PROCLAMA 94

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EDICIÓN 94

ENTRE EL RAMPLÓN FRAUDE NACIONAL Y EL RAMPANTE DEFRAUDE UNIVERSAL NELSON JULIAN VILLAMIZAR♦ Pág. 2

COMUNICADO COMITÉ IMPULSOR MESA NACIONAL DE DISCAPACIDAD, ACUERDOS DE PAZ Y POSTCONFLICTO

LIZBETH RODRÍGUEZ A.♦ Pág. 3

RADIOPROCLAMATE CON EL TÍO MARCELINO

RAUL MORA♦ Pág. 3

AGENDA NACIONAL DE PARTICIPACIÓN DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD MESA NACIONAL DE DISCAPACIDAD♦ Pág. 5

A pesar de todo lo negativo, alcanzaremos la paz.

ACRÓSTICO PROCLAMANDO HASTA SIEMPRE Y HASTA PRONTO N.J.V. MAYALESU♦ Pág. 11

PROCLAMA ♦ 94 Pág. 5

EL GHETTO DE LA DISCAPACIDAD EN COLOMBIA

JAIME MAURICIO GAITÁN GOMEZ ♦

Pág. 6

CABILDOS ABIERTOS POR LA PAZ DE COLOMBIA

LA RENUNCIA DE JUAN CARLOS VÉLEZ

PARA ADOPTAR Y LEGITIMAR EL ACUERDO FINAL

FABIO MONROY MARTINEZ Pág. 7

COLOMBIA INFORMA ♦ Pág. 8

ANTONIO MADARIAGA♦ Pág. 9

La implementación de la paz: FAST-TRACK O SLOW-TRACK♦ ALBERTO RAMOS♦ Página 10


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Editorial

EDICIÓN 94

ENTRE EL RAMPLÓN FRAUDE NACIONAL Y EL RAMPANTE DEFRAUDE UNIVERSAL. Nelson Julián Villamizar

El espíritu humano avanza de continuo, pero siempre en espiral.

-Goethe-

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Periódico de las Poblaciones Vulnerables Director: NELSON JULIÁN VILLAMIZAR

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Diario La República

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ilósofos de la historia, antropólogos y tratadistas de las ciencias sociales y la política universal han creado doctrinas y escuelas de pensamiento para explicar los comportamientos tanto de individuos en sus complejidades sicológicas o psiquiátricas y de los pueblos o sociedades en sus conductas sociológicas como reflejo o gran impacto de sujetos psicóticos, que trascienden a modelos y procesos de la humanidad, regularmente cíclicos que tienden a repetirse. No se trata de un eterno retorno de todas las cosas, como decía Nietzsche. Es un volver a un estadio que se creía superado, pero ahora visto desde una nueva perspectiva. El movimiento histórico tiene forma de espiral: las idas y vueltas, las vueltas y revueltas de la vida de los pueblos. Ningún periodo tiene la última palabra, ningún periodo es el definitivo. No existe victoria final. Lo que hoy triunfa, puede caer mañana. Pero volverá a renacer más tarde bajo otro signo y así sucesivamente, la historia es un constante flujo y reflujo, avances y retrocesos, un continuo vaivén con un movimiento pendular, un mecanismo inveterado de sístoles y diástoles. La historia de los pueblos es una secuencia de flujos y reflujos. La humanidad avanza y retrocede, pero cada retroceso dispara con ímpetu la siguiente etapa de avance, que tampoco será definitiva y volverá a retroceder. Cuando una civilización o nación alcanza su apogeo, la comodidad degenera en lujo, el ingenio en falsa sutileza y se inicia así la decadencia. Todo vuelve al punto de partida, a los tiempos bárbaros. El avance histórico no es lineal, es vertical y espiralado, volver todo a un punto de partida. Pero este nuevo punto de partida ya no es el mismo que el anterior porque está en un estadio superior. La distinta evolución de estos periodos históricos no

son ocurrencias mías, ni mucho menos pretenden ser acomodaticias, soporto esta apreciación en tratados que comprobada validez, destacando científicos sociales que coinciden con esta sugerencia entre ellos Giambattista Vico, Montesquieu, Auguste Comte y Karl Marx, en los que he buscado como poder explicar lo que actualmente sucede en mi País y en gran parte del planeta. Nuestra Patria hace 80 años igual que hoy era dirigida por otros Santos, Echandías y Lleras, que en sus gobiernos y desgobiernos, justificada e injustificadamente por decepción e insatisfacción del pueblo indebidamente manipulado, dieron paso a la ultra derecha de Mariano Ospina Pérez y Laureano Gómez, igual que hoy desde los pulpitos los sacerdotes y pastores vociferaban, que pactar la paz con los rebeldes, llevarían nuestro País al infierno, que la guerra santa debía mantenerse para salvarnos de los comunistas y al igual que hoy en el planeta emergía como dantesca figura Adolfo Hitler con su jefe de propaganda Joseph Goebbels, desarrollando una impresionante estrategia de comunicación similar a la de Donald Trump en el imperio Yanqui. Esta tremenda maquinaria propagandística y sus influencias de adoctrinamiento, mentira y fraude social, ha sido copiada y ejercitada juiciosamente por la siniestra cúpula uribeña del auto denominado Centro Democrático y demás líderes que impusieron el no a la paz en el pasado plebiscito, con las ya consabidas mentiras del Castro Chavismo, del infernal socialismo, la desaparición de la familia, el imperio de los degenerados LGBTI, la eliminación de las pensiones para pagar los sueldos millonarios de los guerrilleros, la terrible reforma tributaría para pagar los excesivos costos de la paz y otras falacias del ramplón fraude electoral en nuestro País.

En el imperio del norte, los insultos, las amenazas contra las mujeres, los negros, los Latinoamericanos y en general contra los inmigrantes y vulnerables calo en los bajos instintos y protervo carácter de los simpatizantes del Ku Klux Klan, los defensores de la Segunda Enmienda, los simpatizantes de la Asociación Nacional del Rifle, de más señores de la guerra regularmente involucrados en las transnacionales y sus tétricos manejos en la totalidad de los gobiernos del planeta, que hoy se solazan con su advenimiento al poder que pronto será secundado en Francia por la ultra nacionalista Marine Le Pen y sus expresiones de extrema derecha y Fascismo, todo esto reeditando la triste película que vivió hace 80 años el mundo que hoy asiste al defraude universal. Lo triste es que como hoy sucede hace 80 años fueron los obreros y en general los pobres quienes llevaron al poder a Hitler y Benito Mussolini y hoy llevaron a Donald Trump al poder, fueron precisamente las mujeres que negaron a su congénere Hilary Clinton, la posibilidad de reivindicar el momento más precioso para las mujeres de EE.UU, fueron los negros los que han llevado a su principal enemigo a ser fiscal en su nación, fueron los latinos quienes llevaron a su máximo contradictor a dirigir el FBI quien se encargara de extraditar a sus familiares y seres queridos. Mientras tanto en Colombia son los pequeños agricultores y los sin tierra, quienes niegan la reforma rural integral, son los pobres quienes niegan sus derechos manteniendo los privilegios de los ricos, son lo subyugados que acarician sus cadenas sociales que les esclavizan en una sociedad inequitativa, son los humillados y dominados quienes lamen las botas que les patean. En el Distrito Capital fueron los informales, vendedores ambulantes, quienes con su abstención o voto errático, similar

al de otros sectores vulnerables e indiferentes que no votaron o traicionaron sus procesos, permitieron el acceso al poder al derechista que hoy los persigue, pero serán ellos quienes en un futuro luego de comprobar la ignominia de su analfabetismo democrático en el nuevo reciclaje de la historia en nuestro País y en el planeta, en un futuro no muy lejano serán testigos del renacer del humanismo, la equidad, la justicia y la paz. En lo personal debo compartir como el Periódico Proclama igual que los demás medios de comunicación comunitaria, alternativa y popular, pese a la existencia de una Política Pública Distrital de Comunicación Comunitaria enfrentan grave crisis por el incumplimiento de los compromisos institucionales del Gobierno Distrital, desconociendo los acuerdos que posibilitaron en los Gobiernos de Izquierda equilibrio ante la posición dominante de los medios que tradicionalmente han servido a los intereses de los poderosos en contra de los principios y las oportunidades de los más vulnerables, agradezco a las directivas del Instituto Nacional para Ciegos INCI particularmente al Doctor Carlos Alberto Parra Dussan quien siempre respetó nuestra línea editorial, posibilitando un ejercicio de libre expresión y derecho a la información y las comunicaciones, igualmente agradezco al equipo del periódico Proclama, particularmente a mi fiel compañera de tanto años y luchas María Yamile León Suarez, a mis hijos, destacando a Julián Yamid, quienes han dado sustento humano y técnico a este proyecto, quienes igual también aman la causa de nuestra población y conmigo aspiran y esperan el redireccionamiento más propositivo y proactivo en un nuevo ciclo de la historia, que en un mejor porvenir dejara atrás el ramplón fraude nacional y el rampante defraude universal.


