ESTRATEGIAS PARA PREVENIR EL ABANDONO ESCOLAR
1.-Introducción:
Las causas que provocan que un alumno no alcance el nivel de rendimiento y pedagógico esperado para su edad son muy variadas. La desmotivación, la falta de concentración, la desorganización, la ansiedad ante un examen, los problemas de memoria, la falta de autoestima, los deficientes hábitos de estudio, etc. pueden dificultar que el estudiante obtenga los resultados académicos esperados.
La finalidad de las estrategias y técnicas es simplificar y optimizar el aprendizaje. A menudo, el esfuerzo que dedica un alumno al estudio no se corresponde a los resultados obtenidos y el secreto no es estudiar más, sino buscar la actitud adecuada ante el aprendizaje, aprovechar al máximo los recursos y aplicar estrategias que faciliten un aprendizaje más metódico y personalizado.
Si
el
alumnado
no
trabaja
con
unas estrategias
o
técnicas
de
estudio adecuadas para él puede ir avanzando en las etapas educativas con dificultad y con problemas para interiorizar los contenidos, a la larga, la falta de estrategias puede dificultar el estudio de una carrera universitaria o ciclo superior de Formación Profesional. Por eso, un buen aprendizaje pasa por tener un buen equipo de habilidades de estudio y saber cuándo usarlas.
2.-El desafío de superar el fracaso
La retención escolar de los alumnos y las alumnas que inician su escolaridad constituye un desafío tanto para cada docente y cada institución como para el
sistema educativo en su conjunto. Resulta necesario hacer converger los esfuerzos de los equipos docentes de cada escuela para favorecer los aprendizajes de los niños y las niñas, teniendo en cuenta las características de las experiencias que tienen a lo largo de todo su itinerario escolar. La integración, convergencia y coherencia de los esfuerzos de cada miembro del sistema es crucial a fin de alcanzar la retención escolar. Favorecer y mejorar la retención de los sistemas educativos es una responsabilidad de todos los constituyentes del sistema, quienes deben desarrollar
diferentes
estrategias
según
las
áreas
en
las
que
se
desempeñen. En lo que respecta al nivel de las instituciones, sería de relevante importancia: A)Poder reconocer cuando la escuela registra índices de fracaso escolar, cuestión que debería ser tratada como un problema, desnaturalizándose los fenómenos de la repitencia, la no concurrencia a exámenes, las inasistencias reiteradas, las bajas calificaciones que persisten a lo largo del ciclo lectivo. B)Conocer la magnitud y las características de los problemas en la escuela e identificar a los alumnos y las alumnas más afectados. Desde la perspectiva del nivel central o regional, se trata de problemas que se traducen en porcentajes, en resultados estadísticos, más o menos favorables. C)Diseñar acciones adecuadas para apoyar a los alumnos y las alumnas con mayores dificultades en función de sus particularidades. Estas acciones deberían considerar las características de los problemas a atender y también los recursos con los que se cuenta para superarlos (el equipo docente, los mismos alumnos y alumnas, los recursos y materiales didácticos). D)Integrar las acciones de la institución a fin de que la retención se considere un componente crucial de la identidad institucional y una prioridad en las tareas que se encaran.
Hay
que
continuar,
participación
de
profundizar,
todas
las
instalar
personas
y
y
consolidar
organizaciones
con
amplia
involucradas,
orientadas a:
A)Prevenir que los alumnos y las alumnas repitan o recursen el año. B)Evitar que los alumnos y las alumnas que repiten o recursan, “repitan” el recorrido de actividades. C)Promover que los alumnos y las alumnas que repitieron o recursaron reparen y recuperen el desfasaje y el trauma que han sufrido.
Todo ello con una aplicación conciente, monitoreada y cooperativa de estrategias didácticas y de organización institucional que mejore las oportunidades de aprendizaje procurando la promoción total de los alumnos y las alumnas.
