Entonces vió a un niño nuevo en una silla de ruedas. La maestra al verla la riñó y la dijo que se fuera.
Había una vez una niña llamada María, un día estaba paseando por los pasillos, olló una conversación y como sentía tanta curiosidad de asomó.
Al llegar a clase la profesora los presentó al niño nuevo,pero todos se alejaron de él por ser diferente. María fué la única que no se alejó y estuvo toda la clase mirando para atrás.
Un día en el recreo fueron a jugar con la pelota y el niño nueva la dió sin ayuda de María, entoncés María se puso muy contenta.
Cuando llegó la hora del recreo María y sus amigas estaban jugando a la comba, derrepente María se fijó en el niño nuevo y vió que estaba solo y fué a jugar con él. Al día siguiente cuando llegó la hora del recreo la profesora la dijo a María que estaba muy cansado y que si se quería quedar aquí con él. María se quedó con él y empezaron a bailar.
Un día María estaba paseando por los pasillos y se encontró una cuerda en la silla del niño nuevo. Fué directa al patio pero oyó a la profesora hablar y se acercó.Escuchó lo que decía y se dió cuenta de que su amigo se había muerto. Al sentir tanto dolor se puso la cuerda en la muñeca y se fué muy disgustada.
Veinte años después María era una profesora y todavía llevaba la cuerda atada a su muñeca.