Para salir del desastre Nacional ¡Gobierno Popular y Asamblea Nacional Constituyente¡ ¡Construyamos la Organización Política Nacional de los T rabajadores y el Pueblo! TODOS AL CONGRESO D E LA OPN Y AL M I T I N D E CLAUSURA Ciudad de México, sábado 27 de agosto (10 am) y domingo 28 (12 horas)
Al pueblo t rabajador: El 30 de octubre de 2010 Martín Esparza, secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas llamó a construir una fuerza política nacional para expulsar de la conducción del país a los responsables del desastre nacional. A ese llamado, realizado en el Estadio Azteca ante más de 60 mil personas, hemos dado nuestra adhesión, dirigentes y activistas de organizaciones obreras, campesinas, indígenas, populares y políticas de todas las entidades de la república para dar paso a la fundación de una Organización Política Nacional de los trabajadores y el pueblo. Los motivos para nuestra determinación están a la vista. El país vive una situación de desastre. El saqueo y explotación imperialistas que sufre la nación, se acentúa a niveles que conducen a una catástrofe nacional. A esto se suma la política que aplica el régimen entreguista y destructor de los derechos y condiciones de vida de las grandes mayorías de la población trabajadora y del pueblo. En este momento, la pobreza afecta ya al 70 por ciento de la población nacional. La vida en las comunidades indígenas y los cinturones de miseria de las ciudades, es un infierno. En tanto los oligarcas acumulan riquezas increíbles a costa de la explotación de los trabajadores y el saqueo de los bienes naturales y la propiedad pública y social. 8 millones de jóvenes no tienen ni empleo ni escuela. Slim, Larrea, Salinas Pliego y Azcárraga, entre otros, son algunos de los grandes ladrones que provocan la ruina de la nación y la miseria de nuestro pueblo. Ellos y los políticos que están a su servicio, convierten la soberanía nacional en una caricatura. La firma del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá en 1994, formalizó el sometimiento de nuestro país a los intereses de las trasnacionales. La industria nacional y la producción agropecuaria han sido
desmanteladas. La adopción de la Iniciativa Mérida, prolongación de la política entreguista del TLCAN, ha implicado el desarrollo de la guerra del narcotráfico que cuenta ya con 50 mil muertos. Calderón pactó secretamente con el presidente Obama la presencia de policías y militares estadounidenses encargados de dirigir esa guerra violando toda soberanía nacional.
¡A detener el desastre nacional! El 90 por ciento del sistema financiero pasó a manos extranjeras y el monto de la deuda nacional se dispara y amenaza con llevar al país a una crisis cualitativamente superior a la de 1982. En clara violación al artículo 27 de la constitución, el 43 por ciento de la producción de energía eléctrica está en manos privadas; al igual que buena parte de los procesos de exploración, producción y refinación de Pemex, empresa pública que durante el gobierno de Calderón ha registrado pérdidas por 273 mil millones de pesos, a pesar de los altos precios del crudo en los mercados internacionales. Al ritmo que vamos México se convertirá en importador de crudo en 2017. Las minas y el agua han sido asaltadas por empresas extranjeras y por la oligarquía mexicana, al mismo tiempo que se pierde más y más la soberanía alimentaria. México importa la mitad de la comida que consume; cuando los monopolios del agronegocio especulan con los precios de los alimentos e imponen patrones de producción y consumo que multiplican la diabetes, el cáncer y todo tipo de enfermedades.
¡Calderón intenta dar un salto en su guer ra!
