MURCIALOVE XXI - El número Yankee

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CLAUDIA “Este verano me fui a Cabo Verde. Allí conocí a toda mi familia: mis tíos, primos, etc. Aquí sólo vivo con mis padres y mis hermanas. Este viaje me hizo mucha ilusión porque nunca había salido de España. Sin embargo, nunca podría vivir allí... soy muy cosmopolita: me gusta la ciudad, su gente, hacer cosas, ver exposiciones…”

¿Y qué te da más miedo en la vida? “La gente, porque las opiniones de las personas a veces son muy duras… tienes que tener mucha fuerza, mucha voluntad para que no te afecten de una forma u otra, para que las constantes críticas no te hundan. Es un poco contradictorio con lo que acabo de decir, porque me gusta vivir en la ciudad con gente, pero es imposible conocer a todo el mundo: hay personas que al final te terminan fallando, a veces sin ningún motivo.”


cine Y ORGULLO AMERICANO Por Teresa Zafra

Tengo un primo Nacido el 4 julio (1989), una cosa de lo más americana. Bueno, él lo celebra como un cumpleaños normal, sin bandera, fuegos artificiales ni barbacoa. Por otro lado, lo de los fuegos artificiales es una pena que no lo haga. Bueno, siempre se ha sabido que los americanos son muy suyos celebrando y homenajeándose. Un claro ejemplo: Buzz dando los motivos por los que salvar a Buddy en Toy Story 2 (2000). A día de hoy todavía pienso que hacen bien, pero que no se quejen si El final de los días (1999) les llega antes, porque como siempre digo, a ellos les pasará primero. Y sobre todo, ellos tienen a los mejores de los mejores para poder aniquilar a los invasores. Además, si no fuera por dichas invasiones no tendrían su Independence Day (1996), gracias al cual, el resto del mundo se

terminó de convencer que en el Área 51 tienen a sus marcianos y ellos lo celebraron al más estilo puro. Y fijaos si se les dio bien que se van a inventar otro día de la independencia. Es cierto que alardean de sí mismos, pero también son duros, porque no nos veo a nosotros mostrando en una serie los tejemanejes de la política española a lo House of Cards (2013) o, en un largometraje, cómo ocultar todo aquello que los ciudadanos de a pié no debemos saber como en Los idus de Marzo (2011). Pero por ahora su amor propio es más grande, porque, ¿qué otro país tiene su propio Capitán? ¿Y además repetido y con Liga de la Justicia incluida?

siempre se ha sabido que los americanos son muy suyos celebrando y homenajeándose




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SUPERHร ROES MADE IN SPAIN Por Jose Ulises Ferrรกndiz


David Rubín Cuando hablamos de superhéroes pensamos siempre en cómics norteamericanos, y no es de extrañar, ya que este género de la narrativa ilustrada forma parte de la historia literaria de Estados Unidos tanto como autores de la talla de Allan Poe, Hemingway, Twain o Stephen King, entre otros tantos. Pero, a pesar de todo, los superhéroes han sido a nivel mundial, los personajes de cuna de muchos jóvenes que han nacido, se han criado y han soñado cada noche con sus vengadores y justicieros favoritos de Jack Kirby o Stan Lee. Uno de los autores más reconocidos de este género en España es David Rubín, a quien tuve la suerte de conocer durante una breve visita a Murcia y compartir con él uno de los días más felices de su vida. Tras publicar en España sus novelas El Héroe y Beowulf, entre otros títulos, y ser un éxito rotundo, el año pasado logró alcanzar el mercado norteamericano gracias a El momento de Aurora West, un spin-off del conocido Battling Boy de Paul Pope. El Héroe (vol. 1 y 2) nos cuenta la historia de los doce trabajos realizados por el semidiós Hércules. Conforme avanza su vida y realiza sus trabajos, el personaje crece en un entorno cuyo paralelismo con la época actual es inevitable, con críticas y alusiones que no nos parecerán muy alejadas tanto social como personalmente. Pero si alguien da completamente el perfil de héroe norteamericano, esa es Aurora West. En este caso, la joven heroína se pone en el papel protagonista desbancando así la más que saturada línea de superhéroes masculinos que hasta ahora ha primado en el mercado del cómic americano. Rompe así con un tópico, a la par que con otros muchos. Una guerrera, con una vida complicada y que tratará de llegar muy lejos gracias a la mano de David Rubín, uno de los más prometedores ilustradores de España hoy día y a su nueva novela gráfica El momento de Aurora West.


LOS ANGELES (EEUU) LORCA

¿Has estado alguna vez en el campo de lorca y has visto todas las luces de las casas de noche? hay quien dice que tiene un gran parecido con los ángeles. ¿Qué opinas?



