Cantar de mio cid

Page 1

Cantar de mio Cid


Índice 1.Presentación. 2.Argumento y estructura. ❏ ❏ ❏

Primer cantar. Segundo cantar. Tercer cantar.

3.Características y Valor histórico. 4.Autor y fecha. 5.Estudio. 6.Curiosidades.


1.Presentación El Cantar de mio Cid es un cantar de gesta anónimo que relata hazañas heroicas inspiradas libremente en los últimos años de la vida del caballero castellano Rodrigo Díaz el Campeador. Se trata de la primera obra narrativa extensa de la literatura española en una lengua romance.


El poema consta de 3735 versos de extensión variable (anisosilábicos), aunque dominan versos de 14 a 16 sílabas métricas. Los versos del Cantar de mio Cid están divididos en dos hemistiquios separados por cesura. La longitud de cada hemistiquio es de 4 a 13 sílabas No hay división en estrofas, y los versos se agrupan en tiradas, es decir, series de versos con una misma rima asonante.


2.Argumento



Cantar primero: El destierro del cid El rey de Castilla Alfonso VI mandó al Cid a Andalucía a cobrar las parias o tributos de los reyes moros de Córdoba y Sevilla. Almutamiz, rey de Sevilla, estaba en guerra con Almudafar, rey de Granada, a quien ayudan el conde García Ordóñez y otros nobles castellanos. El Cid, amparando a Almutamiz, vasallo del rey . Vuelto Rodrigo a castilla con las parias, los enemigos lo indisponen con el rey, y éste lo destierra. Estos hechos no aparecen en el poema, que empiezan con la despedida del Cid, de vivar y su palacio, yermos y desheredados”. Luego se dirige, con los vasallos que lo siguen, a Burgos, donde nadie osa recibirlo, por haberlo prohibido el rey, según lo explica una niña.


Se detiene por unos momentos en la catedral de dicha ciudad, y prosigue después su camino hacia el monasterio de san pedro de Cerdeña, donde están su mujer, doña Jimena, y sus hijas, niñas aún, doña Elvira y doña sol. En Cerdaña se despide de éstas, que quedan confiadas al abad don sancho. Tima a unos judíos, Raquel y Vidas, menospreciando a los judíos.Y sigue en marcha forzada hasta la frontera de castilla, pues están por expirar los nueve días de plazo por el rey. Ya en tierra de moros, el Cid entra en guerra con ellos, a los que gana las ciudades de Castejón y Alcocer, y avanzando en sus conquistas hacia Teruel y Zaragoza, llega hasta el condado de Barcelona, donde vence y toma prisionero al conde de dicho lugar, don Ramón Berenguer, ocasión esta en que ganó la famosa espada Colada. Después de tenerlo tres días en su poder y ante la decisión de éste de dejarse morir de hambre, el Cid convenció para que comiera a cambio de la libertad, así el cid lo puso en libertad.


Cantar segundo: Bodas de las hijas del cid El Cid se dirige luego hacia el mediterráneo, tomando la costa entre Castellón y Murviedro, y ganando después la ciudad de Valencia. También vence al rey moro de Sevilla, que había ido en auxilio del de Valencia, y previo permiso del rey, a quien había enviado varios presentes de caballos, lo que prueba su condición de buen vasallo, más tarde vence al rey de Marruecos, Yusuf que había ido a recuperar a Valencia.


Son tantos los triunfos del Cid, que sus enemigos sienten acrecentar su envidia, y dos parientes del conde García Ordóñez, los infantes de Carrión, don Diego y don Fernando, desean casarse con sus hijas, codiciosos de las riquezas del héroe. El Cid no ve con gustos estos casamientos, pero requerido por el rey, accede lleno de recelos, y se dirige con los suyos a Valencia, donde las bodas se realizan con grandes fiestas que duran quince días.


Cantar tercero:La afrenta de corpes Los infantes de Carrión han revelado su cobardía en varios episodios: el miedo de los infantes ante un león del Cid, escapado de su jaula, y la huída del infante don Fernando, al ser embestido por el moro Aladraf. El Cid, en cambio, va de triunfo en triunfo, y gana la espada tizona en un famoso encuentro con el rey Búcar de Marruecos, a quien vence después de un magnífico combate individual.


Los infantes de Carrión deciden vengarse del Cid, a quien envidian, y se llevan a sus esposas a tierras de Carrión, deteniéndose en el robledal de Corpes, donde las vejan y maltratan brutalmente. Enterado el Cid de esta afrenta pide justicia al rey. Éste, dolido por la mala acción de los infantes convoca a las cortes de Toledo. En ella son condenados los infantes quienes se ven obligados a devolver las espadas Colada y Tizona, obsequios del Cid, a reintegrar la dote, ya consumida en parte, y batirse en duelo con vasallos del Cid. El poema termina con llegada de emisarios de los infantes de Navarra y Aragón quienes solicitan para ambos las manos de doña Elvira y doña sol.