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COMUNICADO COMITÉ IMPULSOR MESA NACIONAL DE DISCAPACIDAD, ACUERDOS DE PAZ Y POSTCONFLICTO Lizbeth Rodríguez Agudelo / Secretaria Comité impulsor de la Mesa Nacional de Discapacidad Subcomisiones de Coordinación, Técnica y de Comunicaciones

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discapacidad del País.

os líderes y lideresas con discapacidad, conscientes de la importancia y momento trascendente en la búsqueda de la PAZ en el País, nos constituimos en una Mesa Nacional de Discapacidad PERMANENTE, reconocidos por la Presidencia de la República y las Instituciones intervinientes, como una “importante fuerza ciudadana que hace visible su capacidad de interlocución en temas de gran impacto nacional como los Acuerdos de Paz”. En este marco y al ser considerados como las y los principales representantes regionales de la población con discapacidad, personas con discapacidad visual, auditiva, sordociegas, física, intelectual, psicosocial y múltiple, así como cuidadoras y cuidadores, tanto en la declaración entregada a Presidencia de la República como en los acuerdos básicos para la construcción de la agenda Nacional, dejamos constancia y al día de hoy reafirmamos, nuestra voluntad y autodeterminación de dar continuidad al trabajo comenzado en la consolidación del “ACUERDO FINAL PARA LA TERMINACIÓN DEL CONFLICTO Y LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PAZ ESTABLE Y DURADERA, firmado entre el Estado Colombiano y la FARC –EP, en todo sentido con una mayor participación del colectivo y reconocimiento de los derechos de este grupo poblacional. En función de los derechos a la participación, la igualdad, la libre asociación y demás derechos conexos, el colectivo impulsor de la Mesa Nacional de Discapacidad, conforma-

3. Se formule y desarrolle una estrategia de participación concertada que garantice la participación en los espacios relacionados con la construcción, implementación y seguimiento de las políticas para el posconflicto, de tal manera que se transversalicen acciones que permitan el ejercicio de derechos de las PCD, sus familias, Cuidadoras y cuidadores, que reconozcan los enfoques territorial, de género, diferencial y poblacional, entre otros, así como los ajustes razonables y formas de comunicación, acceso y accesibilidad.

do principalmente por las personas que participamos en el taller “Pedagogía de Paz Líderes Regionales con Discapacidad”, en la búsqueda de una mayor y efectiva representatividad en las acciones que se desprenden de los acontecimientos como resultado del Plebiscito del 2 de Octubre, en cuanto a los acuerdos de paz, las políticas del postconflicto, que plasme el enfoque diferencial, acciones afirmativas equiparables y el sentir generalizado territorial y nacional de los sectores de discapacidad y en general de la discapacidad organizada, con acciones que garanticen el goce efectivo de los derechos, así como la continuidad en la garantía y promoción de derechos, que ha venido avanzando en los últimos años y que se debe fortalecer a partir de la

Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, en concordancia con el amplio marco normativo, que permitiría unos mayores y equitativos avances en los procesos de inclusión y mejoramiento de la calidad de vida de esta población, víctimas o no del conflicto, demandamos del Estado Colombiano: 1. Que el Ministerio del interior y en su defecto el del posconflicto, en articulación con las instituciones del orden Nacional y territorial competentes, garanticen al colectivo impulsor de la creación de la Mesa Nacional de Discapacidad y a la misma una vez construida, como mecanismo e instrumento articulador en la participación activa y con incidencia, en función de las acciones relacionadas

con los acuerdos de paz, las políticas del Postconflicto, con funciones de articulación, seguimiento y verificación de los acuerdos, implementación inmediata de las recomendaciones del Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad “CRPD”, entre otras. Conformación definida de manera colectiva y autónoma, para lo cual se deberá desarrollar una URGENTE Y amplia convocatoria a las organizaciones sociales de las personas con discapacidad en todo el territorio Nacional. 2. Se dé continuidad a la construcción en el marco de esta Mesa, de una agenda nacional de discapacidad, que permita generar en el posconflicto, unas condiciones y hechos materiales de inclusión y goce efectivo de derechos en general, para la población con

En cumplimiento de lo aquí expuesto, inicialmente financiado por la administración Nacional, solicitamos al Gobierno Nacional a través de las diferentes instituciones como Ministerio del Interior, INCI e INSOR, Presidencia de la República, garantizar y apoyar presupuestalmente un espacio de interacción y encuentro de líderes y representantes de los colectivos nacionales para el cumplimiento y seguimiento de las acciones previas como de la agenda que se determine. Para mayor comunicación dirigirse a: mesanal.discapacidad@gmail. com Cel.: 301 2121357 MESA NACIONAL DE DISCAPACIDAD, NADA PARA NOSOTROS SIN NOSOTROS.

RADIOPROCLAMATE CON EL TÍO MARCELINO De la imaginación a la realidad

Raúl Mora

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einaldo Tangarife: “Como testimonio de fe, un hombre que mueve montañas”…

Como el despertar de un sueño la magia de los sonidos, de los colores y de la luz envuelto en todo un panorama de fantasía emerge c o n í m p e t u e l c o ra zó n alegre y soñador del Tío Marcelino, quien al escuchar las voces infantiles le inspiran un sentimiento de paz, para llevar al mundo su mensaje de libertad, pu-

diendo ser expresado en el arte de la animación para que quienes lo escuchen y lo vean se contagien de su impoluto y magno vivir para servir. Éste es el caminar de un hombre que durante muchos años sigue dejado huella siendo un aporte para la paz, cuya misión e s c u l t i va r d í a a d í a l a semillita que hace sonreír y reír a más niños y niñas en Colombia. Su espontaneidad y carisma hacen

que su don de la ubicuidad pretenda ser perenne en el maravilloso mundo que día a día nos transporta en un viaje sin regreso, para que nuestros anhelos de paz dejen de ser una utopía y se convi ertan en u n a realidad. Ésta es la característica que hace que nuestras voces canten al unísono con el arte proclamando el deseo de ser libres para poder disfrutar de todos nuestros Derechos Humanos y no olvidarnos que su traduc-

ción al Castellano no haya sido en vano, para poder defendernos contra las injusticias y poder expresar que nuestros talentos no tienen límites y sí mucho valor. Para demostrarlo le invitamos a contactar los servicios de animación, recreación y expresión escénica de nuestro TIO MARCELINO al teléfono en Bogotá 6737991, Celular 3103351792 y al correo reinaldotanga@gmail.com.


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AGENDA NACIONAL DE PARTICIPACIÓN DE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD Mesa Nacional de Discapacidad

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dad relacionados con redes de producción, comercialización, distribución, aseguramiento de mercado y fortalecimiento de organizaciones, unidades productivas de personas con discapacidad, cuidadores(as) y familias.

l Comité Impulso Mesa Nacional de la población con discapacidad, cuidadores y cuidadoras, en el marco de nuestra autonomía nos permitimos construir una Agenda Nacional que nos permita una materialización y goce efectivo de derechos, en el territorio Nacional, basado en el amplio marco normativo y en favorabilidad de la Política Pública de Discapacidad, articulada e incluida en las políticas del pos conflicto. En sus diferentes niveles de Gobierno (Nación, Departamento, Municipio y/o Localidades)

8. Definir y establecer la línea de Apoyo Nación Territorio para garantizar el acceso de una vivienda digna accesible y habilitada para las personas con discapacidad. 9. Crear una estrategia Nacional para impulsar y promover la plena participación de las mujeres con discapacidad en todos los asuntos de la vida pública en general y en especial los asuntos relacionados con la discapacidad.

Para lo cual establecemos la siguiente agenda pública. 1. Sanción y firma del protocolo facultativo de la convención y su ratificación. 2. Asegurar en el diseño institucional del Estado estructuras de discapacidad en todo sentido trasversales y coordinadas o administradas por esta población, cuidadores y cuidadoras

población con discapacidad, para la implementación de los Acuerdos de Paz. 4. Hacer efectiva la circunscripción de las minorías en especial de las Personas con discapacidad en las regiones,para la participación política y electoral.

3. Construir la comisión de la

5. En el marco del derecho al trabajo, establecer mínimo el 5% de vinculación laboral estable y permanente en el sector público de población con discapacidad en desarrollo de la Ley 1618 del 2013 y demás normas concordantes.

de condiciones para el acceso a la educación superior, aplicando acceso y permanencia de una cuota mínima del 4% en las universidades públicas de Colombia(como la tienen los afros, indígenas, reinsertados y soldados).

6. Determinar la equiparación de oportunidades en igualdad

7. Garantizar recursos para emprendimiento y productivi-

Para el cumplimiento de la agenda propuesta, el Gobierno Nacional a través de las diferentes instituciones deberá garantizar y apoyar presupuestalmente un espacio de interacción y encuentro de líderes y representantes del colectivo nacional para el cumplimiento y seguimiento de la agenda propuesta.

EL MOVIMIENTO SOCIAL DE DISCAPACIDAD COLOMBIA

Del plebiscito al acuerdo definitivo Vocería Colegiada Mosodic

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L MOVIMIENTO SOCIAL DE DISCAPACIDAD COLOMBIA (MOSODIC), manifiesta a la opinión pública, su profunda preocupación por los resultados del plebiscito. Donde el NO, con una irrisoria victoria sobre el SÍ, logró dilatar la implementación de los acuerdos pactados entre el Gobierno Nacional y las FARC EP, para la terminación definitiva del conflicto armado en Colombia con uno de los actores de este conflicto y abrir una ventana de esperanza hacia la construcción de una paz estable y duradera. Sin embargo, las personas con discapacidad, familias, cuidadoras y cuidadores, convocados en MOSODIC, seguimos adelante en la intención de aportar a la finalización del conflicto en Colombia e invitamos a nuestras organizaciones regiona-

les y al pueblo colombiano en general a no desfallecer en la búsqueda del anhelado cierre del conflicto armado, y a hacer uso de la movilización como mecanismo de apoyo a los acuerdos de la Habana. Reiteramos nuestro rechazo a la lucha armada y a la violencia como forma de hacer política y respaldamos la decisión del Gobierno Nacional y de las FARC EP de continuar con el cese al fuego bilateral e instamos a los equipos negociadores a agilizar la búsqueda de salidas políticas y jurídicas a la menor brevedad posible para que entren en vigencia los acuerdos. De igual forma, demandamos del Gobierno Nacional la instalación de la fase pública de los diálogos con el ejército de Liberación Nacional ELN. Por la defensa y exigibilidad de los derechos de las per-

punto de participación política, se reconociera a las personas con Discapacidad, de la cual 200.000 son víctimas directas del conflicto armado y representan la segunda población más afectada por el conflicto, después de la población afrocolombiana.

sonas con discapacidad, sus familias y cuidadores w w w.fa c e b o o k . c o m / mosodic.co @mosodic mosodic@gmail.com 3152960641,3043946997 Somos conscientes de que esta coyuntura política debe convocar principalmente las poblaciones más afectadas por la violencia en Colombia y por supuesto, a la ciudadanía colombiana en todas sus expresiones y no solamen-

te a los partidos políticos tradicionales; para avanzar hacia un gran dialogo social por la paz, que salvaguarde este pacto político nacional y no se convierta en un pacto de elites, y por ende, en un nuevo frente nacional. MOSODIC, por la incidencia política de sus organizaciones territoriales y fundaciones de base, facilitó las herramientas para que en los acuerdos de la Habana, especialmente en el

Entendiendo que los acuerdos firmados en la Habana permitirán una apertura democrática, que sin duda será una herramienta útil para movimientos como MOSODIC que se conforma desde las bases, RATIFICAMOS nuestro compromiso en seguir trabajando para superar el estado de invisibilización de la discapacidad en el marco de las transformaciones sociales, económicas, políticas y culturales; y se dialogue abiertamente, de manera que el post acuerdo sea un espacio de equidad para toda la población colombiana.


