Valparaíso 30 de noviembre de 2015
Señor: Luis Almagro Secretario General de la Organización de Estados Americanos Presente
Junto con saludarle, el motivo de la presente es para manifestarle nuestra más absoluta preocupación por el grado de intervención que desde la Organización de Estados Americanos se está haciendo en contra de la República Bolivariana de Venezuela. Consideramos que desde que usted asumió el liderazgo de la OEA, esta organización ha dado un vuelco en las relaciones diplomáticas, asumiendo una actitud nunca antes vista contra el mencionado país, que por estos días se encuentra inmerso en la campaña electoral previa a las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre próximo. En ese contexto, usted, de una forma inédita, sin precedentes y sin preguntarle a ninguno de los 35 países que conforman su organización, le envió una extensa carta a la señora Tibisay Lucena, presidenta del Consejo Electoral Nacional venezolano, CNE, en respuesta a que no fue aceptado su obcecado ofrecimiento de enviar una misión de observadores para los comicios. Lo que usted hace, utilizando su cargo de Secretario General, es cuestionar el trabajo que realiza el Poder Electoral de un país soberano, argumentando con datos proporcionados por la derecha venezolana, los mismos que hoy forman parte de una campaña internacional que busca derribar al gobierno del presidente Nicolás Maduro. Esto no sólo pone en tela de juicio el incuestionable profesionalismo del CNE, sino que apunta a deslegitimar a todos los poderes del Estado. Por ello, creemos que es incoherente pedirle a un país de una forma tan insistente que lo invite para “fiscalizar” sus elecciones cuando usted a priori ha insultado el rol que juega el Consejo Electoral, cuestionando el trabajo que realiza su presidenta y dejando en entrever que este organismo no estaría ejerciendo su rol como usted quisiera, dejando además, a través de su carta, un manto de dudas sobre que no existiría transparencia en el proceso. Señor Almagro, usted en su misiva de 18 páginas a Tibisay Lucena, cuestiona la democracia venezolana al señalar que “las condiciones no están garantizadas al nivel de transparencia y justicia electoral…”.
Todo lo anterior se basa en que la OEA esta vez no conforma la lista de observadores internacionales, como sí lo ha hecho en otras 11 de 19 ocasiones. Curiosamente la OEA nunca se enteró de los muertos votantes, de los multicedulados y del “acta mata votos”, prácticas harto conocidas hasta 1999. ¿Lo niega usted señor Almagro? Es insano que tome partido y exprese una crítica tan destemplada sobre el sistema y proceso electoral venezolano, teniendo en consideración además, que esa organización ha participado en numerosas ocasiones en esos comicios, los conoce desde adentro y sabe de su inviolabilidad y transparencia. Usted aboga que con su actitud pretende “velar por la justicia y la transparencia de las elecciones”, sin embargo, permítanos indicarle que con su actitud cae en la arrogancia, pues se arroja la categoría de “supervigilador” electoral, como si fuera la OEA el único organismo capacitado para realizar un trabajo objetivo de observación. Cabe destacar que el CNE es un organismo autónomo y no depende de ningún otro poder del Estado, esto es un motivo más que viene a garantizar la transparencia del sistema. A esto se le suma que Venezuela es uno de los pocos países que tiene incorporada la figura de acompañante electoral, no así países como EEUU, Chile, Canadá, Brasil, Uruguay Barbados y Trinidad y Tobago, todos miembros de la propia OEA. Sin embargo a todo lo anterior, y ante el manto de dudas que han querido expandir para intentar desacreditar las elecciones, es necesario aclarar y resaltar que para los próximos comicios sí habrán misiones de Acompañamiento Internacional y que, de hecho, ya están trabajando y observando el proceso y sus respectivas auditorías. Para ello el CNE ha invitado a integrantes de la Unasur, del Mercosur, de la Celac, del ALBA, del Parlatino, del Parlasur y al Consejo de Expertos Electorales Latinoamericanos (CEELA). Junto con ello, también están consideradas autoridades electorales de países con los que el CNE mantiene acuerdos de cooperación; es decir, en diciembre habrá también delegaciones de Rusia, India, Filipinas, Mali y Corea del Sur. Por eso, señor Almagro, es difícil entender que con la extensa trayectoria diplomática que usted tiene, no puede ser que no considere que al colocar este manto de dudas sobre las elecciones, no solo está desacreditando a Venezuela, sino que también lo está haciendo con las organizaciones que van a acompañar las elecciones, como por
ejemplo la UNASUR, organización que usted bien conoce, la que además, usted mismo ayudó a consolidar.