CHARO UNA EMBAJADORA DE MURCIA EN EEUU



Es posible que no sepas que una murciana ha aparecido en la serie “El Barco del Amor”, o en un anuncio de Pepsi Diet con Ray Charles, o que la han caracterizado con un personaje de los Simpsons y de una película de animación “Pulgarcita” o en uno de los solicitados anuncios de la Super Bowl, o en series como “Aquellos maravillosos 70 y “Las Vegas”… Pues sí, existe, y esa mujer se llama Charo, nacida en Murcia hace X años (la fecha de su nacimiento exacto es una intriga) ya a los 15 años fue la primera mujer en casarse en el hotel Caesars Palace de las Vegas con un hombre de 66 para poder actuar en locales nocturnos. En Estados Unidos la reconocen bajo la frase “Cuchi-chuci” por ser el título de su primer album que se convirtió en un éxito y entre los logros de su carrera destacan multitud de apariciones en programas de televisión, películas y discos. Una mujer que por su forma de actuar y vestir en los escenarios no pasó desapercibida para nadie. Charo también es una seria guitarrista que consiguió ser la mejor guitarrista de flamenco según la revista “Guitar Player Magazine”. En definitiva, un personaje singular no muy conocido en nuestra tierra pero que ha llevado el nombre de Murcia allá por donde ha ido.



Una tarde prendida del cielo (1ª parte) Por: Agustín Foulquié

… Dime. La voz del agente Paco sonaba meliflua, como si acabara de salir de una ensoñación cuya espesura me disponía a tasar. … ¿Dónde estás? … Aparcado frente al chalet, en la acera de enfrente, a unos cincuenta metros a la izquierda de la puerta, exactamente donde usted me ordenó detenerme —me ha detallado con retintín—. … ¿No te habrás dormido? —le he reprochado prematuramente—. … Si me hubiera dormido no estaría hablando con usted —ha sido la estentórea respuesta de un Paco definitivamente despierto—. … No te pregunto si ahora estás dormido, sino si lo

estabas hace un momento. … La verdad es que ganas no me faltan —me ha retado muy ufano—. … Para el carro, Paco, que te conozco —lo he cortado en seco—, y sigue ojo avizor, suponiendo que lo estés: la jefa de la banda tiene que estar a punto de salir. … Pues a ver si es verdad, porque me está empezando a dar hambre y… A esa conjunción copulativa, de pronto colgada del silencio impuesto en las ondas, se le ha birlado la posibilidad de unir en un todo dos elementos (un bocadillo, una tapa o un pincho, el primero de ellos, y el cuerpo de la jefa de la banda, como un alimento de dioses, el segundo) sobre cuya prioridad en hacerse realidad tenía serias dudas. … Paco, ¿me oyes? ¿Pasa algo?


… Me cago en la leche puta. … ¿Qué pasa? —he atinado a decir con voz temblona—. … Pasa que acaba de detenerse una furgoneta de color negro frente a la puerta del garaje del chalet. ¿Me oye, comisario? … No jodas —apenas he sido capaz de balbucir—. … Para polvos estoy yo. … ¿Y la jefa de la banda? … Dentro, supongo. … ¿Dentro de dónde? … ¿De dónde va a ser? Si la he visto entrar en el chalet y no la he visto salir, es porque está dentro, a no ser que sepa volar —ha reaccionado Paco con una ironía que precisaba de un valioso resto de lucidez para existir—. … Déjate de misterios y dime qué ves. … Veo la furgoneta cerrada a cal y canto. … Ya lo supongo, pero alguien la habrá llevado hasta allí. … Evidentemente, a no ser que algunos vehículos a motor sean papaces de ir de aquí para allá según les dicte su voluntad, suponiendo que la tengan. … ¿Lleva la furgoneta algún tipo de identificación? … Nada, aparte de una antena telescópica, ruedas radiales y cristales tintados. Me juego el cuello a que es del CNI. … No digas disparates ¿Qué iba a hacer un equipo del CNI en el chalet? Aún vagaban esas últimas palabras por los axones de mi cada vez más atribulado cerebro, cuando la voz del agente Paco me ha devuelto de golpe a la realidad. … Acaba de detenerse otro vehículo a veinte metros del chalet—. … Serán los vecinos —he aventurado—. … Serán, pero los de dentro siguen dentro.