3.-¿ QUE PODEMOS HACER ANTE EL FRACASO? Parece claro que en el caso de un fracaso escolar primario y habitual, se deberá realizar una exhaustiva exploración médica y psicológica del niño, que descarte algún tipo de trastorno específico, o la existencia de un problema lector-escritor, déficit de atención, bajo nivel intelectual, etc, para poder
tomas
las
medidas
oportunas,
estableciendo
un
diagnóstico precoz que es fundamental en muchos casos. En el caso del fracaso escolar circunstancial las medidas a tomar son en primer lugar analizar todo el grupo ( padres, educadores, equipo psicopedagógico
etc.)
las
circunstancias
concretas
que
hayan
podido motivar la desgana o la apatía de ese alumno, como las cuestiones personales, sobretodo en la adolescencia, problemas con el sexo opuesto, novios, sentimientos de inferioridad o inadecuación, que suele hasta considerarse normal una cierta inflexión. Durante
toda
esta
etapa
no
es
difícil encontrar problemas
de
ansiedad, depresiones, miedos y complejos, consecuencia lógica de la etapa
evolutiva
que
presentan
y
que
serán
más
acusados,
cuanto
más
desinformación tengan sobre esta etapa, padres y educadores. Analizar si las circunstancias familiares, atraviesan una etapa especial que puede haber afectado al chico, o son demasiado exigentes o perfeccionistas, o bien si existe un ambiente malo para el estudio. Hacer por tanto un claro auto-examen de la situación y actitud con respecto al alumno. También debe averiguarse también si ha existido por parte de algún miembro de la comunidad educativa críticas o humillaciones, por parte de algún docente y de los propios compañeros, que hayan minado el interés del alumno. En este sentido existen interesantes estudios sobre el “ bullying” o acoso en las escuelas. Por otra parte, todos sabemos que la socialización es importante. No es raro, que un chico
suspenda el curso cuando cambia de
centro, o
cuando tiene problemas de relación con los demás, si carece por tanto de habilidades sociales. Habría que analizar también este contexto. Una vez hallada la causa debe ponerse el remedio, con la ayuda del psicólogo en el caso de problemas personales o emocionales o de socialización
(depresiones, crisis de
angustia,
ansiedad,
introversión
exagerada, timidez, drogadicción) que nos orientará hacia el tratamiento adecuado , o bien reconduciendo las conductas familiares equivocadas, reconociendo los propios errores, si hemos sido capaces de detectarlos o con la terapia psicológica adecuada. En el caso de que la causa esté en la comunidad educativa abordando inmediatamente el problema para tratar de solventarlo y si es necesario realizar un cambio de centro. Por tanto las herramientas que son fundamentales para conseguir un buen trabajo, lo son en todas las profesiones y en la del estudiante, esas herramientas son imprescindibles : son las famosas técnicas de estudio que facilitarán un buen rendimiento. Los puntos principales son los siguientes. Forma física para el estudio: aquí mencionaremos una correcta alimentación y un descanso adecuado, el estudiante necesita cuando es mayor más de 8 horas de sueño , y cuando son más pequeños aún más
horas de descaso. También es importante para su equilibrio psicofísico, la realización de algún deporte. Entorno adecuado: Sitio para él, si es posible, donde no haya muchas interrupciones o jaleo, en el que pueda tener sus cosas, con un ambiente normal a su alrededor, con una familia en la que se respeten los tiempos de ocio y de trabajo. Herramientas adecuadas: Lectura rápida y comprensiva. Esquemas resúmenes, este. Planificación-organización: No dejarlo todo para el día antes del examen, procurar ir día a día, tenerlo todo organizado de antemano, con descansos cada hora, etc... Asimilación de lo estudiado: comprensión de lo leído, memorización adecuada, saber escuchar en clase, tener atención, análisis y síntesis, etc.…
4.-BIBLIOGRAFÍA:
http://www.educaweb.com/noticia/2010/01/25/estrategias-aprendizajeevitar-fracaso-escolar-14054.html
http://www.csicsif.es/andalucia/modules/mod_ense/revista/pdf/Numero_25 /MARIA_DEL_CARMEN_RUIZ_CORDOBA01.pdf
http://www.unicef.org/argentina/spanish/PROPUESTA_web.pdf
http://www.psicopedagogia.com/articulos/?articulo=454