6 minute read

El secreto de cómo manejar la frustración en la vida diaria

Cuidar de tu salud es algo que debes

de hacer diariamente. Déjame decirte que no es tarea fácil, especialmente para todas esas mujeres que llevan una vida muy ocupada. ¿Pero cuál es el secreto? muchas se preguntan… ya que ven a otras mujeres muy seguras de sí mismas y sin ningún problema frente a ellas. Te platicaré acerca de unos secretos que yo he experimentado y me han ayudado a cuidar de mi salud como se debe, especialmente en cómo manejar mi frustración ya que es algo muy difícil de hacer. Primero, déjame explicarte que es la frustración. Según Anna Garrida en el artículo intolerancia a la frustración (2020), la frustración es un sentimiento de tristeza y de desilusión al no poder satisfacer una necesidad. Ante este tipo de problema las personas suelen responder con ansiedad, enojo e ira, ya que la necesidad que había sido planteada no pudo satisfacerse. Ahora dime, ¿no reaccionarías de la misma manera al saber que con tu vida ocupada lo último que quisieras es lidiar con un problema que pensabas que ya estaba resuelto? ¡Por supuesto que sí! La frustración es un sentimiento difícil de controlar, y es algo que toma control de nuestras emociones y hace que las cosas parezcan más grandes de lo que realmente son.

Advertisement

La frustración puede categorizarse como una acción instintiva. Es decir, el cuerpo adapta la señal que la mente está dando y así actúa, no da tiempo para hacerlo reversible sino a actuar en ese momento por instinto. Entonces ¿cómo afecta esto a nuestro diario vivir? Cada persona actúa diferente ante circunstancias o problemas, y es igual al como manejan las emociones. Cuando una persona está enojada o frustrada automáticamente el problema afecta tanto la vida personal, emocional y profesional, entre otras cosas. Afecta la vida personal cuando dejamos que el estrés cambie nuestra rutina diaria. Por ejemplo, en vez de continuar con nuestro día, permitimos que la frustración tome espacio en otras áreas, ahora ya no estamos enojadas con nosotras mismas, sino también con el esposo, hijos, amigos y hasta los vecinos. Tendemos a tomar la frustración como algo personal cuando debería de ser algo pasajero; un problema que no debería de afectar tanto. También afecta nuestra vida emocional, ya que al estar frustradas, nos sentimos también enojadas, emocionales e insatisfechas. Puede llegar a deprimirnos y podemos llegar a pensar en que no servimos para hacer las cosas bien. Así mismo en el

área laboral y profesional, ya que no podemos enfocarnos en otra cosa porque seguimos pensando en lo enojadas que estamos, como consecuencia esto puede afectar en cómo nos desempeñamos en nuestro trabajo y en cómo nos ven los demás.

Con nuestras vidas ocupadas, y con pocas energías después del trabajo se nos hace difícil tomar tiempo para hacer cosas que podrían ayudarnos a liberar el estrés y por supuesto la frustración que tenemos. Como he dicho antes, para poder llegar a entender cómo manejarla tenemos que poner mucho de nuestra parte, debido a que es una emoción difícil de manejar. La tarea no será fácil, pero tampoco es imposible. Para poder entender un poco más acerca de la frustración tenemos que ver si tú eres de esas personas que tiene baja tolerancia a ella, de esta manera será más fácil encontrar el problema y resolverlo. Según el artículo escrito por Anna Garrida (2020) algunas razones por la cual tenemos intolerancia hacia la frustración pueden ser:

1. ¿Eres una persona impulsiva, que actúa antes de pensar las cosas?

2.¿Buscas satisfacer tus necesidades de forma inmediata, sin pensar que esperar puede ser la mejor solución por el momento?

3.¿Tienes dificultad a controlar tus emociones, y sientes que desarrollas depresión y tristeza con algún mínimo problema?