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EDICIÓN 94 democracia que hemos llamado Mesa Social para la Paz. Se trata un escenario donde nos encontremos cara a cara, el movimiento social popular y los poderes institucionales y económicos, para debatir sobre los problemas que aquejan al país, acordar salidas eficaces a los conflictos socio-políticos que determinan el conflicto armado y pactar las bases para una sociedad democrática, justa y en paz.

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iversas organizaciones sociales y populares, eclesiales, de derechos humanos, sindicales y políticas, convocamos a construir una Mesa Social para la Paz que contribuya a la solución del conflicto social, político y armado. Invitamos a todos quienes estén interesados en la construcción de la paz y la democracia a dar forma a esta iniciativa. Para ello compartimos las ideas que se expresan en el siguiente Llamamiento: Al Gobierno Nacional A las organizaciones y articulaciones de mujeres A los pueblos indígenas, afro descendientes y campesinos A las organizaciones sociales del país A las pobladoras y pobladores urbanos A los jóvenes, deportistas y artistas A las organizaciones ambientales y de DDHH A las organizaciones sindicales A la academia y los estudiantes A las iglesias y a las comunidades basadas en la fe A los gremios económicos A los partidos políticos A las organizaciones insurgentes A los medios de comunicación A la diáspora colombiana y los exiliados A Colombia entera, y a los pueblos solidarios del mundo La necesidad y posibilidad de que Colombia profundice la democracia están a la orden del día. Para que ello se haga realidad, el país requiere una amplia reforma política cuyos componentes esenciales son la realización de los derechos sociales y económicos de la población, la superación de la inequidad social y la adopción de transformaciones institucionales y culturales que rompan el largo ciclo de la violencia y la intolerancia políticas que hemos vivido. Esos imperativos solo podrán materializarse con la participación directa, vinculante y decisoria de la sociedad y el compromiso de los actores claves del país. Nos encontramos en un momento clave para resolver algunos de los conflictos del país en tanto se desarrollan diálogos entre el gobierno y las insurgencias para

terminar el conflicto armado, cuyo éxito depende en gran medida de la realización de transformaciones estructurales. Pero justo en este proceso se corrobora que su principal debilidad es la escasa participación de la sociedad. Todos hemos resentido esta carencia y reconocido

que la participación ciudadana es determinante para darle el impulso que requiere el proceso con las FARC en La Habana, posibilitar los diálogos públicos que se avecinan con el ELN y potenciar los agentes sociales que lideren transformaciones hacia una paz con justicia social. Participación de la sociedad, condición necesaria para avanzar en la construcción de Paz Los diálogos del gobierno y las FARC se encuentran en una fase decisiva, en la cual deberán discutirse cruciales temas; entre otros, resolver cómo se abordarán las llamadas “salvaguardas” que esa organización mantiene sobre la mesa de diálogo y los puntos “pendientes” de acuerdo. Nos parece evidente que para dar un salto en este proceso particular se requiere la participación de la sociedad, que ha mostrado ser un elemento eficaz para destrabar momentos de la negociación; esto se evidenció en el tratamiento de los derechos de las víctimas, donde su participación directa ha sido determinante para encontrar alternativas de justicia, verdad, reparación y no repetición, tal como lo reconocen las FARC y el gobierno nacional. Para subsanar esa necesidad de participación, varios actores políticos –no solo las FARC-han señalado la necesidad de una Asamblea Constituyente que aborde esas temáticas y refrende los acuerdos. Por otra parte, la proximidad

de que se instale una Mesa de Diálogo entre el gobierno nacional y el ELN exige un nuevo impulso a la participación social y ciudadana. Esta organización insurgente ha insistido en que la vinculación de la sociedad como sujeto activo en el proceso es un componente facilitador de sus diálogos directos con el gobierno, como quiera que es la sociedad –en su diversidad y pluralidad- la que debe superar también mediante el diálogo y la negociación buena parte de las contradicciones sociales y políticas que han dado lugar al conflicto armado. La información de los medios de comunicación y las declaraciones de los directos implicados, permite considerar que el gobierno nacional y el ELN han acordado darle cabida a la participación decisoria de la sociedad en esos diálogos de paz. Mesa Social para la Paz Las organizaciones sociales y populares, eclesiales, de derechos humanos, sindicales y políticas abajo firmantes, entendemos que nuestra responsabilidad con la superación del conflicto armado y la construcción de la paz nos obliga a atender esta demanda explícita del proceso de paz, y a la demanda histórica por un nuevo pacto democrático para Colombia. Por ello ofrecemos nuestras organizaciones y nuestra voluntad política para constituir un escenario que aporte decididamente a la terminación del conflicto social, político y armado. En la búsqueda de este pro-

pósito, consideramos que es el momento de formalizar un espacio de diálogo y negociación nacional por la paz y la

Consideramos que la Mesa Social para la Paz y las mesas de negociación entre la insurgencia armada y el gobierno son complementarias, pues el trasfondo del conflicto armado es social, político y económico. Sin embargo, no son mutuamente dependientes; aunque los acuerdos de la Mesa Social para la Paz obviamente inciden en favor de la terminación de la guerra, en cambio éstos no pueden depender de los resultados de las mesas gobiernoinsurgencia armada. Esta propuesta se convierte en un espacio complementario de los diálogos con la insurgencia en la medida que puede abordar y resolver con legitimidad y consenso social problemáticas que no sean abordadas en la mesa gobierno–FARC, así como ser uno de los escenarios de participación decisoria de la sociedad en la perspectiva que han venido acordando el ELN y el gobierno. Pero serán el gobierno y las insurgencias quienes determinen el alcance práctico que tendrán los acuerdos sociales sobre s u s p ro p i a s negociaciones; la Mesa deberá tener una permanente interpelación con las insurgencias y el gobierno para concertar esas formas específicas de complementariedad. Es así como se espera que se desarrolle una negociación autónoma y transformadora entre el movimiento social, el empresariado, la academia, las comunidades basadas en la fe, los partidos políticos y el gobierno nacional en perspectiva de construir la paz y avanzar en grandes transformaciones. El alcance, la composición y la agenda de la Mesa Social para la Paz debemos acordarlos entre todos los sectores que aceptemos este llamado. Desde el campo popular hemos venido construyendo una agenda histórica propia sobre las transformaciones necesarias para la transición hacia la paz y que pensamos es fundamental que sea la base de la negociación en tanto son

asuntos que hacen parte del conflicto social y político. A esta Mesa Social para la Paz llamamos al gobierno nacional, al empresariado colombiano y transnacional, a las fuerzas militares y militares en retiro, a los medios comerciales de comunicación, a los partidos políticos, a los gobiernos regionales, así como a la academia y las iglesias. Las insurgencias deberán tener un lugar en este espacio de participación y construcción de paz, así como gobiernos extranjeros que han tenido elevada incidencia en el conflicto armado o que pueden tener un papel clave en la construcción de la paz; estos últimos podrían cumplir el papel de facilitadores, veedores y garantes del proceso. Consideramos viable hacer confluir estas agendas e intereses, y a partir de ellas construir consensos y acuerdos políticos firmes y duraderos en el seno de la sociedad colombiana para una nueva democracia. Éstos deberían expresarse en acuerdos políticos para la transición, propuestas o consensos sobre políticas públicas que puedan implementarse tanto en el proceso mismo de diálogos de paz, como en la transición democrática. Los acuerdos, pactos y consensos que logremos en la Mesa Social para la Paz pueden adoptar el espíritu y el formato de un espacio pre constituyente, sin desmedro de los pactos y acuerdos que se puedan implementar de forma inmediata.

Para constituir este espacio de diálogo y negociación para la paz, quienes subscribimos este llamado nos disponemos a intensificar un Gran Diálogo Nacional con el más amplio espectro de actores sociales y políticos del país, incluido el gobierno nacional y las insurgencias, para ir allanando ese camino de paz con justicia social y equidad como anuncios de una nueva nación. Una Comisión de Impulso de este diálogo tiene las puertas abiertas a todos los actores interesados en la construcción de la paz y la democracia. Convocantes iniciales, siguen múltiples firmas de sectores representativos de la sociedad Colombiana entre ellos Movimiento Social Discapacidad Colombia - MOSODIC.