CaracterĂ­sticas


Realismo histórico La epopeya española se basa en los hechos fundamentales de su historia: su fuente de inspiración son sucesos reales que están enmarcados dentro de un ambiente geográfico también real, con las deformaciones y ampliaciones propias de la epopeya. En “Mío Cid” la mayor parte de los acontecimiento se ajusta a la historia:el héroe, Rodrigo Díaz de Vivar, fue un personaje que se enfrentó al rey Alfonso VI y participó en la lucha contra los moros. Algunos historiadores señalan algunas incongruencias como en los nombres de las hijas del Cid, pero nunca se altera la historicidad del poema. El escenario geográfico es muy objetivo: los lugares señalados en el poema, trazan la ruta del Cid en un mapa de una España real


Tradicionalidad: Es uno de los caracteres que mejor diferencian la épica española de las demás. España no abandona sus temas épicos, los repite y los va actualizando a través del romancero, del teatro de todas las épocas y de la poesía lírica. Versificación: En todos los cantares de gesta españoles predomina la polimetría: los 3730 versos de “Mío Cid”oscilan entre 10 y 20 sílabas; están constituidos por largas tiradas de versos, todos con una misma rima asonante.


Valor nacional: La épica española refleja los valores que definen la España de su tiempo; en el “Mío Cid” se destacan los valores de la Castilla naciente, la lucha por la reconquista. El Cid sintetiza el valor caballeresco del momento; la organización social, el sentimiento cristiano, las relaciones entre señores y vasallos, ciertas costumbres, y, de manera especial, la guerra como oficio del caballero. Humanización del héroe: Carácter específico de la epopeya española. Sus héroes no son ligados a lo sobrenatural, no son semidioses, ni tienen poderes especiales: Rodrigo Díaz de Vivar es un ser humano que se ocupa de su familia, lucha y trabaja por ella. Sentido religioso: Siempre hay un fondo religioso en la epopeya española, reflejo de la profunda religiosidad del pueblo. Los cristianos invocan al apóstol Santiago y los moros a Mahoma. Los héroes le agradecen a Dios los favores concedidos y siempre acuden con plegarias a la Virgen y los santos en los momentos de necesidad.


4.Autor, fecha

Al final del manuscrito conservado del Cantar aparece la fecha de 1207 junto a la firma de un hombre llamado Per Abbat. en realidad, se trataría del nombre del copista del texto original, compuesto algunos años antes. No hay duda de que el autor era un hombre culto por su lenguaje y sus conocimientos jurídicos. Se piensa que el autor podría pertenecer a Teruel, Alcarria, Burgos o Soria


5.Estudio El más destacado fue Ramón Menéndez Pidal: (La Coruña, 1869 – Madrid, 1968) Filólogo e historiador español. Verdadero iniciador de la filología hispánica, creó una importante escuela de investigadores y críticos. Fue discípulo de M. Menéndez Pelayo en la universidad de Madrid, donde se doctoró en 1893. Miembro de la Real Academia desde 1902, presidió esta institución a partir de 1925. A través del Centro de Estudios Históricos (fundado en 1910) y de la Revista de Filología Española (1914) propició el surgimiento de una nueva generación de investigadores como Américo Castro, D. Alonso o García Solalinde. Durante la Guerra Civil se refugió en Cuba y Estados Unidos.


Curiosidades Aunque Rodrigo Díaz de Vivar apenas superaba los 150 cm de altura, la Historia demostró que fue un gigante en el campo de batalla. Con 14 años entró a servir en la corte de Sancho II y acabó siendo gobernante del principado cristiano de Valencia. En total estuvo luchando unos 35 años sin conocer la derrota. De ahí que sus hombres confiaran en él a ciegas. Incluso ganó batallas que se daban por perdidas. Sin embargo también se cuenta que fue un hombre conciliador, que intentaba solucionar los problemas hablando y agotando siempre hasta el último recurso antes de pelear. Prueba es que en tiempos de paz el Cid supo ser el mejor gobernante. Le encantaba vivir tranquilo con su esposa Jimena y sus hijas.



Bibliografía: ● http://es.wikipedia. org/wiki/Cantar_de_mio_Cid ● http://catedu.es/IESLiteratura/segundo% 20ciclo/cid_genero.html ● http://es.wikipedia. org/wiki/Ramón_Menéndez_Pidal ● Google images


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.