Es por eso que teniendo antecedentes objetivos y contundentes sobre las potencialidades del sistema electoral venezolano resulta extraño sindicar a esta instancia como poco transparente o acusarla a priori de fraude. Este tipo de comentarios no son más que opiniones llenas de ignorancia o basadas en una campaña internacional que busca caricaturizar a uno de los mejores sistemas electorales del mundo. ¿Por qué el CNE debería invitarlo? ¿Porque usted dice que le da garantías a la oposición? Y ha pensado si es que la OEA le da garantías a los partidos y candidatos oficialistas, luego de todas sus declaraciones que apuntan a cuestionar al gobierno y su Presidente?. Consideramos que una vez que usted decide tomar partido, en este caso por la derecha venezolana, eso inhabilita a su organización para proceder a observar una elección de manera imparcial. Por otro lado, hay varias imprecisiones y falsedades en su carta que nos gustaría aclarar porque sus percepciones, desde el cargo que ostenta, no provienen de una persona ignorante, en consecuencia, se dibuja una clara intencionalidad. En su misiva, además de cuestionar al Poder Electoral, también desliza críticas a los procedimientos de otros organismos públicos, lo que constituye peligrosamente en una injerencia pretendiendo debilitar a nivel internacional la imagen de un país democrático, cuyo pueblo ha decidido soberanamente optar por un modelo diferente al que usted beneficia con sus insólitas posturas. En su carta hace un férreo cuestionamiento y nombra a siete integrantes de la oposición que hoy no pueden ejercer cargos públicos, haciendo, nuevamente, una crítica a los procesos y resaltando que estas prohibiciones “solo operan para dirigentes opositores”. Esa no es la verdad Sr. Almagro y usted bien lo sabe; es necesario aclarar que sus afirmaciones son parcializadas y carecen de objetividad. Usted, por algún motivo, no narra la información completa, pues la Contraloría General de la República ha sancionado a cientos de personas, entre los cuales no sólo hay militantes de los partidos de la oposición, sino que también del propio oficialismo en donde podemos ver a ex gobernadores, a ex alcaldes a ex ministros, viceministros, así como también a otros altos funcionarios de partidos del oficialismo. Y esto usted lo omite.
