Revista 2384 - Número 5

Page 18

2384

JULIO SEPTIEMBRE 2013

VOCES Y SOMBRAS

18

FRAGMENTO DE LA NOVELA LA CONFESIÓN FLÁVIO CARNEIRO

Traducido por Sergio Colina Martín

Novela publicada en 2006 por la editorial brasileña Rocco, finalista del Premio Jabuti. Copyright @ 2006 by Flávio Carneiro

ESCÚCHEME, SEÑORA, POR FAVOR. En primer lugar, le pido disculpas por mis malos modales. Ya sé que no ha sido nada amable por mi parte haber intercepte a esas horas de la madrugada y haberle apuntado a la cabeza con un arma, ordenándole, o pidiéndole, depende del modo en que se vean las cosas, creo que le pedí que bajara del coche, aunque el gesto de apuntarle con un arma pueda indicar que se trataba de una orden, y no de una petición, puede ser, no vamos a discutir por naderías, de todos modos reconozco que no fui amable. Tampoco puede ser visto como una señal de buenas maneras el hecho de haber guardado enseguida el arma en la cintura, por dentro del pantalón, no, admito que no lo hice por arrepentimiento, por remordimiento, por esos sentimientos delicados, simplemente necesitaba tener las manos libres, hubiera sido imposible haber aplicado sobre su rostro asustado el pañuelo con cloroformo si no hubiera tenido las dos manos libres, y además me hacían falta también, las manos libres, para acomodar su cuerpo inconsciente en el maletero, por suerte no pesa mucho, es evidente que se mantiene en forma, que conserva su elegancia. También sé que no es nada educado, ciertamente los caballeros no hacen eso, no es nada educado atar a alguien a una butaca como esa, desde la que me mira con cara de quien no sabe dónde está, medio atontada, intentando examinar el entorno, girando la cabeza en busca de una pista, de alguna referencia, frunciendo las cejas en esta habitación en el fin del mundo, en la que pasaremos algunas horas hasta que le haya contado mi historia, de principio a fin. Espero por lo menos que, en la medida de lo posible, esté cómoda. Lo entiendo, tiene que ser un trastorno verse privada de repente de la compañía de su marido, de sus hijos, de su casa espaciosa, confortable, limpia, bien amueblada, bien gestionada, sí, todo eso lo entiendo, pero no piense que soy un hombre grosero, no, tengo modales, que lo sepa, aprendí gracias al tiempo y a ciertas mujeres a tener un gusto refinado. Espero que aprecie lo que tengo que contarle, ¿le gusta la butaca?, puedo conseguir algunos cojines si así lo desea, quiero que se sienta cómoda y que me escuche con atención, prometo esforzarme para que podamos aprovechar al máximo las pocas horas que compartiremos, puedo asegurarle que serán pocas, no se preocupe. Haré todo lo posible para que mi historia le resulte


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.