encarnación de las otras dos, de forma que siempre van juntas. Ahora que ya conocemos lo básico de la palabra “Chö” o “cortar a través”, que es usada para este aspecto particular de la práctica del linaje Shee Ché, me gustaría compartir una pequeña secuencia en la práctica del Chö. Ejemplo de una práctica específica de Chö, que contiene cuatro etapas: 1. La mente que es el lienzo, el espacio de la entera existencia. Lo que se manifiesta en él es la forma, el sonido y el pensamiento: La forma que es ahí físicamente posee diferentes variantes o configuraciones, colores y texturas; El sonido, que según el movimiento de esa forma produce sonido; El pensamiento: cuando una mente específica se relaciona con esa forma y ese sonido surge un concepto, y esta es la forma en que todo existe, en todo momento, aquí y ahora. Veamos como funciona esto mismo con las personas: Una forma particular, con una cabeza, dos manos, dos piernas, etc., es llamada “ser humano”. Una planta crece por aquí y por allá, la unimos con lana de oveja, la usamos sobre nuestra forma, y a eso le llamamos “ropa”. El chaleco verde, los pantalones café, los zapatos negros, todas esas cosas son formas. A su vez, tratamos de expresar cosas, por lo que nuestra forma a través de la cual hacemos gestos y mediante los cuales nos comunicamos, se desarrolla entre esta forma y aquella. 12
Ahora bien, lo que crea estas conexiones, lo que causa todo este movimiento es el pensamiento. De este modo, pienso que una forma con una mente me pide hablar del Chö, y luego yo miro a este sujeto con mis pensamientos relacionados con muchas formas que son los libros, en blanco y negro, y además estoy recogiendo y recordando un montón de sonidos que se produjeron hace mucho tiempo. Y el hecho de que algunos de estos “hacedores de ruido”, están vivos y otros ya no lo están, acude a mis pensamientos. Percibo que hay muchas formas que pueden hacer muchos sonidos y las cuales además se vinculan con pensamientos que están reunidas aquí, y luego vengo yo, me siento aquí, mi forma, todos ustedes, sus formas, y entonces hago este sonido a través de mi pensamiento, por medio de mi forma, para comunicarme con ustedes. Esto es básicamente como las cosas toman lugar en la mente. En este sentido, el significado de este primer punto, podemos relacionarlo con el concepto de mandala, que quiere decir “centro y entorno/periferia/alrededor”. Cada centro tiene un entorno que lo rodea, y cada entorno tiene un centro. De modo que toda cosa en el universo es un mandala de la mente. La forma, el sonido, el pensamiento, todos son mandalas de la mente. La mente es el centro y el pensamiento, el sonido, la forma, son el entorno que rodea a la mente. 2. Debido al poder de la transmisión del Chö, uno debería ser capaz de transformar este mandala de la mente de lo peor a lo mejor, de lo negativo a lo positivo, de lo insano a lo saludable, de lo relativo a lo último. Gracias al poder de la bendición de la transmisión del linaje del Chö, mediante este método, uno puede transformarse. ¿Cómo es que esta transformación ocurre? No se trata de cosas negativas que suceden dentro y cosas positivas que vienen desde afuera, sino de cosas negativas que en cierta forma se manifiestan en formas positivas. La esencia de lo negativo es positivo; la esencia de todo lo insano/enfermizo es lo sano/saludable. La esencia de lo relativo es lo último, por lo que no es que se reciba lo relativo y que lo último no venga de afuera, sino que lo relativo se manifiesta como lo último, siendo lo último con el centro hacia fuera. Esta es una de las formas con las que se puede expresar el método del Chö. 3. Un método particular: al comienzo se dijo que la forma (nuestro cuerpo), el sonido (la expresión) y el pensamiento, están todos relacionados con la mente. Pensamiento y mente son cosas diferentes, existe una diferencia sutil, pero la hay: esto es como el océano y las olas. El océano es la mente, y las olas son el pensamiento. El océano entero no es sólo olas, pero las olas son parte del océano, como los pensamientos lo son de la mente. Este tercer punto se refiere al cuerpo, al habla o expresión y al 13