… ¿No se ha bajado nadie del coche? … Ni un alma. La lógica no parecía dispuesta a dar señales de vida en toda la tarde. … Qué raro. ¿Y qué marca de coche es? … Un deportivo de dos puertas de color rojo. Espere un momento. La cortante exigencia de Paco me ha sonado a peligro inminente. … ¿Qué pasa? … Se ha abierto la puerta del garaje. … ¿De cuál de los dos garajes se ha abierto la puerta? … No sabía que el chalet tuviera dos garajes. … No tiene dos garajes. Me refiero al de los vecinos. … ¿Los vecinos tienen dos garajes? … Tienen un garaje y tres perros. … ¿Y dónde están? … El garaje supongo que estará donde siempre ha estado y en cuanto a los perros, lo más probable es que estén correteando por el jardín o escondidos por ahí. … ¿Dentro del garaje? … Dentro del garaje estará el coche y en la caseta los perros, suponiendo que siga estando donde antes estaba. … La caseta sigue estando en el mismo sitio, vamos digo yo que con lo que debe pesar no irán con ella de aquí para allá, pero no veo ningún perro. … Entonces los del deportivo no son los vecinos. … ¿No me diga que los vecinos pasean a sus tres perros en un deportivo? … No, los pasean en su avión privado —he chillado, aún más descompuesto de lo que es habitual en mí—. … Joder, qué carácter. … ¿Se ha bajado alguien de la furgoneta? … ¿De qué furgoneta? ¿No me diga que no sabe


distinguir un deportivo de una furgoneta? … Me refiero a la que hay aparcada frente al garaje. … ¿Frente a qué garaje? … Frente al del chalet. … Frente al garaje del chalet no hay ninguna furgoneta. … Entonces es que la que había se ha largado. … No —ha sido la concisa respuesta del, al menos todavía, agente Paco—. … ¿Cómo que no? —le he inquirido, mientras el sudor comenzaba a resbalar por mi cara—. … El deportivo sigue detenido frente al chalet de los vecinos, pero no veo ninguna furgoneta frente al garaje, y sigo sin ver ningún perro. … ¿Y frente al chalet? … Frente al chalet no puede haber ninguna furgoneta, ni hay ningún perro. … ¿Y por qué no? … Porque la jefa de la banda no tiene perro, al menos que usted y yo sepamos, y porque frente al garaje hay un inmenso 4x4 del CNI. … Y dale perico al torno. ¿De veras crees que si fueran agentes del CNI iban a detenerse justamente junto a la puerta del garaje del chalet que quieren vigilar? … Puede que los vigilados sean los vecinos, o que la

jefa de la banda esté liada con un agente secreto. … Los vecinos tienen cerca de ochenta años y si la jefa estuviera liada con un agente de inteligencia, digo yo que tendría las luces suficientes como para no pasearse de aquí para allá en una furgoneta que debe cantar a madero más que cualquier comisaría. … Puede que alguien esté utilizando a los vecinos de tapadera. … Claro, y para que el disimulo sea completo, aparcan un deportivo frente al 4x4. … No está frente, sino lo menos veinte metros más adelante, justamente frente al chalet de los vecinos. … En el último año has debido ver muchas películas de espías. … Las suficientes para saber que cuando alguien aparca frente a un garaje, lo normal es que se abra la puerta del mismo antes de que el coche tome posesión de su espacio habitual. … ¿Y qué se supone que están esperando esos supuestos agentes? … Me juego cincuenta euros a que pronto llegará el novio de la jefa acompañado de algunos de los miembros del CNI. Además, acaba de bajarse un fulano del 4x4 pero no parece un agente del CNI, a no ser que vaya disfrazado. … Claro, para detener a unos ladrones, los agentes del


CNI se disfrazan de chorizos, y cuando van a los toros a espiar a algún mangante, se visten de luces, o de putas, si el fulano es adicto a los puticlubs de carretera, o de pasteleros, si resulta que el investigado es aficionado a la dulzaina. … No se encane, o le subirá la tensión. … ¿Qué hace el supuesto espía? … Ese fulano debe ser el amante de la jefa de la banda. Pero los otros no sé qué pintan aquí. … ¿Qué otros? —le he preguntado desconcertado—. … Los que acaban de bajarse del 4x4. … ¿Cuántos son? … Cinco. Espere que creo que me han visto, me cago en mi puta vida. Tan alarmante imprecación se ha visto de pronto sustituida por un rumor sordo, prueba irrefutable de que el teléfono móvil había acompañado a Paco en su vano deseo de diluirse en la nada. … Paco, no te pongas nervioso, y no se te vaya a ocurrir salir a escape porque por Dios te juro que me la pagas. El silencio que ha contestado a mi amenaza no ha contribuido precisamente a serenar mi ánimo. » Paco ¿me estás oyendo? … Se quieres callar usted un segundo: uno de los supuestos espías está vigilando la calle, pero creo que no

me ha visto, o ya habría venido a decirme buenos días —ha musitado Paco a modo de reproche—. … ¿Qué hacen ahora los sujetos? … ¿Los del 4x4 o los del deportivo? … ¿También hay espías en el deportivo? … Debe haberlos, porque el que vigila la calle ha hecho una seña y… espere… Paco acababa de arrizar un poco más la ceremonia del desconcierto. … ¿Qué pasa ahora? … Acaba de bajarse una rubia del deportivo … ¿Y qué hace? … De momento encender un pitillo y apoyarse en la parte trasera del coche. Debe ser la encargada de vigilar esa parte de la calle… espere… … ¡Qué! —apenas he sido capaz de balbucir—. … Uno de los espías ha sacado una bolsa de basura, llena hasta los topes, del 4x4 y la ha dejado, ayudado por un colega, en el suelo del garaje. Pero eso no es lo peor. … ¿Y qué es lo peor? … Que si no tiene una hermana gemela, mucho me temo que la mujer que acaba de bajar del deportivo es su esposa. Y no me pregunte qué hace aquí, porque si no lo sabe usted, figúrese yo…


