TEA STILTON LA CIUDAD SECRETA

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DANIELLE ALEXANDRA VERSTEEG GONZÁLEZ.

TEA ST ILTON: LA CI UDAD SECRETA. AUTOR: TEA ST IL TON. ED I TOR IAL: DEST I NO. PERSONAJES: EL CLUB DE TEA, EL PROFESOR CUANTOC HANCHA, Y SU H I JO GONZÁLO . RESUME N Tea recibe un e-mai l de Paulin a que le explica que ha ido a Perú con el Club de Tea par a buscar a l hijo de el profesor Cuantochancha que ha desapa recido. En ese momento deciden i r a buscarlos a los Andes. Cuando están a l l á a r r iba, l lega un cóndor y l as asusta con sus gritos. M ás ta rde ven que al cóndor se le ha caido un pluma de cuervo y aceite de motor. Cuando el cóndor l as asusta, ellos se separan y uno de los grupos encuentr a a Gonzálo en una cueva a l esconderse. Después, todos salieron de l a cueva y se encotra ron a l as demás, que estaban con el profesor Cuantochancha. Cuando van a celebra r que todos están juntos, se dan cuenta de que sus provisiones desaparecieron con l as l l am as. Después, el club de Tea encuentra l as l l amas y mient rás, Gonzálo le dice a su padre quienes fueron sus agresores y quienes le roba ron los cuadernos. Fueron Paco M an adunca y sus hombres. Entonces, todos se preguntaron que tení an que ver un “cóndor” (que en real idad era un avión cubierto de plumas par a espanta r curiosos de l a ciudad secreta) y Paco M an adunca. Tenían que ver porque M an adunca era quien estaba espantando a los curiosos con el cóndor par a encontra r l a ciudad secreta. El los estuvieron un r ato caminando hasta que escucharon los gritos de Man adunca en l a pu rta del Sol. Escucharon que M an adunca y sus hombres querí an ti r a r l a puerta abajo. No pudieron porque el club de Tea les tendieron una tr ampa. Después, el club logró entra r a l a ciudad secreta pero era un l aberinto. El los no sabian como saber hacia donde i r pero a Paul in a, (del club de Tea) se le ocur r ió que podían usa r una cuerda par a recorda r el camino. A medio camino, se crea un agujero y el club de Tea se separa de los demás. El club se perdió pero encontra ron el tesoro t ras una puerta falsa. El verdadero tesoro no era oro y plata; eran vasijas, tela res, instrumentos y conocimientos. Los demás, pensaban que lo habían encontrado pero en rea l idad era un tobogán gigante, cayeron y l legaron fuera de l a ciudad. D í as después, volvieron a Ratford, (su universidad). OP I N I Ó N PERSONAL Este l ibro no me ha gustado porque tiene a lgunas letras muy grandes y es muy corto. Pero eso sí, es muy divertido y aventurero.


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