UNIVERSIDAD FERMIN TORO VICE-RECTORADO ACADEMICO FACULTAD DE CIENCIAS ECONOMICAS Y SOCIALES ESCUELA DE RELACIONES INDUSTRIALES CABUDARE. ESTADO LARA
MOTIVACIÓN A LOS EMPLEADOS
INTEGRANTES: Vásquez María C.I: 19.106.573 Ramos Michelle C.I: 18.996.455 Yépez Ninoska C.I: 21.047.770
Noviembre 2012
TÉCNICAS PARA MOTIVAR A LOS EMPLEADOS
La motivación consiste en el acto de fortalecer a los trabajadores con el fin de que tengan un mejor desempeño en el cumplimiento de los objetivos, a través de la motivación logramos un mejor desempeño, una mayor productividad, una mayor eficiencia, una buena creatividad, una mayor responsabilidad, y un mayor compromiso
por
trabajadores.
parte
Pero
de
sobre
los todo,
logramos trabajadores motivados y satisfechos,
capaces
de
contagiar
dicha motivación y satisfacción al cliente, es decir, capaces de ofrecer por iniciativa propia un buen servicio o atención al cliente. A Continuación se presentan algunas técnicas o métodos que podemos utilizar para motivar a los empleados: Brindarles oportunidades de desarrollo y autorrealización: Consiste en brindarles oportunidades o posibilidades de autorrealización, logro, crecimiento, desarrollo profesional y personal. Para ello, podemos delegarles u otorgarles mayor autoridad, mayor poder de decisión, mayor autonomía, mayores
responsabilidades,
mayores
facultades,
nuevas funciones, nuevas tareas, nuevos retos, nuevas metas, nuevas oportunidades para que expresen su creatividad. Darles reconocimiento por sus logros:
Otra técnica de motivación consiste en reconocer sus buenos desempeños, objetivos, resultados o logros obtenidos. Por lo tanto, las recompensas económicamente en sus buenos desempeños, elogiarlos por el trabajo realizado, o darles reconocimiento ante sus compañeros, por ejemplo, a través de una ceremonia en donde se premie a los empleados que mejor desempeño hayan tenido en un periodo de tiempo. Mostrar interés por ellos: Consiste en mostrar interés por sus acciones, logros o problemas; no sólo por lo que suceda dentro del ámbito de la empresa, sino también, por lo que pueda suceder en su vida personal entonces podemos preguntarles y aconsejarlos sobre sus problemas personales, apoyarlos en sus metas personales o de desarrollo, por ejemplo, dándoles tiempo y permiso para que cursen estudios, o incluso financiar parte de éstos. Hacer que se sientan comprometidos con la empresa: Una forma de motivar a un trabajador es hacer que éste se sienta comprometido e identificado con la empresa. De acuerdo con lo antes mencionado debemos hacer que se sienta a gusto trabajando en nuestra empresa y que sienta que es parte fundamental en el desarrollo de ésta, por ejemplo, al otorgarles mayor autonomía, mayores responsabilidades, mayores facultades, limitar la supervisión, apoyarlos en sus metas personales.
Hacerlos sentir útiles y considerados: Otra técnica de motivación es hacer que el trabajador se sienta útil, considerado y que sienta que es importante y tomado en cuenta por la empresa. Queda
demostrado
que
debemos
otorgarles
una
mayor
participación, por ejemplo, permitiendo que expresen sus ideas u opiniones, incentivando a que nos den sus sugerencias, por ejemplo, a través
de encuestas, que además de hacerlos sentir útiles y
considerados, nos permite obtener sugerencias valiosas para la empresa. Darles variedad: Consiste en evitar que los empleados caigan en la rutina de tener que cumplir siempre las mismas funciones o realizar siempre las mismas tareas, es decir, que podemos rotarlos de puestos, darles nuevas funciones, aumentarles las tareas requeridas para su puesto, ponerles nuevos retos o metas. Darles oportunidades de relacionarse con sus compañeros: También
podemos
motivar
brindarles
a
los
trabajadores
posibilidades y oportunidades de que tengan una mayor relación con sus compañeros, como lo es crear grupos o equipos de trabajo (que además de permitirles relacionase con sus compañeros, les darán identidad y un sentido de pertenencia), organizar actividades, eventos o reuniones sociales. Darle buenas condiciones de trabajo:
La motivación consiste en procurar que el trabajador tenga buenas condiciones laborales. Por lo tanto, debemos procurar que cuente con un buen sueldo o salario, que cuente con posibilidades de ascender, que cuente con seguros, con beneficios sociales, y con todos los beneficios que obliga la ley. Ofrecerles un buen clima de trabajo: Consiste en crear un clima de trabajo en donde los trabajadores se sientan a gusto, bien tratados, con todas las comodidades necesarias y contar con una buena infraestructura, instalaciones amplias, baños limpios, sillas cómodas, ventilación adecuada, y demás comodidades. Usar metas y objetivos: Finalmente, otra técnica de motivación es la de ponerle a los trabajadores metas u objetivos. Pero para que esta técnica dé resultado, debemos asegurarnos de que las metas se perciban como desafiantes, pero alcanzables; debemos asegurarnos de que los empleados aceptarán las metas y se comprometerán con ellas. De tal manera que las metas específicas incrementan el desempeño, y las metas difíciles, cuando son aceptadas, dan como resultado un mayor desempeño al que habría con metas fáciles.