4. ¿Tienes alguna motivación después de sentirte frustrada, o te sientes desmotivada aún antes de afrontar el problema?

5. ¿Sientes que no eres capaz de realizar algo debido a que piensas que después de tu problema no serás capaz de afrontar nada más?

¡Déjame decirte que no estás sola! La frustración afecta a muchos, ha sido así por muchos años y hay factores que hacen que afecte tu vida mucho más que a otros. Por ejemplo, puede ser que no tengas un buen autocontrol y que sea difícil poder controlar tus emociones. Otro factor muy importante es el temperamento y el carácter de una persona, ya que si eres una persona que tiene un temperamento fuerte no sabrás como tolerar la situación y se hará más fácil el mostrar la frustración. Entre otros más, como una idea errónea de algo que pensabas que estabas haciendo bien, pero resulta que eso a ti no te ayuda como a otros. Como he explicado antes, las circunstancias de las personas son muy diferentes a las de ti misma, nunca te compares o pienses que estás haciendo las cosas mal, al contrario, no

te rindas y busca maneras de poder controlar tus emociones para que en un futuro la frustración no sea más fuerte que tú y sea fácil de controlar (Garrido. A, 2020).

A continuación, te daré consejos y técnicas que son muy fáciles de realizar para que tú puedas aprender a controlar la frustración. Primeramente, tienes que saber que la relajación sirve de mucho en esta situación. Cuando permites que tu cuerpo se relaje, tu mente y tus emociones también lo

harán ya que estas en un momento de tranquilidad y cosas positivas pasan por tu mente. Sé lo que estás pensando… ¡Cuando te sientes frustrado no tienes tiempo para relajarte! En eso te quiero ayudar hoy. Quiero que seas capaz de controlar esa emoción que

no te deja ser tú misma y que ha afectado tu vida.

1. Cuando tú sepas que la situación que estás pasando te pone frustrada y de mal humor, de inmediato tienes que irte a un lugar más tranquilo y quedarte ahí por un par de minutos. Respira profundo por 10 segundos mientras tu cuerpo empieza a relajarse y a pensar en lo que podrías hacer para mejorar cierta situación.

2. Si estás sola después de un largo día, enciende tus velas o inciensos favoritos. El oler algo que te guste ayudará a que tu cuerpo sepa que todo estará bien, más si son olores conocidos.

3. Prepara tu comida o bebida favorita, consiéntete tú misma y entiende que todo tiene solución, tal vez fue un mal día, pero nada más.

4. Prepárate una ducha con agua tibia, inserta pétalos, sales minerales o lo que tu desees para que puedas relajarte e intenta disfrutar de ese momento.

5. Haz ejercicios para controlar tus emociones como hacer notas en un cuaderno, diario personal, o reflexionar acerca de lo que está ocurriendo y de situaciones similares que han pasado mientras piensas en lo que podrías mejorar para la próxima. También puedes platicar con alguien que sepa más del tema o con alguien que está pasando por la misma situación.

6. Intenta ser más comprensiva, más tolerante y también paciente contigo misma. Comprende que en la vida habrá altos y bajos momentos y que esa no será la única vez.

La verdad es que… no hay secreto para manejar la frustración, ya que todas somos diferentes y tenemos vidas diferentes. Pero déjame decirte que espero que con los consejos y técnicas que he escrito pueda ayudarte a aumentar tu tolerancia y manejar de mejor manera la frustración. Yo he practicado esas técnicas en más de una ocasión y sé que ayudan en gran manera. Lo más difícil es comenzar y seguir con el proceso. Pero cuando te acostumbres, verás que es sencillo. No será algo que aprenderás de una vez, sino con el tiempo. Mientras más ejercicios hagas y aprendas a cómo controlar tus emociones, comenzarás a ver los resultados. Recuerda que necesitas tiempo para ti misma y tu salud, no permitas que un problema o situación afecte tu vida entera. ¡Espero estos consejos te ayuden!

Rocio Larios