pensamiento. Cómo colocas tu cuerpo, como lo posicionas, esto es como sentarse derecho y situar correctamente el cuerpo físico. Eso es el cuerpo. Ahora, en relación al habla: cómo respiras, y qué es lo que dices; lo que cambias y lo que no cambias; cuando cantas y cuando no cantas; y, específicamente en el Chö, qué tan fuerte será tu “Pé” con la mente. Un practicante de Chö, debe primeramente tener presente la secuencia de meditación más fundamental, más básica. En el Chö se participa con muchas de visualizaciones. Aunque uno pueda pensar que en el Chö se deben hacer muy pocas visualizaciones, por la idea que se tiene de que se trata de “cortar a través”, la verdad es que es todo lo contrario, ya que el Chö contiene muchas visualizaciones, y muchas son más bien físicas, no sólo visualizar algo allá arriba, que directamente no tiene nada que ver con este cuerpo, por lo general se hacen muchas con el propio cuerpo. Por ejemplo, con una práctica concreta de Chö, se corta nuestro cuerpo sobre el suelo y se ofrece a todos aquellos con los que compartimos conexiones kármicas negativas para alimentarlos con nuestra carne y nuestra sangre, a fin de poder pagar todo tipo de deudas que tengamos con aquellos seres. Por ejemplo, si sucede que se tiene un enemigo ¿Qué intentará hacer él?. El intentará hacernos sufrir, y si resulta que él es muy malo, querrá herirnos. Después de habernos matado, podrá decir: “Ahora que he golpeado a mi enemigo, ya no tengo enemigos”, lo cual en realidad no es cierto, pero así es como pensaría. No existe nada más valioso que tu propia existencia en cuanto a forma, sonido y pensamientos, y con los cuáles puedes trabajar en relación a cualquier tipo de conexiones negativas. Entonces, con tu propia carne y tu propia sangre, alimentas a todas esas energías negativas, a las cuales les debes algo karmicamente hablando. En este sentido, no hace falta decir que se trata de un método bastante extremo y atemorizante para alguien que no lo entiende, pero cuando uno ha recibido la transmisión y lo entiende, uno puedo trabajar con ello. Se trata de un método muy efectivo durante todo el proceso de su desarrollo. 4. Los Métodos: 1. El suelo (sustentobase), la preparación, el entendimiento. 2. La transmisión, las bendiciones. 3. El cuerpo, palabra y mente (o pensamiento). El trabajo con la materia cruda. Todos estos métodos, todo el valor que tienen sólo es efectivo como una verdad relativa, un practicante de Chö, manteniendo el principio básico del Chö, no se aferrará a ninguno de los métodos del Chö como una verdad última. Todo el método en si, es 14
una verdad relativa, por ello es que un practicante de Chö es capaz de “cortar a través” de sus creencias y del método mismo. La misma práctica del Chö no debería convertirse en un obstáculo (en relación a las distinciones dualistas), pues el practicante de Chö tiene que ser capaz de “cortar a través” de todo, incluso del mismo Chö. En uno de los poemas de Tilopa o Naropa, se dice: “El agua puede lavar las manchas, pero el agua no puede lavar el agua misma”. Pero en el caso del Chö, el Chö puede “cortar a través” de todos los obstáculos, incluso a través del mismo Chö. Existe otra forma, más relacionada con la práctica del Chö, y que es un aspecto muy sagrado dentro del linaje del Chö, además de haber sido el método – históricamente transmitido por Machik a su hijo. Ella le dijo: “Estas son las cuatro mejores cosas: discutimos sobre la mejor protección ¿Cuál es la mejor protección? ¿Cuál es el mejor método? Discutimos sobre las acumulaciones y el mérito ¿Cuál es el mejor mérito? ¿Cuál es el mejor lugar? ¿Cuál es la mejor visión?” Después le dijo: “No tener ningún apego a tu propio cuerpo y sus placeres, esa es la mejor protección ¿por qué? Tú, hijo mío, no tienes nada que proteger. Todo el mundo está ocupado tratando de proteger su posición, su bienestar, sus placeres. Pero cuando no tienes ningún apego a estas cosas, entonces no hay nada que proteger”. Entonces, dijo ella: “¿Cuál es la mejor acumulación?” Cuando uno supera su apego por cualquier cosa que sea material, esa es la mejor acumulación, porque generalmente nuestra acumulación es dar $1.000 al pobre, $1.000 a los maestros, $1.000 al templo. Quemamos $1.000 en el uso de una lámpara, ponemos $1.000 en la caja de las donaciones. La acumulación de mérito consiste en usar nuestro bienestar para hacer algo. Pero mucho más que esto es cuando no estamos apegados o aferrados a la acumulación material. Cuando hemos superado el apego por él, entonces todo, cada cosa, se vuelve una acumulación de mérito. Si puedes utilizar cualquier cosa que tengas sólo para ti, sin ningún tipo de apego o aferramiento, si eso es posible, en ese caso, aunque no le des ni un sólo peso a nadie, eso es acumulación de mérito. La respuesta de Machik fue: “La mejor acumulación de mérito es “cortar a través” del apego, el aferramiento y la posesión material”. Esta es la forma más efectiva de actuar. Machik le dijo después: “¿Cuál es el mejor lugar? Si no me aferro a ningún lugar, ese es el mejor lugar”. Cualquier lugar está bien, si no tienes apego a ningún lugar, la geomancia no es necesaria. Cualquier lugar es el mejor lugar si no tienes apego por él. 15