UNAS ISLAS AMERICANAS MUY MURCIANAS…


A unos 700 kilómetros al oeste de la costa de Chile, encontramos unas islas que son conocidas como el “Archipiélago Juan Fernández”. Estas islas son Reserva Mundial de la Biosfera ya que poseen la mayor cantidad de especies endémicas de flora y fauna de todo el mundo. De entre todas ellas, la más conocida y la que les da fama mundial es la isla Robinson Crusoe, llamada así por su relación con la obra de Daniel Dafoe, considerada la primera novela de habla inglesa. Pero, ¿por qué se conocen como Islas de Juan Fernández? Llevan el nombre de su descubridor, un marino nacido en Cartagena alrededor de 1530 y que a los 20 años decidió navegar en busca de aventuras hacia el Pacífico. La verdadera historia de Juan Fernández de Sotomayor supera con creces la historia del ficticio Robinson Crusoe. Este lobo de mar descubrió una nueva ruta para evitar la corriente de Humboldt que reducía el viaje entre Lima y Valparaíso

de 6 meses a sólo 30 días, descubriendo en su nueva ruta las Islas Desventuradas y el mencionado archipiélago de Juan Fernández el 22 de noviembre de 1574. Además, según una carta enviada al rey Felipe II en 1615 por Juan Luis de Arias, también descubrió Nueva Zelanda y parece que llegó a Australia, pero a la Corona Española no le interesó tomar posesión de estos territorios y posteriormente fueron colonizadas por holandeses e ingleses. Juan Fernández de Sotomayor terminó sus días en Santiago de Chile tras recibir el título de ‘Piloto Mayor de los Mares del Sur’ por los servicios prestados a la Corona Española. Sin embargo, sorprende que sea prácticamente un desconocido para los propios murcianos habiendo sido un personaje tan importante en las primeras décadas de la colonización española del Pacífico.


Un Mundo con Alma Por: Eugenia Ales Amat / almamodaaldia.com


Hola amig@s de MurciaLove, soy Eugenia creadora y editora del blog almamodaaldia.com y desde ahora voy a acompañaros en la sección de moda. En cada número os hablaré de tendencias, streetstyle, viajes, alguna pincelada de belleza y sobre todo, una sección que será “Un mundo con Alma” donde os enseñaré la moda desde otro punto de vista. Como decía Chanel, “La moda no existe sólo en los vestidos, está en el cielo, en la calle, la moda tiene que ver con las ideas, la forma en que vivimos, lo que está sucediendo”. Os enseñaré algunos rinconcitos especiales de nuestra región, tiendas con esencia donde la moda esté presente de alguna manera que sea fascinante. Lugares donde el ambiente te atrape para ir con amigos y disfrutar del momento. Ésta será mi forma de mostraros mi visión hacia la moda y hacia todo lo que la rodea. Para empezar os propongo una de mis tiendas favoritas: De Oliveira, situada en pleno centro de Cartagena, en la Calle Mayor. Está regentada por dos emprendedoras hermanas que hace dos años decidieron abrir una tienda diferente, donde podéis encontrar toda clase de prendas y complementos. Estilos como “boho, vintage, casual, minimalista” entre otros, los podréis encontrar aquí en “De Oliveira”. Con una decoración exquisita, fina y sencilla, Tamara y Odett han hecho un rincón de moda especial donde te encontrarás a gusto y podrás disfrutar de una tarde shopping ideal. El look que os muestro lo hemos formado íntegramente con prendas de De Oliveira. Tras realizar nuestras compras, hacemos otra parada en un rinconcito con leyenda de nuestra región, pues después de 132 años sigue en pie: El Telar de 1883, donde tomar un café o una copa, bien sea after work o un finde. Se trata de un antiguo almacén de tejidos restaurado. Lo podéis encontrar en pleno centro de Cartagena, en la Calle Villamartín. Sus actuales dueños han conservado la estructura antigua y simplemente lo han decorado dándole ese aire rústico y encantador. No dejéis de conocerlo.


“La libertad, cuando empieza a echar raíces, es una planta de rápido crecimiento.” George Washington


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