LAS CASAS DE FEDERICO PINTURAS DE ROSA MARÍA UNDA SOUKI
Casa Museo Federico García Lorca Federico García Lorca fue un poeta, dramaturgo y prosista español, también conocido por su destreza en muchas otras artes. La casa museo está abierta al público. El patio es muy característico. Dentro de la casa podemos observar cuadros bordados y mobiliario que todavía se conserva. Mi punto de vista es que las cosas siguen ahí tal y como estaban pero tu presencia no. El recuerdo permanece en lo que dejamos.
Cuadros en casa de Federico, en Fuente Vaqueros. Este es el primer cuadro en el cual Federico hizo la tela y una amiga le bordó el dibujo. En la casa no se podían hacer fotografías me las ingenié para realizarlas a escondidas.
SEGUNDO CUADRO QUE HABÍA EN LA CASA Podemos observar la fecha en la cual se realizó .
ESTE ES EL TERCER Y ÚLTIMO CUADRO
Viaje a Nueva York De su viaje y estancia en Nueva York surge el libro Poeta en Nueva York. En la casa museo existe una exposición dedicada a New York. Hay desde pinzas simulando los grandes edificios hasta los barrios más conflictivos de esta ciudad. Esta sala me pareció muy interesante los cuadros reflejaban todo lo que es “New York”. Y lo que más me llamó la atención fue las “pinzas de ropa” simulando los rascacielos “neoyorquinos”; el efecto era impresionante.
Exposici贸n sala Nueva York
Las ventanas son peculiares ya que en los cristales se observa partes del cuerpo humano.
Se observa pinturas en los muros
Exposición Rosa María Unda Souki EFE una exposición de quince óleos sobre tela y una cuarentena de dibujos de la artista venezolana Rosa María Unda Souki explora las tres casas que marcaron la vida del poeta Federico García Lorca. Profundizar en este universo le hace reflexionar sobre su propia relación con el espacio y en este sentido, recuerda que es “a partir de lo particular como uno puede hablar de lo universal”. Con un estilo figurativo y alguna influencia “naif” reconocida por la artista, las obras muestran perspectivas “nada ingenuas” de los espacios donde habitó Lorca, con un uso intencionado del lápiz para recordar al mismo tiempo los propios dibujos del poeta.
Como el comienzo de cualquier aventura, las obras de Rosa María Unda Souki sobre Las casas de Federico nacen de una pregunta. Detrás de ellas está el deseo de explicarse el contraste entre dos aspectos de la personalidad artística de Lorca: “el poeta y dramaturgo, capaz de traducir las emociones más densas y viscerales del ser humano, y el artista dibujante, capaz de trazar lúdicas líneas y figuras de una increíble ligereza y de una infinita ternura infantil.” Su interrogación sobre los referentes visuales, la frescura y el colorido de la paleta de Lorca desemboca en un viaje: Rosa descubre Granada y visita las casas de Valderrubio, de Fuente Vaqueros y de la Huerta de San Vicente - convertidas en Casas-Museo para comprender el telón de fondo sobre el cual se ha construido, del cual se ha nutrido o, a veces, alejado Federico García Lorca. Y, a su vez, el viaje acaba plasmándose primero en unos ágiles apuntes de acuarela para luego dejar paso a unos sutiles y elaborados óleos que retratan las casas y sus habitaciones desde hace tiempo deshabitadas y, sin embargo, vivas de antiguas presencias.
Visión objetiva Más allá de la inevitable y necesaria reinterpretación poética de las casas de Federico, en los cuadros de Rosa hay pues también una dimensión histórica y sociológica. Los infinitos detalles pintados con mano paciente y escrupulosa son otras tantas pequeñas informaciones, pequeñas piezas del gran puzle constituido por la figura de Lorca, sus lugares y hábitos de vida, su familia Sin embargo, estos retratos hechos de habitaciones, intimidad y objetos cotidianos no son nunca claustrofóbicos. Gracias a la utilización de originales formatos y singulares perspectivas, la artista consigue evitar el peligro de encerrar al espectador en las habitaciones que ha pintado, regalándole la inaudita posibilidad de volar en un interior o contemplar cada objeto colgando de un fanal. Asimismo, Rosa logra preservar el aura de misterio que envuelve al personaje de Lorca. En todas sus representaciones de interiores, siempre hay un espacio de fuga, una ventana, un pasillo, una escalera, una puerta entreabierta o un espejo que sugiere lo que no se ve e insinúa que no se ha dicho ni visto todo, que siempre queda algo en la sombra por desvelar.
EXPOSICIÓN
Reflejada en los cuadros
OTRA PERSPECTIVA
Sentimientos en la exposici贸n.
Visión subjetiva sobre la exposición Me pareció una exposición interesante. También fue la primera vez que visito una exposición para tal fin. Los cuadros son una manera diferente de ver las casas. Para mi transmitían una vista desde lo mas arriba dando sensación de que las habitaciones eran inventadas, ya que muchos cuadros tenían forma redonda. La pintura daba una sensación de realismo aunque la mirada desde arriba dijera lo contrario. Por la manera de ver las habitaciones podemos destacar quien habita en ella y la forma de ser del individuo. Cabe destacar el colorido y frescura de los cuadros dando sensación infantil.
ADAPTACIÓN DIDÁCTICA Para ver de manera diferente el arte planteo poner al alcance de los alumnos de primaria llevarles a una exposición. Esto implica una filosofía educativa centrada en el alumno, poniendo el acento en los procedimientos pero sin descuidar los contenidos. Se trata de trabajos de investigación en los que el alumnado trabaja directamente con la documentación, aprendiendo a aprender y a trabajar autónomamente. Como profesora durante unos días previos investigamos y leemos lo que veremos en el museo. Me interesa que los niños desarrollen capacidades visuales y conozcan la relación entre el Arte y la sociedad.