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EL GHETTO DE LA DISCAPACIDAD EN COLOMBIA Jaime Mauricio Gaitán Gómez

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s innegable que gracias a los esfuerzos de importantes líderes de la comunidad de personas con discapacidad en el país, se han logrado destacados progresos en la atención y la participación de los colombianos y colombianas que por alguna enfermedad, accidente laboral o común, por haber heredado o adquirido en los vientres maternos alguna imperfección orgánica, física o sensorial, se nos clasifica como personas con discapacidad visual, auditiva, cognitiva, mental, múltiple, sordo ceguera o personas de baja talla, condiciones que nos impide desarrollar plenamente nuestras capacidades laborales, sociales, educativas, familiares, culturales o en cualquiera de los ámbitos en los que por ser seres humanos, debemos compartir productivamente, la construcción de la economía y de la red social implícita en cualquier comunidad local, regional, nacional o internacional. Hasta antes de la promulgación de la Constitución Política de 1991, aquella que nos rige y que fuera proyectada en la Asamblea Constituyente que se convocó en 1990 luego del Acuerdo de Paz firmado con el M-19 a través de la Octava Papeleta impulsada especialmente por sectores universitarios el día de las elecciones presidenciales de ese año en las que César Gaviria alcanzó la presidencia, el tema de la discapacidad ni siquiera era contemplado constitucionalmente, lo que probablemente respondía a la insignificancia política del tema, situación que sin lugar a dudas, reflejaba los efectos del prejuicio derivado del desconocimiento generalizado en cuanto a las capacidades, habilidades y competencias de quienes por la disfunción sensorial, incapacidad para movilizarnos sin la ayuda de una silla de ruedas, de oír, de comprender ortodoxamente el mundo que nos rodea, por no poder acceder a los entornos físicos diseñados para ser usados por quienes su estatura corresponde a los estándares promedios o en general, por las dificultades propias que una discapacidad nos ofrece para poder comunicarnos o interrelacionarnos con nuestros entornos. Gracias a ese avance, se dio rienda suelta a la creación de un prolífero e ineficiente marco legal, pues en la Constitución en sus artículos 13, 47, 54 y 69 entre otros, se reconoce que tanto el Estado como la

nacen o son consideradas en el seno del Consejo y por último, por la Secretaría Técnica que se turna entre las entidades gubernamentales del Distrito que tienen asiento tanto en el Consejo como en el comité Técnico. Esta estructura burocrática, política y poco eficiente, se repite en cada una de las veinte Localidades del Distrito, me refiero a los consejos locales de discapacidad cuya conformación también fue una de las tareas de algunos obstinados líderes y no reconocidos por la institucionalidad.

sociedad, deben facilitar nuestro acceso a la productividad y explícitamente, se establece que cualquier persona con disminuciones sensoriales, físicas o cognitivas, debemos ser objeto de una atención prioritaria en el régimen de salud, al acceso al ecosistema educativo, cultural y deportivo, que podemos contar con sistemas de transporte masivo en los que sin importar que no veamos, no nos podamos movilizar sin una silla de ruedas o que seamos de baja talla, por ejemplo, tenemos derecho a ir de un lugar a otro, que tenemos derecho a vivir en inmuebles dignos y que también nos cobija el derecho de desarrollar nuestra libre personalidad. Pero como suele suceder en nuestro hermoso país, no faltó el oportunista que siendo parte de la élite socio económica colombiana, llegó al Senado de la República, personaje que por un accidente automovilístico, contrajo una discapacidad física y convocó a los ingenuos líderes que llevábamos décadas en la quijotesca misión porque nos fueran reconocidos nuestros derechos como a cualquier otro colombiano o colombiana que por el solo hecho de estar vivo, requiere de vivienda, educación, oportunidades laborales, de una adecuada atención de salud, de divertirse o hacer uso del

tiempo libre y nos embarcó en la creación de la que años más tarde, se le conociera como Ley Clopatofsky o Ley Marco de la Discapacidad en Colombia, la que no se puede negar que ha servido de faro para el desarrollo del mencionado marco legal, pero que no es conocida por los líderes y actores con poder de decisión de sectores ajenos al de la discapacidad como el empresarial o productivo, siendo nuestra “biblia” con las que nos damos esperanzas e ilusiones al interior de nuestra comunidad, la que no hemos podido hacer que deje de ser un verdadero Ghetto. Seguramente por la falta de interés y desconocimiento de otros parlamentarios, se apresuraron a aprobar el texto de la que se conoce también como Ley 361 del 7 de febrero de 1997, sin percatarse de innumerables inconsistencias como impedir que los empresarios incentivados para contratar a personas con discapacidad en sus empresas, pudieran prescindir de los servicios laborales de quienes con la disculpa de no poder ver bien, no poder movilizarse fácilmente, por no tener alguna de sus extremidades, no poder comprender bien una instrucción o cualquier otra circunstancia, dejaban de cumplir con obligaciones elementales como hacerse

presente en los sitios de trabajo o cumplir con horarios y normas mínimas, lo que se convirtió paradójicamente, en una barrera para que algunos bien intencionados empresarios, evitaran la contratación de personas con discapacidad a pesar de los incentivos propuestos en la Ley, por el temor de enfrentar procesos legales relacionados con la vulneración de derechos de las personas con discapacidad. Este marco legal impulsó a los líderes para que propusiéramos la creación del Sistema Distrital de Discapacidad, conformado por el Consejo Distrital en el que tienen asiento tanto el Alcalde Mayor como parte de los miembros de su gabinete, especialmente aquellos que tienen que ver con asuntos sociales, de movilidad y otros que por sus misiones institucionales, deben facilitar infraestructuras y condiciones para la inclusión social, en este caso, de los Bogotanos y Bogotanas que vivimos en condición de discapacidad; por el comité técnico, instancia de participación que al igual que en el consejo, le da la oportunidad a un representante por cada una de las siete clases de discapacidad que según la CIF, son reconocidas y que en el caso del Comité Técnico, deben hombro a hombro con funcionarios técnicos, materializar propuestas que

De ahí, instituciones como el IDPAC, la Secretaría Distrital de Salud, la de Integración Social y Cultura especialmente, tal vez con muy buenas intenciones, lideraron procesos que se han vuelto icónicos en la capital colombiana, pero han incurrido en la ineficiencia de conquistar a los sectores más influyentes de nuestra sociedad, como el político o el productivo, basándose en el preconcepto de altruismo y se han interesado más en un enfoque asistencialista que desconoce las potencialidades y las verdaderas necesidades de la población con discapacidad, haciéndoles creer a quienes tienen la responsabilidad de adjudicar presupuestos y facilitar el desarrollo de políticas, programas y proyectos que beneficien a la población con discapacidad, que el enfoque del asistencialismo es el correcto, lo que no les disgusta a estos actores decisorios en la medida que por prejuicios morales y religiosos, están convencidos que quienes vivimos en condición de discapacidad, solo podemos ser objeto de conmiseración y lástima, lo que les permite mostrarse como benefactores de los “pobrecitos discapacitados”, lo que políticamente es atractivo porque difunden entre la gran mayoría de miembros de la sociedad, especialmente entre quienes cuentan con recursos económicos, un mensaje de bondad que se puede capitalizar político económicamente. En ese marco conceptual, en la década de los noventa del siglo pasado, una noble fisioterapeuta que prestaba sus servicios a la Secretaría Distrital de Salud, trajo desde Israel, la novedosa y prometedora estrategia de Rehabilitación Basada en la Comunidad, la famosa RBC, pero debido a su perfil profesional, creyó que las personas con discapacidad con poder lavarse las manos solas, hacerse el aseo personal sin


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EDICIÓN 94 ayuda, poder vestirse, poder caminar o trasladarse solo con la ayuda de una silla de ruedas o muletas o prótesis, usar un bastón blanco o tener intérprete de señas, era suficiente, pues en la academia, a las fisioterapeutas o terapeutas ocupacionales, fue lo que les enseñaron y por supuesto, ellas creen que una persona con discapacidad, si podemos hacer esas cosas sin ayuda, es suficiente. Por esa vía, el impacto que se pudo esperar de la implementación de la RBC, quedó trunco y se desconoció que la inclusión de personas que vivimos en condición de discapacidad, pasa por la posibilidad de que seamos productivos en áreas como el trabajo o el emprendimiento y que para ello, requerimos de verdaderas estrategias y compromisos del sector educativo y de preparación a la productividad, del compromiso de empresarios, políticos y gremios, del compromiso de nuestras familias que deben dejar de ser sobreprotectoras o que entiendan que podemos tener sueños, que nuestros vecinos nos dejen de ver como fenómenos o superhéroes… en síntesis, que entiendan que solo requerimos de ajustes mínimos razonables y de oportunidades para construir con ellos, una sociedad más justa y progresista. Ta n t o e l S i s t e m a d e discapacidad del Distrito como

todas las demás instancias que se han creado alrededor de estos antecedentes y que constituyen el ecosistema de la discapacidad en Colombia, por estar dirigido y sus actores decisorios aconsejados, seguramente con buenas intenciones, por el gremio de las terapias, han hecho grandes esfuerzos en foros, seminarios, creación de normas y políticas, etc. Acciones Dirigidas a fortalecer a las personas con discapacidad y en todos esos casos, las convocatorias se hacen a quienes hacemos parte del sector, llegando a ser una gran familia que nos encontramos cada vez que la institucionalidad, convoca a un nuevo foro o actividad, a las que nunca asisten políticos o empresarios que aprendan el rol que les corresponde para incluir verdaderamente a la población con discapacidad al mundo productivo. Asuntos como no haber sido posible determinar el verdadero tamaño de la población con discapacidad en el país, población que se supone que alcanza el 12% de la totalidad de colombianos y colombianas según la OMS y que según el censo poblacional de 2005, somos algo así como 4 millones, pero que gracias al intento fallido del Ministerio de Salud por levantar un registro y caracterización idóneo, solo se tiene información confiable de cerca de 900 mil personas con discapacidad, la falta de conocimiento de cómo tratar