Esta es la razón por la cual Milarepa, escogió el lugar más inhabitable e inhóspito, como las cuevas en la montaña nevada, donde no puedes hacer crecer flores, o algún jardín, ni puedes criar gallinas. Buscó un lugar que fuera totalmente inservible, y escogió ese para meditar. Pienso que hizo esto para no permitirse apegarse a aquél lugar, además de muchas otras razones claro. Machik enseñó a su hijo la cuarta de las cuatro mejores cosas, la visión: “La mejor visión es cuando no estás apegado a tu visión”. Cuando superas el apego y el aferramiento a una visión particular, entonces esa es la mejor visión. Esto es algo muy importante en la enseñanza del Chö y para el practicante. Existen ciertos riesgos con esto que acabo de compartir con ustedes. Esto puede ser de utilidad ahora, pero se corren riesgos si uno subestima o sobreestima estos esfuerzos ¿Cómo puede ser esto posible? Si bien puedo explicarlo con las otras cosas, resultará más claro hacerlo con la visión. Es cierto que no debemos apegarnos o aferrarnos a nuestra visión, pero por ahora, esto debería permanecer en el trasfondo y ese entendimiento debería ser aplicado cuando nos apegamos demasiado a nuestra visión. Sin embargo, debemos tener algún tipo de visión, y algún principio, de lo contrario, para la mayoría de nosotros, si no tenemos un principio, nos perdemos. Si no tenemos una visión, nos perdemos. Aunque la visión que tengamos no sea la mejor visión, pues la mejor visión es la novisión, aún así, tenemos que tener alguna visión de la cual sujetarnos, mediante la cual podamos llegar a ese estado de entendimiento “más allá de la visión”. Por esto es que no nos lo debemos tomar literalmente por ahora ni dejarnos llevar demasiado por este excelente conjunto de consejos. Estos son consejos desde el punto de vista de lo último, mientras que nosotros estamos lidiando todavía a un nivel relativo, de manera que es muy importante ver el valor de todo esto, entenderlo e inspirarse en ello, y al mismo tiempo tener un principio válido sobre el cual apoyarse temporalmente. Todo esto tiene que ser practicado de acuerdo a quiénes somos, dónde estamos (en un sentido relativo), y al mismo tiempo, sabiendo qué somos y cómo son las cosas en un sentido último. Por lo que no hay que confundirse con estos dos aspectos. Este es uno de los métodos específicos del Chö, que fue transmitido por Machik a su hijo, ahora bien, existe un método particular de Chö que es muy sencillo y que yo encuentro muy efectivo, aunque debo decir que no soy un experto en Chö. Por lo que me gustaría compartir este principio básico con ustedes. No significa que les daré la instrucción, por lo que no pueden ir y hacer lo que les hablaré, sino que les daré un concepto de la práctica, de forma que al menos podrán tener algún tipo de 16
entendimiento de ella. Esta práctica se denomina “Abriendo la Puerta del Espacio”. Su significado o sentido es comúnmente entendido de manera muy limitada y estrecha, en relación a nuestras habilidades tanto físicas como mentales. Mediante este método se abre aquella puerta, de modo que de lo limitado surja lo ilimitado. Es como alguien que estuviese en una celda por muchos años, y de pronto, repentinamente se abre una puerta y él puede caminar a través de ella, saliendo de la celda hacia el exterior, donde existe mucho espacio. Esto se realiza a través de un método específico de Chö que utiliza sonido, visualización y posturas físicas. Se desarrolla mediante una fuerte concentración en el centro del cuerpo, el cual es muy importante. Si alguien me corta mi mano derecha, yo seguiría con vida, pero si alguien me cortara por el centro, estaría acabado. La parte central del cuerpo es como el tronco de un árbol, y es el centro de la energía en el cual la mente funciona de manera muy sólida desde el tiempo que fuimos concebidos, después de 16 o 29 días hasta el momento de nuestra muerte. De manera que desde que somos concebidos hasta nuestra muerte, funcionamos desde el centro. Para desarrollar el canal central, existen muchos métodos, algunos de los cuales se enseñan en el Chö. En este método, la energía total que es la manifestación de la mente es llevada a la parte baja del centro, y a través de los métodos de canto, postura física y formas particulares de respiración del Chö, se va liberando gradualmente por los distintos