En la próxima sesión de las cámaras legislativas, el gobierno quiere dar un salto en la guerra contra el pueblo trabajador, haciendo aprobar un paquete de "contrarreformas" entre las cuales:
La laboral que llevaría a la destrucción del derecho a la contratación colectiva, a la individualización de la relaciones de trabajo, a la negación de las prestaciones, al trabajo por horas, etc. Se pretende liquidar los artículos de Ley Federal del Trabajo que favorecen a los trabajadores y desaparecer a las organizaciones obreras más antiguas y combativas: al Sindicato Mexicano de Electricistas y al Sindicato Minero entre otros. La de seguridad nacional que con el pretexto de la lucha contra el narcotráfico, llevaría al país a la militarización y daría al poder ejecutivo la facultad de utilizar las fuerzas armadas contra cualquier protesta social, electoral, obrera, etc. La de Asociaciones público privadas que significaría legalizar al estado como un mero gestor y administrador de contratos para el sector privado, es decir, como un gestor de las empresas imperialistas y de la oligarquía local. De aprobarse esa ley se entregaría totalmente el petróleo, la electricidad, los minerales, los recursos acuíferos y eólicos. Las cámaras legislativas están corrompidas hasta la médula. Hoy todos los partidos institucionales están de acuerdo en lo esencial de las contrarreformas. No hay duda, la oligarquía económica y política y el imperialismo configuran un escenario de guerra que facilite la instalación de una dictadura civil-militar, la que llevaría adelante la entrega total de las riquezas de la nación y la destrucción de todos los derechos arrancados por el pueblo a lo largo de dos siglos de luchas.
¡O son ellos o somos nosotros! No existe más salida para los Trabajadores y el Pueblo
que la resistencia unificada y organizada: Esa resistencia existe y tiende a desarrollarse, como lo muestran los trabajadores electricistas, profesores, mineros, de Mexicana de Aviación, entre otros, que buscan recuperar su trabajo y sus contratos colectivos y las comunidades campesinas que defienden sus bosques, sus tierras, y los jóvenes y las familias de las víctimas inocentes de la guerra que se movilizan diciendo: “¡alto a la guerra y a la militarización!”, “¡no más sangre!”. Las rebeliones de los pueblos del Norte de África y del Medio Oriente, de América Latina (Chile) y el Caribe, la lucha de los trabajadores de Europa y de los mismos Estados Unidos (Wisconsin), muestran cómo crece la resistencia a la guerra que han declarado los gobiernos imperialistas y los gobiernos oligárquicos en todo el mundo contra los trabajadores y los pueblos. Estas luchas son un aliciente para el desarrollo de la resistencia del pueblo mexicano. La Organización Política Nacional de Trabajadores y el Pueblo (OPN) surge para contribuir a dar a la lucha de los trabajadores una expresión política independiente. La OPN considera que la única forma consecuente de defender a la nación y los derechos económicos y sociales del pueblo trabajador es luchando por echar del poder a la oligarquía económica y sus representantes políticos. La OPN se compromete a trabajar por una auténtica representación democrática del pueblo; por un gobierno de trabajadores que haga realidad una Asamblea Nacional Constituyente. La Organización Política Nacional de Trabajadores y el Pueblo se pronuncia por una política de alianzas y acuerdos puntuales con los movimientos sociales, organizaciones políticas, sindicales,..., por las demandas del pueblo y en defensa de la soberanía y unidad de la nación. La OPN se define a la vez como una organización internacionalista dispuesta a solidarizarse con las luchas de los pueblos de nuestra América y las de la clase trabajadora y los pueblos del mundo.
A los T rabajadores y al Pueblo de México: Los invitamos a todos y todas a unirse a este gran esfuerzo en cualquier lugar del país donde se encuentren, poniéndose en contacto con la comisión organizadora de la OPN. Los invitamos a preparar nuestro CONGRESO CONSTITUTIVO que se realizará el sábado 27 de agosto en el Sindicato Mexicano de Electricistas ubicado en Insurgentes Centro 98, Col. Tabacalera, Delegación Cuauhtémoc, México, Distrito Federal (cerca del Metro Revolución) y al MITIN PÚBLICO con el que concluirán los trabajos al día siguiente, domingo 28 de agosto, a las 12 del día, en el Palacio de los Deportes ubicado en el Deportivo Magdalena Mixhuca, Av. Río Churubusco y Añil s/n, Col. Granjas México, México, Distrito Federal (cerca del Metro Velodromo).
opn.mex@gmail.com www.opnmex.org
Tels. (55) 55-10-94-34 y (55) 55-47-78-75