el tema de la discapacidad por parte de los grandes y más influyentes medios de comunicación que se están viendo reemplazados por las redes sociales que no siempre son bien usadas, los prejuicios que nadie parece querer modificar y la invisibilidad de la discapacidad como problemática, van haciendo que los “muros” que delimita el ghetto de la discapacidad, sean cada vez más infranqueables en nuestro país. Y es lamentable la indiferencia social generalizada que impide derrumbar esos “muros”… En el año 2006, la prestigiosa comunicadora social brasileña Claudia Werneck, autora de metodologías y una inmensa obra académica relacionada con la comunicación masiva en función de la inclusión de personas con discapacidad, dictó un seminario en la ciudad de Bogotá a medios de comunicación masivos al que fueron invitados importantes medios de comunicación Venezolanos, Ecuatorianos y Colombianos, habiéndose tomado la decisión de hacerlo en Bogotá en virtud de la equidistancia geográfica, habiéndose hecho presente representantes de los más importantes periódicos y otros medios de los vecinos países, siendo la sorpresa que de ninguno de los medios nacionales, se hicieran presentes, lo que les hubiera dado la oportunidad de emplear términos como “personas con discapacidad” y no “discapacitados” y otros

conceptos elementales que por desconocimiento, no son empleados por los grandes y muy destacados periodistas que con méritos, son reconocidos por la sociedad Colombiana, pero gracias a su influencia, solo resaltan las caminatas de los soldados “discapacitados”, echando por tierra los enormes esfuerzos que desde nuestro ghetto, hacemos para que seamos vistos como personas con discapacidad en el marco de tratarse de una condición diferencial, pero no excluyente. En ese mismo sentido, cuando gracias a la incansable presencia de nuestros líderes se logró que la institucionalidad contratara a profesionales con discapacidad para hacer parte de los equipos que atienden a la población con discapacidad a través de proyectos con marcado enfoque asistencialista, los mismos, fueron conformados bajo la orientación de profesionales, otra vez, de las terapias, que de acuerdo a las experiencias, no conciben tener como compañeros laborales, a personas con discapacidad, a las que están permanentemente dispuestas a descalificar sin tener en cuenta que el desempeño de los profesionales con discapacidad, pasa por la capacidad que tanto las instituciones como los orientadores de esos equipos, desarrollen estrategias de ajustes mínimos necesarios y a pesar de haber recibido información acadé-

mica acerca de la complejidad psicosocial de las personas con discapacidad, desconocen torpemente esta realidad, quedando nuestros intentos de salir del ghetto, restringido por el entorno. Solo nos queda, al parecer, seguir quejándonos entre nosotros mismos en nuestro ghetto. Finalmente la historia desconocida, precisamente porque no hemos podido dejar de ser un ghetto, si la revisamos, encontraremos incluso algunos abusos que en nombre de la discapacidad, algunos funcionarios vividores del sector, han cometido… en el año 2006, la Embajada de Japón hizo una convocatoria en alianza con el ICETEX para que un docente de un colegio Distrital, asistiera a un seminario en ese hermoso y desarrollado País Nipón para que aprendiera metodologías para incluir a estudiantes con discapacidad a las aulas regulares, convocatoria ganada por un docente que le tocó llamar a los medios de comunicación para denunciar del despojo del que fue víctima por la que por entonces, era la representante de la Secretaría de Educación del Distrito ante el Comité Técnico de Discapacidad, que sin saberse de qué manera, resultó ser la adjudicataria de la beca con todos los gastos pagados. Si seguimos en el ghetto, estas cosas seguirán pasando.

CABILDOS ABIERTOS POR LA PAZ DE COLOMBIA

Acudir al Constituyente primario para entrar a opinar y reorientar la política pública sobre tema tan álgido como lo es de la paz en Colombia se convierte en un procedimiento esencial, novedoso y muy práctico en momentos tan aciagos como los que estamos viviendo en nuestro país. Fabio Monroy Martínez / Abogado-Periodista, Coordinador en Colombia Servicio Paz y Justicia en América Latina, SERPAJ-AL.

Audaz iniciativa que acude al Constituyente primario con tal de consultarle sobre tema trascendental para Colombia, aun cuando el Cabildo abierto es para temas locales, la paz siendo nacional cobra valor en todas las ciudades, en los 1.113 municipios, en la gran cantidad de localidades, extensiva a las barriadas, las esquinas y todos los hogares. De allí el que una figura local sea impulsada para despejar un tema del orden nacional. “Realmente se busca que a través del país se reafirme la adhesión de los colombianos al acuerdo de paz y que también unos del SÍ y otros del NO concurran y ellos mismos pueden introducir los ajustes que sean del caso. Se trata realmente de un mecanismo de participación que está en la base y no se trata de mesas de notables que están arriba. Este es un momento más de democracia participativa, no democracia representativa”, expresó Eduardo Cifuentes, ex magistrado del Consejo de Estado de Colombia, ex Defensor del Pueblo y ex candidato para integrar la Corte Penal Internacional.

Según Cifuentes con los cabildos abiertos los ciudadanos “se unen para elevar su grito de independencia frente a la guerra”. El catedrático y constitucionalista señaló que la Carta Política de 1991 consagra el Cabildo Abierto como uno de los mecanismos de participación ciudadana. Precisó que sólo se requiere que el 5 X 1.000 del censo de cada municipio haga la solicitud para que el concejo se transforme en un cabildo abierto donde la asistencia debe ser certificada por la Registraduría. ¿Qué es el cabildo abierto? “El cabildo abierto es la reunión pública de los Concejos distritales, municipales o de las juntas administradoras locales, en la cual los habitantes pueden participar directamente con el fin de discutir asuntos de interés para la comunidad”. (Artículo 9, Ley 134 de 1994). Al respecto, la Universidad de Antioquia, precisa: “El procedimiento comienza por la solicitud que deben hacer por lo menos el 0,5% del censo

electoral respectivo –también las organizaciones civiles pueden participar en el proceso de convocatoria y celebración de los cabildos abiertos–, ante la secretaría del Concejo o de la Junta Administradora Local, entidad que debe divulgar el lugar, fecha y temas que se tratarán en el cabildo. Al mismo pueden asistir las personas interesadas –habitantes del lugar– pero sólo pueden hacer uso de la palabra el vocero de quienes solicitaron el cabildo y aquellos que se inscriban al menos con tres días de antelación y presenten el resumen escrito de su intervención. Todos ellos pueden participar en la deliberación; la decisión es adoptada por la Corporación respectiva, dando respuesta escrita y razonada a las solicitudes ciudadanas”. “A través de los cabildos abiertos se puede obtener la expresión política del pueblo colombiano. El plebiscito no tenía, según la Corte Constitucional, ningún valor jurídico, no creaba ningún norma, simplemente era un vehículo para que el pueblo se pudiera expresar en relación con la paz”, explicó Cifuentes.

La petición de convocatoria a cabildo abierto debe ser resuelta en 15 días y el lugar de sesión no necesariamente es la sede del concejo, también puede ser una plaza pública.

como lo es de la paz en Colombia se convierte en un procedimiento esencial, novedoso y muy práctico en momentos tan aciagos como los que estamos viviendo en nuestro país.

Continúa precisando la Universidad de Antioquia: “…lo que hace la Ley 134 de 1994 en materia de cabildo abierto es desarrollar en el derecho positivo una serie de formalismos que deben agotarse para que opere el cabildo, teniendo en cuenta que los ciudadanos que intervienen en el mismo no adoptan propiamente decisiones, aunque sea este un espacio donde se definirá precisamente la suerte que tendrán sus propuestas. Ello resulta cuestionable para quienes asuman el concepto de participación democrática del modo que lo hacía Estanislao Zuleta cuando planteaba: Que la gente pueda opinar no es suficiente, que pueda actuar es necesario, y que pueda actuar en aquello que le interesa, en su comunidad, en su barrio, en su municipio…”

Pasar de la incertidumbre al haber triunfado, así sea por escaso margen, el No en el plebiscito al panorama esperanzador que nos concedió el Premio Nobel de la Paz es como si estuviésemos en un parque mecánico de recreación, embarcados en la montaña rusa más alta y más veloz del mundo, entre uno y otro escenario no medió siquiera una semana.

Acudir al Constituyente primario para entrar a opinar y reorientar la política pública sobre tema tan álgido

Ahora, el ex magistrado Cifuentes nos recrea el paisaje con la posibilidad de darle todo el apoyo político al gobierno nacional en los Cabildos abiertos, en cuanto concierne a la legitimación de los Acuerdos de La Habana, que, como bien lo ha expresado el ex magistrado: ¡“están legalmente vigentes”! Cabildos abiertos por la paz de Colombia. ¡Por la PAZ de Colombia Tod@s uníos! #AcuerdoYa, #PazCompleta.


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LA RENUNCIA DE JUAN CARLOS VÉLEZ

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Colombia Informa

uan Carlos Vélez, uno de los alfiles de confianza del expresidente Álvaro Uribe, conmocionó al país con sus declaraciones para el periódico La República, a propósito de la estrategia usada por los promotores del NO en el plebiscito. Allí confesó los engaños y mentiras que usaron y la financiación que recibieron. De las mismas se retractó y presento su renuncia a dicho partido. Lo que más cuestionan de las declaraciones de Vélez es que evidenció que el uribismo durante la campaña por el NO mintió, asustó y confundió. En uno de los apartes de la entrevista, el gerente de la campaña uribista por el NO, expresó: “Unos estrategas de Panamá y Brasil nos dijeron que la estrategia era dejar de explicar los acuerdos para centrar el mensaje en la indignación”. Precisó que buscaron que “la gente saliera a votar berraca” A lo largo del día el escándalo fue tomando mayor fuerza. Al punto que fue tendencia en redes sociales el hastag #UribismoMintioParaGanar Por su parte la senadora Claudia López en una dura declaración afirmó: “Al Uribismo no les reconocemos ninguna legitimidad para renegociar los acuerdos”.

República, los mensajes transmitidos en los medios comerciales durante la campaña del plebiscito confirman que, efectivamente, dicho partido usó mentiras, engaños e incentivó el miedo en los votantes.