puntos como el ombligo, el corazón, la garganta, la coronilla, puntos que llamamos chakras (que se refiere a los ejes o lugares principales o centrales del cuerpo) y que están todos en el centro del cuerpo. Pasa a través de cada uno de los puntos centrales y sale finalmente por la coronilla, el lugar más alto, donde la reina lleva su corona. Esta es la parte más importante y sagrada del cuerpo, por la cual la mente es liberada en el cielo y se funde en el espacio. Este es el ejemplo de un método de Chö específico, pero que para ser practicado es necesario haber recibido la transmisión y las instrucciones. Estos aspectos concretos que he descrito, están más bien relacionados con el desarrollo interno, pero existen muchos otros para propósitos específicos como beneficiar a otros, más dirigidos a realizar algo externo que solamente desarrollar algo internamente. Este es un ejemplo de tantos métodos que existen y que puede llamarse “Ofrecimiento y Generosidad”, muy vinculado con la devoción y la compasión. Existen muy pocas cosas que una persona necesita desarrollar, o que necesita realizar en verdad. Cuando se tiene una idea ambiciosa, mucha gente se deja llevar por esa idea y al final no logra concretar nada, logrando solamente meterse en muchos 17
problemas. En cambio, otras personas pueden hacer de su ambición algo real. Evidentemente, hay muchos tipos de karma y muchas cosas relacionadas con ellos, pero hablando técnicamente se trata de un principio con tres aspectos diferentes: devoción u ofrecimiento (hacia los que tienen más devoción y compasión que uno), compasión y generosidad (hacia los que tienen menos compasión y menos generosidad que uno). Y a ti mismo en el medio. La devoción, la compasión, ofrecimiento, la generosidad. Cuando deseas hacer algo, lo primero que tienes que saber es qué es lo que realmente quieres hacer, quién eres y qué es lo que puedes hacer. Cuando tienes estas tres cosas, entonces sabes exactamente qué es lo que quieres hacer, quién eres y qué puedes hacer. Trabaja con estos tres aspectos y lograrás que las cosas se hagan, que las cosas ocurran. De lo contrario, no sabrás exactamente qué es lo que quieres, o quién eres y qué es lo que puedes hacer, y entonces, en medio de tanta confusión, si además tienes un ego muy grande, creerás que puedes hacer algo, pero ni siquiera sabrás qué cosa. Lo mismo pasa en la práctica ¿Cómo tener compasión? ¿Hacia quién? ¿Cómo tener devoción y hacia quién? Esto es muy sencillo, se debe tener devoción hacia aquellos que tienen más devoción y más compasión que nosotros. Mientras que se debe tener compasión hacia aquellos que tienen menos compasión y devoción que nosotros. Eso es todo. En este método de Chö, la devoción y la compasión se relacionan con todos los seres sintientes y todos los seres iluminados que están más allá de los seres sintientes comunes, que en una época fueron seres sintientes comunes, pero que dejaron de serlo y ahora están iluminados. Estos se clasifican en 4 categorías: 1. Objeto de devoción y ofrecimiento; 2. Objeto de respeto y ofrecimiento; 3. Objeto de compasión y generosidad; 4. Objeto de conexiones kármicas negativas y generosidad. Otro término que se utiliza en el Chö para esto, es el de los 4 invitados. La idea es la de estar ofreciendo un festín o banquete, teniendo 4 categorías de invitados. El cuarto objeto, en un sentido general es un objeto de compasión, pero al mismo tiempo en un sentido específico, se refiere a aquellos a quienes se les debe algo o aquellos que nos deben algo a nosotros, es decir, seres con los que tenemos fuertes conexiones kármicas ¿Qué son las conexiones kármicas para el Budismo? Todos y cada uno de los seres sintientes ha sido nuestra madre, nuestro padre, y todo lo demás, hace algún tiempo atrás, ¿pero quién ha sido recientemente tu padre, madre, amigo o cualquier cosa que haya guardado alguna relación contigo? “Recientemente” no quiere decir dos años atrás, sino que se trata de quienes han sido cercanos a nosotros en nuestras 100 18