Como ejemplo a lo anterior, ya que usted se toma el tiempo de entregar el listado de 7 opositores inhabilitados, le mencionamos a otros de las filas del chavismo como el ex Ministro de Finanzas, Tobías Nóbrega; el ex Ministro de Defensa, Raúl Isaías Baduel; el ex Gobernador del estado Guárico, Eduardo Manuitt; el ex Gobernador del estado Sucre, Ramón Martínez y el ex Alcalde del municipio Valencia, Edgardo Parra. Así como también hay otros ex funcionarios del gobierno que están siendo investigados por presuntos hechos de corrupción y ellos también podrían quedar inhabilitados si se confirman los delitos de los que se les acusa. Como por ejemplo la ex Ministra de Salud, Eugenia Sader; el ex Ministro de Transporte Acuático y Aéreo, Hebert García y el ex Alcalde del Caroní José Ramón López. El caso de Leopoldo López es otro al que usted dedica gran parte de su carta para defenderlo con argumentos proporcionados por la oposición venezolana. Sin embargo, no pone ninguna línea en la misiva respecto al fondo de la detención. Es este asunto el que considero céntrico en su carta. Allí concuerda usted plenamente con la derecha continental. ¿Se ha tomado usted unos minutos para escuchar a las víctimas de la violencia en 2014? Cabe destacar que López fue condenado mediante el debido proceso, por los delitos de incendio intencional, instigación pública, daños a la propiedad pública y asociación para delinquir con las agravantes de la Ley Orgánica contra la delincuencia organizada y financiamiento al terrorismo; esto en relación a los lamentables hechos de violencia incitada por el opositor, que terminó con la vida de 43 personas, tras el llamado que hizo a movilizarse y a desconocer el triunfo electoral del presidente Maduro en 2014, y que el propio López denominó “La Salida”. Con el nivel de prontuario de López, en EEUU lo habrían condenado a la pena de muerte o cadena perpetua. Lo que pasó en Venezuela, tras la sublevación de la oposición, aparte de los lamentables fallecidos, entre ellos una compatriota chilena, provocó también desordenes desmedidos en las calles, incendios y destrozos en las oficinas de servicios públicos, de transporte y agresiones”. Por otro lado, usted vuelve a cuestionar al CNE indicando que junto con las “inhabilitaciones de los opositores” también la campaña electoral “arrancó con ajustes que podría afectar la cantidad de diputados opositores”. Al respecto, para despejar las dudas intencionadas que deja con sus afirmaciones, es necesario aclarar que los cambios en el número de diputados a elegir por las zonas electorales, se realiza de acuerdo al artículo 186 de la propia Constitución venezolana, en donde los diputados son electos en circunscripciones en base al 1,1% de la
población del país. Y los cambios van en directa relación con el aumento o disminución de la población en relación a las nuevas estadísticas del INE. Por ejemplo, en el Distrito Capital disminuyó la base poblacional, ya que parte de la población que vivía antiguamente en zonas de alto riesgo han sido reubicadas gracias a la Gran Misión Vivienda Venezuela-un gran logro del gobierno del presidente Madurorazón por la cual en esta elección parlamentaria elige un diputado menos que en 2010. En la Isla Margarita y en el Estado Guárico la población también se incrementó, por lo que cada uno ha ganado la posibilidad de elegir a un Diputado más en relación a los anteriores comicios. En cambio, el circuito 2 del estado Miranda que disminuyó su población por el cambio de miles de sus habitantes hacia otras regiones, elegirá un diputado menos respecto a las parlamentarias de 2010. Todo esto apegado a la propia Constitución, que usted, de paso, también critica. Nos preocupa, reiteramos, el nivel de parcialidad que ha tomado la OEA durante su mandato, ya que lo que hace no es sólo cuestionar un sistema sino que intenta a través de duras imputaciones de tratar de debilitarlo y de deslegitimarlo, misma línea que sigue a diario EEUU. ¿O no será que aquí hay un plan orquestado, en coordinación con la derecha venezolana para crear un escenario de tal desprestigio internacional que les permita el 6 de diciembre desconocer las elecciones para luego justificar una posible intervención? Consideramos que desde su rol, no sólo debería replicar de otra forma los cuestionamientos que realiza la derecha venezolana, sino que debería ser de su máxima preocupación el nivel de agresividad con la que la derecha internacional está actuando en el exterior en contra del gobierno del presidente Nicolás Maduro. No caiga usted en sumarse a la ola de críticas que la derecha venezolana difunde a nivel internacional: golpear al oficialismo, debilitar con mentiras las instituciones públicas de Venezuela; crear un falso ambiente de poca transparencia del sistema electoral. Su rol, al menos el que esperamos que asuma, es el de evitar este tipo de expresiones contra un país democrático y no sumarse desde la galería levantando sólo la bandera de la derecha venezolana, que lo único que busca es derrocar al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Reciba nuestros saludos, con la expectativa de un cambio en su enfoque hacia el gobierno electo de Venezuela
Camila Vallejo Diputada de la República de Chile
Hugo Gutiérrez Diputada de la República de Chile
Alejandro Navarro Senador de la República de Chile