Por su parte, la Fiscalía General de la Nación anunció el inicio de una investigación contra Vélez Uribe por el delito de fraude al sufragante: “La Fiscalía dispuso la apertura de la investigación correspondiente, con el fin de establecer si las afirmaciones del doctor Vélez Uribe constituyen una conducta punible a la luz de la legislación nacional”. Paradójicamente, Vélez intentó mostrar lo exitosa que había sido la campaña y terminó haciendo unas revelaciones que indignan a los de la campaña del Sí, a varios del No; incluso el expresidente Uribe regañó a Vélez por esas declaraciones en un tuit que parece confirmar lo dicho por el gerente de la campaña del Centro Democrático del NO. A esto se sumó el comunicado del Centro Democrático que desautorizó las declaraciones de Vélez.

cer la entrevista completa de una hora y media que le hicieron al gerente de la campaña del NO del Centro Democrático. Los financiadores del NO

Tras el escándalo, Juan Carlos Vélez expresó en entrevista a la emisora Blu radio que lo dicho en el diario la República no era acertado, estaba sacado de contexto o tergiversado. Curiosamente, el mismo Vélez subió en su cuenta en twitter dicha entrevista.

Según la entrevista de Vélez en La República, recaudaron $1.300 millones de 30 personas naturales y 30 empresas, entre las que se destaca la Organización Ardila Lülle, Grupo Bolívar, Grupo Uribe, Colombiana de Comercio (dueños de Alkosto) y Codiscos.

Fernando Quijano, director del diario La República, expresó que estaban dispuestos a dar a cono-

No obstante, la Organización Ardila Lülle y el Grupo Uribe negaron haber aportado dinero a la campaña del NO. El grupo

Bolívar admitió haber aportado a la campaña del NO pero también a la campaña del Sí. Los demás grupos económicos aportaron recursos a la campaña. Sin embargo, miles de personas que apoyan los acuerdos de paz y votaron por el Sí, llamaron a boicotear a estas empresas y no comprar sus productos, a través de las redes sociales. Las mentiras en medios Aunque finalmente Juan Carlos Vélez presentó su renuncia ante el jefe máximo del Centro Democrático, Álvaro Uribe, por sus afirmaciones y se retractó de lo declarado ante el diario La

En la información ampliamente difundida en redes sociales, medios de radio, televisión, prensa, volantes, vallas, etc, los mensajes engañosos se centraron en la llamada “Ideología de Género”, afirmaron que en los acuerdos se le entregaba el país a las Farc, que Colombia sería como Venezuela; en impunidad, se valieron de la Reforma Tributaria que el gobierno realizará, azuzaron el odio, entre otras imprecisiones. A pesar de que tras las declaraciones de Vélez, varios medios comerciales hicieron mención de dichos mensajes, durante los días de la campaña estos mismos medios transmitieron esta publicidad confusa o engañosa. Cuñas y pautas radiales del NO. El Consejo Nacional Electoral, encargado de vigilar las campañas; informó las reglas del plebiscito pero no detuvo dicha publicidad, salvo algunos casos en los que ordenó retirar algunas vallas del SÍ y del NO.

LA GRAN MARCHA DEL 2 DE DICIEMBRE

El 2 de diciembre hay que salir a marchar contra aquellos que se oponen al fin del conflicto armado, a la construcción de una paz estable y duradera y que buscan, a toda costa, eliminar, simbólica y físicamente, a indígenas, afros y campesinos. Uribe es apenas un eslabón en esa larga cadena de empresarios que buscan perpetuar la guerra. Germán Ayala Osorio / Comunicador social y politólogo.

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e ventila en varias redes sociales que el 2 de diciembre habrá –habría– una Marcha contra Uribe Vélez. La invitación se da en medio de la pugnacidad entre quienes aún defienden “su obra de gobierno” y sus ideas políticas, y quienes insistimos en develar los daños1 que Uribe le hizo y le hace aún al país. Debo, eso sí, recomendar a quienes convocan y apoyan la iniciativa, que la Marcha no debe enfocarse en los “huesitos y las carnitas” del Senador y ganadero, sino en lo que éste representa. Con esa precisión, la Marcha podría ganar más simpatizantes y marchantes, en la medida en que la figura política despierta simpatías, odios y miedos, lo que podría hacerla fracasar. Y para que ello no ocurra, quienes convocan a Marchar contra Uribe, deben hacer un listado de los temas y asuntos públicos que, atravesados por el actuar político del señalado

convertidas en únicas y hegemónicas actividades, a las que se oponen los proyectos de vida de afros, indígenas y campesinos: la ganadería extensiva, el monocultivo y la gran minería a cielo abierto. Varias de esas prácticas y actividades antrópicas, están ancladas en el latifundio como único modelo viable para el país.

político y latifundista, ponen en evidencia el país premoderno, violento y conservador que defiende Uribe y los sectores de poder que él representa. Así entonces, la Marcha del 2 de diciembre debe centrarse en el rechazo al proyecto de país que sectores de poder político y económico insisten en mantener, usando la vigencia política2 de Uribe3, su mesianismo, combatividad y su interés de regresar al poder político, así sea en “cuerpo ajeno”. Uribe Vélez, como enemigo de la paz4 y la reconciliación, niega la existencia del conflicto armado interno. Su tesis negacionista5 sirve a los propósitos de quienes buscan ocultar que el proyecto paramilitar sirvió a los intereses económicos de agroindustriales, azucareros, ganaderos, empresas mineras, multinacionales y nacionales, entre otros, que de tiempo atrás expulsan de sus territorios a indígenas, afrocolombianos y campesinos, para imponer allí

el modelo de la plantación. Hay que Marchar este 2 de diciembre contra la vigencia del fenómeno paramilitar y contra los efectos sociales, económicos, políticos y culturales que dejó a lo largo y ancho del país. En especial, en sectores rurales y urbanos. Sumado a lo anterior, hay que Marchar en contra de las prácticas de producción económica en las que cree Uribe Vélez,

de sus procesos civilizatorios.

Así entonces, hay que salir a Marchar contra el debilitamiento de la institucionalidad estatal, en particular, la ambiental, durante los ocho años en los que Uribe Vélez mandó en Colombia.

Igualmente, hay que salir a marchar este 2 de diciembre, contra los Medios masivos7 y los periodistas que hicieron de Uribe el Mesías que el país estaba esperando. Sin duda, el político antioqueño es una invención mediática8. Su vigencia política se explica porque hay sectores sociales que simpatizan con su procacidad, su vulgaridad y ese carácter de “Macho frentero”, asociado antropológicamente a esa subcultura arriera que tanta admiración despierta en muchos colombianos.

El problema que afronta el país no es Uribe como persona e individuo, sino lo que él representa como Macho6, político, latifundista y ganadero. Nunca antes en un presidente, ex presidente y senador, confluyeron y confluyen tantos asuntos problemáticos para una sociedad y un Estado que se resisten a mantenerse en la más oscura premodernidad y precariedad

Por todo lo anterior, el 2 de diciembre hay que salir a marchar contra aquellos que se oponen al fin del conflicto armado, a la construcción de una paz estable y duradera y que buscan, a toda costa, eliminar, simbólica y físicamente, a indígenas, afros y campesinos. Uribe es apenas un eslabón en esa larga cadena de empresarios que buscan perpetuar la guerra.


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PARA ADOPTAR Y LEGITIMAR EL ACUERDO FINAL

Repetir el error del plebiscito de poner en los partidos políticos la sostenibilidad política del Acuerdo, es negarse a ver la realidad que se expresó en la segunda vuelta presidencial que le dio el mandato de la Paz y en la reacción social posterior al 2 de octubre que le permitió superar la derrota y reconducir el proceso. Antonio Madariaga Reales / Director Ejecutivo Corporación Viva la Ciudadanía

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e conoció el 14 de Noviembre que arribaron en La Habana a un nuevo Acuerdo Final para la Terminación del conflicto las delegaciones negociadoras de las Farc-EP y el Gobierno Colombiano. La sobria ceremonia en que realizó el anuncio tuvo entre otros dos Asuntos para resaltar. El primero de ellos es la utilización repetida del término definitivo para caracterizar el acuerdo alcanzado. Lo anterior se vería complementado con la declaración posterior del Jefe Negociador Humberto de la Calle cuando dijo que no existe margen para más negociaciones. El segundo aspecto que destacaremos es el que tiene que ver con el tono utilizado tanto por Iván Márquez como por de La Calle para insistir en que se habían tomado en cuenta la mayor parte de las sugerencias y anotaciones de los promotores del No. Se hizo énfasis en lo que ya todos sabíamos. No es aceptable ni para el Gobierno ni mucho menos para las Farc que el proceso termine con los máximos dirigentes de las Farc en la cárcel e inhabilitados para participar en política. Mantener esos criterios salvó

el acuerdo entre las partes pero algunas de las restricciones incorporadas, como la referida al área de restricción efectiva de la libertad van a significar sin duda limitaciones importantes para el ejercicio de la política. Pero lo más importante es que estos ajustes, precisiones y explicaciones dejaron clara para nosotros que es lo que sigue en juego en la sociedad colombiana. Como decíamos en nuestro anterior artículo se trata ni más ni menos que el enfrentamiento entre dos proyectos de sociedad. Ese enfrentamiento no tiene por lo tanto como único escenario el Acuerdo entre las Farc y el Gobierno sea este el de septiembre o el de noviembre. Más aún, su

escenario es la lucha por el poder político entre las fuerzas que quieren retroceder la Constitución de 1991, incorporando características de la Constitución de 1886 y quieren mantener el carácter rentista de la propiedad rural. La hipótesis más probable entonces es que el presidente Santos tramitará vía Congreso la adopción del Acuerdo, logrará éxito en esa tarea gracias a las amplias mayorías de que dispone, si es ayudado por la Corte Constitucional podrá revivir el fastrack, de manera expedita, si no utilizará la vía ordinaria para tener esa posibilidad en 6 meses. Lo importante es que el Centro Democrático seguirá oponiéndose a los acuerdos aun sabiendo que