vidas pasadas. De modo que las conexiones kármicas con ellos son más recientes que con otros, y entre estas conexiones kármicas recientes, podemos encontrar algunas formas de karma negativo. Por ejemplo, si yo maté a alguien, si yo nací como araña y otro como mosca, y yo me lo comí vivo a pesar de que gritaba para que lo dejara ir. Esa es una conexión kármica bastante negativa, y es este tipo de conexión kármica reciente la que se conoce como deuda kármica negativa, como si nos debiéramos algo mutuamente. Este es el cuarto objeto. En el Chö, generalmente se ofrece un festín o banquete muy limitado, debido a que los practicantes de Chö no pueden costear muchas cosas materiales, y es por esto que se utilizan banquetes simbólicos muy significativos. Se asemeja mucho a las ceremonias católicas, donde tienen muy poco pan para comer y muy poco vino para beber. En este sentido hablamos en el Chö de un banquete visualizado. En el texto se señalan toda una serie de ofrendas, básicamente de tres tipos: vegetarianas, novegetarianas, y de bienes materiales. Las ofrendas vegetarianas son para todos los seres, incluyendo monos y conejos, mientras que las novegetarianas incluyen todo tipo de seres sintientes como tigres y leopardos, y ambos tipos de ofrendas se hacen para todos los seres sintientes, incluyendo osos, que a veces comen carne y a veces comen vegetales. Los bienes son para todos los seres sintientes materialistas. Estas ofrendas son tanto imaginarias como físicas, no las visualizamos simplemente ni las damos neuróticamente. Ellas están bendecidas por un ritual físico específico, que incluye cantos y pensamientos poderosos que son reforzados por el linaje de transmisión. De esta manera, cualquier cosa que visualices, estando bendecida, se vuelve algo poderoso, no sólo un trozo de pan, no sólo la imaginación de joyas, ropas, etc. Cuando ya se ha reunido todo esto, entonces invocamos a los invitados, siguiendo la secuencia: primero invocamos los objetos de devoción: Buda, Dharma, Sangha, Guru, Deidad, Protector. Después de eso, invocamos los objetos de respeto: los dioses del universo, los dioses de las montañas, de los ríos y océanos, los dioses de los hombres, de las mujeres, de los niños, de la educación. Cada persona tiene su propio espíritu que la acompaña, los que llamamos “dioses de los hombros” (“shoulder gods” o dioses guardianes o guardaespaldas). Se encuentran sobre nuestro hombro derecho, y cuando cuidamos bien de él, todo sale bien, si no lo cuidamos se va, se aleja. Cuando el espíritu se ha ido, la persona decae. Muchas cosas desafortunadas ocurren a las personas que no cuidan bien de estos espíritus. No se trata de un castigo, sino más bien es como para un pez cuando no hay agua, si sucede eso el pez no puede vivir. Sin este espíritu, la persona se vuelve un ser sintiente sin aquella fuerza divina extra. Sin embargo, estos espíritus no pueden darnos más allá de lo que ellos tienen, no pueden darnos la 19
iluminación, pueden darnos protección, pueden hacernos saludables o ayudarnos de muchas formas, pero no pueden darnos la iluminación, por esto es que se trata de objetos de respeto y no de devoción. Luego vienen todos los seres sintientes, objetos de compasión, y esto se debe a que, todos ellos poseen una naturaleza perfecta, pero como no la reconocen, están sufriendo en el samsara. No importa quienes sean o en qué condiciones se encuentren, ellos padecen muchos sufrimientos. Por esto es que se tiene compasión por ellos. Después están los seres con quienes estamos conectados kármicamente cada uno de nosotros en nuestras vidas pasadas recientes, incluyendo esta. Se trata de conexiones kármicas negativas, en las que nosotros les debemos algo o ellos nos deben algo a nosotros. Estamos conectados y el resultado todavía no ha manifestado, todavía no. Por esta razón, se tiene compasión por ellos. Por lo tanto, a estos objetos de devoción, respeto, compasión, y aquellos seres sintientes con los que tenemos conexiones kármicas, a todos ellos, les hacemos ofrendas. Cualquier cosa que necesite ser satisfecha, nosotros la satisfacemos. Si existe algún ser que tiene una conexión kármica con nosotros 100% negativa, entonces respondemos a eso con 100% de positividad, lo que produce como resultado, que aquella conexión negativa sea invalidada por la positividad que hemos puesto entre nosotros y él. Podría decirse que esta secuencia y estructura es prácticamente la estructura de cualquier método de Chö para curar a alguien que se encuentra física o mentalmente enfermo, para sanar/limpiar un lugar que esté bajo influencias negativas, y para curar a alguien que esté poseído por un espíritu maligno o algo por el estilo. Todas estas prácticas siguen un principio muy parecido. Estos son algunos de los aspectos particulares de las prácticas relativas al Chö, que creo que pueden ser beneficiosas para todos. Nota: Texto traducido por Yeshe Jungne del sitio: http://quietmountain.org/links/teachings/cho.htm “Para beneficio de todos los seres”. Fuente: http://movimientorime.cl/rime/ [Revisado]
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