Edipo Rey

Page 18

SÓFOCLES

EDIPO REY

CREONTE: No veo que juzgues con criterio sano.

me he puesto de acuerdo con ese adivino, no me condenes a muerte por un solo voto; hazlo por dos, incluyendo también el mío. Deja, pues, de condenarme sin oírme y por vagas sospechas, pues no es justo creer a la ligera que los buenos obran mal, y los malos, bien. Rechazar a un amigo leal equivale, a mi juicio, a sacrificar la propia vida, que es el bien más preciado. Con el tiempo reconocerás la verdad de lo que te digo, pues sólo el tiempo revela al hombre leal, mientras que un solo día basta para desenmascarar al traidor.

EDIPO: Por lo menos juzgo en mi propio interés. CREONTE: Tienes también que juzgar en el mío. EDIPO: Pero tu naturaleza es la de un pérfido.

CORIFEO: Príncipe, para todo el que desee no dar un mal paso, Creonte ha hablado bien. Juzgar con demasiada ligereza no proporciona juicios seguros.

CREONTE: ¿Y si en contra mía no puedes probar nada?

EDIPO: Cuanto con más presteza y cautela el enemigo se apresura a armar contra mí celadas, más pronto debo estar yo para atender a mi defensa. Si espero inactivo, los proyectos de este hombre se realizarán y los míos estarán condenados al fracaso.

EDIPO: Hay, no obstante, que ceder ante quien manda.

CREONTE: ¿Qué quieres hacer? ¿Obligarme a abandonar el país?

EDIPO (Levantando los brazos.): ¡Ciudad, ciudad de Tebas!

EDIPO: No; quiero tu muerte, no tu destierro. CREONTE: No antes, sin embargo, que me hayas demostrado qué malquerencia abrigo contra ti.

CREONTE: Y yo también soy de la ciudad; Tebas no es sólo tuya.

CREONTE. No, si el que manda es injusto.

CORIFEO: ¡Cesad, príncipes! Muy a tiempo para vosotros veo a Yocasta que sale de su palacio. Hay que contar con ella en la presente contienda. (Entra YOCASTA.)

EDIPO: ¿Hablas, pues, como si no quisieras ni doblegarte ni ceder? © Pehuén Editores, 2001.

)18(


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.