ERTIBIL
(...) Recuerdo cuando en los agujeros de los ladrillos, iluminados por el sol, se dejaban ver las telarañas, en forma de túnel, que nos llamaban la atención y de una forma incontrolable tomábamos una paja del suelo para hacerles sentir que una mosca o insecto cualquiera había caído en la red. Rápidamente salía la araña, y tan rápida como salía, volvía a entrar al ver que lo que allí pasaba no era la llamada al banquete sino una niña jugando en el sol de agosto. (...) Extracto de Pensamos demasiado, sentimos poco. Quizá haya que hablar menos y hacer más. Catálogo Ertibil 2017
ECOS ikus-entzunezko irakurketa topagune bat da, non dokumental, laburmetrai eta bideo-lanen bitartez Rekalde Aretoko erakusketen gai nagusiak jorratzen diren. ECOS es un encuentro de lectura audiovisual donde a través del visionado de documentales, cortometrajes y piezas de video-creación, se exploran los temas principales de las exposiciones de Sala Rekalde. ECOS is an audiovisual reading gruop in which, through documentaries, short films and video creation pieces, we explore the main themes of the exhibitions at Sala Rekalde.
Sala Rekalde / Alameda Recalde 30, 48009 Bilbao / Tel: +34 94 406 85 32 /Fax: +34 94 406 87 54 / http://www.salarekalde.bizkaia.net/
Son todos los que están… no están todos los que no son: Eriz Moreno Aranguren; Triglav 04:00 min. Inés García; Corridor 2:31 min. Raquel Durán & Rut Briones, Barruan eta Behean 03:51 min.
(...) Se cuenta que la eminencia roja quiso centralizar el Poder. Que mientras Europa se diezmaba en la Guerra de los 30 años, el Cardenal Richelieu formó la Academia francesa. En ella, años más tarde, su sucesor fundaría la Academia de Bellas Artes. Que el mismo Luis XIV la visitaría a fin de poder decorar Versalles. Se cuenta, también, que para influir a la alta cultura, este rey Sol permitió abrir el Salón de París. La exposición oficial de la Academia fue todo un símbolo del favor real. Y se fue haciendo una costumbre regular. Y se fue haciendo costumbre pública. Y crecía cada año. Y se colgaban marcos, pinturas, desde el techo hasta el suelo. Y se introdujo el jurado. Y se colgaban medallas en los retratos, mientras que en las calles de la ciudad, en tiempos de revolución, se colgaban las cabezas de los señores. Pero el Salón no tembló. Y se siguieron colocando más piezas todavía. Y tantas, que no entraban. Y, ¡habrá que rechazar!, dijo uno. Pues este que anda muy suelto... Pues este que no cumple el canon... Y cada vez más eran los sueltos y más las protestas. Y Courbet pasó de todos y se independizó. Y Napoleón III se asustó. Y para probar que había democracia en las elecciones del Salón, abrió el Salón de los Sueltos o Rechazados, algo así se cuenta. Y que a Hitler le gustó la idea y le dio por comisariar “Arte Degenerado”. Se cuenta que esta fue la exposición más visitada de toda la historia. Que a todos les gustaba ver qué era lo que no tenían que hacer. (...)
De manera juguetona, Ecos#13 hace eco sobre aquel Salon des Refusés, sobre aquel intento de visualizar un espacio off, un fuera de campo que en primera instancia vendría a salvaguardar el encuadre al darnos una percepción total del panorama. Un intento de objetualizar, al hacer marco y dar cuenta de sí a través del otro rechazado. Por suerte, algo no llegó a funcionar. Pues el concepto panorama no significa “todo lo que se ve”, que podría calmar por referir a su vez a una cierta mirada, un punto o coordenada cartesiana contra la cual se podría atentar. Sino que etimológicamente panorama refiere a la “visión total”. Y claro, una <total visión total>, no hay dios que la entienda.