será derrotado en el Congreso en el trámite de adopción y del desarrollo de normas para su implementación, porque su aspiración es ganar la presidencia y el control político del Estado en 2018 y echar atrás los aspectos esenciales del Acuerdo con las Farc-EP. Lo anterior sirve para decir una vez que ni siquiera las concesiones realizadas por las Farc en este Acuerdo dejarán satisfecho al Centro Democrático porque un acuerdo, cualquiera que esté sea, representa una opción poco o nada rentable para el proyecto de sociedad y para los intereses que el Centro Democrático representa. Debería por lo tanto el presidente reconocer que sólo la legitimidad que le otorgue a los acuerdos el mayoritario respaldo de amplios sectores de la sociedad, será también la garantía de que habrá quien defienda en 2018 los acuerdos e impida el revés que para estos significaría un triunfo Electoral del Centro Democrático. En tal sentido la propuesta de lograr una enorme cantidad de firmas que respaldan políticamente el acuerdo nos parecen, junto a las diferentes formas de movilización, la Cumbre por la Paz, el Encuentro Sindical por la paz, la Asamblea

preparatoria y el Congreso Nacional de Paz, los Encuentros Territoriales de paz, o los Cabildos, formas de legitimación ciudadana que el gobierno debería valorar y no poner como único camino el del Congreso. En términos sencillos y siguiendo lo ya expresado por distintos grupos, sectores y confluencias directamente al presidente, la interlocución con estos sectores y grupos es una obligación y una oportunidad para rodear el Acuerdo y darle sostenibilidad política. Repetir el error del plebiscito de poner en los partidos políticos la sostenibilidad política del Acuerdo, es negarse a ver la realidad que se expresó en la segunda vuelta presidencial que le dio el mandato de la Paz y en la reacción social posterior al 2 de octubre que le permitió superar la derrota y reconducir el proceso. Coda: Mientras tanto sigue la incertidumbre sobre la liberación de los secuestrados del ELN, aumentan los ataques de este grupo y del EPL, se producen confusas muertes de miembros de las Farc y el tiempo se agota. Es urgente iniciar el proceso de implementación.

REFLEXIONES SOBRE EL PROCESO DE PAZ EN COLOMBIA Corporación Construyendo Poder, Democracia y Paz -PODERPAZ-

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os diálogos de paz que el Gobierno Nacional de Juan Manuel Santos ha sostenido con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia desde el año 2012 representa un magno esfuerzo por encontrar una salida política y negociada al conflicto social y armado que vive nuestro país, el ACUERDO FINAL PARA LA TERMINACIÓN DEL CONFLICTO Y LA CONSTRUCCIÓN DE UNA PAZ ESTABLE Y DURADERA pone de presente grandes avances en la posibilidad de dar solución a las causas originarias del conflicto, principalmente, la inequidad en la distribución de la tierra, la violencia política, el problema de los cultivos de las plantas de uso ilícito, ha puesto los derechos de las víctimas en la centralidad del debate de los acuerdos, propone posibilidades de desarrollo rural, ha construido una propuesta de justicia transicional acorde con los estándares internacionales, que en general beneficia al conjunto de la sociedad colombiana y mantiene validez jurídica. En el momento actual, el Acuerdo, luego de una rediscusión y arreglo, a raíz de los resultado plebiscitarios del 2 de octubre, mecanismo de refrendación acordado, y que puso de presente

como una realidad política, la necesidad de incluir sectores sociales que se consideraron excluidos del mismo o que se negaron su participación, los partidarios del NO manifestaron “desear la paz” al igual que la mayoría de la sociedad colombiana, pero no estar de acuerdo con parte del contenido, y el máximo comandante de las FARC-EP reafirmó que “mantienen su voluntad de paz y reiteran su disposición de usar solamente la palabra como arma de construcción hacia el futuro”. Debido en gran medida a los vicios de violencia, corrupción y clientelismo de nuestra cultura y clases políticas se vieron seriamente afectadas la campañas que rodearon el plebiscito por la paz, el mayor defecto de nuestra democracia sale a la luz, el abstencionismo electoral, 62% por ciento de la población apta para votar no salió a las urnas, y el restante de la población que participó de los comisión, manifiesta no conocer la totalidad del contenido de lo acordado, la desinformación y el caudillismo marcaron la jornada, La diferencia en los resúltanos fue inferior al 1 % y nuestra sociedad se polarizo en sus opiniones. Una vez conocidos los resultados del plebiscito el presidente de la

república valiéndose de la facultad constitucional de negociar procesos de paz con las insurgencias llamó a los opositores para generar propuestas que condujeran a mejorar el contenido de los acuerdos, luego de reunirse sus representantes con los principales sectores políticos, partidos e incluso sectores religiosos, un total de 400 propuestas fueron presentadas en la mesa de La Habana para construir a partir de lo logrado un “mejor acuerdo” que permita una aprobación mayoritaria de la sociedad colombiana y legitime la puesta en práctica de una salida al conflicto armado. La sociedad civil que ha sufrido los efectos del conflicto, las víctimas, las zonas rurales más afectadas, apoyaron con ahínco los nuevos esfuerzos de diálogo, los estudiantes fueron los primeros en manifestarse, movilizaciones multitudinarias se originan alrededor de todo el territorio nacional, campamentos, caminatas, vigilias, foros y debates alrededor de mantener el cese bilateral al fuego y consolidar el proceso de paz. Miembros de sectores sociales y políticos, comunidades indígenas, comités promotores del SI, ONG´S, victimas, Organizaciones sociales de las personas con discapacidad,

sus familias, cuidadoras y cuidadores, comunidad LGBT, acompañantes internacionales, autorizados por el gobierno nacional se reunieron en la habana con Las FARC-EP, ante la posibilidad de transformar y complementar puntos de los acuerdos ya alcanzados por las partes, llamando la atención de diversos sectores, que no se quieren ver excluidos y algunos que demandan su inclusión. Dentro de las propuestas presentadas por partidarios del no, muchas de ellas fueron incluidas en los nuevos acuerdos, el jefe los equipos negociadores tanto del Gobierno Nacional como de las FACR-EP mantuvieron arduas rondas de negociaciones para dar discusión a todo el acumulado de propuestas para mejorar el acuerdo y complementar elementos necesarios, dando como resultado el ACUERDO DE LA ESPERANZA, presentado ante la opinión pública. Es un compromiso del conjunto de la sociedad colombiana, y en ello las organizaciones sociales y populares jugamos un rol fundamental en mantener nuestro optimismo y laboriosidad por la consolidación de este proceso de paz, que hoy como en muchos años no se había logrado, vemos próxima un

proceso de reconciliación nacional y reinserción a la vida civil de la insurgencia más significativa y antigua de la historia de Colombia, es por ello que estudiantes, mujeres, victimas, comunidades indígenas y afrodescendientes, LGBTI, organizaciones comunitarias y demás miembros de la sociedad civil organizados y no organizados, debemos trabajar por crear un escenario de concordia, reconciliación, pluralidad, respeto por la diferencia, participación política, solidaridad y demás valores de la cultura que abran caminos para la paz en nuestras comunidades y nuestros territorios. La paz que merece nuestro país no corresponde al mero silenciamiento de los fusiles, la nuestra debe ser una paz con justicia social, una paz con soluciones a los problemas que originaron el conflicto, una paz grande y necesaria, para ello recordemos las sabias palabras de una mujer luchadora por la paz en nuestra américa: “La paz no es solamente la ausencia de la guerra; mientras haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión difícilmente podremos alcanzar un mundo de paz”. RIGOBERTA MENCHÚ


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LA IMPLEMENTACIÓN DE LA PAZ: FAST-TRACKOSLOW-TRACK

El atolladero para la implementación del Nuevo Acuerdo está en la forma extraña o anómala como la Corte Constitucional ligó o condicionó la vigencia del Acto Legislativo No 01 de julio 7 del año 2016 que aprobó el método del Fast-Track a la aprobación en las urnas del plebiscito, y lo hizo posteriormente en agosto con una Sentencia C-379 / 2016 que, realizaba control de constitucionalidad a la Ley 1806 de 2016, Ley estatutaria que modificó el umbral del plebiscito y lo adecuó como apto para preguntarle a los colombianos si querían la paz a través de esos 6 acuerdos. Alberto Ramos Garbiras

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acto legislativo como forma de reforma a la Constitución (artículo 374), tiene vida propia al expedirlo el Congreso, o puede quedar condicionada su existencia por una Sentencia de la Corte constitucional que no detectó la inexequibilidad (inaplicación) por ser un derecho fundamental sometido a las urnas? El Congreso se equivocó también al cambiar la vigencia de la promulgación del Acto Legislativo del séptimo debate, que era inmediata a la expedición, trasladándola a la fecha de la refrendación. Ambas ramas del poder público se obnubilaron al avanzar sobre un mecanismo de participación improcedente para llevarlo a la decisión electoral.

