HOMENAJE
Mujeres que inspiran Son cinco mujeres que hacen honor al género femenino, que ocupan lugares en ámbitos públicos o privados y que hacen su trabajo diario con pasión y compromiso. Por esa razón desde la revista OCIO quisimos homenajearlas durante el Networking de Mujeres: porque estamos seguros de que sus historias son fuente de inspiración para todas. Por Laura Moreno Ocampo. Fotos: Fino Pizarro.
Perla Senesi Vicepresidenta de la Fundación Oncológica Córdoba (FOCor)
“Siempre me ha gustado el trabajo solidario”
S
u trabajo está enfocado en la contención psicológica de los enfermos con cáncer que llegan al Hospital Oncológico Provincial. En la mayoría de los casos se trata de pacientes con bajos recursos económicos, no mutualizados y con trabajos informales. En el ámbito de la prevención hacen dos campañas anuales en la vía pública: contra el cáncer de mama, mamografías para mujeres entre 40 y 70 años, y papanicolau, para la prevención del cáncer de cuello de útero. ¿Cuáles fueron sus motivaciones para crear FOCor? Fue el Dr. Martín Alonso (director del Hospital Oncológico Provincial) quien me invita a fundarla en el 2008. Somos un equipo pequeño pero con mucho compromiso. Aquí quiero destacar a todos los integrantes porque médicos, psicólogos y hasta el personal administrativo del Hospital le ponen mucho amor a la tarea. Contamos con cursos de yoga, relajación, un taller de belleza, que les sube muchísimo la autoestima a las mujeres y un Banco de Pelucas. Para nosotros la contención psicológica del paciente es tan importante como el tratamiento médico. ¿Por qué elige el cáncer como destino del trabajo solidario? En mi familia he tenido muchos casos de cáncer, algunos tíos y hasta un hijo mío tuvo cáncer. Siempre me ha gustado la actividad solidaria aunque no entraba en mis proyectos algo referido a esta enfermedad. Quizás me hubiese inclinado por trabajar para los chicos, pero cuando uno tiene la determinación interior de ayudar, se da la posibilidad de hacerlo. Siempre es más lo que se recibe que lo que se da, sobre todo en la experiencia de los talleres. ¿Hay prejuicio con los enfermos de cáncer? Sí, hay discriminación, con la cuestión de seguros sociales la persona puede quedar con alguna debilidad. Por ello otro de nuestros objetivos es buscar una solución para el tema económico. Muchos de los pacientes que se atienden acá tienen trabajos informales en los que tienen que poner el cuerpo. Con su enfermedad tienen que dejar de trabajar y a veces son la única fuente de ingresos. Una mujer a la que le sacan el pecho, puede quedar resentida en uno de sus brazos y su rendimiento inevitablemente baja, pero esa persona con su experiencia tiene la capacidad de dirigir a otras. Nuestro anhelo es hacer talleres de trabajo para recapacitarlos y que de alguna manera se puedan reinsertar en el ámbito laboral o tener las herramientas para crear microemprendimientos de grupo.
OCIO68
¿Con qué sueñan en la Fundación? Nos gustaría tener un lugar para la gente que viene a tratarse del interior, también para los enfermos terminales, una especie de hospital o un espacio para que se puedan quedar, hacer el tratamiento y recuperarse bien.