COMO MOTIVAR A LOS EMPLEADOS DE BAJA AUTOESTIMA
Se
deben
planear
las
formas de mantener motivado a los
empleados,
características
según
las
propias
del
mismo, para una persona con capacidades
especiales
es
necesario hacerle notar que es capaz de realizar
las cosas
que se proponga aún con su limitación física, para esto se deben crear actividades que lo involucren con personas con capacidades normales, sin hacerlo sentirse inferior a ellos por su baja autoestima, esto le hará mejorar su autoestima y minimizar los síntomas depresivos y ansiógenos. Es muy importante diseñar y aplicar diferentes formas de concursos que ayuden a la solución de los problemas reales de la empresa de una manera que sea divertida y creativa para los empleados; en la que todos se integren y generen ideas grupales alternativas de solución.
Las organizaciones deben valorar el trabajo de sus miembros, con mecanismos
que permitan disponer de una fuerza de trabajo
suficientemente motivada para un desempeño eficiente y eficaz, que conduzca al logro de los objetivos y metas de la organización.
Si el personal observa que su opinión es tomada en cuenta, que a su trabajo siempre se le da la importancia que merece la efectividad de estos empleados y ellos tendrán mucho más autoestima en si mismo dentro de la empresa, por lo tanto mantendrá siempre una buena autoestima. Un directivo o gerente de una empresa puede motivar a los trabajadores
haciendo
interesante
el
trabajo,
relacionando
las
recompensas con el rendimiento, promoviendo recompensas que sean valoradas, tratando a los empleados como personas, alentando la participación y colaboración y ofrecer retroalimentación precisa y oportuna. Es importante destacar que la motivación como parte de un programa
de
desarrollo
de
la
autoestima,
no
es
solamente
responsabilidad del gerente, sino de un trabajo en conjunto de todas las personas que integran la empresa. Es como aplicar un sistema de calidad total en la empresa dedicado a desarrollar calidad de empleados que creen en su trabajo y en el crecimiento de la empresa por medio del fortalecimiento de la propia valoración en sí mismo.
IMPORTANCIA DE LA MOTIVACIÓN EN LA PRODUCTIVIDAD DE LAS ORGANIZACIONES
La motivación de los empleados es un medio importante para el desarrollo de la empresa, ya que mientras más motivados se encuentren los trabajadores, su autoestima será cada vez más adecuada, y por la mima confianza y estima que se tengan a sí mismos serán más eficientes; aumentando
la
productividad
en
la
empresa. La pérdida de motivación afecta no sólo en la vida personal, sino también, y con más fuerza, en lo profesional ya que es allí donde más horas se pasan. Por ello, es de vital importancia que las personas se sientan motivadas en su lugar y ambiente de trabajo. Hay que buscar la manera de convertir esos conflictos y situaciones adversas, que acaban dinamitando el buen clima laboral, en verdaderas oportunidades. De este modo, motivar a un empleado tiene que ver con proporcionarle una serie de condiciones o estímulos necesarios para que adopte el comportamiento y desempeño profesional más óptimo. Todos los métodos y técnicas para motivar a los empleados dependen de las diversas realidades culturales y sociales en las que se encuentre la organización. Aunque existen una serie de pautas generales para lograr el mayor interés y compromiso de los trabajadores de una empresa.
En una primera instancia, será fundamental que el jefe o líder del área escuche al empleado, desarrollando una empatía a través de la
retroalimentación entre los rangos bajos, medios y altos, con el único objetivo de hacer sentir al trabajador pieza fundamental en la empresas.
A esto se le puede añadir, el buscar iniciativas propias que fomenten el trabajo en equipo para conversar abiertamente aclarando las dudas sobre normas, responsabilidades, derechos y deberes, Así como valorar los aspectos positivos de los empleados, agradeciendo y elogiando las buenas acciones que ellos realicen. Gracias a estas y otras técnicas será posible alcanzar la automotivación. Los trabajadores reconocerán diversos factores positivos y se volverán gradualmente miembros más creativos, motivados y conciliadores, principalmente porque podrán controlar el estrés y manejar de manera positiva sus propios sentimientos y los ajenos. A partir de este momento, todos los cambios que se produzcan serán trascendentales. Los trabajadores empezarán a reflejar esa satisfacción laboral en su trabajo, mejorando así la productividad empresarial de esta manera alcanzando los objetivos propuestos que tengan las organizaciones conduciéndolas al logro.