as iniciales reflexiones sobre este dilema surgieron de una larga conversación de 2 horas que sostuve con Henry Acosta Patiño, el hombre clave del proceso de Paz, en Cali el 21 de octubre, después de afirmar él con vehemencia que una vez realizada la revisión de los 6 acuerdos con las propuestas de los sectores del NO nacería un Nuevo Acuerdo; que tendría vida propia; consideramos que era innecesario someterlo a refrendación por la potestad del Presidente de firmarlo en virtud a la legitimidad que obtuvo en la segunda vuelta: el mandato por la PAZ. Y por otras consideraciones que ya he expuesto en tres artículos. Precisamente parte de nuestro diálogo giró sobre mi primer artículo titulado “El Pos plebiscito” publicado el 14 de octubre en el Semanario Virtual Caja de Herramientas, y evaluamos el escenario 8 del artículo sobre como destrabar la PAZ. Pensamos, lo que debería sopesarse era la forma de la implementación que también al ser un nuevo acuerdo habilita las facultades del acto legislativo 01 de julio 2016 ya que no se han suspendido por una nueva decisión en las urnas, además porque la refrendación puede realizarse ante el Congreso en pleno citado a sesiones extraordinarias (artículo 138, inciso 3 de la Constitución), activando de ipso facto el Fast-track. Entonces nos surgió la reflexión de que si la Corte Constitucional expresó que de darse la refrendación, o sea que prosperara el plebiscito, ello no significaba la incorporación de ningún texto al ordenamiento jurídico porque el plebiscito era un acto meramente político. De allí que nos asaltó la pregunta si ese acto equivocado,

de buena fe y voluntario del Presidente Santos (Henry Acosta tres veces le transmitió el mensaje de la inconveniencia), ¿podría ser amarrado a la no implementación si ese plebiscito no pasaba? Pero dejó la Corte una ventana abierta al expresar que, la falta de votos suficientes sería la imposibilidad jurídica para el Presidente de adelantar la implementación de esos acuerdos en específico, puesto que, fue una decisión de política pública la que se sometió a la refrendación popular. Por eso la consecuencia es que el Nuevo Acuerdo como Acuerdo Final, distinto al negado en las urnas, puede implementarse con el fast-track (vía rápida) porque es otro Acuerdo que no ha sido sometido a refrendación plebiscitaria porque no se necesita –como lo expliqué en el artículo titulado

“Estulticias que afectan la Paz”, publicado en ése mismo Semanario Virtual Caja de Herramientas el día 4 de noviembre– pero si, buscar otra forma de refrendación. El atolladero para la implementación del Nuevo Acuerdo está en la forma extraña o anómala como la Corte Constitucional ligó o condicionó la vigencia del Acto Legislativo No 01 de julio 7 del año 2016 que aprobó el método del Fast-Track a la aprobación en las urnas del plebiscito, y lo hizo posteriormente en agosto con una Sentencia C-379 /2016 que, realizaba control de constitucionalidad a la Ley 1806 de 2016, Ley estatutaria que modificó el umbral del plebiscito y lo adecuó como apto para preguntarle a los colombianos si querían la paz a través de esos 6 acuerdos. De forma extraña, porque no se percataron que el plebiscito era improcedente debiendo declarar la inexequibilidad, dejaron avanzar el error del Presidente y el error del Congreso de someter la Paz a un manoseo electoral, siendo la Paz un derecho contramayoritario. Como lo expuso Rodrigo Uprimny, “si las sentencias de los jueces constitucionales tienen un impacto jurídico y político considerables, es muy importante que sus decisiones no dependan de su puro capricho, sino que puedan ser fundamentadas y controladas racional y normativamente”. Y agrega Uprimny que, “por ser el órgano de cierre del ordenamiento jurídico, sus eventuales errores o abusos carecen entonces de posibilidades de rectificación”. “Los jueces constitucionales parecen entonces representar un poder cuyas decisiones suelen estar desprovistas de controles, con lo cual devienen, en cierta medida, un órgano jurídicamente

infalible”. (Uprimny, 2001)2. En un análisis anterior expresé, “… al incluir modificaciones nace un Nuevo Acuerdo que, si podría implementarse porque no ha sido sometido a refrendación innecesaria pues la legitimidad y el mandato para lograr la Paz la tiene el Presidente. También de forma intonsa dice la Sentencia C-379 del año 2016 que, “se ponga a consideración del pueblo una nueva decisión con unas condiciones diferentes a las que inicialmente se pactaron y fruto de una renegociación del Acuerdo anterior o la suscripción de uno nuevo…”. Ese poner a consideración del pueblo el Nuevo Acuerdo es potestativo del Presidente y no de la Corte Constitucional porque esta se extralimitó al indicar refrendación de algo que no exige la constitución, y sobre una reforma a la ley estatutaria que erróneamente lo adecuó y reguló. Se extralimitó porque la alta Corte tiene facultad, “solo por vicios de procedimiento en su convocatoria y realización (artículo 241 citado), y no para ordenar realizarlo”. El artículo 77 de la Ley 134 de 1994 deja esa potestad de convocar un plebiscito sólo al Presidente con la firma de todos los ministros. Y la PAZ es contramayoritaria por ser un derecho fundamental y un propósito teleológico de la Constitución según el preámbulo, el artículo 1 (la prevalencia del interés general) y el artículo 2 (mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia); entonces no puede ser expuesta a campañas y discusiones, por fuera de las que pactaron las partes que han soportado los enfrentamientos de la guerra. Y por ser el Presidente el depositario de la soberanía (artículo 3, Constitución). La pregunta que surge para los constitucionalistas es esta: ¿Un

Pero como ahora con el nuevo acuerdo no se va a refrendar (sería doble error, por ser inconstitucional), y es otro Acuerdo, no negado, entonces las facultades del Fast-Track son aplicables y no las del Slow-Track (vía lenta o común en los trámites del Congreso). Aplicable porque el artículo 5 del Acto Legislativo contempla que rige a partir de la refrendación y en este caso la refrendación se hará ante el Congreso en pleno por su calidad de Constituyente secundario delegado por el pueblo, donde se conjuga la voluntad general de la Nación según la teoría constitucional. El diccionario de la Real Academia de la Lengua, dice de la palabra refrendar, en tres acepciones aplicables: 1) corroborar algo afirmándolo; 2) volver a ejecutar o repetir la acción que se había hecho; 3) autorizar un documento por medio de la firma de persona hábil para ello. Y de eso se trata. En ninguna parte de la Constitución y de la Ley estatutaria se dice que la refrendación solo se hace a través de un mecanismo de participación. La Constitución en el artículo 103 tiene el voto como el primer mecanismo de participación. Y puede ser el voto de los delegados del pueblo (el Congreso) quien refrende lo firmado por el Presidente y la contraparte, las Farc, y al ser ese cuerpo colegiado quien expidió el Acto Legislativo, allí mismo se activará lo que fue condicionado a la refrendación, en este caso el nuevo acuerdo. Refrendación que para revestirla de mayor legitimidad podría hacerse ante delegados de la sociedad civil que se han mostrado activos después del 2 de octubre con la consigna de Acuerdo Ya, así se consolida el pacto nacional popular, y delegados de los organismos multilaterales a los que pertenece Colombia (ONU, OEA, UNASUR, NOAL, Pacto Andino, Alianza del Pacífico y otros), más los presidentes invitados de países amigos. Si algunos consejos torvos tratan de inducir hacia la implementación común, lenta u ordinaria del Congreso (Slow-Track), corremos el riesgo inminente de que se reinicie la guerra interna.


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ACRÓSTICO PROCLAMANDO HASTA SIEMPRE Y HASTA PRONTO NELSON JULIÁN VILLAMIZAR. Haz sido muy importante en mi vida y siempre hemos estado en las buenas y las malas Aunque la distancia nos separe será temporalmente tú lo sabes yo también Sé que no estás derrotado, es nuevo aliento necesario continuar para nuestros proyectos de vida. Todos y todas sabemos del liderazgo que siempre has demostrado en beneficio de los demás. Aunque el camino este lleno de piedras y espinas nunca te han detenido, adelante siempre. Si la vida fuera fácil no sería tan hermosa como lo es y no tendríamos que lucharla tanto Inigualable e incomparable eres lleno de amor por la vida y la solidaridad siempre está contigo El gran Dios unió nuestras vidas hace 32 años nos dio el tesoro más grande un hogar con hijos. Me diste amor y amor recibiste del bueno del que nunca se acaba porque es puro y transparente Paz quiero que te acompañe siempre desde lo más profundo de tu corazón Resolviendo y corrigiendo errores es sabio, valorando lo que eres y lo que la vida te da En un futuro no muy lejano se consolidaran tus sueños y los sueños colectivos de familia. Nelson quiero que sepas que agradezco a Dios por tu presencia en la mía, no es casualidad, Es más bien una causalidad para unir nuestros liderazgos acompañados de amor y felicidad. La vida nos ha dado grandes oportunidades que no hemos sabido canalizar lo reconozco. Siempre hemos liderado grandes batallas y siempre juntos en las altas y en las bajas Ojala que te vaya bonito como dice la canción... El compromiso con nuestras comunidades Nunca lo dejaremos son parte de nuestras prioridades y cuentas con una familia que siempre esta. Jamás te sientas solo en mi haz encontrado la esposa, la amiga, la madre de tus hijos Unidos siempre fuimos grandes y lo seguiremos siendo, solo vas de vacaciones. La vida dicen que es corta hasta el momento en que cambiamos de dimensión. Importante que no te sueltes de la mano de Dios y reconozcas su grandeza, la luz iluminara tu camino Así tus días y los míos serán más fáciles pero sobre todo quiero que agradezcas a Nuestro Dios cada bendición que nos ha dado a cada instante y no hemos sabido agradecer. Vamos a propiciar con la ley de atracción lo mejor para nuestras familias y la discapacidad. Ilusiones y sueños se deben hacer realidad, no todo en la vida es lo económico. Las luchas no son en vano al final del día siempre hay una compensa y es la vida misma. La sabiduría de la felicidad está en el aprovechamiento de cada instante y la lealtad siempre te Acompañe, esto me ha dado éxito satisfacción tranquilidad de ser autentica y leal Me gustaría que cambies algunos patrones que han detenido muchos éxitos en tu vida, parecen Insignificantes pero si los analizas te das cuenta de esos porqués, la familia siempre es lo primero. Zarpa, aborda y navega en el barco del futuro que es el del éxito y la felicidad. Así encontraras tranquilidad y amor y a donde vayas de lo que llevas encontraras

Resta tan solo decirte lo que ya sabes…esta es tu familia que haz rescatado para siempre. MAYALESU


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